Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

¿Errores? por Hinata Yaoi

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Este Oneshot participa en el concurso organizado por Misaki Heartfilia en su pagina de Facebook.

Disclaimer: Los personajes del anime/manga de Naruto no me pertenecen, son propiedad de Misashi Kishimotto, la historia si es de mi imaginacion.

 

– Me casaré con Hinata.

El mayor paró de lavar los platos por un momento al escuchar a su hija quien se encontraba detrás de él sentada en los bancos situados cerca de la barra. Tomó un plato y un trapo para secarlo y giró hacia su hija para confirmar que lo que decía era una simple broma. Su rostro, como casi siempre, estaba indiferente, serio, no mostrando la preocupación que sentía. Su hija de piel blanca, cabello negro ondulado largo hasta la cintura, el cual estaba sujeto en una cola de caballo alta y sus ojos azules lo miraban con seriedad haciéndole saber que no era ninguna broma.

– ¿A qué se debe esa decisión tan impulsiva? – Preguntó.

– Lo amo, nos amamos demasiado y queremos estar siempre juntos. Es suficiente eso – Dijo segura, pero el mayor notó un leve nerviosismo en su mirada.

– Aunque digas eso, sigue siendo una decisión impulsiva, apenas tienes 18 años. No creo que lo que te haya hecho decidir eso sea solamente porque se aman ¿o me equivoco?

La adolescente no supo que responder por un momento. Mordió su labio inferior tratando de encontrar una respuesta que satisficiera a su padre y la apoyara a la hora de decirle a su otro padre sobre eso.

– No veo que hay de malo, nos amamos, ya somos mayores-

– Te faltan 3 años – Le interrumpió su padre.

– Prácticamente somos mayores de edad – Se corrigió – Sabemos lo que hacemos, sólo necesitamos tu apoyo. Necesito tu apoyo. Papá armará un escándalo cuando se lo cuente y quiero que estés de mi lado en ese momento.

– Tsuki, si me dices toda la verdad, tal vez lo piense. – Respondió su padre a la vez que dejaba el plato en la alacena y se acercaba a su hija para sentarse a su lado.

Tsuki respiró profundamente y soltó un suspiro, sabía que su padre no la apoyaría a menos que le contara todo.

– Sus padres decidieron enviarlo a Estados Unidos para que estudiara en Stanford GSB, sabes que es la mejor universidad del mundo para la dirección de empresas, así que no nos volveremos a ver y pensamos que si nos casábamos su familia no podría separarnos, por lo tanto, tendrían que enviarme con él también. No queremos separarnos. – Dijo de manera rápida pero clara como para que su padre le siguiera el ritmo.

El mayor suspiró. Sí que son unos estúpidos chiquillos. Hinata Hideki era un niño rico y era el próximo sucesor del presidente de la más grande compañía de tecnología en Japón. A pesar de ser rico, era un joven humilde y trataba a todos como su igual, no le gustaban mucho los lujos; bueno en los deportes; el mejor estudiante de la preparatoria, luego de su hija, y un caballero. Podría decirse que era el príncipe azul que todas las niñas soñaban encontrar, pero para desgracia de ellas su hija lo logró conquistar primero. Tenían ya tres años de noviazgo. Aún recuerda el día en que su hija, luego de un año de noviazgo, al fin se dignó a presentárselo. Ella estaba nerviosa, pero no porque él o el idiota de su novio no lo fueran a aceptar, más bien era lo contrario, ella no le había dicho a Hinata que sus padres eran una pareja homosexual. Logró calmarla luego de decirle que si no aceptaba aquello y se alejaba de ella era porque no la merecía. Afortunadamente, el chico era alguien muy bueno, sólo se sorprendió para luego reírse de su novia por ser tan tonta de no contárselo. El único que no estaba de acuerdo con esa relación era el sobreprotector de su pareja.

Idiota.

– Papi, no te quedes callado, dime qué piensas. – La voz de su hija lo trajo a la realidad.

