Faltaba poco para la gran noche, sinceramente ninguno estaba nervioso, ya habían pasado por lo mismo repetidas veces. Sentían haber hecho un gran trabajo, ahora era tiempo de estar orgullosos y admirar lo realizado.
Eran cerca de las diez y acababa de salir de la ducha. Caminó hacia el clóset y tomó el primer traje que encontró. Un Massimo Dutti color gris, zapatos de vestir Rockport color negro, una corbata Loewe con detalles en plata, acompañada de una camisa Gucci negra que su ex Deborah le había obsequiado hace unos años; no le era muy grato recordarla, pero debía admitir que aquella camisa era de sus favoritas. Con algo de colonia y acomodando su cabello castaño, salió de su habitación para pasar a la sala. No vio a nadie ahí, Susan había salido con sus amigas y se llevó al pequeño Exton consigo. Indio ya no vivía con él y lo extrañaba, al menos él sí lo acompañaba a eventos cinematográficos en los que era el protagonista. Dio un último vistazo a su “modesta” morada y salió en su auto Bentley Continental GT.
En el camino recibió un mensaje en su iPhone, sin quitar su mano izquierda del volante, tomó el aparato y en la pantalla estaba el nombre del remitente. “La película comienza en 20 min. Apresúrate.” Sonrió al leerlo y lo guardó en su traje.
No era de los que llegan temprano a algún lugar y sabía que sin él nada podía comenzar. Casi no había tráfico y a pocas calles del lujoso teatro se podían observar las luces. Dejó su adorado Continental y sus llaves al Ballet Parking. Se colocó sus lentes oscuros y caminó por la alfombra roja sin pasar por alto las cámaras, posando como de costumbre y evitando las entrevistas con el pretexto de que se le hacía tarde. Al llegar la primera persona que vio fue a su gran amiga Kate Paltrow, alias Pepper.
-Cada día estás más hermosa.- Se detuvo a observar su vestido de coctel largo color perla y dorado. La saludó con un gran abrazo y un beso en la mejilla.
-Hace mucho que no te veo Rob.- Sonrió la rubia soltándose del abrazo y admirando de igual manera el atuendo del castaño.
-Dos semanas es mucho tiempo.- Interrumpió Chris Martin, líder de Coldplay y pareja de Kate quien se encontraba a su lado.
-Trajiste a Martin.- El castaño hizo una ligera mueca, pero saludó al más alto con un apretón de manos.
Kate tomó del brazo a Martin atrayéndolo a ella.- Vamos no peleen.- Rio divertida y los miró a ambos.
-Por cierto, ¿dónde está Susan?- Mencionó Martin al ver que Robert no estaba en compañía de su esposa.
Kate lo jaló un poco a manera de regaño.- Mejor vamos a buscar asientos cariño.
-Pero tenemos un par reservados en la primera fil…
La rubia se lo llevó lo más rápido que pudo.- ¡Te veo allá Robert!- Le gritó al castaño mientras se alejaban.
Estuvo un par de segundos parado en el mismo sitio hasta que escuchó una voz conocida.- Al menos debiste advertirme que llegarías tarde.
Giró su rostro, miró a un rubio alto y fornido de ojos azules, quien llevaba un traje color azul marino que hacía que sus orbes resaltaran con mayor intensidad.- Creí que era obvio.- Sonrió ladinamente.
-Para la próxima tendré que sacarte de tu cuarto si es necesario.
-Eso quiero verlo “Cevans”.
-Oye, no me llames así.
-Así te llaman todos.
-Sí, pero no me gusta que tú lo hagas.
-Oh vamos, todavía de que te invito a la premiere de mi película.
-¿Así que me estás haciendo un favor?- Se cruzó de brazos y miró al castaño. Siempre se hacían bromas entre ellos, pero no esperaba la siguiente respuesta.
-Se podría decir.- El rubio frunció el ceño.- Sino fuera por mí, estarías en casa de tu madre viendo alguna novela.
El más alto suspiró y giró para ir hacia la salida.- Será mejor que me vaya, podré mirar después “tu película” en casa de mi madre.
Robert sabía que no estaba bromeando y se colocó frente a él para detenerlo.- Yo… ahm… lo… siento, sólo era una broma… no te vayas.
-¿Qué? ¿No quieres que haga un escándalo frente a la prensa?
