// Tu cambiaste.. ¿Por qué? Acaso... ¿Fue mi culpa? No lo entiendo... Solo me dijiste que te dejara en paz y te alejaste de mi... Y aquí estoy de nuevo, en el mismo lugar en el que soliamos quedar. Este parque en el que nos pasabamos las tardes enteras jugando y hablando. Nos lo contabamos todo.. ¿Que paso? Supongo que simplemente te cansaste de mi. Yo soy el unico que mantiene nuestra promesa y todas las tardes vengo aqui y miro a los niños mientras juegan y siento envidia de ellos. Quiera verte y decirte lo que siento.. Como me siento. Pero se perfectamente que eso no puede ser, que volvemos a ser unos desconocidos como al principio... //
- ¡Ajá! Supuse que estarías aquí. - Dijo un pelicastaño mientras se acercaba al rubio que estaba sentado en el balancín.
- Kiba.. - Dijo Naruto sin ganas. como si le acabaran de despertar de un sueño.
- Naruto, ¿Otra vez estas asi?
- ¿A que te refieres?
- Cada vez que vienes aqui te pones triste, ¿por que vienes entonces?
- No lo se - Dijo Naruto mientras se daba la vuelta y comenzaba a caminar junto con su amigo. - // Supongo que sigo viniendo aqui por que no quiero perder el vinculo con el y por que tambien tengo la esperanza de que el algun dia.. Vuelva. // - Pensaba el rubio mientras seguia caminando con la mirada ida.
- Naruto, ¿me estas escuchando? - Dijo Kiba algo molesto.
- ¿Eh? Perdona.
- No te preocupes. Te decia que vine a buscarte para ir a jugar a los videojuegos, ¿vienes?
- No tengo muchas ganas
- Lo suponia... Si cambias de opinion estaremos todos en casa de Rock Lee.
- Vale. - Los dos chicos se dieron la vuelta y se fueron cada uno por un camino diferente. Por su parte, el rubio fue directo a su casa, la cual estaba muy cerca de allí.
- Ya estoy en casa.. - Dijo Naruto mientras entraba en la oscura casa. Naruto era huerfano y su tutor legal tenia muchos viajes de negocio asique se pasaba la mayor parte de su vida solo. Al entrar en la casa, subio las escaleras y fue a su cuarto. Este se encontraba completamente desordenado, pero no tenia ganas de recojerlo asique simplemente se lanzó a la cama. En esta Naruto no tenia ganas de hacer nada asique simplemente durmió toda la tarde y noche.
A la mañana siguiente, Naruto fue despertado por el despertador y pesadamente lo apagó y se fue a duchar. Cuando este volvió a su cuarto se dió cuenta que se le había hecho tarde.. Se pasaban 15 min de la hora en la que deberia entrar en el instituto asique se vistió lo más rapido que pudo y salió corriendo en direccion a la escuela. Su casa se encontraba cerca de esta por lo que no tardo mucho en llegar. Corrió por las escaleras tropezando varias veces. Corrió por el largo pasillo asta que abrió la puerta del aula de golpe.
- ¡LLEGUÉ! - Gritó el Rubio con una cara triunfal.
- Llegas tarde Uzumaki. Tome asiento, por favor. - Dijo el Profesor Kakashi el cual se encontraba escribiendo en la pizarra. Tras decir esto un coro de risas resonó en la clase y Naruto , un poco avergonzado llevandose una mano a la parte de atras de su cabeza y sonrriendo, se dirigió a su asiento, el cual compartia con su amigo Sai. La cara de Naruto cambió al mirar a la persona que se encontraba sentada a su lado. Era él. Naruto miró al pelinegro con cara de lástima. Este se contraba haciendo garabatos en la mesa. Naruto se quedó mirandolo un rato hasta que el profesor Kakashi le tiró una tiza a la cabeza del rubio para que prestara atencion y de nuevo todos se volvieron a reir. Sasuke, que así se llamaba el pelinegro, solo se limitó a mirar a Naruto por unos segundos y volvió a lo suyo. Tras dos clases más llegó la hora del recreo, pero toda la clase habia sido castigada sin salir al patio debido a una broma que hicieron Naruto y Kiba en la cual pusieron petardos en el baño de las chicas haciendo que estas salieran corriendo. Naruto se levantó para ir al baño pero al hacer esto dio un golpe sin querer a la mesa de Sasuke.
