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Don't speak por parku

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Notas del capitulo:

Este one-shot está basado en You seem to need hope, mi fanfic LayHan ^^

No es necesario haber leído el LayHan para entender este shot :3

Espero que les guste, aunque a mi no me convenza del todo xP

Ahora que ya escribí y subí este, puedo empezar a escribir el capítulo 25 de "You seem to need hope" n-n

Lamento si no es lo que esperaban~
Espero sus comentarios :3

Don't speak


Luces de colores que se prendían y se apagaban, personas sudorosas bailando frenéticamente pegadas unas a otras, y el olor a cigarrillo y alcohol inundando el ambiente.

Maldigo el momento en el que convencí a ChanYeol y a KyungSoo para salir a bailar, pensé frustrado. Me habían abandonado un rato después de entrar al lugar, y no había logrado ubicarlos. Quería despejarme, dejar de pensar y dejar de sentirme tan solo.

Me acerqué a la barra y pedí algo fuerte para tomar.
- LuHan esto, LuHan aquello- susurré molesto y me tomé de un trago el contenido de mi pequeño vaso. Sentí como me quemaba la garganta, ya que no estaba acostumbrado a beber cosas tan fuertes como el tequila -Estúpido Kai, que no deja de hablar de ese tal LuHan- pedí un segundo shot.

Mi mejor amigo, Kim Jongin, se había ido a China por un intercambio que obtuvo en un instituto en el que había estudiado desde pequeño. Estaba feliz por él, por supuesto. Pero se había hecho nuevos amigos... y parecía que se había vuelto demasiado cercano a uno de ellos. LuHan. No dejaba de hablar de él, sin saber que me lastimaba al hacerlo. Si iba a hablarme de esa persona, prefería que no lo hiciera.
Habíamos pagado un servicio extra en el celular, para poder comunicarnos en esos meses que él no iba a estar; pero últimamente yo casi no respondía sus mensajes y, si lo hacía, era cortante con él. No podía evitarlo. Los celos y el dolor me consumían, y él no dejaba de hablarme de ese chico. Al cual estaba empezando a odiar.
Yo había estado años a su lado. Pasábamos todos los días juntos, solos o con nuestros otros amigos ChanYeol y KyungSoo, había estado con él en cada momento bueno y malo de su vida; apoyándolo. Y ese chico, LuHan, llegaba y en pocos meses lograba arrebatármelo. Me había resignado a ser siempre su mejor amigo, nada más que eso. Y pensaba que incluso podía llegar a ser suficiente. Pero ahora sentía que lo estaba perdiendo.

Y, en un momento de desesperación, ante la soledad que sentía y lo mucho que lo extrañaba; había decidido salir a buscar a alguien con quien pasar el rato, arrastrando a mis dos amigos conmigo. Amigos a los cuales no veía hacía varias horas.

Después de tragar mi tercer tequila, me dirigí al baño tambaleándome. Apenas entré, me apuré en hacer mis necesidades, ya que mi vejiga estaba por estallar.

Mientras me lavaba las manos, enfoqué mi vista en una pared de mi costado, que tenía un espejo gigante donde me veía de pies a cabeza. Me acerqué para verme mejor. La remera fucsia, que tenía un dibujo en el centro y el escote en V, dejaba a la vista parte de mis clavículas; y el ajustado pantalón negro con las rodillas rasgadas y una cadena colgado, delineaban mis piernas dándole un toque atractivo. Me acerqué más, sacando con mis dedos el delineador que se había corrido de debajo de mis ojos. Puse mi mejor sonrisa, sin notar lo forzada que se veía.
- Vamos BaekHyun, vos podés hacer esto- me dije pastosamente, con el efecto del alcohol en mi cuerpo.

Salí, divisando inmediatamente a un chico muy parecido a Kai. Tenía los labios gruesos, el corte de cara era similar y bailaba muy bien, al igual que él. Pero su pelo era anaranjado, y su piel más clara. Me acerqué a él, y comencé a bailar cerca, sin quitar mi mirada de la suya, que ya estaba fija en mí.

