Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Geheim por VampireDark

[Reviews - 100]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola!

Acepto que estén enojados conmigo, ya que como recordaran, en el capitulo pasado afirme que la idea era terminar este fic en lo que quedaba de Junio, cosa que efectivamente no paso.

Mis razones son sencillas, estuve muy pendiente de los partidos, incluso ahora, aunque ya salió mi país, ando todavía pendiente, ya n tanto como antes, pero igual. Además, justo después de que mi país saliera, descargue un juego Otome  y estuve estos días molestando la vida con él, conociéndolo y eso, por lo que deje de lado el fic.

La verdad el capitulo ya estaba un 90% realizado, faltaba era terminarlo y revisarlo, pero bueno, la pasión del futbol es la pasión del futbol xD

En fin, no les fastidio más la vida. Disfruten el cap. ¡A leer!

Kyungsoo observaba distante como Chanyeol estaba botado en aquella esquina de la casa, nunca lo había visto tan mal ni tan ido en todo lo que llevaba de conocerlo. El alto siempre, incluyendo en los momentos de mayores problemáticas, había sido el polo a tierra del menor, incluso desde mucho antes de irse a vivir con él.

Pero ese que estaba ahí, llorando y a puertas de un colapso, ese definitivamente no era el Chanyeol optimista y lleno de vida del que se había enamorado y eso lo estaba turbando. Por sobretodo, le molestaba que se estuviera dejando caer por un estúpido sin importancia y, vaya que le hervía la sangre conocer perfectamente al culpable de esa situación. Y él no iba a permitir que su vida y su familia se vieran destrozadas por un simple mocoso, por supuesto que no.

—Chanyeol… —al no recibir respuesta su corazón se vio estrujado, no estaba seguro si por la ira o la melancolía, pero no se daría por vencido, no tan fácilmente—. Chanyeol, mi amor. Ven conmigo, necesitas comer algo.

Pero el más alto volvió a guardar silencio, ni siquiera había prestado atención a las palabras del menor. Estaba totalmente perdido en sus pensamientos, sus culpas eran cada vez más grande y las imágenes mentales que se formaban en su cabeza solo lograban que su corazón fuera cada vez más negro. Tomo decisiones sin medir las consecuencias y había sido su hijo quien había terminado pagándolas, eso jamás se lo iba a perdonar a sí mismo.

Por su parte, Kyungsoo estaba arto de la situación. Chanyeol siempre había sido una persona fuerte, responsable y digna. Era un hombre alegre, solidario y amoroso. Y por nada del mundo permitiría que un idiota le bajara su autoestima y su amor propio.

Y, principalmente, no iba a permitir que nadie le quitara al hombre que lo trataba como si fuera el tesoro más hermoso y preciado del mundo. No, no permitiría que le quitaran al hombre que le cumplía cada uno de sus caprichos y le hacía cumplir con su fantasía de un hombre perfecto.

Porque Kyungsoo necesitaba al hombre que le daba regalos caros, al hombre que le sonreía con picardía y al que le decía lo mucho que amaba su perfecto aspecto físico y su dulce personalidad. A Kyungsoo definitivamente, no le servía aquel desperdicio de piltrafa humana que, en aquel momento, se encontraba en su sala, mirando a la nada y llorando en silencio a costa de un hijo que ya estaba olvidado y que nunca había valido la pena.

Tomo su chaqueta, las llaves del auto y las de la casa y dio una última mirada al que se suponía es su esposo, quien no se daba por enterado de nada de lo que estaba ocurriendo a su alrededor. Sonrió con la desilusión totalmente plasmada en su rostro, tomo el pomo de la puerta y salió, dispuesto a detener toda esa situación de una buena vez.

Lo último que supo Chanyeol antes de caer en la absoluta miseria, fue como el golpe de la puerta al ser cerrada resonó por toda la casa. Causando un escalofrío que recorrió cada parte de su cuerpo, recordándole justo el día en que él decidió desaparecer para siempre de su anterior vida. Para nunca volver, se había dicho aquella vez.