- Perdona - Dijo Naruto sin poner mucha importancia y siguió caminando.
- Dobe.. - Se limitó a decir Sasuke.
- ¿A quien llamas tu Dobe? - Dijo Naruto dandose la vuelta para mirar al pelinegro
- A ti, Dobe. - Dijo el pelinegro sin dar mucha importancia a la reaccion del rubio mientras seguia dibujando en la mesa.
- Tsk.. Esa actitud me molesta.
- Pues es lo que hay asique te jodes.
- Uchiha.. Tu de verdad que.. - Dijo el rubio agarrando al pelinegro por el cuello de la camisa del uniforme haciendo que se levantara.
- Naruto.. Sueltalo. No vale le pena. - Dijo Sai poniendole la mano en el brazo mientras que un coro de chicas gritonas fans de Sasuke los iban rodeando.
- Sai.. - Sasuke por su parte le dió un golpe a las manos de Naruto para que este lo soltara y ante esto Naruto volvió a agarrarlo. Verdaderamente estaba molesto. Pero en ese momento entró un profesor.
- ¡¿Que está pasando aqui?! Uzumaki, ¿Tu otra vez? - Dijo el profesor Iruka mientras se acercaba a los dos alumnos.
- Iruka-sensei.. Empezó él. - Dijo Naruto señalando a Sasuke.
- Me da igual quien haya empezado.
- Pero-..
- Sin peros.. Los dos os quedareis esta tarde a ayudar a limpiar el gimnacio interior.
- ¿Los dos? - Dijo Sasuke arqueando una de las cejas.
- Si. Y no quiero ni la mas minima escusa.. A ver si aprendeis ya a comportaros como personas de 16 años ya. - Tras esto Iruka salió del aula.
- Genial.. - Dijo Naruto tras un gran suspiro.
- La proxima vez.. Deja de ser tan impulsivo. - Dijo Sasuke sentandose en su pupitre.
- ¿Que-..?
- Naruto.. Dejalo. - Dijo por segundo intento Sai.
- Está bien. - Dijo Naruto saliendo del aula casi corriendo. Naruto fue directo al baño en el cual se encerró en uno de los cuartitos con retretes y se puso a pensar.. La actitud de Sasuke verdaderamente le molestaba pero a la vez queria estar cerca de el.. Era extraño.. Deseaba con todas sus fuerzas que todo volviera a ser como antes, pero sabia que era casi imposible..
El resto del dia no fue diferente. Naruto y Sasuke teniendo pequeñas peleas a lo largo del dia entre clase y clase por cosas que no tenian sentido, añadiendoles así más castigos despues de las clases. Cuando fue la hora del almuerzo Naruto fue a la cafeteria, ya que trabajaba allí para asi poder pagar sus estudios y parte de la casa... Cuando llegó allí vio a Sasuke y con sus nuevos amigos. Sintió pena y celos. De nuevo recordo cuando ellos iban a comer y a jugar a los videojuegos, no se llevaban verdaderamente bien pero.. eran amigos, no como ahora. Naruto seguia en las nubes mientras servía las cosas y rompia uno que otro plato y los amigos de Sasuke se reian de el. Tenia mucha rabia.
- Naruto. Lleva esto a la mesa 7. - Dijo uno de los cocineros al rubio.
- Vale. - Dijo Naruto mientras cojia con una mano la bandeja con una pizza y con la otra una bandeja con 4 bebidas. Al salir de la cosina vio que en la mesa 7 estaban sentados Sasuke y sus amigos. - Mierda.. - Se quejó Naruto, pero pocos segundos despues se dirigió a la mesa de estos con paso firme, aunque sabia que seguramente se armaria una bronca, como siempre.
- ¡Ya era hora! ¡Me moria de hambre! - Dijo el peliblanco dando un manotazo en la mesa.
- Aqui tienen.. - Dijo Naruto aguantandose las ganas de dar un comentario grosero.. No podia permitir que le despidieran de nuevo.
- Espera Uzumaki. - Dijo la chica pelirroja que se encontraba agarrando el brazo de Sasuke cariñosamente. Naruto dió un suspiro y de giró mientras volteaba los ojos.
