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Había una vez un pequeño chico, de cabello castaño y ojos verdes cuyo nombre era Hipo, el era un joven vikingo el cual solía tener un dragón color negro con rasgos gatunos llamado Chimuelo, el cual hacia la función de ser su cuidador y mascota; A pesar de que Hipo era un vikingo, el no era grande, ni fuerte, ni feroz, ni temible, el era... Hipo el entrenador de dragones.
Esta es la historia de su nueva aventura.
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Una mañana muy temprano cuando el sol apenas hacia acto de presencia, el joven Hipo se encontraba dando su paseo matutino con chimuelo, el cual consistía habitualmente en dar vueltas volando al rededor de la isla, pero esta vez decidieron alejarse un poco mas de berk, aunque pensándolo bien esto no fue buena idea, ya que cuando se dieron cuenta de que estaban muy lejos fue porque no reconocían el entorno, o mejor dicho se habían perdido. "claro lo que faltaba perdidos a primera hora" pensó Hipo, y dándole una palmadita en la cabeza le pidió a Chimuelo que volara mas alto para ver si lograban distinguir algo a la distancia, Ya encontrándose mas arriba descubrieron el camino de regreso a berk, puesto que se observaba un pequeño montón de rocas a lo lejos, pero algo paso, cuando estaban a punto de llegar a berk Chimuelo empezó a debilitarse cayendo picada junto a Hipo al mar, dentro del agua Hipo trato de mover a Chimuelo y se dio cuenta este no se encontraba por ningún lado así que el chico trato de nadar hacia arriba para tomar aire y seguir buscando, pero para su sorpresa la prótesis metálica en su pierna lo hacia hundirse, "¡perfecto! no encontró a Chimuelo y ahora iba a morir, su día terminaría de forma excelente" pensó sarcásticamente antes de perder la conciencia mientras se hundía en el mar.
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Ya en la tarde Hipo se despertó creyendo que todo había sido una pesadilla hasta que su padre se acerco y con cara seria le dijo a Hipo lo cerca que había estado de morir y la suerte que tuvo de que un errante lograra sacarlo del agua, así como tambien su padre le dijo que no existían rastros de lo que pudo haber ocurrido con su dragón, ni de que había sido de el, con esta noticia Hipo se puso pálido y recordó como no logro encontrar a su amigo al caer en el mar; El joven se recoloco la prótesis que se encontraba junto a el y salio corriendo de la cama a vomitar en el baño ya que la noticia de que su único y mejor amigo estaba desaparecido o peor hizo que se sintiera enfermo.
Después de expulsar lo que fue el desayuno de esa mañana e incluso algo de la cena del día anterior Hipo regreso a su habitación, cansado pidió a su padre que se marchara y una vez que Estoico salio y cerro la puerta Hipo rompió en llanto, y mientras una parte de el pensaba que jamás volvería a ver a su amigo, otra parte aun tenia la esperanza de que este hubiera logrado llegar a la costa y que tal vez por el cansancio aun no regresaba, con la creencia de que Chimuelo aun podría seguir vivo y de que podría necesitar su ayuda Hipo se levanto, salio de su casa y fue a buscar un dragón que lo pudiera llevar a la zona donde casi se ahoga y ahora que lo piensa, ¿como fue que sobrevivió? "a si, un errante lo salvo" es lo que había dicho su padre, decidió sacudir esos pensamientos de su cabeza por el momento, ya que lo importante justo ahora era encontrar a Chimuelo y mientras estaba a punto de subir a un nadder que había encontrado hace poco escucho que alguien le decía que se detuviera y cuando volteo se dio cuenta de que no era nadie que conociera, pero existía algo familiar, tenia unos tóxicos y afilados ojos verdes, que al reconocerlo se hicieron mas suaves, un algo largo cabello negro que llegaba debajo de los hombros y una piel blanca acompañada de unos ligeros músculos, Hipo algo confundido por la apariencia de este hombre, el cual ahora que lo veía bien estaba utilizando una de las pieles de su padre, Hipo soltó al nadder dejando que se fuera y se acerco al extraño preguntándole quien era y de donde lo conocía, quedando impactado por la respuesta, ya que aquel joven media cabeza más alto que el afirmaba ser Chimuelo, pero eso era imposible ¿cierto? es decir Chimuelo era un dragón, tenia que ser mentira, además de que Chimuelo estaba desaparecido o... y sin poderlo evitar Hipo comenzó a derramar lagrimas y el muchacho pelinegro se acerco a abrazarlo, por alguna razón Hipo se sintió bien, como si sus problemas se fueran y al ver como este chico le sonreía se dio cuenta que no podía ser otro mas que Chimuelo y aunque esto fuera muy improbable no quería decir que era imposible, como cuando decían que los dragones eran criaturas violentas e indomables y eso resulto ser mentira.