 

 

 

 

 

JongIn metió la llave de la casa con algo de duda en sus movimientos, estaba asustado. Si Park había decidido ir a su casa lo más probable es que su madre quisiera hablar seriamente con él, con ellos. Y él no estaba ni con los ánimos ni las ganas de tener una conversación de ese tipo.

Baekhyun estaba dormido en su espalda, casi pareciendo un pequeño infante y eso le imposibilitaba de muchas maneras sus movimientos, impidiendo que fueran tan sigilosos como siempre solían ser.

Una vez dentro, pudo observar que la casa aun estaba en total silencio, los rayos de sol apenas estaban empezando a colarse por la ventana y el frio de la noche aun no había escapado por completo de la casa.

El moreno respiro un poco más tranquilo y subió, casi en total silencio, a su habitación, en donde deposito, con total delicadeza, el cuerpo aun dormido del mayor. El cual, ni siquiera alcanzo a cubrir completamente antes de ser alterado por una voz que, por supuesto, conocía bastante bien, justo detrás suyo.

—Supongo que tenemos que hablar ¿Verdad? —la voz salió fría, monótona. Y JongIn se sintió la peor persona del mundo por estar decepcionando a su madre.

—Se que debemos hacerlo…

—Baekhyun también está involucrado en esto.

—No lo está, mamá. Si tienes que pelear con alguien que sea conmigo, él no necesita más problemas en su vida.

—Te está arrastrando a ti con ellos —su madre guardo silencio por unos instantes, casi meditando cuales palabras deberían ser las siguientes—. Quiero a Baekhyun, lo quiero mucho y lo sabes. Pero no puedo permitirme que, por culpa de él yo pierda a mi único hijo. No puedes dejarte influenciar por él. Él no es una buena persona, JongIn…

—¿Qué sabes tú, madre? —la voz de JongIn salió molesta, recriminaría—. ¿A caso vas a ser como todos los demás? ¿Te crees con el derecho suficiente para juzgarlo a él? ¿Si quiera te has detenido a pensar por las cosas que él ha tenido que pasar?

—Son sus problemas, no tienes que hundirte con él en el fango, JongIn.

—¿Y si yo quiero hundirme con él?

—Estas arruinando tu vida. Que él no tenga un futuro no significa que tú debas seguir sus pasos.

—Madre… te amo ¿Si?... Pero no voy a permitir que hables mal de él. Mucho menos que digas cosas tan despreciables. Él te ama, como a la madre que nunca tuvo… Y tú mientras tanto me pides que le dé la espalda… No puedo creerlo de ti.

—Debes entenderme, yo…

—No, tú eres quien debe entender. No voy a abandonarlo y eso es todo lo que debes saber y tener claro. De aquí en más lo que yo decida hacer será únicamente mi problema.

—Vas a dañar tu vida…

—Mientras sea a su lado no me va a importar acabar mendigando en la calle.

—JongIn…

—Hasta luego, mamá. Cierra la puerta cuando salgas.

Y la mujer prefirió callar, había abordado de la manera equivocada a su hijo y ahora, inevitablemente, él estaba a la defensiva. Simplemente se decidió a salir de la habitación y cerrar la puerta detrás suyo, mientras veía como su hijo se sentaba lado del otro y empezaba acariciar sus cabellos con exagerada ternura.

La habitación se quedo en silencio por algunos minutos, JongIn no quería pensar en las palabras de su madre. Ella simplemente no entendía todo lo que había tenido que sufrir Baekhyun, él no podía abandonarlo, no después de todo lo que habían pasado juntos. Porque los mejores amigos jamás se abandonaban entre ellos.

—Tú madre tiene razón —la voz de su amigo lo dejo helado por unos instantes, más por la afirmación lanzada, pero él no se echaría para atrás, menos ahora—. Lo sabes ¿verdad?

—No digas estupideces, Byun. Ella no sabe por lo que hemos pasado, siempre hemos superado nuestros problemas juntos. Eso es algo que no va a cambiar  ahora.