- ¿Que se le ofrece?
- He recordado que no me gusta este tipo de pizza.. Traeme mejor una barbacoa. Jijijiji
- ¿Para que la has pedido entonces?
- He dicho que se me habia olvidado.
- Pues tendran que pagar las dos, señorita. - Dijo Naruto con una sonrrisa sarcástica.
- No lo creo.. - Dijo el pelinaranja que se encontraba sentado al lado de Karin.
- Pagalo tú si quieres. Jajaja - Dijo el peliblanco.
- Eso Uzumaki.. Aprobecha y cómete algo decente en vez de tanta comida instantanea jajajaja. - Se burló la peliroja. Naruto habia sobrepasado su límite de paciencia asique cogió la pizza y se la estampó en la cara a la chica de pelo rojo.
- Buen probecho. - Dijo Naruto de nuevo con una sonrrisa sarcástica mientras se daba la vuelta y se dirigía a la cocina. Mientras tanto Karin no paraba de gritar e insultar a Naruto a la vez que Suigetsu y Juugo se reian. Sasuke por su parte tomó su vaso y mostró una pequeña y momentanea sonrrisa segundos antes de dar un sorbo y marcharase sin decir nada.
- S-S-Saasuke.. ¡Espera voy contigo! - Dijo Karin soltando las servilletas que tenia en la mano y cojiendo el bolso lo mas rapido que podia.
- No. Quedate ahí. - Se limitó a decir el pelinegro con una mirada seria mientras que salia de alli con un andar tranquilo y elegante que hacia que todos y todas lo mirasen boquiabiertos. Cuando Naruto entró a la cocina, estaba preparado para la bronca y el despido asique se quitó el delantal y estupo a punto de salir pero su jefe lo paró.
- Naruto.. ¿A donde vas?
- A casa..-
- ¿Por que? Aun no ha terminado tu turno.
- Y-Ya lo se pero- ..
- Naruto.. Vi lo que paso. Esa chica se lo merecia. - Dijo el jefe con una sonrrisa. - Te dare otra oportunidad ¿vale?
- ¡Si! - Dijo el rubio con una Gran sonrrisa. Este no se dió cuenta que Sasuke estaba mirandolo desde una ventana con una sonrrisita y segundos despues se fue a la clase a estudiar mientras que Naruto seguia esforzandose y trabajando en el cafe con una gran sonrrisa.
Al cabo de un rato volvieron a ir a las clases ya que todavia tenian 2 más asique cada uno ocupó su sitio. Las clases fueron como siempre, con alguna que otra tonteria de Naruto, más otra pelea entre el pelinegro y el rubio hasta que al fin se acabó la segunda clase. Naruto estaba a punto de salir por la puerta pero el profesor le paró y le recordó que estaba castigado junto al Uchiha asique hizo un puchero y se dirigió al gimnacio junto con Sasuke. Cuando llegaron a este observaron que en medio del recinto habian cubos de agua junto con botes de detergentes, fregonas, plumeros etc.. Sin decir nada cada uno cojió una fregona y empezaron a fregar. El silencio innundó la sala. Solo se oian las gotas del agua al caer.
- ¡Hey, Tú! - Dijo el Uchiha poniendo fin al silencio.
- ¿Que quieres?- Respondió el rubio entre dientes.
- Me estás pisando lo fregado - Dijo Sasuke algo molesto. Naruto no hizo caso de la queja del pelinegro y siguió fregando dandole la espalda a Sasuke. Este por su lado le dió un golpe con el palo de la fregona en la cabeza haciendo que este diera un pequeño grito y se desestabilizara, por lo que perdió el equilibrio y calló al suelo. - Hay que ver que torpe eres.. - Dijo mientras seguia fregando el Uchiha sin mostrar ninguna intencion de ayudar al rubio a levantarse por lo que este, tras varios intentos de ponerse en pie, se dirigió a los aseos junto con un paño para limpiar los cristales. Al entrar a este dió un gran portazo que resonó en toda la planta, haciendo el silencio de nuevo. Naruto se quitó la camisa, la cual estaba completamente mojada, y siguió limpiando los asulejos y cristales, casi habia acabado hasta que le sono el móvil. Esto era bastante extraño ya que normalmente nunca recibia una llamada o algo parecido..
