Rias: No, la verdad. (Oh, no, eso debe ser cuando he estado en la habitación de Zero, que me han caído las gotas de su pelo en mi ropa)
Nico: A lo mejor eres tú-
Rias: ¡No! ¡Imposible!
Nico: Vale, vale, da igual, lo habré confundido...
Rias: ¡Sí! Será eso... Bueno voy a ver si veo la manta, Nico, pásame esa silla de ahí, para que pueda ver lo que hay en la leja de arriba.
Nico cogió la silla y se la dio a Rias, se subió en ella y encontró la manta arriba, pero cuando iba a bajar no veía el suelo con la manta tan ancha así que empezó a ponerse nerviosa y a temblar, la silla parecía que se iba a volcar, y efectivamente, volcó...
Nico: ¡Cuidado Rias!
(Nico se puso debajo de ella, para cogerla cuando ella cayera)
Rias: ¡Ah! (se cae encima de Nico, y la manta sale volando)
Nico: ¿¡R-Rias estás bien!?
Rias: A-au... (Se da cuenta de que está encima de Nico) ¡L-Lo siento mucho! Yo no quería... digo... ¿estás bien?
Nico: S-Sí, yo estoy bien ¿y tú?
Rias: Ta-También... esto...
Nico: ¿Si? (le vuelve a dar la olor de Zero) Un momento... (Se acerca al cuello de Rias)... Esta olor es la de... Zero.
Rias: (gira la cabeza)
Entonces Nico, se quitó a Rias e encima, cogió la manta, y cuando iba a salir al pasillo...
Rias: ¡N-Nico! ¡Donde vas!
Nico: ¡A mi habitación!
Rias: ¡¡E-Espera!! ¿Qué pasa por que te pones así?
Nico: Solo quiero irme a dormir.
Rias: ¿Qué he hecho para que te enfades?
Nico: Nada. Buenas noches...
Rias: ¡Nico! ¡Aun no he terminado de hablar contigo!
Nico: ¿Huh?... Hay gente durmiendo, no grites, es muy tarde.
Rias: ¡Yo no est-! Vale, ¿me lo puedes explicar?
Nico: No tengo nada más que decir. Buenas noches...
Y sin decir ninguna palabra más Nico se metió a su habitación y cerró la puerta, no quería saber nada más de Rias... Cuando cerró la puerta se apoyó en ella y se preguntó que por que le molestaría tanto que Rias hubiera estado con Zero, si al fin y al cabo sólo son amigos, tienes todo el derecho del mundo a estar con quien quiera. Él no puede meterse en su camino, o al menos intentaba comprenderlo...
Nico: No lo entiendo, ¿por qué me tiene que fastidiar tanto esto? ¿Por qué me siento así? Quiero saber las respuestas pero no le encuentro sentido alguno... ¿Acaso no estaré enamorado de ella? Necesito respuestas ya... Pero necesito dormir... ¡¡Son las 5 ya!!... y mañana tengo que levantarme a las 8 para empezar a hacer las visitas a la familia, estoy acabado.
A la mañana siguiente:
-Suena la alarma del móvil-
Nico: ¿Eh? ¿Qué hora es? ¡Ah! ¡¡Llego tarde, llego tarde!! ¡Son las 7:45! ¡Con las cosas que tengo que hacer! Voy a vestirme, bajo a desayunar y luego subiré a por el móvil y todo lo demás... Oh, que sueño (bostezo)
Cuando Nico se bajó, Rias que estaba en la habitación de al lado, escuchó el golpe de la puerta de Nico, y la despertó.
Rias: (mira el reloj) Aún son las 7:45 tengo tiempo para dormir... Bajaré a desayunar a las 11, no cierran temprano así que...
Y se volvió a dormir... Mientras tanto Nico ya había terminado de desayunar y había visitado ya a casi toda su familia solo quedaban sus abuelos...
Nico: Son las 11, haber, tengo que volver al hotel, a coger el móvil y todo lo que necesito...
Rias bajó a desayunar a las 11, y Zero a las 10 y media, no se toparon así que no hubo problema...
Rias: Oh, dios, que bueno estaba el desayuno, he comido demasiado, no debería de haber comido tanto... (Subió al ascensor) Que sueño que tengo y estoy tan cansada... (Salió del ascensor y se dirigió a su habitación, cuando en el pasillo...)
Rias: ¡N-Nico!
Nico: ¡Rias!
