Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Geheim por VampireDark

[Reviews - 100]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Vuelvo y actualizo después de mil años, creo que ya no quedan seguidores aquí, y que probablemente quede en el olvido, pero tengo que darle un final.

 

Este fic tenía un final ya en otra página, pero allí me lo borraron debido a que alguien malintencionado lo reporto por tener "contenido sensible", así que con el dolor de mi alma vi la perdida de uno de mis trabajos más hermosos y queridos.

 

Por eso, haré la finalización aquí, me lean o no, creo que quiero darme el lujo de verla finalizada sea como sea.

 

`Para quienes esten interesados o todavía vivan por esta pagina gracias por la atención.

 

Subire hoy tres capitulos, y luego ire subiendo cada fin de semana uno para darle cierre prontamente.

 

Disfruten su lectura

Ver a ambos jóvenes frente a su puerta, con una mirada que intentaba ser retadora, aunque era evidente el temor que sentían, lo impresiono terriblemente, sin embargo, en menos de nada estaba riendo divertido por la situación.

—Maldición, Byun… Parece que no tienes ni el más mínimo sentimiento de autoconservación en tu cuerpo —su voz salió con malicia, molestia y algún toque de diversión, viendo que su presa había ido directamente hacía su puerta, para ser devorada.

—Atrévete a tocarlo… y te juro que… —escucho la voz de Kim haciendo que su sonrisa se ampliara, más cuando la amenaza quedo a medias debido a la interrupción del otro joven.

—En serio… no tenemos tiempo para esta mierda… profesor Wu… estamos aquí por algo que nos interesa a los tres… un enemigo en común, de hecho.

La ceja de Kris se arqueo en ese momento sin poder quitar la mirada de los dos jóvenes frente a él por la repentina y extraña afirmación, teniendo perfectamente claro que solo existía una persona en común entre Byun y él.

Y aunque sabía que todo podía ser una mentira bien elaborada para salvar su propio pellejo, o tal vez un acto desesperado de supervivencia por parte del menor, decidió que tal vez sería una buena idea escucharlos antes de decidir que haría con los dos adolescentes frente a él.

Termino de abrir su puerta con una sonrisa maliciosa en sus labios, viendo como ambos jóvenes dudaban completamente en entrar en su casa, el territorio enemigo después de todo, pero al final Byun se decidió a avanzar con un gesto de valentía que casi hubiese podido ser creíble, mientras Kim maldecía detrás, siguiéndole los pasos.

Cuando ambos jóvenes hubieron estado en su sala, Kris simplemente cerro su puerta con llave, evitando que cualquier persona pudiese salir o entrar, a excepción de él, por supuesto, como tanto solía gustarle, tenía el completo control de la situación.

Observo como ambos adolescentes se miraron fijamente con algo de terror en la mirada de ambos, antes de mirarle de nuevo como no queriendo perder ningún detalle de sus movimientos, temiendo por sus acciones. Y eso sin duda alguna, le llenaba de aquella deliciosa satisfacción del cazador que por fin había podido acorralar a su presa.

—Bien… supongo que deben intentar darme una buena razón por la cual debo comportarme como un jodido adulto decente y responsable, ¿no? —la sonrisa había desaparecido por completo, ahora mostraba aquella faceta realmente molesta por lo que había ocurrido la noche anterior, esa parte de él que quería matar a Byun allí mismo—. Les aconsejo que empiecen a habar ya… antes de que me arrepienta de ser alguien bueno.

—No somos como tus estúpidas noviecitas… deja de darnos ordenes… no lograras intimidarnos —la ira en la voz de Kim no podía hacer mas que aumentar su satisfacción, pero mantuvo su mirada fría y estoica, realmente el dolor de cabeza y el recuerdo de lo que había pasado la noche anterior no le permitía estar para juegos aquel día.

—Kai… cálmate —vio el gesto del contrario, el cual tomo la mano de su amigo en un gesto que rápidamente permitió que el otro se relajara un poco, ambos eran la debilidad del otro era un hecho—. Esto no se trata de nosotros, se trata de cómo podemos ayudarnos mutuamente si queremos destruir a alguien que de seguro todos estaremos felices de eliminar.

—Demasiados rodeos, Byun… se directo, no tengo tiempo para esto…

—Se donde vive, donde trabaja, que hace y de hecho tengo fácil acceso a la vida de Do Kyungsoo… y en verdad quiero destruirlo… y al parecer usted tampoco es un buen amigo de él… ¿o sí?

