Harry ha perdido la esperanza y se hunde en el dolor, está cansado de ser constantemente utilizado. De fingir que todo estaba bien frente a sus amigos, mientras él se perdía entre la ira, el dolor y la melancolía. Él sólo deseaba ser amado; tener un lugar al que llamar hogar pero, en cambio qué tenia, ¡nada!, sólo una profunda soledad. Esa era su vida, un mar de dolor y desolación, en el que se ahogaba lentamente…

Sin embargo, Harry pronto descubriría que Snape tenía el salvavidas perfecto para él.

¿Quién dijo que, todos los caballeros llegaban con una blanca armadura?