Rias: Oye yo... quería decirte...
Nico: Lo siento...
Rias: Y yo... espera, ¿cómo?
Nico: Siento lo de anoche, estaba un poco estresado, tenía tantas cosas que hacer tan poco tiempo para descansar, ya que he dormido menos de 3 horas...
Rias: Lo entiendo perfectamente, pero estábamos tan a gusto hasta que saltaste con lo del olor a Zero...
Nico: (agacha la cabeza) Ya...
Rias: ... ¿Por qué?
Nico: ¡Por nada!
En ese momento sale Zero de su habitación...
Nico: ¡Zero! (con rabia)
Zero: (levanta la cabeza) ¡N-Nico! (sorprendido)
Nico: ¡Cabrón asqueroso! (se lanza contra él, lo coge de la pechera y lo estampa contra la pared)
Rias: (Sorprendida y asustaba, se temía lo peor) ¡Nico, déjalo! (coge a Nico e intenta separarlo de Zero)
Nico: Déjame Rias.
Rias: ¡Para!
Nico: ¿¡Qué le hiciste a Rias anoche!? ¡Habla!
Zero: ¡Yo no le hice nada!
Nico: ¡Mentiroso! (le da un puñetazo a Zero en la cara)
Rias: (Tengo que hacer algo o sino se van a hacer daño de verdad, y esto se va a convertir en algo serio) ¡Nico, deja a Zero! (pasa de ella) ¡Nico que dejes a Zero! ¡Estamos juntos, por eso olía a él anoche!
Nico y Zero a la vez: ¡Qué!
Rias: Es la verdad, así que acéptalo. (Coge a Zero de la mano) ¡Oh Dios, Zero estás sangrando! ¡Nico eres un imbécil! (le da un guantazo a Nico, y entra en su habitación con Zero)
Cuando Rias y Zero entraron en la habitación, Nico, sorprendido y impactado a la vez, sintió que se le venía el mundo encima perdió la fuerza y cayó de rodillas al suelo, estuvo llorando un rato, cuando se dio cuenta de que allí no hacía nada, se levantó y entró a su habitación para hacer sus maletas; mientras en la habitación de Zero...
Zero: Rias, ¿me puedes explicar todo esto?
Rias: Iré a por algo para curarte eso...
Zero: Pero explícamelo...
Rias: Cállate y siéntate en la cama.
Zero: De acuerdo. Pero tengo derecho a pedirte respuestas.
Rias: Eres un tonto, y tu champú tiene la culpa.
Zero: ¡Ah vale! ¡Perdona por ser un chico limpio!
Rias: ¡Que no me refiero a eso! Verás, ¿te acuerdas de anoche?
Zero: ¿Te refieres a lo del beso?
Rias: Exacto.
Zero: Lo siento de verdad-
Rias: No te preocupes, no estuvo tan mal.
Zero: ¿Cómo? ¿Estás diciendo que te gustó?
Rias: ... Verás, he dicho antes que estaba saliendo contigo para que Nico no te matara...
Zero: Sí, será eso.
Rias: ¡Que te lo digo en serio!
Zero: Yo no he dicho que sea mentira.
Rias: B-Bueno... Déjame que te limpie esa herida. Dios mío, vaya puñetazo te ha dado Nico... Si te hubieras estado quieto el día anterior, esto no hubiera pasado...
Zero: ¡Ah, duele!
Rias: ¡Lo siento!
Zero: No pasa nada... (Le mira a los ojos)
Rias: B-Bueno, esto ya está.
Zero: Gracias.
Rias: No hay de qué. Voy a guardar esto, ahora vengo.
Zero: Vale... Que sueño, y que cama más blandita que tienes (bostezo)
Rias: Pues es igual que la tuya, ¿no, Zero? (No responde) ¿Zero? (se asoma a la habitación) ¡Ze-! V-Vaya... Se ha quedado durmiendo... En fin, que se quede durmiendo, tengo que ir a comprarme una camiseta de manga larga, en el centro comercial de en frente, no creo que haga nada malo, y parece que la siesta va para rato... (Lo tapa y le deja una nota en la que pone: He ido a comprar una cosa, ahora vengo, no hagas nada malo... Fdo: Rias)
A los 20 min., de que Rias se fuera, un ruido de afuera lo despertó, se asomó a la ventana y vio a unos jóvenes se estaban peleando, y se arrojaban lo que pillaban...