Las cartas habían sido puestas sobre la mesa, ahora solo quedaba ver cuales serían los resultados, estaban arriesgando demasiado, Kris lo sabía, veía en el rostro de los chicos que irle a buscar había sido un acto desesperado. Casi incluso podía decir que podía ver la sinceridad emanar de los menores.

Pero después de todo ¿Él que podía saber al respecto? Había sido engañado por Do Kyungsoo con anterioridad, no podía confiarse del todo aún.

—¿Qué les hace pensar si quiera que conozco al tipo? ¿Por qué venir a pedirme ayuda cuando tan solo anoche arruinaron mi diversión?

—Diversión… claro… vaya diversión… estar dispuesto a dañar a… —gruño y guardo silencio cuando Baekhyun le hizo un gesto para que se callara de una buena vez.

—No puedo asegurar que es aquello que ese hombre le hizo, pero ayer dijo que quería vengarse de él, y que me utilizaría por estar de su lado —niega varias veces—. No soy un aliado de Kyungsoo, pero supongo que lo pensó después de la reunión que tuvimos… Vi como lo miraba, y sus palabras de anoche me lo confirmaron… él es un enemigo de ambos, y si nos unimos podremos al fin vengarnos de lo que nos ha hecho, sea lo que sea que le hizo a usted.

Kris mantuvo silencio por unos instantes, vio como Kim rápidamente empezaba a perder los estribos y estaba dispuesto a iniciar una jodida guerra verbal en la que realmente tenía pocas ganas de participar. Por su parte, Byun le estaba intrigando, mostraba una actitud tranquila, el miedo o desesperación anterior parecían haber desaparecido.

El chico parecía estar seguro de que Kris aceptaría ayudarlos y eso a Kris le dejaba con un sin sabor en la boca, sabía que no podía perder la oportunidad, pero tampoco quería darle el control de la situación al mocoso.

—¿Cómo puedo asegurarme de que lo que dicen es verdad? ¿Cómo saber que realmente tienen un acceso tan fácil a ese maldito hijo de puta? —y la sonrisa que puso Baekhyun, hizo que quisiera maldecir en ese momento.

—¿Qué mejor prueba que el hecho de que Do Kyungsoo fue quien asistió a la citación que usted programo por mis ausencias? —le mira con una sonrisa divertida—. ¿Necesita una prueba mejor que esa?

—Ayer iba con una maleta de equipaje, Byun… si es que usted en verdad tenía algún tipo de contacto con él, dudo que eso ocurra en este momento.

La sonrisa desapareció en el rostro del menor y Kris quiso suspirar con fuerza, habían vuelto al mismo punto en el que estaban antes, en la completa nada. Realmente aquellos mocosos no eran de ningún tipo de ayuda.

—Se equivoca, no solo conocemos su casa y su trabajo, también conocemos perfectamente que persona necesita mantener alejado de él si quiere ponerle en una situación compleja, y mejor aún tenemos el arma que hará que esa persona se aleje sin ningún problema de Do —Kai hablo curiosamente tranquilo, teniendo en cuenta la mirada que estaba lanzando al mayor, llena de desprecio.

—Y teniendo en cuenta que el Doctorcito tiene el don de enojarse cada que nos ve cerca, creo que podemos sacarlo de sus estribos de manera suficiente, para poder causar un caos que lo deje desprotegido… —se queda pensando en ello y sonríe de medio lado—. Allí es donde usted, profesor Wu, entraría… con Do siendo todo suyo para que haga lo que tenga que hacer.

La mirada de Kris se poso en ambos aún con demasiadas dudas, no sabía si realmente aquellos niños estaban siendo sinceros, o si quiera si su plan tenía algún sentido. En lo que conocía a Kyungsoo no era alguien que fuera fácil de engañar. Pero al ver la sonrisa que Baekhyun puso en su rostro, supo que el menor ya había planeado algo mucho más elaborado.

—Y lo mejor es que ahora tenemos al perfecto idiota útil que Do no conoce y sin duda nos ayudara en lo que necesitamos.

Y cuando el bajito, poso su mirada en el menor de los presentes pudo notar la duda seguida del terror que este había colocado en su rostro, mientras negaba varias veces.

—No, no… no lo usaremos a él…

Y ahora las cosas se estaban tornando curiosamente interesantes.

 

 

 

 

 

 

 

Kyungsoo había estado tan emocionado con la partida de aquel maldito mocoso que no dudo en dejar todo el arreglo de la casa en un segundo plano y pedirle a Chanyeol que le invite a comer.