Antes de que pudiera darme cuenta, ya estaba pegado a ese chico; moviendo mi cadera contra la suya, al mismo ritmo que él. Le saqué su vaso de la mano, y tomé lo que quedaba de un trago, emborrachándome un poquito más. Me sacó el vaso vacío, tirándolo al suelo y pegó sus labios bruscamente a los míos. Le seguí el juego, ya que eso había ido a buscar a ese lugar. Alguien con quien estar un rato.

Me estampó contra una pared, sin dejar de besarme y metiendo una de sus piernas entre las mías. Lo abracé del cuello, intentando no pensar. El alcohol que había consumido no era suficiente para no notar lo que hacía. Dejó mis labios para ir a mi oído y hablarme en un intento de tono seductor.
- ¿Te parezco lindo?- susurró, sin despegar su cuerpo del mío. Al parecer, era de esos que le calentaban que le dijeran cosas lindas sobre su físico. Lo empujé despacio, para separarlo de mí.
- Por más lindo que seas, si me preguntás eso no me vas a gustar- declaré, empezando a irme, dejando solo a ese chico del cual nunca quise nada realmente.

Pero... ¿A quien quería engañar? Ese chico nunca iba a gustarme por el simple hecho de que no era Jongin.



Ignorando donde se habían metido ChanYeol y KyungSoo, salí del lugar sintiéndome un poco menos mareado. Caminé torpemente unas cuadras, con frío y odiándome por lo que había intentado hacer. Agarré mi celular, y apreté el botón de marcado rápido. El primero en la lista.
- Hola, ¿Baek?- preguntó la voz de Jongin al otro lado de la línea. Se oía distorsionado.
- Hola- dije sin saber muy bien que más decir. Entre el alcohol y los nervios, no sabía ni para donde estaba yendo.
- ¡Espera que no te escucho nada!- gritó. Escuché mucho ruido por unos segundos, y de golpe silencio -Ahora sí, estaba en un boliche pero salí. Había muy mala señal- me explicó -¿Estas ahí?
- Si- respondí, intentando no llorar -Te extraño- murmuré torpemente.
- Yo también, Baek- sentí la sonrisa en su voz.
- Ni siquiera Sasuke Uchiha puede ocupar tu lugar- seguí hablando.
- ¿Sasuk...? ¿Que? ¿Estás borracho?- cuestionó.
- Un poco- antes de que pudiera evitarlo, un fuerte eructo se escapó de mi garganta y me reí por la sorpresa -Tal vez un poco más que un poco- me sequé una lágrima que había caído por la fuerza que había hecho al eructar.
- ¿Porque tomaste tanto?- suspiró -Eso no es común en vos.
- Ya te dije. Te extrañaba mucho y tuve que salir a buscar a alguien con quien estar.
- ¿Y los chicos?
- ¡Yo que sé! Me dejaron solo apenas entramos- bufé molesto.
- Baek... Baek, no me grites. ¿Estás bien? ¿Seguro que sólo estas borracho?- su tono de voz era de preocupación.
- ¿Sabes que? Me hice más tatuajes. Ahora mi brazo derecho está lleno desde la muñeca hasta un poco más arriba del codo- cambie de tema, resistiendo las ganas de llorar que sentía.
- Que... bueno, BaekHyunnie- dijo -¿Donde estas?-agregó.
- En la calle, volviendo a mi casa solo y con frío- y es por tu culpa. Le acusé injustamente.
- ¿Solo? Pero...
- Voy a cortar- le avisé. No quería escucharlo más. Las ganas de llorar me daban más nauseas y no creía poder tolerarlo mucho más.
- No, Baek. No cort...- corté. Y me puse a llorar. Porque le había cortado mientras hablaba, porque lo amaba y nunca había sido lo suficientemente valiente como para decírselo. Por los recuerdos que compartía con él, porque estaba borracho y porque nunca lo iba a superar.
Me senté en el cordón de la vereda y seguí llorando, viendo como el "nosotros" que nos implicaba a Jongin y a mí, moría lentamente.