- ¿Diga? - Dijo el Rubio con un tono entre intrigado y preocupado.
- Buenas tardes Señor, ¿hablo con Naruto Uzumaki? - Preguntó desde el otro lado del telefono lo que parecia un hombre jóven.
- S-Si, soy yo. - Respondió Naruto, cada vez más intrigado.
- En ese caso, tenemos algo que informarle. Es sobre su Tutor Legal... - La conversacion de Naruto por el movil se escuchaba desde el otro lado de la puerta, por lo que Sasuke escuchaba todo con claridad. Tras terminar limpiar las gradas del gimnacio, se acercó a la puerta para decirle al rubio que se encargara el de terminar el resto, ya que tenia una cita y ya iva retrasado, pero al entrar a esta se encontró con algo que no se esperaba. El rubio se encontraba serio, apagado, pálido, con los ojos a punto de estallar en el llanto..
- S-Si.. E-Entien-do.. Gra-Gracias.. - Dijo Naruto con una voz temblorosa y apagada que indicaba que romperia a llorar en cualquier momento. Este apagó el móvil y lo dejó caer al suelo haciendo que se le callera la tapa y la bateria del movil. Como no tenia mucho dinero, no podia pagarse un movil de ultima generacion y ese ya tenia por lo menos 4 años. Naruto se quedo hay, parado, sin saber que hacer, mirando al suelo como si en ese momento fuera lo unico que le importase.
Por otro lado, Sasuke simplemente cerró la puerta del baño con un ligero ''Clank'' haciendo que el rubio lo mirara de golpe, como si no se hubiera dado cuenta de su presencia asta ese instante, como si hubiera estado sumiso en un sueño desde el mismo instante en que cojió la llamada.
- S-Sasuke.. - Dijo el rubio mientras observaba al pelinegro. Este estaba frente a la puerta bloqueando la unica salida, impidiendo asi que Naruto pudiera escapar. Con esa figura firme, seria, como si lo unico que le importase fuera el mismo. De pronto, la primera lágrima calló de la cantidad de lagrimas que tenia contenidas el rubio en esos ojos azules. Por alguna razon, el ver a esa persona llorar hizo que Sasuke sintiera algo en su interior, no fue muy importante, ni instenso, pero sintió algo. No obstante, decidió no darle importancia. Naruto se sentia desanimado y triste, muy triste por lo que se avalanzó a los brazos de Sasuke. Introdujo sus brazos por la cintura del pelinegro y apretó con fuerza su camisa, para minutos despues romper en llanto. Sasuke sentía las lágrimas del rubio callendo en su camiseta cálidamente. Aun no tenia claro que hacer asique decidió no hacer nada, sin participar en ese abrazo.
-¿Que ha ocurrido? - Preguntó Sasuke un poco intrigado por saber que habia causado el estado de animo del rubio.
- Y-Yo.. M-Mi.. - Decia Naruto entre sollozos.
- Procura decir algo coherente...
- Ji-Jiraya.. Ya no es-esta.. - Dijo el rubio haciendo un gran esfuerzo para decir casi una frase. En ese momento Sasuke recordo. Vió en su mente diapositivas de los momentos que paso en casa de Naruto en los que Jiraya les daba galletas, les echaba la bronca por romper casi todo o pintar las paredes y una pequeña y momentanea sonrrisa apareció en su rostro.
-¿Como que ya no esta?
- Ha-Ha muer-to.. Un coche l-le.. - Naruto no podia hablar. Se sentia demasiado triste. Solo queria llorar y llorar asta quedarse vacio pero algo extraño ocurrió. De pronto, sus piernas no respondieron y le entró un sueño momentaneo haciendo que se desmallara y callera al suelo, dandose un fuerte golpe con el lavabo. Sasuke pensó en dejarlo allí, pero al ver el charco de sangre que se estaba empezando a formar decidó cogerlo en brazos y llevarlo al hospital.
El pelinegro hizo una llamada y enseguida llego un Honda negro con un conductor vestido del mismo color, el cual ayudó a recostar al rubio en la parte trasera del coche mientras que Sasuke se sentaba en asiento del copiloto y le daba ordenes a dicho hombre para que les llevara al hospital lo antes posible. Al llegar a este, tardaron un rato en atender al rubio y transcurrido este tiempo comenzaron a hacerle algunas pruebas.