El mayor como siempre había accedido sin muchos miramientos al pedido de su novio y, aunque Kyungsoo estaba terriblemente molesto por la actitud apagada y aburrida de Chanyeol, decidió ignorarlo ya que en verdad quería una celebración por todo lo alto que ni siquiera Chanyeol le iba a poder arruinar.

En el restaurante las cosas iban realmente tranquilas y perfectas para ambos, o al menos ese era el concepto que el menor tenía en ese momento, mientras ambos hacían un pequeño brindis.

Chanyeol cada vez lucía un poco más animado que antes, incluso conversaba con él algunos temas de su trabajo que, sin duda, poco o nada le interesaban, pero al menos se sentía tranquilo de observar aquella sonrisa, no tan animada como en otras ocasiones, pero igual contenta.

Incluso Kyungsoo podía recordar los momentos antes de que a aquel mocoso le diera por aparecer en su vida, o incluso mucho antes, cuando aún estaba estudiando y utilizaba cenas improvisadas y sus buenas actuaciones para fingirse completamente interesado en Chanyeol y sus absurdas conversaciones.

La verdad es que aquel restaurante era su favorito, por lo que siempre solían ir al mismo lugar, así que el lugar tenia bastantes recuerdos positivos para él. El primero fue cuando pudo por fin librarse de sus padres, humillándolos por su pobreza y humildad en aquel mismo lugar.

Claro, todos sus compañeros de universidad e incluso el mismo Chanyeol tenían una imagen distinta de lo que había ocurrido con su familia, por supuesto él había sido la pobre víctima abandonada por unas personas que simplemente no habían podido tolerar que su hijo fuera homosexual.

Un cliché claro, pero lo suficientemente creíble para que todos vieran en su historia a un pobre e inocente chico que había logrado salir adelante por sus propios méritos, y por supuesto funcional, ya que permitió que Chanyeol se encargara de pagar todos sus estudios.

Si, sin duda aquel restaurante era su lugar de triunfo, donde atesoraba sus mejores recuerdos, donde por primera vez Chanyeol le hablo de irse a vivir juntos, dejando atrás a su estúpida familia. Y donde, ahora, celebraban que esa estúpida familia quedaba, de nuevo, fuera de sus vidas.

Volvió su atención al mayor cuando noto que estaba esperando una respuesta de su parte, respecto a cualquiera de las idioteces que de seguro había estado diciendo.

No había seguido ni un poco el hilo de la conversación así que no sabía realmente que era lo que esperaba el mayor que él contestara.

Debido a esto, decidió irse por el camino fácil, simplemente se levanto un poco de su asiento y jalo a Chanyeol hacía él para darle un pequeño y tranquilo beso que fue fácilmente correspondido, dejando la conversación de momentos atrás en el olvido.

Cuando se separaron, Chanyeol le sonrío de forma tranquila antes de continuar con su comida, haciendo que Kyungsoo intentara volver a perderse en sus pensamientos, pero esta vez la conversación de Chanyeol empezó a tomar un rumbo que le interesaba.

—Supongo que… como te decía, en verdad es bueno que dejemos todo lo que hemos vivido estos días en el pasado, somos una pareja fortalecida, debemos seguir de esta manera.

—Por supuesto, Chan. No podemos dejar que nada de lo que hemos vivido hasta ahora nos afecte. Somos una pareja mucho más fuerte que eso —no sabía a donde quería llegar Chanyeol con sus palabras, pero él le alentaría a que dejara a ese mocoso fuera de su vida de una vez por todas.

—Lo sé, es por eso que pensé que mudarnos sería la mejor opción. Podemos buscar algo más cercano a tu trabajo si quieres. Tú tienes buen gusto, de seguro podrás encontrar algo que sea perfecto para ambos, donde nadie indeseado pueda llegar a nosotros.

Y él, simplemente no podía creerse las palabras que Chanyeol le estaba diciendo, llevaba tiempo pidiéndole al mayor que se fueran a vivir a otra casa, una más lujosa y agradable. Chanyeol ganaba lo suficiente para comprarse una que les permitiera un mejor estatus social.

Sin embargo, el idiota era demasiado modesto, incluso decía que la que tenían actualmente era demasiado lujosa para lo que ambos necesitaban, y nunca había logrado que accediera a ese capricho.

