Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Under Your Wings por Gaara_Uchiha

[Reviews - 7]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

¡Hola! :3 Hoy les traigo un pequeño fic dedicado a mi omma-boy, omma, te quiero :3

 

Espero que les guste :D

 

Imágen del fic: http://i50.tinypic.com/8xm1s1.jpg

Notas del capitulo:

Primer capítulo de este pequeño fic, tendrá más o menos 3 capítulos. 

Todo el tiempo sucedía lo mismo, Yi Fan ya debería haberse acostumbrado a aquello, pero por más que lo intentara, no podía hacerlo. Cada vez que discutía con Jong In, por más estúpida e insignificante que fuera la razón, éste terminaba lastimándose físicamente. Sí, Jong In tenía un problema, pero era tan terco que no quería aceptarlo.

 

El rubio se encontraba abriendo de mala gana la puerta del departamento de su pareja, su ceño estaba fruncido y la mueca que se había formado en sus labios no era nada agradable ¿Qué era lo que causaba tal actitud en el chico? Simple, ya era la segunda vez en esa semana que tenía que salir corriendo al hospital ¿Por qué? Porque como siempre, después de alguna para nada importante pelea, su novio desde hace dos años, terminaba atentando contra su vida. Esta vez, como la anterior a esa, había llegado a tiempo, el menor no había perdido mucha sangre y había sido dado de alta el mismo día.

 

—Kris...—Susurró el pelinegro, se encontraba cabizbajo en una de las esquinas de la sala de estar, cerca de la puerta, su cabello tapaba parte de sus ojos y tenía las manos entrelazadas. Sus muñecas estaban vendadas y un apenas perceptible color rojo, las teñía.

 

— ¿Por qué lo haces? —Preguntó el aludido, su tono de voz era severo y la expresión de su rostro era intimidante, Jong In alzó el rostro para mirar de frente al más alto, mas no pronunció palabra alguna— ¿Te gusta lastimarte? —Cuestionó, el pelinegro seguida sin decir nada— ¡Habla ya! —Se estaba desesperando, estaba alterado, molesto y desconcertado por las acciones de su novio.

 

—Kris... Yo...—Abrió su boca para articular ese par de palabras pero luego la cerró, no sabía que decir o que hacer. Volvió a bajar el rostro y apretó sus manos con fuerza, haciendo que sus nudillos se tornaran verdes.

 

—Ash... ¿Sabes qué? —Dio un paso hacia adelante y suspiró con pesadez, el más bajo levantó un poco la cara—Kai, creo que lo mejor sería terminar con esto—Comentó inexpresivamente.

 

— ¿Qué...? —Los ojos del pelinegro se abrieron de par en par, los latidos de su corazón cesaron por un instante y en su cabeza solo se repetía la última frase dicha por el rubio.

 

—Lo que acabas de escuchar...—Dudó por un momento pero luego recapacito, tenía que acabar ya con esa relación—Debemos terminar—Afirmó.

 

—Pero...—Intentó decir pero el rubio lo interrumpió.

 

—Pero nada, lo hago por mi bien—Informó comenzando a dar lentos pasos hacía la puerta.

 

— ¿Por tu bien?—Chillo el menor, estaba muy alterado y dolido— ¿Solo en eso piensas? ¿En ti? —Un par de finas lágrimas se deslizaron por sus oscuros ojos— ¿Qué hay de mí? Yi Fan... Te amo...—Cientos de gotas cristalinas se escaparon de sus ojos— ¿Acaso no me quieres? —Preguntó temiendo por la respuesta del mayor.

 

—Jong In... ¿Cómo crees que voy a querer a alguien que ni siquiera se quiere a sí mismo? —Interrogó bruscamente, el aludido abrió sus ojos con exageración para después desviar la mirada—Esto será lo mejor...—Murmuró, caminó hasta la puerta, pasando al lado de Kai y la abrió.

 

—Yi Fan...—Susurró muy bajito tomando el brazo derecho del aludido, éste negó con la cabeza y apartó la mano del pelinegro.

 

—Lo siento—Habiendo dicho esto, terminó por salir del departamento no sin antes susurrar un casi inaudible "Adiós"

 

En ese momento Jong In se sentía devastado, lo amaba demasiado y ahora, todo había terminado. Su corazón dolía, tenía un nudo en la garganta y una extraña sensación en la boca del estómago. Sentía rabia, estaba furioso, pero al mismo tiempo, la tristeza que lo embargaba era inimaginable.