Me desperté al otro día vestido, sobre mi cama y con un fuerte dolor de cabeza. Inmediatamente recordé las estupideces que había hecho y las cosas que le había dicho a Kai la noche anterior. Odiaba eso; me había emborrachado pocas veces en mi vida, pero siempre recordaba todo. Sentí mi cuerpo arder por la vergüenza. ¿Que pensaría Jongin de mí después de eso?

Me cambié, salí de mi casa y me subí a mi patineta para ir a la casa de ChanYeol. Antes de que pudiera golpear, la madre de mi amigo salió. Sonrió, me saludó y me dejó pasar antes de irse.

Subí las escaleras, dirigiéndome a la habitación de ChanYeol, y abrí la puerta al llegar.
- Park Chanyeol...- me quedé de piedra y callado, viendo a las dos figuras sobre la cama inmóviles. ChanYeol y KyungSoo. Ambos en boxer; el primero arriba del segundo y sus bocas a centímetros -¡Perdón!- grité, cerrando la puerta de golpe y bajando las escaleras completamente sonrojado. Con razón desaparecieron anoche.
- ¡BaekHyun, espera!- exclamó ChanYeol, corriendo por la casa en ropa interior.
- ¿Que pasa? Lamento haber entrado así, no me esperaba...- bajé la mirada, avergonzado.
- No... te preocupes- se sentó en un escalón -¿No estas molesto porque no te contamos?- negué con la cabeza -Que bueno- lo miré, y estaba sonriendo.
- Vine porque quería saber si estaban bien, como ayer desaparecieron... Aunque ahora entiendo todo, y veo que están más que bien- le sonreí divertido. Vi a KyungSoo aparecer con el mismo pantalón ajustado de la noche anterior, y una remera enorme, seguramente de ChanYeol. Mi amigo más alto sonrió bobamente al verlo. Suspiré, triste. Cuantas veces había deseado ver una mirada similar en Jongin, dirigida a mi.
- ¿Hace cuanto están juntos?- pregunté.
- Unos meses- respondió KyungSoo, sonriendo -¿Quieren que prepare algo para comer?
- Si, por favor- dijimos con ChanYeol al unísono. Nada mejor que una comida hecha por él.




Después de esa noche en el boliche, donde "estallé" de una manera extraña, intenté ignorar a Kai durante las siguientes semanas; pero me era difícil. Me llamaba, me mandaba mensajes, e-mails, me hablaba por skype. Me era imposible resistirme a él. Por lo que le terminaba respondiendo; pero no a todo.

Finalmente cedí, volviendo a tener largas conversaciones por medio de vídeo llamadas. Pero nunca mencionamos aquella charla telefónica que habíamos mantenido mientras yo estaba borracho. Me sentía un poco mejor ya que, aunque lo seguía nombrando a LuHan, no lo hacía tanto como antes.
Incluso empecé a llamarlo yo, recibiendo siempre una respuesta muy animada de su parte. Eso me hacía feliz; pero terminaba no siendo suficiente. Quería verlo. Y con ese deseo, pasé los siguientes meses.





Volvía del colegio, andando en mi patineta, completamente ensimismado. Tanto, que no noté cuando mi cuerpo, que se sabía el camino de memoria, hizo girar la pequeña tabla bajo mis pies para subir por el caminito que daba a la entrada de mi casa. Fallando el inconsciente cálculo y llevándome por delante el pasto, cayendo sobre éste de manera patética. Apoyé mi antebrazo sobre mis ojos, pensando en Jongin. No quiero necesitarte de este modo, no quiero extrañarte tanto. Suspiré con angustia.
- ¿Estás bien?- preguntó una voz algo grave, que me erizó los pelos de la nuca. Me destapé lentamente los ojos, viendo a Kai inclinado hacia adelante, sonriendo. La primer sonrisa sincera en meses, hizo presencia en mi rostro.
- ¡Kai!- exclamé, parándome rápidamente -¿Que haces acá?
- Volví- estiró sus brazos, y yo salté hacia adelante para dejar que me envolviera entre ellos -Volví- repitió, y se sintió muy reconfortante -Y veo que seguís igual de torpe que siempre- comentó. Me separé del abrazo y lo miré con un puchero.
- ¿Porque me decís eso?
- Tu rodilla. Vamos adentro que te curo- dijo riendo. Miré mis rodillas. Sobre la pierna derecha del pantalón gris del uniforme, se estaba formando una mancha bordó.
- Ay... ¡Duele!- exclamé, escuchando la risa de Kai.