Ahora gracias al imbécil de Byun lo había conseguido, si hubiese sabido que lo único que tenía que hacer para conseguir lo que quería era desprestigiar al hijo de Chanyeol, bueno… hace mucho tendría su nuevo hogar. 

No pudo evitar levantarse nuevamente para besar los labios del chico de manera tranquila, disfrutando de aquella exquisita victoria, del delicioso placer que se tenía al saber que había ganado desde cualquiera de los puntos que pudieran verse, ese poder siempre había sido excitante para él.

—Te juro, amor, que encontrare la casa perfecta para nosotros, te juro que nadie podrá molestarnos o volver a intentar arruinar nuestra perfecta vida —vuelve a besarle antes de separarse por completo—. Solo seremos nosotros dos y nuestra vida de ensueño, para siempre.

Y el realmente estaba creyendo en esas palabras, realmente pensaba que su paraíso de cristal no podría ser roto, que en ese momento no era menos que una poderosa fortaleza impenetrable.

Claro que él creía fielmente en eso, hasta que la conversación tomo de nuevo un tono más banal y él decidió distraerse observando por la ventana. En aquel momento quedo terriblemente paralizado, sintiendo como su perfecto paraíso temblaba levemente, mostrando que no era tan inquebrantable como él lo había pensado.

Después de todo, Byun Baekhyun estaba observándoles a los lejos, con los brazos cruzados y una burla evidente en su mirada, mientras daba media vuelta dispuesto a alejarse de aquel lugar.

Y realmente ver a Baekhyun no debería haber producido semejante reacción en él, un mocoso que había perdido toda oportunidad de volver a ser parte de sus vidas.

Pero su mirada y aquella sonrisa, aquella jodida y maldita sonrisa le había producido escalofríos. Fue casi como una amenaza latente, como si con esa sonrisa el chico le estuviese advirtiendo que nunca les dejaría en paz, que sería la sombra amenazando con destruir todo lo que él tanto se había esforzado en crear.

Por eso no dudo en levantarse de la mesa y prácticamente correr fuera del restaurante. Pero, para su molestia, al momento que salió ya el mocoso no se veía a los alrededores y la gente, tanto dentro como fuera del restaurante le observaban con algo de duda y miedo.

Chanyeol dejo el dinero de la cuenta sobre la mesa y salió siguiendo a su chico, acariciando suavemente sus hombros y sintiendo como este saltaba un poco ante el repentino contacto.

—¿Qué ocurre, amor? ¿Está todo bien? —y la mirada de Chanyeol le hizo volver a la realidad, sintiendo rabia consigo mismo.

Ese niño no iba a alterarle, mucho menos a causar que su mente entrara en temores estúpidos e infundados, él no solo había ganado la batalla, sino que la guerra completa tenía su nombre en el triunfo. Y que ese niño diera algunas patadas de ahogado no cambiaria en absoluto el resultado de ese juego.

Por lo tanto, devolvió su mejor sonrisa a Chanyeol y tomo las mejillas del mayor acercándose para, una vez más en aquella noche, darle un beso suave, que permitiera alejar todas las malditas dudas que querían apoderarse de su mente.

—Por supuesto, amor. Nada podría estar mal en este momento.

 

 

 

 

 

 

 

Kai había llegado solo a la casa de Oh Sehun, había hecho lo posible porque su madre no notara que estaba por el barrio para evitar más problemas de los que ya tenían y tendrían a partir de ese momento.

Parqueo la moto de Baekhyun y golpeo la puerta esperando que el mayor ya hubiese llegado de la academia, la noche ya empezaba a hacerse notar y no podía evitar suspirar, culpándose por haber arrastrado a su vecino a toda aquella mierda.

Para su suerte, Sehun abrió la puerta mostrándole una pequeña sonrisa, al parecer se veía contento de que después de todo Kai si quisiera regresar, y eso solo hizo que un piquete de culpabilidad pinchara su corazón, pero él debía ser fuerte para poder salvar a su amigo.

Siguió a la casa de forma tranquila y espero pacientemente hasta que Sehun le trajo algo de tomar y se sentó a su lado, ambos quedándose en un pequeño silencio por unos instantes, hasta que fue el mayor quien decidió hablar.

—Aún estoy preparando algo para que podamos comer los tres, estará listo en unos momentos, ten un poco de paciencia —le sonríe un poco, jugando con sus dedos nerviosamente—. ¿Tu amigo no vendrá?

