Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Incomodidad por Unii_Chan

[Reviews - 9]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Mi segundo fic de B.A.P que subo aquí :DDD

Notas del capitulo:

Ahhh otro fic de B.A.P que había hecho hace tiempo, aunque la verdad no me gustó mucho pero quize compartirlo con ustedes :DDD

Comenten por favor¡¡¡¡

No era fácil tratar esa situación, al menos no para él. No recordaba exactamente en qué momento había terminado allí ya que solo podía concentrase en aquella incomodidad. La persona a unos metros de él le dedicaba tímidas miradas de vez en cuando mientras limpiaba algunos asientos, y cuando volteaba a verlo dirigía sus ojos a la ventana aparentado no haberlo visto, un acto que se le hacía totalmente tierno.

La lluvia no parecía querer cesar en poco tiempo, el ambiente se volvía frio con cada segundo que pasaba al igual que el silencio se hacía más pesado. Definitivamente no había peor forma de terminar con aquel chico, aquel tierno chico varios años menor que él y que lo volvía loco.

Todo eso había iniciado por una simple caminata con HimChan, aquella diva, ya vería cuando lo tuviera frente a él mañana. Caminaban rumbo a la preparatoria de JongUp, actual novio de su amigo, era extraño, las parejas del pelinegro no duraban más de dos semanas, su amigo era el tipo de persona que gustaba de vivir diferentes tipos de experiencias y no soportaba algo rutinario, por eso  fue demasiado surrealista que ya llevara medio año con aquel callado chico amante del baile, al parecer finalmente había encontrado una persona que captara su corazón e interés, justamente al igual que él.

Cuando ya habían logrado ver al castaño notaron junto a él a su mejor amigo, Choi Jun Hong, o como el propio JongUp lo llamaba: “Zelo”.

Hacía tiempo que había quedado cautivado por aquel chiquillo, desde la primera vez que lo vio hablando con el novio de HimChan, su forma tan tierna de ser, su rostro inocente e infantil, su timidez y entusiasmo, todo le parecía irresistible. Nunca había hablado directamente con él, solo se limitaba a saludarlo con una inclinación de cabeza o mirarlo a lejos, hablar con él era algo que trataba de evitar ya que tenía el mal hábito de no medir sus palabras y decir cosas que podrían dañar a los demás.

En fin, la cosa había sido que el pequeño –en edad, ya que tenía que admitir que su altura era impresionante con tan solo tener 17 años– había quedado a cargo de la limpieza del salón al final de clases, inicialmente sería JongUp quien lo iba a esperar, pero repentinamente le había surgido un problema y HimCHan tenía que acompañarlo.

El bailarín le había pedido el gran favor de esperar a su amigo ya que Zelo era “una persona que necesitaba que lo cuidaran,”  nunca se sabía qué podría pasar si se quedara  solo. Tuvo que elegir entre estar con el chico que lo volvía loco o seguir aguantando los gritos y aegyos de HimChan, “¿Acaso te estás negando a cumplirle un favor a mi novio?” Y aunque se podría decir que esa era una decisión fácil de tomar, el problema radicaba en estar a solas y sin ningún tema de conversación con el rubio.

Así que mientras observaba a los últimos estudiantes irse a lejos, tomados de las manos rumbo al restaurante de ramen junto a la escuela, se preguntaba cuánto más tendría que soportar toda aquella tensión que podría ser cortada incluso con un cuchillo. Volvió a mirar a aquella pareja, si no se equivocaba eran aquellos que siempre cantaban, tenían una asombrosa voz y parecían un perfecto duo.

Trató de imaginar cómo sería un día así, tomado de la mano junto aquel jovencito tímido, ir a pasear e incluso darle un beso. Eso lo mataría. ¿Cómo se habían tornado las cosas? El increíble y rudo Bang Yong Guk imaginando cosas ridículas y cursis de amor que eran usualmente dueñas de las mentes de varias chicas dirigidas hacia él.

Observó por millonésima vez a su acompañante, al parecer ya solo le faltaba ordenar algunos papeles y ponerlos encima de la gaveta. El sonido de las gotas caer era lo único que se percibía aparte de sus respiraciones, no tenía mucho que había empezado a llover, perfecto, no había traído un paraguas consigo, ¿Cómo se iría ahora? Aunque en realidad lo que más le preocupaba era que el menor se fuera solo con tal tormenta.

- Lo siento, por mi culpa ahora está esperando con esta lluvia.

