Nada de lo que dijera su amigo, lograría convencerlo. — Te lo advierto — dijo totalmente nervioso, pasando una mano por su corto cabello.
— ¿Qué cosa? — Stiles. sabia que estaba colmando la paciencia de su mejor amigo.
— ¡Maldita sea!, Stiles.
— Ya cálmate. — Resoplo, «¡Diablos!» El calor era insoportable y, enzima tenia que soportar el regaño de su Hermano — Scott, No es gran cosa.
Claro que para Scott sí era gran cosa. Ya había estado pensando en la posibilidad de mandar a Erica y, Boyd esa noche. Pero dado que no podía encontrarlos, las posibilidades eran nulas. Por tanto, decidió pisar el freno. No tenia deseos de estar preocupado por Stiles, toda la noche. Su ex novia o novia… lo había invitado a una cita… ¿reconciliación en puerta? ¿Quién sabe? Ya no sabia si estaban o no estaban…,juntos. De estarlo, este seria su aniversario y, no quería faltar… sea lo que sea qué lo esperase…
— No es la gran cosa… — repitió en voz baja, con la cabeza asistiendo reflexivo y, una luz de esperanza deslumbrándose para Stiles. — ¡No es la gran cosa!. — Grito maldiciendo a todo el árbol genealógico de Stiles y, mandando a la ostia sus esperanzas. — ¡Joder! — Scott estaba cabreado. — ¿Qué no te das cuenta, de lo peligroso qué es esto?.
— No es…
— Lo vuelves a decir y,… — le señalo, perdiendo totalmente el control de sus nervios. — Y juro que la próxima vez que Derek. quiera hacer, un estofado con tus orejas de conejo, lo dejare, sin pestañar siquiera.
Stiles trago fuerte. Protegiendo instintivamente sus orejotas, entre sus manos. — no es… tan malo — termino de decir al ver que los ojos de su amigo empezaban a tomar un color nada agradable para el que supiera su significado.
Scott levanto una ceja. — Me estas jodiendo ¿verdad?.
Como, todo verano. Scott y Stiles se hallaban, sentados en una de las bancas del campus, con los rostros enfrentados. Ambos estudiantes del BBHS. Pero, solo uno de ellos era el hijo del Sheriff Stilinski.
Rogando vergonzosamente.
¡Gracias al cielo! Su padre no se encontraba allí, para verlo.
— ¡Oh, vamos! Scotty… — puso su cara de cachorro lastimado — ¡Por favor! No seas malito… ¿Zhi?.— Dijo en un chillido.
— No hagas eso…
El castaño rebuzno molesto, sacudiendo su cabeza de un lado al otro. Demasiado consternado y, frustrado por no conseguir lo que quería con tanto anhelo.
Scott era muy cruel.
Se levantó de la banca y empezó a caminar dispuesto a irse a su próxima clase, pero nada satisfecho regreso sobre sus pasos, intentando dar una escusa que su hermano aceptara. Pero scott negaba cada frase que intentaba armar…,«¡Maldición!». Scott, no caía con ninguna.
— Tal vez si..
— No.
— Pero si, yo.
— No.
— ¡Ni siquiera me estas escuchando!.
— Y, el mundo sigue de pie.
Frunció el ceño. — Esto es injusto… ¿Cuándo se murió Derek y, te nombro alpha?
Scott se encogió de hombros, aun sentado en aquel sitio. — Di lo que quieras, eres mi responsabilidad…, no la de Derek.
El castaño hundió los hombros rendido y, empezó a encaminarse a su clase.
Los pasos cortos se detuvieron y, los ojos café se dilataron completando en cuanto, un rayo de luz se encendió en el cerebro del joven Stiles Stilinski.
Sin pensarlo mas de dos veces: Giro sobre sus talones ante la atención de su amigo. El cual movió sus orejas al escuchar el pasto siendo pisado por las pisadas rápidas qué provocaban los pies del castaño. Scott lo sintió, cerca, muy cerca de el, pero conocía a su amigo y suponía que lo aria. rodó los ojos. Volvería a rogarle.Nunca espero una reacción diferente en Stiles.
— ¿Quien es el lobito, mas bueno de toda la tierra? Eh…? — dijo acercándose a la oreja de Scott y rascándoselas
« ¡Joder!, ¡vasta!, ¡vasta! » Pensó Scott. Sin poder evitar golpear su pie derecho varias veces en el suelo, como un cachorro al que le rascaban las orejas — ¡Maldición! ¡No pares!, por lo que mas quieras, no pares... — Scott miro a su espalda y, al ver a stiles recordó que no debería excitarse solo por qué esté le estaba rascando la oreja. «Mierda»
— ¡Ya, por favor! ¡Para!.