No puede evitar sonreír un poco por la actitud del mayor, era sin duda un tipo agradable, sin embargo, mantenía algunas dudas en su cabeza por las acciones de aquel pelinegro, y tal vez ahora que estaban solos era el momento indicado para resolverlas.

—Baekhyun vendrá en un rato, gracias, instructor Oh —su sonrisa se ensancha un poco e inclina su cabeza hacía un lado, mirando fijamente al hombre que levanta una ceja, curioso—. Sin embargo, quiero hablar con usted antes de que él llegue, después de todo existe una duda que no me deja tranquilo, y si he de aceptar quedarme en su casa tendré que poder aclararla.

Al ver la confusión en el rostro del mayor no pudo evitar que una sonrisa se posara en sus labios, a pesar de todo la situación era divertida y, de alguna manera, sentía que no quería perderse ni una sola de las reacciones que tuviera Oh Sehun con la pregunta que él iba a hacerle.

—Bueno, primero que nada, puedes llamarme únicamente Sehun, no estamos en la academia… Y en cuanto a lo que dices, lo importante es que tú y tu amigo se estén cómodos, no quiero que se sientan obligados a nada, solo quiero tenderles una mano —ve como el pelinegro se queda pensando unos instantes en que decir a continuación antes de asentir tranquilamente—. Puedes preguntar lo que necesites para poder aclarar sus dudas.

Kai se acerca un poco más a Sehun, haciendo que sus rodillas choquen suavemente y la piel quede en contacto, sonriendo divertido por la expresión impresionada que se posaba en el rostro de su mayor.

—Espero completa sinceridad con su respuesta, Oh —le mira fijamente, sus ojos brillando entre la diversión y la verdadera duda—. ¿Por qué siempre me espía desde su habitación? ¿Acaso es algún tipo de acosador de quien deba preocuparme?

Ver el rostro de Sehun en aquel instante valió totalmente la osadía de la pregunta y agradeció que en verdad estuvieran solos, ya que Baekhyun no hubiese dudado en burlarse y hacer toda una escena en su cabeza, divertida únicamente para él mismo.

Y es que el mayor había abierto sus ojos de par en par, impresionado por aquella pregunta tan repentina, sin duda no se la esperaba, y por el sonrojo que rápidamente se había apoderado de todo su rostro mientras agachaba la mirada, supo que ni siquiera se había dado cuenta con anterioridad que había sido descubierto por el menor.

—¿Qué pasa, Sehun? —la diversión aún no se iba de su rostro, pero intentaba mantener una voz más neutra, ya que en verdad quería una respuesta a las acciones del contrario—. Su silencio me hace sentir aún más preocupado que antes, tal vez… debería tomar mis cosas e irme de aquí, así no tenemos ningún inconveniente.

—¡No! No… —su sonrojo se hace aún más evidente al ver como rápidamente había levantado la voz e incluso se había alterado un poco por la situación en la que en aquel instante se estaba viendo involucrado—. Mereces una respuesta a esa pregunta, ya después decidirás si esta bien irte o quedarte.

Kai se acomodo mejor en el sofá, dispuesto a escuchar aquella explicación de Sehun que sabía, sin duda alguna, sería bastante interesante, ya fuera para bien o para mal.

—Honestamente… desde el primer momento en que te vi en la academia sentí mucha curiosidad por ti, pero no en un mal sentido, no pienses ese tipo de cosas, ¿De acuerdo? Simplemente… me parecía increíble saber que un chico de tu talento no estuviera interesado en unirse a nosotros y aprender incluso más. Y más aún, cuando un día por causalidad note que estabas ensayando en tu cuarto, bailando y divirtiéndote, como si en verdad esa fuera la cosa que más amaras en el mundo.

Sehun se detiene un momento y le mira fijamente a los ojos, al notar que el menor aún parecía esperar un poco más suspiro y continuo con su relato.

—Simplemente no había visto esa pasión y esa entrega en nadie nunca, ni siquiera en mi mismo, ni en la academia, o incluso en el lugar en el que yo hice mis estudios… tienes un ángel bastante especial a la hora de bailar, y se nota que amas irremediablemente eso. Y no todos los días puedes observar a alguien disfrutar mientras hace lo que ama.

La habitación se quedo en silencio unos instantes en el momento en que Sehun termino su explicación, Kai se encontraba impresionado por las palabras que el mayor había pronunciado, ya que parecían tan sinceras que le habían desarmado.