Miró sorprendido al chico, no esperaba oírlo decir algo, aunque debía admitir que escuchar su voz hizo que algo dentro de él se revolviera.

- Ah, no, no importa. – Su voz podría sonar calmada sin embargo sus pensamientos no estaban en orden.

- Que pena, tener que pedirle a un hyun que me acompañe. – Dijo el rubio con vergüenza evitando su mirada.

- Te digo que no importa, es mejor que quedarme en casa sin hacer nada productivo. – Si pudiera, desearía ver los ojos del menor sobre los suyos.

- Ha ha – Se rió levemente su donsaeng. – Pero tengo entendido que usted hace rap por las tardes en el parque que está a unas cuadras de aquí.

- Cierto, soy el mejor en eso. – Dijo permitiéndose darse algunos aires de orgullo que de nueva cuenta hicieron reír al menor.

Esa fue la primera “conversación” que habían tenido, y aunque fueran solamente unas cuantas oraciones para él fue algo memorable por no decir magnífico, y que comentar de su risa, fue como si hubiera escuchado la melodía milagrosa de los ángeles, se estaba volviendo loco con cada gesto del menor.

La tensión disminuía, un aire más tranquilo se presentaba ya que el chico dueño de un skateboard se veía más calmado y una pequeña sonrisa permanecía en su rostro. Seguramente fue eso lo que también lo calmó a él, ahora si podía disfrutar de estas a solas con aquel atractivo joven.

Miraba cada pequeño acto que hacía, no lo perdía de vista en ningún momento, cuando finalmente terminaba de guardas los papeles en la gaveta y cerrarla con llave fue por sus cosas para retarse, eso lo dejó algo decepcionado, recién había podido dejar atrás todo el silencio antes presente y gozar de la compañía de Jun Hong.

Antes dirigirse junto a él a la salida subió una última caja en lo alto de la gaveta, por alguna razón –quizás fuera realmente cierto lo que le dijo JongUp, era necesario estar con el para evitar que se haga daño– tropezó con su propio pie perdiendo el equilibrio.

El menor no pudo sujetarse de nada así que esperó sentir la caída contra las frías baldosas del suelo, sin embargo, YongGuk había llegado en algún momento detrás de él, lamentablemente no fue lo suficientemente rápido como para poder detenerlo a tiempo así que termino teniéndolo sentado de espalda entre sus piernas amortiguando la caída.

Eso sí que fue demasiado, tenía a Zelo entre sus piernas, ¿Porqué el destino lo trataba así? Pero si nos concentramos en el menor las cosas tampoco iban para nada bien, su rostro le ardía tanto como si estuviera en llamas.

Ciertamente se había obsesionado con aquel hyun de apariencia ruda. Por alguna razón algo en él había llamado su atención, no supo en qué momento había crecido tanto ese “interés” que cada vez que lo veía junto al novio de su amigo JongUp solo se quedaba petrificado o salía corriendo con tal de no tenerlo cerca, temía hacer alguna torpeza que lo dejara en ridículo en su presencia. Vamos, era solo un niño aún, y YongGuk era solo su hyun, uno que nunca se fijaría en él, tenía que aceptarlo.

Volviendo a la situación actual, su rostro no podía estar más encendido, era ese tipo de torpezas las que quería evitar hacer frente a él.

- ¡Lo siento! – Dijo cuando pudo reaccionar finalmente levantándose rápidamente. – Soy demasiado torpe algunas veces, yo no quise…

- Cálmate un poco. – Le dijo cuando ya se hubo levantado levemente decepcionado. – Fue solo un accidente, no te preocupes, no te voy a comer. – Quizás.

- En verdad que lo siento, solo te he causado problemas el día de hoy. – Bajó su mirada aún con vergüenza ¿Ahora qué pensaría YongGuk de él?

- Te he dicho que no me importa. – Su inteción era calmar al menor pero al aprecer solo lograba ponerlo más nervioso al hablarle con un tono seco y rudo, él no tenía la culpa de que su voz fuera tan grave y su expresión usual fuera casi siempre seria. – ¿Estás bien?

- Si, ¿Y usted hyun?

- Igual, ahora solo vayamos a casa, al parecer ya dejó de llover. – Dijo mirando la ventana, finalmente la lluvia se había detenido en algún momento.

- Cierto, vamos. – El chico tomó sus cosas y su skateboard sin mirarlo directamente de nuevo.