 

Por más absurdo que pareciera, él solo tenía ganas de romper cosas, destrozar la sala si era posible, y así lo hizo. Tiró los libros al suelo, despedazó los cojines del sofá y lanzó las sillas de un lado a otro, rompiendo algunos adornos de vidrio que estaban allí en la sala.  No obstante, aquello no le ayudó en nada, lo único que logró fue cansarse y como era de esperarse, quedar ronco por lo mucho que gritó.

 

Sus ojos estaban rojos y su respiración era irregular, llevó una mano a su cabeza, masajeando su sien, tenía una insoportable jaqueca. Pasando entre el desorden que había en su sala, llegó hasta la cocina, abrió el refrigerador, sacó de éste un bote de helado de chocolate y tomó un cucharilla grande, se dirigió nuevamente a la sala y sentándose en el sofá, comenzó a degustar  el postre.

 

Si había algo que reconfortara a Jong In, era el helado, en especial el de chocolate, era como un adicto a eso. Al pasar los minutos su helado se terminó, frunció el entrecejo y con notable molestia, lanzó en envase junto con la cuchara a algún lugar de la habitación.

 

 Kai suspiró con pesadez y se levantó del sofá, agarró su chaqueta de cuero, la cual estaba en el perchero al lado de la puerta y salió del apartamento rumbo a algún lugar que él mismo desconocía.

 

Caminó despacio por las transitadas calles de la ciudad, os minutos le parecieron horas, no sabía a dónde iba y tampoco le importaba. Suspiró por enésima vez y alzó la vista hacía el oscuro cielo, mirando las estrellas como si fueran lo más interesante en todo el mundo. Se podía decir que su mente estaba vacía, puesto que no pensaban en nada realmente, tal vez era porque quería olvidar todo lo que había sucedido ese día.

 

Divisó un pequeño banco frente a una dulcería,  se acercó a éste y tomó asiento, apoyó sus codos sobre sus rodillas y cubrió su rostro con sus manos, otra vez sentía esas terribles ganas de llorar.

 

Al cabo de unos minutos, dejó de derramar aquellas salinas gotas, quitó los restos de éstas de su rostro y se dedicó a mirar todos aquellos autos que pasaban frente a él a gran velocidad, haciendo ruidos ensordecedores. Por alguna razón, ver el montón de carros circular en esa carretera, se le hacía muy interesante.

 

Fue en ese entonces que una idea surcó su mente. Se paró de ahí y caminó a paso lento hasta la carretera ¿Qué posibilidad de sobrevivir había si lo arrollaba un auto? Era de noche, seguramente era improbable que saliera ileso de aquello.

 

A cada paso que daba, estaba más cerca de su tan anhelada muerte. Una melancólica sonrisa se dibujó en sus labios, ya estaba en medio de la autopista, vislumbro una camioneta de color vino tinto acercarse a gran velocidad hacía él, escuchó el fuerte pitido del claxon,  cerró los ojos con fuerza y esperó el impacto, mas éste nunca llegó. Sintió como alguien lo sostenía fuertemente por la cintura y por un momento sintió como sus pies habían dejado de tocar el suelo ¡Había sido elevado! Pero ¿Cómo?

 

Una molesta luz lastimó sus cerrados ojos, intentó abrirlos para descubrir que era lo que sucedía pero le fue imposible, la irradiación era tan fuerte que le impedía ver lo que ocurría.

 

Poco a poco la incandescente luz se fue opacando, permitiéndole así, conocer el motivo por el cual no había muerto, si es que ya no lo había hecho.

 

— ¿Pero qué...? —No pudo formular completamente la pregunta, frente a él estaba un apuesto joven observándolo fijamente, aquello le parecía tan irreal ¿Cómo era posible que aquel chico lo hubiera salvado? Y lo más importante ¿Por qué tenía alas? ¡Alas! ¡Tenía alas!

 

Notas finales:

¿Qué les parecio? Dejen rws *O* sus comentarios me alimentan XD

 

Acosenme en twitter:

@ChocoGaaDeLimon


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).