—Son cosas por las que tú no deberías haber pasado. Estos son mis demonios, no los tuyos.

—No empieces con ese discurso. Nada de lo que digas va a poder cambiar mi decisión, Byun. Voy a estar a tu lado sin importar nada.

Baekhyun estaba a punto de responder a esa afirmación, pero el moreno no estaba dispuesto a discutir más por un asunto que, simplemente, él tenía demasiado claro. Por lo que, sin pensárselo demasiado beso a su amigo, causando que este olvidara por completo lo que fuera a decir.

—Voy por algo de tomar. Intenta descansar un poco más, Baek. Hoy no ha sido un día fácil para ti.

Baekhyun se quedo callado mientras lo observaba salir por la puerta de la habitación. Entendía perfectamente la situación por la que estaba pasando la madre de su amigo, varias noches había pasado en insomnio pensando aquellas mismas cosas. Pero él era egoísta, no quería perder a su amigo, ni mucho menos hundirse solo en la absoluta mierda, sin nadie que fuese capaz de acompañarle.

Pero justo ese momento su mente estaba decidiendo observar la otra cara de la moneda. Después de todo ¿Era justo que su amigo, un chico que siempre fue de bien, se viera involucrado en una guerra con demonios ajenos? Tal vez, para Baekhyun, había llegado el momento de dejar de ser un niño egoísta y mimado, para empezar a comportarse como un verdadero mejor amigo.

 

 

 

 

 

Kai estaba confuso, sabía que tarde o temprano tendría que tener aquella conversación con su madre, era algo que se convertía en una lógica. Pero jamás espero tener esa misma conversación con su amigo, conocía lo impulsivo que este podía llegar a ser y esa era su mayor preocupación en ese momento.

Lo principal en aquel instante era encargarse de eliminar cualquier tipo de estúpido pensamiento de la mente de Baekhyun, ya que, si el mayor seguía con esa estúpida idea, iba a ser capaz de hacer lo que fuera con tal de alejarlo de él. Y Kai jamás iba a permitirle semejante cosa, jamás lo abandonaría, ni aunque el mismísimo Baekhyun lo quisiese de esa manera.

Sus pensamientos se vieron interrumpidos por el ruido de la puerta, uno, dos, tres golpes suaves, los cuales si hubiese estado arriba jamás escucharía. De hecho, lo más probable es que el fuese el único que hubiese escuchado esos delicados golpes.  

Lavo sus manos tranquilamente, con el único propósito de matar un poco más de tiempo antes de ir a ver quién era el que irrumpía en su casa a esas horas de la mañana. Otros tres golpecitos resonaron en la puerta, antes de que el moreno decidiera que debía atenderla.

Nunca espero encontrar detrás de aquella pared, a aquel chico bajito, que aunque no conocía bien, si recordaba a la perfección. Jamás olvidaría que la última vez que lo había visto había querido estrangularlo con sus propias manos.

—¿Qué hace acá, Dr. Do?

—Buenos días para usted también, joven Kim.

—¿Qué es lo que quiere? No tengo todo el día, honestamente.

—Entonces, supongo que me alegra no venirlo a buscar a usted —la voz retadora no paso desapercibida por el menor. Quien le miro con los ojos inyectados en fuego—. Vengo a ver al joven Byun… podría por favor avisarle que lo estoy buscando.

—¿Para qué lo necesita? Si se puede saber.

—No, Kim. No se puede saber, es un asunto que solo nos incumbe a nosotros dos. Sería tan gentil de llamarle.

—No, lo siento. Pero él no se encuentra acá, si le interesa puede dejarle algún mensaje conmigo. O si prefiere puede buscarlo en su casa, él no suele estar en casas ajenas.

—Joven Kim, no entiendo cual es su problema conmigo. Ya fui a su casa y un vecino me comento que el joven había venido a vivir acá después de la muerte de su madre.