-No… no es eso.- El castaño miró el suelo y se quitó sus lentes.- He estado bajo mucha presión y…- Los altavoces del teatro anunciaron la última llamada para tomar asiento. Sintió como halaban de su brazo y lo llevaban casi a rastras.
-Será mejor que nos movamos.
Robert volvió a sonreír y se dejó llevar por el rubio.- Creí que estabas enojado Chris.
-Soy mejor actor que tú.
No podía ver su rostro entre la oscuridad de la gran sala, pero sabía que estaba feliz al regresarle una broma.
Se sentaron en la primera fila, los asientos forrados de piel estaban reservados a su nombre. Llegaron justo a tiempo, el director Shane Black y Stan Lee comenzaron los agradecimientos a todos los actores, productores y demás que contribuyeron con el film. A los pocos minutos comenzó la tan ansiada película. Robert miraba de reojo el rostro de Chris preguntándose cómo alguien podría soportar su a veces duro sentido del humor y seguir como si nada.
Pasaron los minutos y se escuchaban los murmuros y risas de las personas detrás de ellos sobre algunos hechos durante la filmación de aquellas partes; recordando cómo todo parecía verse diferente con las pantallas verdes; la cara de Robert cuando le dijeron que en lugar de ser lanzado por un verdadero avión en una de las escenas, tendría que ser colgado con un ventilador debajo de él o cuando Kate tuvo que usar el traje de Ironman y tardaron un par de horas para que pudiese entrar a la perfección.
El ambiente era muy relajado, pero Robert se sentía algo frustrado. Cada vez que aparecía en la gran pantalla las partes donde él y Kate tenían que besarse, no podía evitar mirar a su alrededor. A su lado derecho Martin evitaba ver la pantalla mientras Kate lo observaba divertida. Por su lado izquierdo podía notar que Chris se veía más serio de lo normal. Nunca le molestaron aquellas partes, ni cuando las veía junto con Susan o cerca de su hijo Indio.
Finalmente se rindió y colocó su codo en el brazo del asiento, posando su rostro sobre este y mirando sin muchos ánimos la pantalla. Chris se percató de esto y se acercó al oído de Robert para susurrarle.-Creí que estarías divirtiéndote al mirarte por casi dos horas.- El castaño trató de ignorarlo, a decir verdad no escuchó ninguna palabra de lo que dijo, sentir su aliento acariciando su piel lo había distraído por completo.
Chris se levantó de golpe arrastrando a Robert hacia el lobby del teatro. Por suerte hasta la recepcionista se hallaba viendo la película por una de las puertas de emergencia, la seguridad y los paparazzi se encontraban fuera, estaban completamente solos.- ¿Qué te sucede?- Gritó el castaño mirándolo con furia.
-Eso iba a preguntarte.
-Yo no soy el lunático que me sacó a la fuerza.
El rubio lo miró con desaprobación.- Volveremos si después de la película prometes contestar todas las preguntas que te haga.
-¿Desde cuándo trabajas para el FBI?
-Robert.
Esa era una mala señal, nunca lo llamaba así a menos de que en verdad estuviese enfadado.
-De acuerdo. ¿Ya podemos volver?- Contestó con fastidio y regresaron a la película.
Al volver a sentarse Kate llamó la atención del castaño, pasando por alto que Martin estaba en medio de los dos.- ¿Dónde estaban?- Susurró casi a gritos.
-Nada importante.- Robert le dedicó una sonrisa y continuaron prestando atención.
Chris reía cada vez que miraba a War Machine, anteriormente Scarlett Johansson le había comentado algunos spoilers que le había sacado a Kate, donde decía que hacía aparición el “hijo” de Ironman y Capitán América.
Las risas continuaron, ahora al unísono, cuando en una parte Tony peleaba con un niño pequeño a causa de un sándwich.
Después de más escenas divertidas la película estaba a punto de terminar. La continuación sería en Avengers 2, la cual Chris ya había leído el guión, pero gracias a la película, encontraba mayor conexión a lo que estaban filmando.
Al finalizar, reaparecieron Shane Black y Stan Lee comentando algunas partes y continuando con los agradecimientos. Todos los presentes comenzaron a levantarse de sus asientos y dirigiéndose a donde sería la fiesta de celebración.
Antes de que Martin y Kate se encontrasen de nuevo con Robert, Chris lo apartó de los demás.