En un mundo continuamente en guerras por territorios o riquezas, siempre hay algún reino que consigue mantener la paz; ya sea por ser un reino sin interés estrategico, sin riquezas o sin tierras para cultivar.

Latil juntaba estos tres motivos por lo que era un reino pobre y en paz. Era un pequeño terreno al norte del continente Del Sol. En la capital se entrelazaban muchas vidas distintas, desde la más extrema pobreza que obligaba a los aldeanos a vivir en la calle, hasta los ricos nolbres que hacían riqueza a costa de los demás.

Allí, en el club lazo rojo, vivían ajenos a ajenos a la pobre, pero, de alguna manera estaba muy presente. Lennard había sido vendido por su familia y se vio obligado a vender su cuerpo, con la única esperanza de salir de viajar a reinos más prosperos. Pero aún le faltaba para pagar la deuda.

"-No tengas tanta prisa- Murmuró- He pagado por dos horas.

Se apartó del cuerpo del chico y se sentó, apoyando la espada en el cabecero de la cama. No tuvo que decir nada más, Len llevaba suficiente tiempo siendo su favorito como para saber que quería.

Tomó el miembro con la boca para lamerlo, lubricandolo con su saliva. Cuando sintió una mano acariciando con suavidad su cabeza, engulló toda la extensión de la polla.

Sabía como hacer una mamada tan buena que su cliente durara menos de diez minutos, pero con Draco era distinto, a él le gustaba disfrutar de la sensación cálida de su boca y había pagado dos horas enteras. Se lo tomaría con calma, dedicándose a darle placer.

Draco terminó por correrse dentro de su boca, entre suaves jadeos, Len se dedicó a lamer los rastros de semen antes de separarse por completo de él. Se mordió el labio inferior al verle, pero esta vez no había sido un movimiento perfecto y estudiado, esta vez había sido inconsciente.

La verdad es que a él, por alguna razón, le producía una gran excitación realizar felaciones, tal vez fuera algún mecanismo de defensa por parte de su propia mente para que la situación en la que se vio envuelto desde tan joven fuera más soportable.

O tal vez es que había nacido para prostituirse.

Ese gesto le gustó a Draco, quien se echó de nuevo sobre Lennard y estuvieron besándose y tocándose sobre la cama hasta que su polla estuvo erecta de nuevo. Colocó a Len a cuatro patas sobre el colchón y él se irguió, observando el pequeño agujero por el cual iba a introducirse."

Aquí, en este momento en el que puedo ver la horca frente a mi, me pregunto “¿Por qué he tenido que nacer en este país, en esta época?”

Aquí, en este momento en el que estoy maniatada mientras espero las piedras volando hacía mi, me pregunto “¿Por qué he tenido que nacer en este país, en esta época?”

Aquí, en este momento con el viento frio calándome hasta los huesos, con la nieve frente a mi y escuchando sus pasos justo detrás, me pregunto “¿Por qué he tenido que nacer en este país, en esta época?”

Tres historias contadas a la vez, ya que en el fondo es la misma. Odio, miedo, impotencia y un solo deseo: Que esto cambie algún día

Zephyr es un buen chico, siempre ayuda a quien lo necesita y es amable con todos.

No se imaginaba lo que podria acarrear eso.

Un inesperado encuentro en un callejón oscuro lleva a Zephyr a conocer al frio Viktor. Un hombre calculador y cruel que conseguirá cambiar por completo y destruir la vida del joven.

...

   -Agachate- murmuró observando el cuerpo del chico que tenia en frente, éste se quedó de piedra, con un temor intenso reflejados en sus orbes verdes y sus manos temblando a los lados de su cuerpo.

   -¿Qué…?- Alcanzó a decir con la voz ronca, Viktor clavó una mirada que no dejaba lugar a replicas -Agachate- Repitió con autoridad y un toque de amenaza. Zephyr obedeció lentamente, quedandose de rodillas frente a Viktor, fijando su vista en la mesita de noche que tenia a su lado, intentando no enviar miradas furtivas a su entrpierna. La mano callosa de Viktor acarició su mejilla, obligandole a mirarle, quedandose hipnotizado en la electricidad que desprendían sus ojos- Sacame la polla y empieza a chuparla- Ordenó en voz baja pero clara, dejando a Zephyr con una expresión de pánico congelada en su cara- ¿Tengo que repetirlo?- Añadió, con una nota de enfado que hizo reaccionar al joven, apartandose bruscamente de él, mientras que Viktor levantaba una ceja.

   -N-no…- Intentó hablar, pero la respiración agitada se lo ponía muy difícil- Por favor… E-eso no…

   -No te lo estoy pidiendo- Su voz fría le atravesó, provocando un jadeo en Zephyr.

...

Esta historia contiene algo de sadomasoquismo (no demasiado fuerte) y sexo explicito 

En la época actual los cambiaformas sufren una lenta extinción y las pocas familias supervivientes hacen todo los posible para no caer en el olvido. Mike, el hijo menor de una antigua familia de cambiaformas tigre, siempre ha seguido el camino marcado hasta que conoce a Chris, un misterioso y sexy cambiaforma que le atrae desde el primer momento, aún sabiendo los problemas que conlleva eso, no puede evitar caer en sus redes cada vez que le mira.