– Creo que son unos idiotas – Tsuki iba a protestar, pero él levanto la mano ordenándole que lo dejara hablar – Primero que todo, según tengo entendido, la carrera sólo durará dos años, si tardara más es porque decidió realizar alguna especialización. Segundo, el internet es de mucha ayuda. Podrán realizarse vídeo llamadas si necesitan verse o escuchar la voz del otro. Tercero, lo que te pasa para tomar esa decisión tan impulsiva, cosa extraña en ti, es que tienes miedo de que el amor que ustedes dicen procesarse no sea el suficiente para resistir esta separación. Seguro te surgen preguntas como: "¿Me olvidará? ¿Se enamorará de otra chica mejor que yo? ¿Me engañará? ¿Todo se terminará?" – Paró un momento para ver a su hija y, por su expresión, se dio cuenta que había acertado en todo. – Si no se tienen confianza esa relación no prosperará. Confía en él y haz que él confié en ti. Son jóvenes, disfruten de ello, conozcan otros lugares, salgan a divertirse con sus amigos de manera sana, no querrán luego arrepentirse cuando ya están casados, con hijos y no puedan salir a divertirse, ya sea por el trabajo para lograr mantener a la familia, el cuidado de los niños y muchas más responsabilidades que se vienen en la vida como adulto.

– Pareciera que hablas por experiencia – Dijo Tsuki mirándolo con curiosidad.

– Lo último que te dije fue lo mismo que me dijo tu tío Obito.

– ¿eh? – Se sorprendió.

– Recuerdo exactamente las palabras que me dijo: "Sasuke, sal a divertirte, pásala con tus amigos, no todo son los estudios, claro que estos son importantes y no hay que descuidarlos, pero también se debe tomar un tiempo para disfrutar los placeres de la vida. Casándote solo te echarás demasiadas responsabilidades y luego querrás vivir todo eso que no hiciste siendo joven e incluso podrías llegar a serle infiel a tu esposa, te arrepentirás y te acordarás de mi".

– ¿Te casaste muy joven con la tía Sakura?

– Sí, te contaré mi historia...

...Desde pequeño fui bastante popular, yo no me lo busqué, para las niñas era bastante guapo y para todos era un niño con un increíble talento, ya que, era bueno en todo lo que hacía y cómo no serlo si en la familia Uchiha eso era primordial. Ser perfectos. No me interesaba lo que pensaran los demás de mí, lo único que quería era que mi padre y mi hermano se sintieran orgullosos de mí. Estudiaba bastante, tal vez y lograra superar a mi hermano, el cualera el favorito de papá, él era perfecto.

Cuando tenídiez años mis padres murieron a causa de un ladrón. Según la policía se resistieron al robo y el ladrón se descontroló y los mató huyendo con sus pertenencias. Afortunadamente lograron capturarlo y aún sigue pagando su condena. Itachi aún era menor de edadasí que, la policía buscó un familiar que pudiera ser nuestro tutor y encontraron a nuestro primo Obito, que de inmediato vino por nosotros y nos llevó a Italia, donde trabajaba como chef. Seguimos con nuestras vidas, nos acostumbramos a esa nueva cultura, hicimos nuevos amigos y allá es donde conocí a Sakura. Al principio me parecía una chica bastante molesta y no soportaba tenerla cerca, pero luego le fui tomando cariño y confianza, era con quien más permanecía, nos contábamos casi todo lo que nos ocurría y lo que pensábamos. Ella estuvo apoyándome cuando Itachi murió a causa de una enfermedad que no fue detectada a tiempo, quedé destrozado, él y yo éramos muy unidos, lo idolatraba, teníquince años cuando ocurrió. Luego de un año me di cuenta que veía de manera distinta a Sakura, me dije que estaba enamorado y no dudé en pedirle que fuera mi novia,lo cual ella aceptó.Éramos una pareja perfecta aunque tuviéramos una que otra discusión. Pensé en un futuro junto a ella y le propuse matrimonio luego de tres años de noviazgo...

– ¡No puede ser! – Gritó Tsuki.

– Oye, se lo pedí a mi manera, que no sea expresivo no significa que no pueda llegar a hacer eso – Dijo Sasuke con el ceño fruncido.

– Pero es que la historia es demasiado cursi para ser tu vida – Dijo de manera burlona.

– Tsk, allá tú si no me crees, continuaré haciendo el aseo – Se paró, pero su hija lo tomo del brazo y lo sentó para que continuara.

Suspiró.