- Seguís igual de freaky que siempre- comentó recorriendo mi habitación, viendo mi colección de mangas que había aumentado durante su ausencia.
- Orgullo otaku- declaré sentado sobre mi cama y acomodando mi pantalón. Mi rodilla ya estaba vendada. Se giró y me miró.
- ¿Tenés nuevos de esos que donde hay parejas de hombres haciendo cosas?- preguntó divertido. Recordé que gracias a esa clase de mangas, ambos habíamos declarado ante el otro que nos atraían los hombres. Claro que eso no hubiera pasado si Jongin no se hubiera puesto a revisar mis cosas.
- No...- mentí -¿Porque?
- Curiosidad. No te tenía así, Baek- me guiñó un ojo.
- No soy un santito como vos crees- le informé.
- ¿Ah no?- negó con la cabeza.
- No. Pero... ¿Sabés quienes más no son santitos?- susurré.
- ¿Quien?- preguntó de igual modo, sentándose a mi lado.
- ChanYeol y KyungSoo. Están saliendo...- le conté la situación en la que los había encontrado hacía unos meses.
- ¿De verdad?- asentí -Wow, quien se lo hubiera esperado de ellos...- nos miramos fijamente.
- Nosotros- dijimos al unísono. Reímos fuertemente.
- Hace tiempo que lo veo venir, y sé que vos también- dije sonriendo.
- Si, es verdad- me miró fijamente unos segundos -Sabés... LuHan hizo que...
- ¿Querés comer algo?- lo interrumpí, parándome y viendo lo sorprendido que estaba él. Yo podía llegar a ser muy desagradable, enojón y tal vez maleducado. Pero no con él. Nunca con él. Con Jongin siempre era diferente, porque él era especial para mi. Todos creían que se debía a la fuerte amistad que nos unía. Sin ganas de escuchar nada que tuviera que ver con LuHan, seguí hablando -Ya vengo- le informé, y me fui sin dejarlo responder.