Sasuke volvio a mirar el reloj, ya llegaba 30 min tarde asique le dió un papel a la enfermera y le dijo que cuando ya hubieran terminado de hacer las pruebas, llamaran a ese numero y vendria un hombre a recojerlo. Al principio, la enfermera no estaba demasiado convencida, pero Sasuke le ofreció un fajo de billetes si colaboraba con su peticion y esta acabo aceptando. Tras esto, Sasuke fue directo a un edificio, el cual tenia el Simbolo de su familia como logotipo en la fachada y entró en esta. Varias personas se abrian paso al ver al jóven Uchiha, el cual pronto llegó a su destino.
- Llegas tarde - Dijo un pelinegro, el cual estaba sentado en un gran sillon, dando la espalda a la puerta por la que entró Sasuke.
- Perdona, tube un contratiempo - Se escusó el pelinegro mientras se quitaba la chaqueta del colegio y la dejaba sobre un sillon
- ¿Contratiempo? ¿De que se trata?
- Naruto Uzumaki. Lo llevé al hospital.
- ¿Enserio? ¿Que pasó?
- Al parecer Jiraya murió y se conmosionó con la noticia.
- ¿A si?
- Si - Dijo el pelinegro como si aquello no fuera de gran importancia.
- ¿Tienes idea de quien ha sido?
- Eso no te incumbe, ¿verdad Itachi? - Dijo el pelinegro a la vez que la otra persona se daba al fin la vuelta y cruzaba sus manos frente a la cara apollandose en la mesa.
- Empecemos pues con nuestros asuntos, Sasuke. - Se limitó a decir este dejando de darle importancia, al igual que su hermano.
Naruto se desperto, no obstante, sus pestañas seguian pesandole demasiado como para ver las cosas con claridad. Por el momento solo podia ver algunas cosas borrosas y demasiada claridad entrando por una ventana. No reconocia esa habitacion y se preguntaba que habia pasado mientras soñaba con que comia un plato gigante de ramen. Al cabo de un rato recordó lo de Jiraya, lo cual hizo entristecerle, pero tambien recordó el desmayo.. El Uchiha estaba alli..
- ¿Lo abrasé? - Se pregunto a si mismo en voz alta al recordar el momento en el que abrazó al pelinegro. - Yo.. ¿Me desmallé? ¿Me desmallé en sus brazos? - Continuó preguntandose.
- Mas quisieras, Uzumaki - Dijo alguien desde la puerta de la habitación.
- ¡Aah~! - Gritó el rubio callendose de la cama. - ¡¿T-T-T-Tu que haces aqui?! - Dijo el Rubio señalando con cara de sorpresa al pelinegro.
- Este es mi cuarto. - Decia el pelinegro mientras se acercaba a Naruto, el cual comenzó a mirar a todas partes. Sasuke tenia razon, aquel era su cuarto y recordó las pocas veces que fue a allí. - ¿Te duele?
- ¿El qu-..? - Naruto se paso la mano por la cabeza y se dio cuenta de que tenia un vendaje que le cubria la frente y la cabeza. - ¿Que me paso..?
- Te desmallaste y te comiste el lavabo con la cabeza - Se limitó a decir el Uchiha. - Duermete y descansa - Dijo segundos antes de salir por la puerta y cerrar esta con llave.
- ¡Hey! ¡Oye! ¡Abreme La Puerta! ¡Hijo de Puta No Me Dejes Aqui Encerrado! ¡Abreme! ¡Oye! ¡No Me Vas A Poder Callar! ¡Abre~! - Gritaba el rubio desde el interior de la habitacion mientras que el pelinegro se alejaba de esta y iva al salon principal. Estubo en esta un rato viendo la tele, mientras que se escuchaba a lo lejos los gritos del rubio. Al dejar de escuchar los quejidos de este se dirigió a la habitacion y se encontro con que este estaba completamente dormido en el suelo asique lo tomó en brazos y lo acostó en la cama. Se veia inofensivo, fragil.. Sasuke deslizó su mano por la cara de Naruto haciendo que este se moviera un poco y salió de la habitacion. El haber ayudado al rubio no implicaba que volvieran a ser amigos asique se dirigió a un cuarto para invitados que habia cerca de allí y pasó la noche este...