Con su nueva resolución Hipo decidió ir con Chimuelo a su casa y cuando estaban entrando el padre de Hipo lo estaba esperando, Estoico le preguntó a su hijo que hacia afuera tan tarde y fue ahí cuando noto que traía compañía, al observar al muchacho pelinegro recordó que fue él quien salvo la vida de Hipo horas atrás, Hipo miro confundido a su padre el cual se había quedado estático y sin decir nada al observar a Chimuelo, sumiéndolos en un extraño silencio el cual fue roto por Chimuelo al decirle a Hipo que debían irse a dormir, causando que Estoico saliera de su estupor al recordar que si bien el pelinegro había salvado a su hijo, este había estado desnudo cuando llego cargando a Hipo en brazos después de haberlo sacado del mar y que al no tener nada, fue el mismo Estoico quien le dio una de sus prendas para que este misterioso hombre salido de la nada pudiera vestir, así que como el buen padre que intentaba ser saco al extraño de la casa, no sin antes darle algo de dinero para que pudiera quedarse en la pequeña posada del pueblo y dejara a su hijo en paz.
Pasadas unas dos horas Hipo escucho unos rasguños en su ventana y sabiendo de quien se trataba la abrió dejando entrar al chico de cabellos negros, al cual antes de que su padre sacara de la casa había logrado hacerle señales indicándole que cuando su padre se durmiera entrara por la ventana, una vez estando Chimuelo dentro de la habitación comenzaron a hablar.
- ¿De verdad eres tu Chimuelo?
- Claro que si ¿quien mas?
- ... Pues vaya no se que decir, no pensé que te podías convertir en humano
- Yo tampoco
- Entonces ¿que fue lo que paso?
- Pues cuando volábamos me sentí débil y caímos, me transforme y luego te busque, no podías nadar y te saque del agua, estabas inconsciente, estábamos cerca de berk, solo Odín sabe que paso
- Ya veo, así que me salvaste nuevamente, gracias chimuelo y ¿como es que puedes hablar y caminar tan bien?
- Me hace feliz que estés bien y te oigo hablar mucho así que se que decir, sobre caminar fue extraño primero, pero ahora es fácil
Así por el resto de la noche Hipo pregunto unas cuantas cosas mas al ex-dragón, como porque había terminado con la ropa de su padre y terminaron por dormir muy poco esa noche.
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Al día siguiente ambos se levantaron muy temprano como era costumbre y... Chimuelo seguía siendo un humano, así que hipo tomo la ropa mas grande que tenia y se la dio a Chimuelo para que se cambiara mientras el se iba al baño, una vez que salio ya cambiado vio que el furia nocturna se estaba cambiando la camisa haciendo que Hipo se sonrojara un poco para después decirle a su dragón que el baño estaba libre, Chimuelo entro y salio preguntándole a Hipo como funcionaba, tras una vergonzosa explicación salieron al fin de la casa cuidando que Estoico no los viera y una vez fuera iniciaron con un paseo matutino caminando por la zona de muelles, viendo que podrían comprar para comer, tras haber comprado los víveres mientras regresaban a casa platicando de lo que harían el resto del día aprovechando que Estoico siempre estaba ocupado durante el día, se encontraron con los chicos (astrid, patán, los gemelos y patapez) en el camino de regreso y Astrid fue la primera en saludar a Hipo ya que los demás estaban en shock al observar que el muchacho, el cual se supone que había perdido a su mejor amigo andaba de lo mas sonriente con un chico al cual ni siquiera conocían, Hipo devolvió el saludo sin notar la mirada que todos tenían, siguiendo su camino con Chimuelo reanudando su platica, una vez fuera de trance los jóvenes del pueblo le preguntaron a Astrid quien era ese pero ella no supo que decir, pero claro que lo averiguaría.
Mientras tanto Hipo y Chimuelo ya en casa del primero se instalaron en la cocina con el ex-dragón sentado en la mesa, mientras Hipo se encargaba de destripar los pescados para después asarlos en el fogón, una vez listos los acompaño con unas papas hervidas que había preparado en el caldero, Hipo tomó asiento con Chimuelo e iniciaron a comer, mientas Hipo le indicaba a Chimuelo como utilizar los cubiertos correctamente, tras un rato de platica Chimuelo le pregunto a Hipo que tan bien se veía, a lo que Hipo se sonrojo un poco y le dijo que se veía muy apuesto y el furia nocturna sin perder tiempo le dijo que el se veía muy lindo, cosa que causo un sonrojo mayor en el menor pero que tambien causo que se molestara un poco diciéndole a Chimuelo que el no era lindo, era apuesto, un poco ya que solo los bebes y animales pequeños son lindos, Chimuelo solo asintió con la cabeza reteniendo la información y decidieron ir a la habitación de hipo para que este pudiera continuar con sus diseños y para que Chimuelo pudiera descansar ya que no podría estar en su casa una vez que Estoico llegara.