- ¿A donde vas a ir?- me preguntó Jongin, viendo como pasaba un cinturón de tachas por las presillas de mi pantalón chupín negro, del que ya colgaba una cadena.
- Ya te dije, voy a salir con ChanYeol y KyungSoo... Y vos vas a venir conmigo- le informé.
- ¿Tan arreglado?- lo miré con curiosidad.
- Siempre me visto así- susurré, sacándome mi prenda superior para buscar otra. Me decidí por una remera violeta fuerte.
- Deja de moverte un segundo- me pidió, sosteniéndome de los brazos para mirarme a los ojos. Le devolví la mirada tímidamente. No era algo de todos los días para mí estar sin remera y que Jongin estuviera tan cerca -Me gusta como te queda la argollita en la nariz- comentó.
- Gracias...- bajó la mirada a mi antebrazo derecho, donde no había piel que no estuviera cubierta por un tatuaje. La levantó hasta casi pegar su rostro a éste- ¿Que haces...?
- ¿Quién diseñó estos tatuajes?- preguntó repentinamente. Parpadeé varias veces antes de responder.
- Yo.
- Me gustan mucho- confesó.
- Eso... me hace feliz- me sonrojé. Señaló una parte y me miró. Desvié la mirada a mi brazo, temeroso, sabiendo lo que había visto.
- ¿Eso es a propósito? ¿O fue casualidad que se forme eso?- cuestionó.
- Sos... mi mejor amigo, sos importante... Por eso lo hice- mentí a medias rápidamente, soltándome de su agarre y haciendo que desvíe la mirada de la parte de mi antebrazo donde decía "Jongin" de manera muy camuflada. Me acerqué al espejo que colgaba de mi armario, con el delineador en la mano, y procedí a pintar una línea muy finita en cada uno de mis párpados.
- Sabés... LuHan...- volvió a empezar a decir eso por décima vez en los últimos tres días, desde que había llegado. Como todas las veces anteriores, lo interrumpí.
- ¿Me pasas ese peine?- pregunté, señalándolo. Lo hizo a regañadientes y volvió a comenzar, diciendo exactamente lo mismo -¿Me alcanzas la remera que dejé en la silla?
- No- me giré para mirarlo, asustado por el duro tono de voz que usó.
- ¿Que?
- Que no. Y no vas a salir de acá hasta que me escuches- se paró enfrente mío.
- Kai...- empecé a caminar hacia la salida. No me creía capaz de escuchar lo que tenía para decir sin romperme.
- Kai nada- me tomó de la muñeca, y prácticamente me lanzó a la cama. Sentándose rápidamente en mi abdomen para que no pudiera pararme. Como cuando éramos chiquitos y él se encaprichaba con que haga algo que yo no quería hacer -Vas a escucharme.
- Por favor...- susurré.
- LuHan hizo que me diera cuenta de algo- me tapé la cara con las manos.
- Por favor... no...- mi respiración se volvió irregular.
- Estuve muy confundido con él, creí que me gustaba- siguió hablando. Miré entre mis dedos, sintiendo mis ojos humedecerse. Él miraba a otro lado, sin darse cuenta de mi estado.
- Por favor, no hables más- supliqué.
- Incluso lo besé, a la fuerza.
- Por favor... no me cuentes eso... Duele- bajé una mano a mi pecho, a la altura del corazón, y con la otra cubrí mis ojos que ya derramaban lágrimas.
- Y mientras lo besaba y, si me permitís darte algún detalle extra, me frotaba un poquiito contra él...- dejé escapar un leve llanto, siendo totalmente obvio. Ya no había nada que ocultar.
- Ya sé que estás diciendo, por favor deja de explicarte. No digas más porque me duele- murmuré. Sentí como se hundía el colchón a los costados de mi cabeza.
- Mientras hacía eso con LuHan...- siguió sin importarle nada. Me retorcí, intentando sacármelo de encima -Me dí cuenta de que estaba pensando en vos- declaró. Frené todo movimiento y me saqué la mano de la cara, con las lágrimas aún cayendo. Su rostro estaba a la altura del mío, pero bastante más arriba. Lo miré sorprendido.
- ¿Que?- dije muy bajito.
- Pensaba en vos. En si estarías bien, en que estarías haciendo o pensando en ese momento... En como se sentiría besarte y acariciarte... Que se sentiría estar haciendo eso con vos, en vez de con él- sonrió con ternura.
- ¿Que?- repetí, sintiéndome estúpido, sin poder creer lo que decía. Rió y acarició mi mejilla con su mano derecha.
- LuHan hizo que me diera cuenta de que estoy enamorado de vos- me explicó -Sabés que soy cabeza dura, me costó darme cuenta... Pero ahora que lo sé, no pienso aceptar un no por respuesta- me froté los ojos con fuerza, sintiendo el peso de Jongin en mi estómago y las lágrimas, ahora de felicidad, brotar de mis ojos -No llores más... Por favor. Y aunque suene egoísta, necesito una respuesta. Me voy a volver loco si no. Porque yo realmente...