… Ignoré lo que Obito me dijo y me casé luego de terminar la preparatoria. Estábamos muy bien, ella fue a la Universidad a estudiar medicina mientras yo estudiaba Ingeniería de Sistemas. Luego de dos años tuvimos a tu hermano, Takumi. Estaba muy feliz de ser padre. Cuando Takumi tenícinco años la relación entre Sakura y yo no era la misma, casi no teníamos tiempo para pasarla juntos, ella ya trabajaba en el hospital, yo trabajaba desde casa desarrollando softwares y vendiéndolos, así tenía mucho tiempo para estar con Takumi. Quise solucionar nuestro matrimonio, o eso creía, le propuse a Sakura que descansara un día y dejáramos ese día a Takumi con Obito para pasarla juntos. Ella tomó el día libre,y aunque no quiso dejar a Takumi con Obitoaun así nos divertimos, pero notamos que nuestra relación en verdad se venía abajo. Quería salir, ir a bailar o beber con amigos, los cuales no tenía, aun así decidí dejar a Takumi al cuidado de Obito, Sakura estaba en el trabajo y me fui a una discoteca, así sea solo. Conocería a alguna persona para divertirme esa noche por lo que me quite el anillo y lo guardé...

– Espera – Lo detuvo Tsuki poniendo su mano frente a la cara de Sasuke, el cual la retiró un poco molesto. – Engañaste a mi tía Sakura.

– No fue a la única. – Respondió indiferente.

– ¿Qué quieres decir con eso?

– Una de esas noches en que salía a divertirme conocí a Naruto.

… Estaba sentado en la barra del bar viendo si esa noche podría encontrar, al finalguna chica que me satisficiera, olvidé cuándo fue la última vez que había tenido sexo. Al poco rato Naruto se me acercó con aire seductor y una mirada que me dijo claramente cuáles eran sus intenciones, aunque yo solo veía a un idiota que creía que yo era homosexual.

– ¿Por qué tan solo?

– Porque se me da la gana – Contestécortante.

– Vaya, no estés a la defensiva gatito– Me dijo con una sonrisa aunque pude notar un tic en su ceja, se había molestado, peroyo lo estaba más, "¿gatito?, me llamó "¿gatito?".

– Mira idiota, no me atraen los hombres, soy heterosexual así que lárgate de mi vista.

– Bastardo, eres de esos tipos que me provocan bajarle esos aires de grandeza – Me dijo sosteniéndome del cuello de mi camisaacercando mi cara a la de éldándome a entender que estaba cabreado.

Yo sólo sonreí como suelo hacerlo cuando quiero burlarme de alguien.

– ¿En verdad crees que puedes conmigo?

Podía jurar que me iba a golpear, pero respiróhondo y me alejó de él para luego irse del lugar...

– Rayos y yo que creí que se habían revolcado esa noche – Dijo Tsuki haciendo un puchero.

"Sakura es una mala influencia, me la convirtió en fujoshi"

– Como sea.

… Dos semana luego de ese encuentro nos vimos de nuevo, esta vez no fue en la discoteca, esta vez él me buscó, sin saber que era el tipo al que le iba a dar una paliza, para que le realizara un trabajo. Quería un sistema de seguridad para la información de su empresa. En cuanto nos encontramos para concretar los términos sentí un poco de vergüenza, después de todo, Naruto manejaba la compañía de telefonía más usada en el oriente y Europa. Temía que por mi comportamiento no quisiera que trabajara con él, parece que por un instante pensó en irse, pero decidió dejar de lado nuestras diferencias. Logramos simplemente hablar del trabajo como si apenas nos conociéramos.

– Eso es todo, en seis meses o menos podremos tener su sistema listo. – Le dije.

– Veo que en el trabajo y fuera de este es igual.

– ¿Tiene algún problema con eso? – Dije aunque en el instante me arrepentí, pero mi orgullo era más fuerte y Naruto me exasperaba.

– Jajajajaja, veo que no te importa el cargo o nivel de otra persona para hablar así – Me dijo de manera burlona, mientras se levantaba y se colocaba frente a mí– Eso me gusta. – Termino con su cara demasiado cerca a la mía con una sonrisa zorruna, yo solo quería matarlo con la mirada.

– Creo que ya te dije que no soy gay, idiota.

– Sí, ya me lo dijiste, no tienes que repetírmelo – Me lo dijo al oído causando que mi cuerpo se estremeciera a lo cual me alejé de inmediato y por lo que vi en su cara, este se había dado cuenta de lo que había causado en mí y estaba feliz con ello.

– Nos vemos en otra ocasión, Namikaze – Dije retirándome de inmediato del lugar, debía de alejarme de él, sentía que era peligroso...

– ¿Estabas asustado por la sensación que te causó? – Dijo Tsuki mientras servía jugo de mandarina en dos vasos y le pasaba uno a su padre.

– Solo me llegué a fijar en una persona durante mi vida y era una mujer, ¿Cómo no asustarme si empezaba a sentir cosas por un hombre?