Perfecto, había asustado a Zelo, eso era lo que precisamente no quería que pensara de él, que era solo un chico rudo que asustaba a los demás. Nuevamente el silencio se hizo presente. Tenía que solucionarlo de alguna forma, trató de iniciar alguna conversación que pudiera volver a romper aquel muro invisible que se encontraba entre ellos, así que sólo preguntó lo primero que le vino a la mente antes que fuera demasiado tarde y tuvieran que separarse.

- Por cierto, ¿Eres muy popular no? – Se atrevió a preguntar mientras bajaban las escaleras.

- Eso me han dicho los demás. – Respondió levemente sonrojado.

- Ya veo. – Tenía que seguir con la conversación de alguna manera. – ¿Y hay alguien que te interese?

Eso si fue una sorpresa para ambos, Bang no supo en qué momento su boca dejo escapar esas palabras, habían salido simplemente de él, aunque no sabía si quería escuchar o no una respuesta por parte del chico.

Por tanto, Zelo no sabía cómo contestarle, la persona que quería estaba a su lado preguntándole si había alguien que le interesara. En el fondo quiso decirle que era él, que lo cautivo tiempo atrás y que desde entonces no podía dejar de pensar en él, pero eso podría hecarlo conseguir su desprecio, aquello sería algo que no podría soportar nunca.

Finalmente había podido conversar con él y quizás hasta podría considerarse que habían podido sobrepasar la incomodidad siempre presente entre ellos, no iba a arruinar eso tan pronto, prefería mil veces dejar sus sentimientos en el fondo de su corazón a perder lo poco que había conseguido.

- Pues hay alguien que me interesa. – Respondió finalmente después de unos momentos, no notó como el cuerpo de su compañero se tensaba. – Pero esa persona no lo sabe – “Y nunca lo sabrá”

- Ya veo – Sin querer, su voz se volvió seca y su mirada algo irritada. – Pues deberías decírselo, no es de hombres ser cobardes.

Ninguno de los dos lo supo, pero inconscientemente habían herido al otro, YongGuk al recibir aquella respuesta no pudo hacer nada más que sentirse devastado, el menor ya tenía a alguien que había llegado antes que él a su corazón, Zelo por su parte solo se entristeció al escuchar el tono irritado del hyun, ¿Qué había dicho que lo haya podido enfadar?

Eso fue todo lo que dijeron camino a la salida, inesperadamente, la tensión había vuelto. Esta vez incluso mayor que la otra. Zelo estaba con el ánimo por los suelos, seguramente aquella sería la única vez que podría estar con él y terminó de aquella forma.

- Bueno, gracias por haberme acompañado. – Le agradeció ya en la salida. – Yo me voy por este lado, así que…

- De nada. – Respondió secamente YongGuk causando aun más tristeza en el rubio.

- Cuídese. – Fue lo único que dijo JunHong antes de irse.

El mayor se dio la vuelta dispuesto a caminar al lado contrario del chico, todo había terminado. Seguramente así era como terminaría todo, nunca llegaría a ser nada para el menor, tenía que aceptarlo la dura y cruel realidad.

- “Pero realmente odio darme por vencido” – Su teléfono empezó a sonar, lo tomó y contesto sin muchas ganas.

- ¿Qué quieres? – No tenía que mirar para saber quien lo llamaba, HimChan.

- ¿Qué pasa con ese humor? – Le respondió el otro con tono ofendido. – Lo que sea ¿Ya terminó el pequeño de limpiar?

- Si, ya se fue a su casa, yo también estoy de camino a la mía. – Su voz sonaba irritada, no quería hablar con nadie en ese momento.

- ¿Qué? – Le gritó el pelinegro con enojo. – ¿Cómo que ya se van? ¿No lo vas a acompañar?

- ¿Por qué tendría que hacerlo? Por cierto gracias por romperme el tímpano. – Le dijo remarcando el sarcasmo.

- Vaya que eres estúpido. – Aveces no sabía si YongGuk tenía un problema para notar ciertas cosas.

- Oye no te atrevas a hablarme así – Su humor no hacía nada peor que empeorar.

- Es la verdad, ¿Tienes idea de por qué te dejamos JongUp y yo con a solas con él? – Le preguntó ya más calmado.

- No me importa. – Ya nada le importaba.

- Pues debería, los dejamos solos porque creíamos que así podrían finalmente hablar y tirar a la basura esa incomodidad, se nota a kilómetros la atracción entre ustedes.