— Allison, tenia razón. — murmuró. Scott se sobresalto al escuchar ese nombre y, de un rápido movimiento dejo la mano de stiles rascando el aire. — ¡woww!… eh, scotty…« No tiene los ojos rojos, ¿Eso es buena señal o mala…?»
Scott prácticamente hizo un conteo de metros esperando estar lo suficientemente lejos de stiles. «Así que, Allison le contó eso, algo tan intimo.¡Mierda! ¿Por que las mujeres no pueden guardarse sus trucos sucios?» Cada vez que ella hacia eso él cedía a lo que le pidiera, como un idiota. « Malditos reflejos perrunos» Pensó. «…,No cederé, No, con Stiles.»
Coloco sus libros sobre su entrepierna.
«Joder, ¡por los mil demonios!», El no se esperaba una reacción así. «Pero vale, olvide que era Stiles y realmente esta mierda, es algo que me excita.». carraspeo tratando de salir del momento incomodo.
— Se puede saber… ¿Qué cojones intentabas hacer?
—Oh, vale que me eh creído, que te gustaría. — Scott le miro esperando una respuesta mejor. Los cachetes de Stiles al notar lo que Scott escondía detrás de sus libros. se habían vuelto mas rojos. que el labial que usaba la loca de Lydia, ál menos, ahora ella y Stiles tendrían algo en común. El rojo les sentaba de la puta madre.
— …
—…
Jodido momento incomodo. Donde quieres que la tierra te trague y, buscas el suelo o lo que sea, menos la mirada de la persona que tienes en frente.
Scott trago grueso, carraspeo intentando contener lo que guardaba e intentaba salirsele hasta por los fundillos del pantalón. Que vergüenza. Realmente, Stiles lo había puesto… lo había puesto en una encrucijada y solo había una forma de salir de ella.
— eh...
Y esa forma no le gustaba nada.
Simplemente. por que todo, había sucedido a causa de ello.
Se negaba. Rotundamente, a qué su mejor amigo casi hermano. patrullara solo esa noche o cualquier otra noche. Pero sabia que el solo quería serle útil a la manada. Y demostrar en cierta forma que no solo su cerebro servia en momentos de estricta presión.
— ¡Esta bien!. — Suspiro derrotado. Sin mover un centímetro sus libros aun parado a unos siete pasos de Stiles. — iras. Pero… — Scott observo como su loco amigo, saltaba como un niño al que le habían prometido ir al circo.
Si hacia toda su tarea.
— Pero… — Stiles había parado de saltar y miraba a Scott con cara de póker. *_*
— Pero... Derek "ira contigo".
Stiles se quedo con la boca abierta, la cerro y volvió a abrirla — Joder, estas de broma ¿verdad?
— No puedo ir contigo y no te dejare ir solo. Lo tomas o lo dejas…
— pero…
— Ya te dije qué es mi aniversario con Allison y, no quiero pasarme la noche pensando, si estas bien.
— Si, lo hiciste. Déjame recordar. Ummm... cumplen una semana completa en la que no se han dejado uno al otro. Maldición, Scott es que ustedes son la pareja mas extraña que eh visto. — suspiro, y luego negó con la cabeza. — es que hasta me atrevo a decir. que Lydia y Jackson. Son la pareja mas normal de todo el campus ahorita. — Scott rodó los ojos pero ciertamente, le agradaba ver que Stiles ya no lloraba por los rincones por Lydia Martin.
Es una sensación fea querer contarle a tu mejor amigo. lo bien que te va con tu novia. Cuando esté anda llorando por un amor no correspondido. Pero vale, bien qué bien… a él no le estaba yendo.
— Ok. ¡Ya que!. Iré con el lobito alfa. pero qué te conste… eh, Si me muerde, o algo. — le señalo. — Tu cargaras con eso en tu jodida conciencia.
— Como le miras a veces, mas bien…, Yo temería, qué tú le violes, con la mirada. a que él te toque, un solo pelo de rana calva que tienes.
Stiles. le tiro con un libro por la cabeza. Scott se lo lanzo de vuelta sin soltar sus propios libros que cubrían su excitada entrepierna. «Bájate de una vez, no ensero. ¿Stiles? Diablos.» En ese mismo momento Allison hacia acto de presencia. Y como siempre Stiles se iba dejando a los tórtolos en paz.
Claro que siendo él, no dejaría todo así como así…
Acercándose a Allison. — ¡Oye! Allison — dijo Como, en secreto de confesión.