—Pues le informaron mal —Kai estaba empezando a desesperarse, ese maldito medico lo estaba sacando de sus casillas y si no se iba ya mismo lo más probable es que terminara partiéndole la cara, tal como había deseado aquel día en el hospital.

—Si no puedo hablar con el joven Byun, tendré que hablar directamente con su padre entonces. Estoy seguro que al señor Park si le interesara saber lo que le tengo que decir de su hijo.

El moreno quedo en blanco, por supuesto lo último que esperaba es que aquel medicucho de quinta supiera algo sobre Park. Por sobre todo, no quería que hablara con Baekhyun, algo le traía mala espina de todo ello, pero dejar que ese imbécil hablara con el padre de su amigo podría ser aún peor. ¿Qué podría hacer?

—Tranquilo, Kai. No tengo ningún problema de hablar con ese señor —la voz de Baekhyun, tan fría y poco alegre, consiguió que todos los pelos se le pusieran de punta al menor. Definitivamente, no era conveniente que esos dos hablaran.

—No tienes de que preocuparte, Baek. Sube a acostarte, ya me encargo de sacar a este hombre de acá y subo contigo.

Kyungsoo miraba la escena divertido, le encantaba ver como el rostro de JongIn se iba transformando en una mueca de desesperación. Estaba perdiendo el control de la situación y al parecer eso era demasiado para el moreno y lo suficiente para darle algo de diversión al mayor.

—No es bueno que se involucre a Park en situaciones que a él no le incumben en lo más mínimo. Tú espérame arriba, yo hablare con el doctor, haber que es lo que se le ofrece.

Y así, sin más, Baekhyun paso por el lado de Kai, saliendo de la casa y dirigiéndose con el mayor  una cafetería cercana. No antes, por supuesto, de que Kyungsoo le dedicara una mirada y una sonrisa burlona al menor de los tres. Y Kai quiso verdaderamente patearlo, jurándose a sí mismo que, tarde o temprano, le quitaría a sonrisita de la cara a semejante imbécil.

 

 

 

 

 

Baekhyun observaba  fijamente al hombre que tenía en frente, mientras este daba un sorbo tranquilo a su café, al parecer, sin intensión alguna de empezar a hablar, causando algo más que desesperación en el menor, quien ya no podía simplemente seguir esperando a que el otro estuviera interesado en mencionar palabra.

—Si no tiene nada interesante que decir puede avisarme de una buena vez. Yo no estoy dispuesto a perd…

—¿Sabías que tu padre fue obligado a casarse?

—¿Qué? —la confusión del menor fue demasiado grande. No esperaba un comentario como aquel.

—Lo que oyes, tu padre nunca amo a tu madre. Desde muy joven Chanyeol tenía una orientación sexual bastante definida, sin embargo, su padre jamás estuvo demasiado de acuerdo con ello, por eso lo obligo a casarse con tu madre.

—No entiendo de que va todo esto…

—Chanyeol tampoco quiso tener hijos, el detestaba los niños, siempre lo hizo —el primer baldado de agua fría para Baekhyun y una gran sonrisa en el rostro del adulto—. Sin embargo, la mujer le echo algo en el vino aquella noche y lo obligo a acostarse con ella. Cuando menos lo espero, ya venía un mocoso en camino…

Otro baldado de agua fría para Baekhyun y silencio… La sonrisa de Kyungsoo se ensancho aún más y llamo a la camarera pidiendo un poco más de café, quien gustosa le atendió. Todo esto mientas Baekhyun intentaba procesar toda la información que le había sido entregada.

—Chanyeol se sentía en la obligación de cuidar a ese mocoso, aunque realmente lo que le tenía era fastidio —continuo relatando Kyungsoo una vez la camarera se había ido—. Incluso fingió por seis años que su matrimonio era un cuento de rosas, pero su esposa estaba cansada de no recibir el amor que creía merecía. Por eso la pobre mujer calló en el alcohol y las drogas, para olvidar que no era amada.