Dejó de caminar, ¿Había escuchado bien?

- ¿Qué demonios quieres decir?

- Que desperdiciaste tu oportunidad con él, se perfectamente que estas babeando por él, lo supe desde el primer momento. – HimChan era una persona cuidadosa, había planeado junto a JongUp una manera de unir a esos dos, solo que al parecer no había salido según lo planeado, esos dos eran todo un caso. – De verdad que me estresas.

- Bueno, eso no importa ya, él ya quiere a otra persona. – Dijo recordando las palabras antes dichas por el rubio.

- Si, a ti.

- ¿A qué te refieres? – No, eso no podía ser cierto, simplemente no.

- Claro, se lo ha dicho a JongUp, sólo que es demasiado tímido como para hablar contigo, por eso queríamos que estuvieran solos, creímos que podrían hacerse tan siquiera amigos.

- Espera, estas diciendo que yo le… - Aun seguía sin asimilarlo ¿Zelo sentía algo por él?

- Si, esta igual que tú. – Le dijo HimChan sonriendo desde algún lugar junto a JongUp quien escuchaba toda la conversación. – Sabes, si yo pude encontrar a JongUp, tu puedes intentar dar un paso con él. Tu le gustas, el te gusta, realmente no se cual es problema de ustedes dos.

No recibió respuesta, YongGuk había cortado la llamada. Sonrió complacido tomando de la mano a su novio, al parecer después de todo su plan si había funcionado.

 

 

¿Qué estaba haciendo? Él era el todopoderoso Bang Yong Guk, nuna perdía una batalla ni se daba por vencido, no le temía a nada, no tenía por qué permitir que una oportunidad como esa se escapara. Había podido hablar finalmente con Zelo, había roto la tensión entre ellos, se había enterado que el menor también le correspondía sus sentimientos. ¿Qué mejor momento que ese para finalmente dar un paso adelante?

No dejaría escapar al que se volvió alguien especial para él sin siquiera conocerlo del todo. Dio la vuelta, no lo vio, seguramente ya se encontraba lejos, pero claro que no por eso se detendría, corrió en dirección el camino por donde había desaparecido el otro.

En otro lado, Zelo estaba perdido en sus pensamientos, iba con el ánimo por los suelos. De alguna manera había conseguido el enojo del castaño. Cuando JongUp le había pedido al mayor que lo acompañara estuvo a punto de llamarlo loco de no ser porque quería escuchar la respuesta del otro, desde el momento en que había accedido supo que las cosas no irían bien pero no se esperaba que terminaran de esa forma.

Suspiró con pesadez, ahora ya no había forma de poder volver a intentar algo con su querido hyun. Siguió con su camino acelerando el ritmo de su skateboard, solo quería llegar a casa y dormir para tratar de olvidar lo ocurrido.

YongGuk por su parte corría tratando de alcanzar al rubio, sus ojos desbordaban un extraño sentimiento entre decisión y tenacidad, no dejaría escapar al menor, no ahora que sabía que era correspondido. Finalmente había logrado divisarlo a lo lejos, había llegado el momento de la verdad.

- ¡JunHong! – Gritó llamando al rubio.

- ¿Hyun? – Musito extrañado al verlo allí - ¿Qué pasa? ¿Me llamaste por mi nombre?

- Escucha, sé que esto sonará raro para ti, pero tengo que decírtelo. – Tomó con ambas manos su hombros como temiendo que escapara.

- ¿Qué cosa? – Inquirió muy extrañado por la actitud del castaño-

- Sé que no nos conocemos en realidad y que apenas hemos logrado hablar de forma directa el día de hoy, pero, hay algo que no me hace dejar de pensar en ti. – Empezó decir con vergüenza, no era un experto en cosas relacionadas con el amor y el cariño así que estaba dando lo mejor de sí para poder comunicarle sus sentimientos al menor. – Debe ser muy pronto para que puedas comprender esto, y mucho más pedirte que seamos algo, pero créeme cuando te digo que en verdad me atraes.

- YonGuk hyun…

Si había alguien más sorprendido que Guk, ese era Zelo. Su hyun esta frente a él diciéndole que le atraía, que le gustaba. No podía se real, simplemente algo tan maravilloso no podía ocurrirle.