— Tu novio tiene un serio problema en sus áreas bajas. — En un torpe intento de susurro. Allison siguió las señas con el dedo de Stiles encontrándose de lleno con los libros de su novio sobre su órgano masculino. Y este carraspeando intentando salir desapercibido. Allison golpeo el brazo de Stiles el cual se reía de la situación. — No pienses mal. Qué el andaba pensando en los arrumacos que le haces… — Scott asesino con la mirada a Stiles. Pero siguió parado ocultando. A hora, con más razón su problema. Este volvió a acercarse a Alison. — "Deberías entrenarlo mejor."
— Oh, no te preocupes Stiles. — Sonrío Alison — Yo me encargo de ‘Entrenarle’.— le beso la mejilla al castaño. .— Tu mejor ve, que Lydia. tenia algo urgente que decirte.
Tanto Stiles como Scott le quedaron mirando de manera extraña.
— ¿Esta fumada o qué?
— Ni idea. Solo me dijo que quería hablar contigo de algo importante.
— OK…¡Gracias!.
« Hace tiempo… bueno, mas precisamente. desde que Lydia sale con Jackson que no me da ni la hora. Y es que el gilipollas de Jackson era rayando de celoso.» pensó Stiles.
— Nos vemos, tortolitos. — dijo Stiles luego de salir alborotado, sin saber para donde ir.
— ¿A donde vas?.— Allison golpeo su frente con la palma de su mano. — Stiles ¡No, es por ahí!. Ella se encuentra en la sala de cómputos.
— Oh. Gracias de nuevo. — dijo apenado dando vuelta, yendo a la dirección que Allison le había dicho. — ¡Nos vemos!.
— ¿A donde va, ese idiota.? — Pregunto, apareciendo detrás de la joven pareja.
Scott apoyó su mano en su corazón.
El maldito de Derek le había sorprendido desprevenido.
— Paresia muy feliz… — murmuro, el ojiverde — demasiado…
—¡Maldición! Derek. No, puedes aparecer de una manera normal. Se dice hola, ¿como estas? — Suspiro. — ¿sabias? — A Scott se le había bajado la excitación de el susto. Y el enojo. Su chica simplemente rió ante la escena.
— Ya cálmate, Scott. — rodó los ojos.
Y Scott deseaba morder a alguien. Porque coño todos le pedían que se calmara. La culpa de vivir así de molesto era de ellos no suya. — ¡¿calmarme, como hacerlo con ustedes?! Y, ahora que lo dices…, ¿Qué buscas aquí?
— Solo vine para saber si tienes alguna idea de donde están Erica y, Boyd.
— ¡Demonios! Yo que se, deben estar escondiéndose en las alcantarillas. Demasiado tengo con Stiles. — Scott tomo la mano de Alison y, salio de ahí totalmente cabreado.
— La culpa es mía por convertir a puros mocosos… — entonces reflexiono. — No. Scott, es culpa de Peter… totalmente su maldita culpa. —Resoplo y, se alejo molesto del campus, irritado por las miradas de los estudiantes PRE-hormónados que iban ahí.
Esa misma noche.
Stiles estaba patrullando en él condado de Beacon Hill.
Totalmente solo.
Al parecer Scott se había olvidado de decirle a Derek que patrullarían juntos. Oh, que el quería hacerlo solo. Dado que Scott no podía venir por su felpudo aniversario.
— Ojala, que Alison. se llenara de pulgas. — Si, no es que odiara a Alison. Simplemente, odiaba el hecho que acaparara para todo y todo el tiempo a su casi hermano. Es que esa mujer no le daba un minuto de sosiego. Y el muy capullo se dejaba hacer por ella como un cachorro.
— ¡Maldición! Joder, ¡mierda!. que solo a mi Oz pasa esto. — Dijo cuando su jeep se quedo varado.
Abrió el capot «¡Genial!», el motor se había congelado.
La razón era la causa por la que patrullaban los últimos días era el extraño comportamiento en el clima. En el ultimo mes, todas las mañanas se sufría de una espantosa ola de calor y, por las noche hacia un frió de la madre. Intento revisar el motor entre los espasmos de frío que tenia. La maldita bufanda se le resbalaba cada que intentaba acomodarla y, los dedos le temblaban.
Se asusto cuando escucho el radio encenderse del jeep.
Cuando apagues la luz
voy a poder velarte
contemplar tu silueta
y acercarme despacio.
Se relajo.
Cuando apagues la luz
platicaremos en silencio
se esfumara la tensión
de nuestros cuerpos.
Últimamente su jeep no andaba al 100% cosas así solían pasar. Como, eso de encendérsele, el radio. Tenia que hacer arreglar ese porquería. Muy a pesar de todo. No le molestaba la canción.