Él, en verdad, esperaba algún estúpido discurso que los adultos solían dar cuando intentaban conquistar a alguien mucho menor que ellos. Si era honesto, esperaba que las palabras que dijera Sehun dieran pie a que pudiera seguir el plan trazado por Baekhyun. Pero aquellas palabras le habían descolocado y dejando sin poder pronunciar alguna respuesta coherente.

Al final, lo único que pudo hacer fue negar suavemente y clavar la mirada en un nervioso, pero al tiempo mucho menos apenado Sehun, que parecía haberse sacado un peso de encima al decir aquellas palabras, como si se las hubiese guardado desde hace mucho tiempo.

—¿Y por qué permitirme quedarme en tu casa? —fue lo único que sus labios fueron capaces de pronunciar.

—Porque quiero ayudarte… —y fue ahí donde Kai, mordió sus labios fuertemente, antes de acercarse a Sehun, un poco más, colocando una de sus manos en el respaldo del sofá, mientras la otra quedaba sobre el pecho del contrario, con este completamente paralizado.

—Entonces… ¿En verdad quieres ayudarme, Sehun? -dice con sus labios extremadamente cercanos a los ajenos—. Porque yo en verdad puedo estar necesitando una ayuda muy importante de tu parte en este momento…

Y sin más beso los labios del mayor, sonriendo al sentir como este correspondía, algo mecánico por la confusión inicial, pero luego se dejaba llevar de la misma manera, mostrando en ese simple roce lo pasional que Oh Sehun podía llegar a ser.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Entró al hospital caminando directamente hacía la sala donde una de las enfermeras se encargaba de asignar las próximas citas y seguimientos de cirugías. Y una vez estaba frente a la encargada poso una de sus sonrisas seductoras, mirándole de forma algo coqueta, pero amable.

—Señorita —lee el gafete con una sonrisa antes de volver a mirarle a los ojos—. Minji, un gusto. Vengo a solicitar una cita de seguimiento de una cirugía.

—Claro que sí, caballero —la chica un poco sonrojada, desvió rápidamente su mirada hacía el computador para poder realizar la asignación de la correspondiente cita—. ¿Cuál es su nombre?

—A mi puedes decirme Kris, cariño… sin embargo, la cita es realmente para un amigo, tuvo una cirugía hace poco y me pidió a mi que viniera a pedirla por él…

—Claro —muerde su labio por la manera en que el chico le llama y niega varias veces intentando enfocarse—. Necesitaría el nombre y el número de documento para poder asignarla. ¿Podría darme esos datos?

—Ohh… ese es el problema… soy algo torpe… olvide por completo el numero de documento de mi amigo, pero sin duda podremos programar la cita sin ningún inconveniente, ¿verdad? —al ver a la chica negar continua con su pequeña sonrisa, haciendo unos ojos como si estuviera a punto de rogarle a la chica.

—E-es que… no hay manera sin el número de documento me es imposible poder asignarle cualquier tipo de ci… —la chica lanza un suspiro suave, quedando completamente en silencio al sentir como una de las manos de Kris acaricia de manera delicada la suya.

—En verdad necesito que me ayudes, linda… Si no pido esta cita realmente mi amigo me matará… llevo retrasando varios días esto, ahora realmente él se enojará conmigo si no consigo llegar a casa con la cita correspondiente —su mano lentamente se mueve al rostro de la chica acariciando suavemente su mejilla, mientras le da una de sus sonrisas inocentes.

—Y-yo… de acuerdo… ¿Cuál fue la cirugía que tuvo su amigo?

—Tuvo un accidente en moto, hasta donde se fue un tal doctor Do quien le atendió… —noto en el rostro de la chica que aquel accidente se le hacía familiar, y sonrió de medio lado, continuando con las suaves caricias para que la chica no pensara de más en el asunto y terminara recordando algo que no les convendría.

—Claro… recuerdo al doctor Do atendiendo a ese paciente —ve a la chica morder su labio y empezar a anotar algunas cosas en el computador—. Perfecto, la cita ha quedado asignada para el día de mañana a las 5 de la tarde, justo en mi turno…

Lo último lo dijo en un tono bajo, casi susurrado, pero Kris alcanzo a escuchar perfectamente, por lo que sonrío guiñándole un ojo a la chica de forma tranquila.

—S-solo faltaría que me diera el nombre del paciente, para poder finalizar la asignación.

—Por supuesto cariño, el nombre de mi amigo es Oh Sehun.

Notas finales:

Espero lo disfrutaran, estaré subiendo los otros dos en los próximos minutos.

 

Gracias por todo


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).