El triunfo de Loki
Por Kelpieax
Podía verlo en sus ojos casi a cada segundo, aunque jamás lo había visto derramar una sola lagrima él podía ver que en su interior estaba destrozado. Tristeza, una profunda tristeza era lo que le demostraban aquellos ojos verdes, el dolor de la soledad y el vació oculto tras una mascara de furia. Y aun no tenía ni idea de cómo traerlo de vuelta, sacarlo de ese mar de oscuridad, no se le ocurría nada más que permanecer a su lado. Caminaba despacio hasta su celda en donde esperaría su destino final. La sentencia había sido dictada el sueño eterno como castigo a sus actos, por lo que el resto del mundo llamaba su inexorable maldad. Thor había suplicado al padre de todo casi al punto de la humillación para que cambiara la sentencia pero en vista de la falta de arrepentimiento de su hermano el veredicto era inapelable.
Se sentó junto a él en la desgastada cama en las penumbras de su celda.
-Loki- comenzó inseguro su discurso, sabía que el menor no lo interrumpiría debido a la mordaza que llevaba pero quería a estar seguro de que le prestaba atención a sus palabras.
-Por favor pide una disculpa pública.- la respuesta ya la conocía desde antes de dirigir su mirada hacia esas esmeraldas frías, decididas, indomables aún así tenía que preguntar. Permaneció sentado junto a él en silencio durante horas. ¿Cómo podría traerlo de vuelta? La noche llegó y al fin el guardia de la celda le informo que era hora de retirarse. Beso su blanca frente antes de salir del lugar. No supo por qué pero Loki no lo rechazo.
Recostado en la oscuridad de su cuarto veía pasar las horas sin poder dormir la opresión en su pecho no disminuía. Padre al ver su angustia le habló en privado “tal vez en mil años”. Pero ¿de que servirían mil años dormido? Estaba seguro que eso no cambiaría el dolor que lo tenía sumergido en tinieblas, debía haber una forma de ayudarlo sólo que aún no la conocía.
Amanecía sin que él hubiera podido conciliar el sueño, la temible hora se acercaba y todo lo que podía hacer era volver a su celda a esperar junto a él. Sentado a su lado al igual que la noche anterior la desolación en su pecho ya no pudo ser contenida.
-Por favor Loki te lo ruego, no me dejes. Te necesito ¿no lo entiendes? Por favor te lo ruego, no permitas que tu dolor te ciegue, que tu orgullo nos separe ¿Quieres verme humillado? pues aquí estoy de rodillas frente a ti suplicándote que no me dejes. – el rubio oculto sus rostro en el regazo de su hermano tratando de evitar que viera sus lagrimas. –Por favor.- suspiro entrecortadamente cuando de repente paso algo que no imaginaba, las frías manos de su hermano acariciaban suavemente su dorado cabello. Levantó la vista lentamente para encontrarse con esos hermosos ojos verdes viéndolo con empatía. Por un segundo tan sólo por un segundo pensó que tal vez Loki estaba reconsiderando, pero no.
Sus ojos aun mostraban se determinación a no ceder ni una pizca en su empeño.
-Desearía poder hacer algo para aliviar tu dolor.- murmuro el dios del trueno levantándose rápidamente besando sus ojos. Desde su regreso besar su rostro se había convertido en una costumbre, quizás para él era una forma de disculpa, además, de la clara muestra de afecto. Se anuncio la llegada de la escolta que lo llevaría hasta su destino final. Thor se aparto permitiéndole a los guardias continuar con su trabajo. Al llegar a la plaza publica todos ocupaban su lugar, al condenado encadenado en el centro del lugar de le retiro el bozal mientras el padre de todo la dirigía la palabra.
-Loki alguna vez fuiste hijo pródigo de Asgard, peleaste con nuestro ejercito y defendiste heroicamente nuestro mundo, por todo esto se te entrega esta ultima oportunidad arrepiéntete de tus pecados y tu condena disminuirá.
-Padre de todo.-habló con sorna el rey de las bromas. – De lo único que me arrepiento es de esos “actos heroicos” de los que hablas, Asgard debería y toda su estirpe debería ser borrada del universo.
-Ya que así lo quieres, que así sea. -Señalo Odin tomando su asiento nuevamente, el verdugo llevo una copa de oro incrustada con piedras preciosas hasta el dios de las mentiras. El pelinegro rodó los ojos, era absurdo que hasta para llevarle veneno usaran un artefacto tan elaborado, levanto la copa a manera de salud a sus jueces y desviando la mirada hasta donde estaba su hermano apresuro la bebida en su boca.
-¡Noooooo!- gritó el rubio corriendo hasta el cuerpo que se precipitaba al suelo, alcanzó a sostener su cabeza sobre sus rodillas antes de que diera de lleno en el piso, pudo ver como su hermano menor temblaba y luchaba por respirar. Sus lagrimas que en este punto ya eran incontenibles mojaron el pálido rostro quien sonrió llevando una de sus delgadas manos hasta sus mejillas limpiándolas.
-Por fin ..... lo ...logré.... mi vengan.....za. Destruí lo que más amas.... Y Asgard sin la luz......de su amado Thor pronto se hundirá en la oscuridad mmmnhh.... ¡gané!.- susurró triunfante el príncipe delas bromas mientras su corazón dejaba de latir. El dios del trueno bajo su rostro he inclinándose levemente besó sus labios, robándose así el ultimo aliento de su amado Loki.
-Ganaste.- afirmo el heredero del trono con el rostro desencajado muestra clara del dolor que lo embargaba, la infinita tristeza que antes habitaba en los ojos esmeralda ahora se posaba sobra la mirada azulina, quien observaba como el rostro de Loki por primera vez en mucho tiempo parecía dormir apaciblemente, con esa sonrisa relajada y sincera de muchos años atrás, aquella que siempre recordaría, esa de la cual se enamoro.
Fin
Sorry no quería hacer algo tan dramático pero creo que emparejar a estos dos es invocar al drama mismo, tienen demasiados asuntos sin resolver. A todas las fans Thorki se los debía y espero les haya gustado. Hace poco subí “variable” y me entristeció un poco no recibir reviews, así que por fa regálenme uno y díganme ¿qué les pareció?