- No hables- dije destapándome los ojos.
- ¿Que?- pasé mi mano por su nuca y lo acerqué hasta que nuestras frentes y narices chocaron.
- Que no hables- desde esa corta distancia, lo miré a los ojos. Él, sonriendo, entendió y me dio un suave beso con la boca cerrada. Prácticamente un roce de labios. Pero yo venía aguantándome durante años, y eso no era suficiente. Con mi mano, que seguía en su nuca, evité que se alejara y capturé su labio superior entre los míos, para después hacer lo mismo con el inferior finalizando el contacto con mi lengua deslizándose por éste. Repartí pequeños besitos en su mejilla, viendo su sonrisa y sintiendo mis ojos todavía húmedos. Volví a su boca, que me esperaba lista para empezar un beso de verdad. Dejando que nuestras lenguas se conocieran, nuestros labios sincronizaran y nuestros dientes chocaran un poco cuando el beso se volvió desenfrenado -Yo... también estoy... enamorado de vos- susurré entrecortadamente luego de un intenso y largo beso -Desde hace años.
- Disculpame por no notarlo...- todavía arriba mío, escondió su rostro en el espacio entre mi cuello y mi hombro.
- No hables si vas a decir eso- le pedí -No quiero que sientas ninguna clase de culpa- le acaricié el pelo suavemente.
- Te quiero tanto, BaekHyunnie- dijo contra mi piel, produciéndome un escalofrío. Por su aliento, que había golpeado esa zona, y por sus dulces palabras.
- Yo también, Jongin. Muchísimo- le abracé -Tanto que voy a cancelarles a ChanYeol y a KyungSoo para que pasemos un rato solos- bromeé.
- Uy, el BaekHyunnie si que era pervertido al final- comentó, haciendo que clavase mis uñas en su espalda, molesto. Rió fuertemente -Era un chiste, Baek, no te enojes- besó lentamente mi cuello, primero con sólo los labios y luego añadiendo la lengua y los dientes.
- Creo... que puedo perdonarte- me avergoncé de mi mismo, ya que había parecido más un gato ronroneando que una persona hablando -Si, si puedo- aseguré cuando terminó su beso con una lamida.
- Que bueno que seas tan amable- levantó su cabeza y me guiñó un ojo. Ambos sonreímos -¡Ah! Por cierto, nos invitaron a China a pasar las vacaciones de allá, sólo tenés que aceptar y yo me encargo de todo.
- ¿Estás loco? ¡Es mucho dinero!- exclamé. Sabía que si había algo que a Jongin no le faltaba, era plata, pero no quería que gastara tanto en mí.
- Sólo tengo que pagar los pasajes, LuHan nos ofreció hospedaje a los dos- me informó. Fruncí el ceño.
- BaekHyunnie... LuHan esta en pareja, no siento nada por él. Te lo juro- me dio un rápido y casto beso -Pero me hice muy amigo suyo y lo aprecio mucho. Además, él y su mejor amigo quieren conocerte- me miró suplicante. Suspiré.
- Está bien- acepté. Después de todo, no era tan desagradable conocer un país nuevo. Y, según lo que me había dicho Jongin, si no hubiera sido por LuHan, él no habría notado sus sentimientos hacia mí -Pero sólo porque te quiero mucho- apoyé mi dedo en su nariz.
- No tanto como yo te quiero a vos- dijo, arrugando su nariz, haciendo que sacara mi dedo de ahí. Pasé mis brazos por su cuello, y le respondí con un beso.

Tal vez... Sólo tal vez... Ese LuHan no era tan malo después de todo.

Notas finales:

DOS COSAS:

Sí, el chico que se agarra Baek era Taemin (?) xD [Me había prometido no mezclar bandas, por eso no aclaré nombre... Pero en mi cabeza fue Taemin :B Y me había prometido no matar y bueh. Nunca cumplo al parecer è-é JAJA]

Y, por si lo notaron, hay algunas cosas sacadas de la canción "Don't Speak" De Gwen Stefani :3

 

Está dedicado a Bedu y a Kim, porque les pregunté que parejas les gustaban de mi lista de parejas por hacer (?) y ambas dijeron KaiHyun :3
Espero que les haya gustado, pechochas~

Y también, espero que les haya gustado a todas n-n

Gracias por leer, y no vemos (A las que lo siguen) en You seem to need hope :D

 

 

Todas/os ustedes son lo más y me hacen re filiz. -Henryteamo-

¡Las/os adoro!

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Parku~


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