Zero: ¡Ah, que molestos! (grita) ¡Niño, que estáis haciendo! ¡Que quiero dormir!
Joven 1: ¡Pues duerme viejo!
Zero: ¡P-Pero como que viejo! ¡Si bajo te cuelgo del árbol más alto que haya!
De repente los jóvenes echaron a correr, y Zero no entendía nada hasta que vio el coche de la policía aparecer por el fondo...
Zero: Ya era hora... (Bostezo) Que sueño... (Se quita la camiseta) Dios, que calor... (Se da la vuelta y ve a Rias)
Rias: ... ¿En serio, piensas colgar al chaval ese? (Se ríe)
Zero: N-No pensaba hacerlo... (Se ríe) No te he oído entrar...
Rias: Normal, con los gritos que estabas dando... (Se ríe)
Estuvieron un buen rato riéndose, entonces, Rias se acordó de que no se había llevado el móvil, y que necesitaba llamar a sus padres e informarlos de que estaba bien, que tenía amigos que la cuidaban y que sus vacaciones durarían más de lo que esperaba...
Pero cuando fue a coger el móvil vio un mensaje, era de Nico... Decía: -Lo siento, Rias, pero me voy... Espero que te vaya muy bien. Un beso, Nico-. De repente a Rias sintió que le faltaba tiempo, y echó a correr, salió al pasillo, traqueó la puerta de Nico y no respondía nadie...
Zero: R-Rias, ¿¡donde vas!?
Rias: Lo siento Zero, ya volveré...
Zero: ¿¡Cómo que ya volverás!? ¡E-Espérame Rias! ¡Mierda, mierda! ¿¡Y mi camiseta!? J-Joder... ¡Aquí! ¡La encontré Rias...! ¿R-Rias?
Zero bajó corriendo las escaleras, que por poco no se come algunos escalones, y vio a Rias hablando con la de recepción y salir corriendo hacia la puerta...
Zero: ¡R-Rias! ¿Quieres esperarme?
Rias: ¡Corre Zero, y ponte la camiseta!
Zero: ¡Pero si no me dejas tiempo!
Se puso la camiseta y salió corriendo detrás de Rias, aunque seguía sin saber porqué estaba corriendo, solo sabía que parecía ser urgente...
Zero: Pero, ¿Por qué corremos?
Rias: Es Nico...
Zero: ¿Que le ha pasado a Nico?
Rias: ¡No lo sé, por eso corremos!
Zero: ¿Pero donde está?
Rias: Puede ser que esté en la estación, por eso nos dirigimos hacia allí...
Zero: Ese imbécil... Muy bien (coge a Rias de la mano y empieza a correr más rápido)
Rias: Vaya Zero, ¿Cómo es que corres tan rápido? No puedo correr tan rápido.
Zero: Ser el número uno en todo tiene sus ventajas... Vamos Rias, tú puedes...
Cuando llegaron a la estación de tren, se separaron para buscar a Nico, pero no aparecía por ningún lado, entonces quedaron en ir a ver los horarios de las entradas y las partidas del tren y por suerte allí se encontraba Nico... Cuándo Rias vio a Nico, no pudo contener las lágrimas y se abalanzó sobre él por detrás...
Nico: ¿¡Pero qué-!?
Rias: ¡Eres un imbécil!
Nico: ¡¡Rias!!
Nico se dio la vuelta y abrazó a Rias con todas sus ganas, dejó caer sus maletas y se le cayeron unas lágrimas, mientras Zero observaba desde lo lejos, apoyado en un pilar.
Rias: ¿¡Que pensabas hacer!?
Nico: Iba a irme lo más lejos posible de ti...
Rias: ¡Pero que estás diciendo!
Nico: Ya que no te puedo tener junto a mí por el resto de mis días, por lo menos quiero intentar olvidarte...
Rias: No te vas a librar tan fácilmente de mí (lo agarra del pelo y lo besa)
Zero no pudo soportar ver esto último y se fue a por algo de beber, cuando llegó a la máquina de refresco, había un chico unos dos años menor que él...
Carl: ¡Que asco de máquina! ¡Suelta mi dinero! (le da una patada a la máquina)
Zero se asoma y ve al joven darle la patada, pero prefiere observarlo para ver que haría a continuación, se apoyó en la pared, se metió las manos a los bolsillos y se quedó mirándolo, pero al ver que le iba a dar otra patada...
Zero: Oye, oye, no te cargues la máquina...