- Me importa poco lo que dirán los demás, pero solo quiero saber una cosa. – Retiró una de sus manos del hombro del chico para tomar la suya con cuidado, como si quisiera evitar asustarlo. – ¿Qué es lo que tú sientes por mí?

- Hyun, yo… - Todo el tiempo que había pasado pensando en él, imaginando como sería hablar con él, como sería poder decirle que lo quería, pero ahora, después de todo, podía decirlo, realmente podía confesarle todo aquello que sentía por él. – Yo quiero estar contigo, quiero ser alguien importante para ti, alguien que solo pueda tenerte. – Apretó su mano mientras finalmente lo miraba a los ojos, a pesar de que su rostro debería estar ardiendo sus ojos se mostraban decididos. – Nunca había sentido esto por alguien antes, tengo algo de miedo, pero si es por ti, haría lo que fuera.

YongGuk no dijo nada más, solo sonrío, tomó entre brazos al chico y lo abrazó con alegría; acto seguido lo besó. Si, lo besó. Fue apresurado, demasiado, pero había ocasiones en las que ya no pensaba, solamente dejaba a sus instintos guiarlo. Fue tan repentino que ninguno de los dos reaccionaba.

Esas cuatro acciones, una detrás de otra, sorprendían en turno al menor, en especial la última. No estaba soñando, estaba consciente, de pie allí siendo besado por Bang JongGuk, la persona que quería. Había imaginado muchas cosas, pero nunca algo como eso, ni siquiera llego a pasar en su mente la posibilidad de ser amado por él, y tal como se daban las cosas era demasiado para su joven vida.

Estuvo a punto de caer debido a la sorpresa de no ser porque estaba siendo sujetado por el mayor, no pensaba claramente, solo estaba quieto, no se movía, solo disfrutaba del beso deseando que nuca terminara. YongGuk se separó lentamente del rubio cuando el aire se hizo necesario para ellos, de no ser por eso hubiera seguido así por otro rato más, quedó a una distancia corta del menor.

- Lo siento, se que fue repentino.  – Le dijo en voz baja.

- Está bien, no me molesta. – En absoluto.

- Mira, no soy una persona romántica y mucho mensos sé cómo tratar amablemente a los demás, siempre he sido alguien rudo que no deja que alguien entre fácilmente a mi vida, suelo ser duro con las personas e incluso he llegado a dañarlas, pero tú me haces diferente, me haces algo extraño. No puedo evitar pensar que puedo lastimarte de alguna manera, y eso me pone nervioso. – Sus palabras sonaban tan irreales en él, esa no era su habitual forma de ser, pero cuando miró su rostro sonrojado y aquellos grandes y expresivos ojos observándolo sorprendido solo se dejo llevar. – Eres especial, porque finalmente encontré a la persona que me hace diferente, que me hace cambiar.

- Yo… - Su mente no razonaba correctamente y sus pensamientos eran un caos, en vez de hablar decidió terminar de acortar la distancia entre él y YongGuk para besarlo nuevamente, esta vez con más suavidad. Pudo sentir una explosión de sentimientos desencadenarse en él, pero lo que más importaba era ese perfecto momento.

YongGuk sintió aquellos labios tan suaves y dulces que no pudo dejar de saborearlos, parecían hechos completamente para él. Una sensación de victoria lo invadió, tomó del cuello al menor con fin de acercarlo más y profundizar el beso. Se quedaron un rato allí sin separarse.

Como la vez anterior solo se separaron lo suficiente como para quedar a escasos centímetros, YongGuk tenía su mano en la mejilla sonrojada del menor, sonrió como no lo había hecho antes obteniendo la misma repuesta por parte del otro.

- YongGuk hyun, te quiero. – Le dijo suavemente en un susurro el chico.

- No sabes lo mucho que anhelaba escuchar eso. – Respondió de igual manera.

Cayeron en cuenta de que atardecía, decidieron ir a casa, YongGuk acompañando al menor hasta la suya. Quizás fuera demasiado rápido y tal vez no supieran lo que hacen, pero que mas daba, si se amaban el uno al otro no importaba lo demás. Estaban consientes de que algunas cosas cambiarían, en especial ellos, pero eso es parte del amor y estaban dispuestos a todo con tal de estar juntos.

Al final, la incomodidad había desaparecido. 

Notas finales:

Bueno ¿Qué les parecio?

Sigo diciéndome que me quedo raro :P peero lo que más me interesa es su opinion así que les suplico que dejen reviews

Saranghe ~ :DDD <3


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).