Stay
¿Por qué ya no puede ser más, por qué has dicho que debes alejarte?
No lo puedo evitar, las lágrimas se fugan de mis ojos al pensar en tus palabras, al pensar que esta es la última vez… y ya no habrá más ¿Por qué no puede haber más si con vehemencia mi cuerpo no deja de llamar al tuyo?
Siento tus labios recorrer el camino de las lágrimas, lo siento como fuego ardiendo que consume mi rostro… quiero apartarte de mí, alejar tu cuerpo que tanto me lastima… no volver a mirar tu alma… pero no puedo… quiero tenerte cerca y que nuestras pieles traspasen la frontera la una de la otra, que vayan más allá del limite de los poros, que se encarnen hasta las entrañas.
Entonces no podrás irte…
Stay with me…
Siento la aspereza de tus manos sobre mí; ásperas… así debían ser las manos de cualquier bajista… pero tú no eras cualquier bajista, el calor intenso de cada uno de tus dedos tocaba mi alma y sacudiéndola casi la hacías salir de mi cuerpo. Y en este momento no puedo reconocer la ubicación de esas manos tuyas, siento que estoy dentro de ellas, que me aprisionan… ojala pudiera ser para siempre…
Stay with me… al menos hazme dejar de pensar…
Stay with me… que la metamorfosis del cuerpo traspase el alma…
Stay with me… y al tiempo…
No recuerdo cuándo había comenzado… pequeños juegos dentro de los camerinos… besos fugaces tras el escenario cuando nadie observaba… los primeros en llegar a los ensayos, los últimos en irnos… mis manos tras el bajo deslizándose en tu torso… mis labios conociendo los tuyos y tu poseyendo cada letra de canción en mis labios.
Intento cantar para ti…
Stay with me…
Pero mi voz se fracciona en pedazos de corazón…
Desesperadamente…
Stay with me…
Siento tu intromisión en mi interior… atraviesa mi alma a través de mi cuerpo y yo envolveré la tuya con mis brazos… y yo cantaré a tu corazón convirtiendo mi voz en un torbellino de éxtasis…
No detengas tus movimientos… siento la escancia de tu ser brotar por tus poros, la siento entrar en los míos… por qué si en medio de esta hermosa canción me dices que aquí es donde pertenecemos el uno para el otro… con tus palabras terminas con todo… y nos llevas hasta el infierno.
Why can’t you see me…
Siento tus lágrimas sobre mi rostro… las he visto caer de tus ojos y siento como se entremezclan con las mías, el transparente liquido de nuestras almas y también el blanco liquido de nuestros cuerpos… unidos en el dolor y en el placer… ni siquiera ellos quieren separarse…
En un esfuerzo inútil te abrazo… fuerte… intensamente… no quiero que te alejes y sé que no quieres alejarte… el temblor de tu cuerpo me lo dice o quizá es mi corazón el que tiembla… el que llora… cuando salgas de mí cuerpo todo acabará… excepto el dolor… de nuevo las lágrimas y de nuevo tus manos ásperas en mi rostro…
¿Qué intentas proba ahora…?
“Lo siento… Ryuichi” Haz susurrado… y después mi nombre en tus labios… pesado… casi amargo.
“Quizá este sea el acto de amor más grande que haga por ti…”
No entiendo de qué hablas… no necesito actos de amor… sólo necesito tu mirada sobre la mía…
“Soy el demonio… el infierno viene conmigo…”
Pero yo quiero ir al infierno contigo… no me importa si debemos cantarle al diablo…
Why can’t you hear me…
Pero ya has salido de mí… y dentro de mí se cierne un vacio infinito que jamás podrá ser llenado…
Te veo recoger tu ropa… te veo ir a la puerta… y tu figura se distorsionada entre la cortina de lágrimas… quizá si grito puedas escucharme…
Stay with me…
¿Habrá algo más allá de ti…?
Más allá de la luna…