Cuando apagues la luz
se sentirá un alivio
donde sabremos quienes somos
sin tener que mirarnos.
Tarareo un poco la canción. escuchar música era el tipo de cosas que lo calmaban. Empezó a moverse al sonido de la canción pero otra vez sintió esa extraña sensación de ser observado.
Por que los ojos ciegan
y la luz opaca
las palabras estorban
y la imagen no hace falta.
Sintió una mirada justo en su espalda.
Me vas a conocer
cuando apagues la luz
no te voy, no te voy a perder
cuando apagues la luz.
Clavada en su nuca.
Giro el rostro a los lados, pero nada se hallaba, Solo el.
Me vas a conocer
cuando apagues la luz
no te voy, no te voy a perder
aunque apagues la luz.
Cerca de un jodido bosque, cubierto por árboles en los cuales cualquiera podría esconderse. Y, raptarlo, convertirlo en trocitos, tirar sus restos debajo de algunas hojas secas y, sucias mientras su cuerpo se descompone, muy lentamente… Y, se pregunto qué tan entupido era como para dejar su celular en la guantera del auto. — ¡Muy estupido, Mierda! — estaba temblando, a paso lento empezó a caminar devuelta hacia la puerta del jeep — «¡Vamos, Stiles! ¡no seas gallina!. Tu puedes… cagarte en tus pantalones. Tío. ¡joder! qué no habéis visto a nadie…, es-es… solo tú maldita imaginación. » pensó.
Cuando apagues la luz
se encenderán al viento
una descarga de energía
en movimiento.
Cuando Stiles al fin se sentó en el lado del conductor. corrió su cabeza hacia atrás, cerrando los ojos.
Cuando apagues la luz
tu sentirás lo que yo siento
y no dejaras sin aliento
en la oscuridad.
«Respira. Vamos, respira con calma». Con su mano derecha apago el radio «click». y volvió a relajarse.
Se sintió el ruido del botón nuevamente «click» y la radio volvió a sonar…
«Estupido, aparato» Volvió a apagarlo y, sucedió nuevamente lo mismo. «click» y, junto con aquel ruido, otro cantante escucho. Pero esté no se hallaba en el radio, No. Este estaba demasiado cerca de el.
Por que los ojos ciegan
y la luz opaca
las palabras estorban
y la imagen no hace falta.
«Oh, ¡Dios!»
— Que te has dado un susto, chaval. — dijo una voz a su lado. Stiles abrió sus ojos como platos y giro su cabeza para mirar a un sujeto vestido de cuero y cabello platinado mirándole. El cual había encendido el radio.
Me vas a conocer
cuando apagues la luz
no te voy, no te voy a perder
cuando apagues la luz.
— joder. ¿Qui-quien eres tu? — pregunto, con la lengua tropezando en su boca, se había vuelto tartamudo del susto. Sus ojos se dilataron de terror al ver al hombre sentado en el lado del acompañante.
Me vas a conocer
cuando apagues la luz
no te voy, no te voy a perder
aunque apagues la luz.
— ¡Tu peor pesadilla!. Cochinito. (Oñ, oñ )— Se burlo. Mientras su rostro empezaba a transformarse — ¡tu peor pesadilla!.— Mostrando ante él, la imagen del mismo diablo.
Y la canción, seguía sonando.
El platinado iba directo hacia el cuello de el joven Stiles. él cual, simplemente estaba en shock de todas las criaturas con las que se pudo a ver topado.
Me vas a conocer
cuando apagues la luz
no te voy, no te voy a perder
aunque apagues la luz.
Canturreo sobre el oído de el Stiles. Quién estaba rígido como cadáver antes de tiempo.
Sabia, que Scott no aparecería. Pero pedía mil plegarias que al menos. el lo-bito alfa llegara para la damisela en aprietos que se sentía en ese preciso instante.
Estaba mas que seguro que nunca se toparía con un vampiro. El bastardo de Derek. siempre, qué le había preguntado, le había dicho que esos seres nauseabundos no existían
Me vas a conocer
no te voy, no te voy a perder
me vas a conocer
cuando apagues la luz
no te voy, no te voy a perder
aunque apagues la luz.
¡Joder! cuando el tío mordió su oreja. supo que estaba jugando con el. Como si fuera su maldita y puta comida.
¿o lo quería comer o se lo quería cojer?. ninguna de las dos le agrada por mas guapo que se veía el tipo.
— joder — que si no existían. ¿Que carajo era, lo que le quería chupar la sangre? Irónicamente en medio de la oscuridad. Había, conocido a un vampiro.
Deseaba en ese momento que la canción dijese.
No te voy,
no te voy a comer…
aunque se apague la luz.