La mirada del menor se hallaba perdida, no sabía que decir o hacer ante las palabras ajenas. Pero Kyungsoo sabía que lo estaba escuchando, y solo por ello decidió continuar. Su misión era destruir completamente al menor y lo iba a lograr, sin importar que tuviera que hacer al respecto.

—Con una esposa alcohólica y un chiquillo al cual no tenía ningún cariño, esperándolo en casa.  Pues… era evidente que el empezaría a faltar a casa, llegaba tarde, dejaba de ir algunas noches. ¿Por qué otro motivo crees que se daba el placer de fingir que olvidaba tus recitales? Chanyeol, odiaba tu existencia, casi tanto como odiaba su matrimonio.

Y Baekhyun lo miro, por fin, desde que comenzó el relato, el odio en su mirada era evidente, el dolor estaba impregnado en todo su gesto. Y Kyungsoo no pudo sentirse más contento por lo conseguido. Aquel chiquillo sería más fácil de eliminar de lo que esperaba.

—¿Cómo puede ser verdad todo lo que dices? Y en caso de que lo fuera ¿Cómo podría saber usted todo eso?

—Chanyeol odiaba los niños, pero siempre tuvo un gusto particular con los hombres que eran menores que él. Yo tenía tu edad cuando lo conocí,  nos enamoramos irremediablemente y no tuve que esperar sino tres años para que decidiera que debía irse conmigo. Los abandono a ustedes por estar a mi lado, ahora vivimos juntos y nos amamos más que nada en esta vida.

—¿Y qué quieres que te diga? Si lo que quieres es que te diga papi y este agradecido contigo, estas muy equivocado.

—Por supuesto que no espero eso Byun, pero eso usted ya lo sabe —su voz salió venenosa  y por primera vez Baekhyun pudo sonreír, había logrado molestar al tipo—. Chanyeol y yo hemos vivido en paz y tranquilidad todos estos años, nos amamos como a nada y… logre convencerlo de que adoptáramos un hijo, un niño al que si va a amar.

—Felicitaciones por ustedes entonces, pero aún no entiendo que gana contándome todo esto.

—No quiero que usted joven Byun se convierta en una piedra en el zapato en nuestras vidas. Quiero que así como decidió aparecer desaparezca, después de todo… a Chanyeol no le importaría que usted decidiera desaparecer así como él lo hizo hace algunos años.

Notas finales:

¿Qué tal? ¿Les gusto? xD

Ok si, fue un capitulo en si corto, lento, sin mucha acción, destinado para que odien a D.O (?) Ok, no x3

Pero era un capitulo necesario e importante. ¿Por qué? Pues porque a partir de este es que va a iniciar lo bueno, es decir, ya por fin, vamos a empezar a ver Chanbaek/Baekyeol… evidentemente iniciando por algo suave, tranquilo, llegando a lo más hard xD

También, para el agrado de varias y, tal vez, el descontento de otras, se va a empezar a disminuir el Kaibaek, tampoco tan drásticamente obviamente. Y va a empezar a haber una aparición más profunda del Chansoo, pero no tan intima como hubo del Kaibaek en estos primeros capítulos. Si no me entienden pues… lo entenderán a través de la historia xD

Bueno, además de eso quiero aclarar una cosa, ya mencione en las notas al inicio que la idea era que este fic se acabara en este mes y no pudo ser y di las razones por las que no actualice. Sin embargo, quiero comentarles otra cosita al respecto. Este fic no iba a ser realmente largo, pero, en estos días se me han estado ocurriendo bastantes ideas, lo que me ha llevado a entender de que el fic va a ser mucho más largo de lo que yo esperaba.

Espero que esa sea una buena y no una mala noticia para ustedes.

En fin, creo que no tengo nada más que comentarles. Cualquier duda, sugerencia, comentario o felicitación es altamente bien recibida. Besos gigantes, y nos vemos más pronto que tarde, lo juro.

En mi cumpleaños abre publicado al menos dos caps, lo prometo. xD

Entonces, pues estamos en contacto, espero leerlas pronto.

Sayo


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).