Carl: (Se da la vuelta y se queda embobado en Zero) E-Esto... no iba a darle otra vez...
Zero: No engañes a tus mayores pequeño (Se incorpora, se acerca al joven y le revuelve el pelo)
Carl: (se sonroja) Y-Yo so-solo he dicho la verdad, y tampoco soy pequeño...
Zero: ¿Ah, no? ¿Cuántos años tienes?
Carl: Diecisiete cumplí hace poco.
Zero: Pues pequeño. (Se ríe)
Carl: ¡Oye! Es que, ¿cuántos años tienes tú?
Zero: Tengo diecinueve.
Carl: (susurra) Es más mayor que yo, que asco de tío, y aún encima viene con leyes...
Zero: ¿Decías?
Carl: Eh, ¡nada! Solo que nada más nos llevamos dos años, ¿y ya me estás llamando pequeñajo?
Zero: Exacto, veo que lo has pillado.
Carl: (sonrojado) Odio a los tíos como tú, tan superficiales... uf..., de verdad los odio...
A Zero le entraron ganas de jugar con él, así que fue directo a fastidiarle el día a Carl... Zero cogió a Carl de las manos, con una mano sujetaba las manos de Carl, impidiéndole hacer nada, y la otra, como no, en el bolsillo, lo tiró al suelo y se sentó encima suya, sin soltarle las manos, claro...
Zero: ¡Eh! Pequeñajo- (acerca su cara a Carl)- ¿a quien estás llamando superficial?
Carl: (Al principio piensa: Que ojazos que tiene, desde aquí es más guapo, si pudiera quedarse así un rato más... pero, luego reacciona...) ¡O-Oye suéltame! O mejor dicho, ¡quítate de encima! ¡Aquí nos puede ver la gente!
Zero: ¿Y qué pasa si nos ven?
Carl: Tengo vida social, no tiene porqué un superficial como tú estropeármela...
Zero: E-Espera deja de llamarme superficial, al igual que tú tengo un nombre...
Carl: No me digas, pensaba que eras tonto...
Zero: (Se levanta de Carl, y le ofrece su mano para levantar a Carl, el cual la acepta) Me llamo Mike López, Zero para los amigos (le guiña un ojo)
Carl: (Muy sonrojado) ¡Chsss, pero serás idiota!
Zero: ¿Eh? ¡Aún encima que me presento!
Carl: Pues vaya presentación más sosa...
Zero: ¿¡Eh!? Niño maleducado, te recuerdo que tú aún no te has presentado...
Carl: Tampoco tenía pensado hacerlo...
Zero: Pues vale... (Se da la vuelta y comienza a andar)
Carl: ¡Eh! ¿¡Dónde vas!?
Zero: Con mis amigos...
Carl: ¡Oye!
Zero: ¿Y ahora qué?
Carl: ¿Dónde vives?
Zero: (Piensa: ¿para qué querrá saber este donde me hospedo? En fin...) Me hospedo en el hotel Casablanca.
Carl: Gracias. ¡Y mi refresco qué!
Zero: Cierto. (Se da la vuelta, le da un codazo a la máquina y cae el refresco) Ahí tienes pequeñajo.
Carl: ¿¡Pero cómo... lo has hecho!?
Zero: Secreto.
Carl: (Sonrojado) Gr-Gracias... (Agacha la cabeza)
Zero: ¡De nada! (Se ríe, se da la vuelta y se va)
Pero Carl, se quedó pensando en el hotel, pero cómo ya sabía donde se encontraba el hotel no le preocupaba nada, abrió su refresco y se fue por el pasillo tomándoselo, hasta que cuando ya estaba lo suficientemente lejos de Zero, le vino a la mente que no sabía en qué habitación estaba, de seguida, tiró el refresco al suelo y salió corriendo en busca de Zero, pero Zero ya estaba con Rias y con Nico...
Rias: ¿¡Zero dónde te habías metido!?
Zero: Había ido a por un refresco.
Nico: ¿Y el refresco?
Zero: Es una historia muy larga...
Nico: No me lo digas... ¡Ya te has ligado a alguien! (Se ríe)
Rias: ¿¡Eh!?
Zero: ¡Para nada! He conocido a un chico que estaba por ahí...
De repente se oye un grito por el fondo de la estación -¡EH, TÚ ANORMAL! ¡VEN AQUÍ!... (Cuando ya está cerca de él) ¡N-NO PUEDO FRENAR!