… Así comenzamos a trabajar, para mi pesar, debía reunirme constantemente para ver los requerimientos del sistema y en cada encuentro Naruto tenía un acercamiento que hacía que mi cuerpo sintiera cosas que jamás había sentido y mi corazón palpitaba cada vez más rápido cuando se me acercaba, no me gustaba para nada esa sensación. Dejé de ir a la discoteca para pasar tiempo en cenas o idas aal cine con Naruto. Tenía un poder de convencimiento increíble, siempre me terminaba preguntando cómo es que lo lograba, aunque admito que en cada salida me divertía un poco con las estupideces que hacía o decía, pero las peleas no podían faltar, ya era una manera de tratarnos. Hubo una ocasión en la que fuimos a comer a su apartamento.

– Bien, ¿Cómo diablos me dejé convencer? – Dije con una vena marcada mientras Naruto servía su comida favorita, sí, el idiota servía ramen.

– Es porque te gusto que aceptaste – Dijo con una sonrisa mientras yo sentía mis mejillas calientes y este se reía y me decía que me veía adorable.

Maldito idiota.

Traté de golpearlo mientras él esquivaba mis golpes y no sé cómo, pero terminamos cayendo, yo encima de él y nuestros rostros demasiado cerca. No traté de alejarme, estaba absorto en sus ojos y sin darme cuenta Naruto me había besado. Fue al principio despacio, como temiendo a que yo me alejara, al ver que esto no sucedía fue tomando más confianza y el beso subió de tono cada vez más, tanto que cuando ya recuperé mi conciencia, Naruto, estaba encima mío y una de sus manos acariciaba todo mi torso por debajo de mi camisa. Nos separamos por falta de aire y estoy seguro que en ese momento estaba como mi fruta preferida. Naruto me veía con una sonrisa tonta en su rostro.

– Creo que sí te gusto.

– No... no lo sé – Dije viendo a cualquier parte menos sus ojos.

– jeje así lo niegues Sasuke, tu corazón, tu mente y tu cuerpo reaccionan a mí. – Dijo mientras se paraba y me ayudaba a levantarme. – Salgamos este fin de semana.

– Estaré ocupado y... debo irme. – Dije mientras recogía mis cosas y me arreglaba un poco las ropas y mi cabello. Ya tenía el pomo de la puerta cuando me devolví y le di un beso casto para luego sí irme dejándolo parado con los ojos abiertos.

Cuando llegue a casa, Sakura y Takumi estaban en la sala. El primero en darse cuenta de mi presencia fue Takumi.

– Bienvenido a casa papá.

– Ya llegué – Respondí.

– Bienvenido a casa Sasuke – Me saludó Sakura mirándome con los ojos un poco abiertos

– Papá, te pasó algo muy bueno ¿verdad? – Preguntó Takumi mientras yo me acercaba a cargarlo.

– ¿Por qué lo dices?

– Tienes una sonrisa en la cara. Eso es raro – Dijo mientras señalaba mi sonrisa. Yo no pude evitar ir a un espejo con mi hijo en brazos para comprobar lo que decía y era cierto, me veía muy feliz, creo que solo tuve esa expresión cuando Takumi nació.

– Tal vez sí paso algo bueno. – Dije mientras le daba un beso en la frente y lo dejaba en el suelo. Estuve jugando durante unas dos horas con Takumi para luego llevarlo a dormir.

Sakura no me dijo nada...

– ¿Por qué no se revolcaron? – Preguntó Tsuki con una mueca decepcionada.

– Tsk, estuvimos así por un tiempo, no pasaba nada más allá de besos y no era porque tu padre no quisiera, yo lograba evitar que pasáramos a mayores y más luego de investigar un poco sobre sexo homosexuales.

– ¿Qué tiene de malo? Es hermoso – tenía sus manos juntas y una mirada pervertida. Sasuke podía jurar que casi se le cae la baba y salía un poco de sangre de la nariz de su hija.

Sasuke carraspeó para que Tsuki regresara a la realidad.

– Tres meses luego de que todo empezara.

… No recordaba como habíamos terminado en la cama totalmente desnudos, con Naruto encima besando mi cuello y acariciando mi cuerpo, mi trasero. Mi respiración estaba acelerada y sentía la sangre en mi cara. Hubo un momento en que empezamos a besarnos en su apartamento y este se tornó más hambriento por lo que el idiota me fue despojando de mi ropa y la suya propia guiándome hasta la habitación.

– Na.. Naruto... espera – Traté de decir.

– ¿Qué pasa? – Me respondió con una voz ronca que en ese momento me pareció de lo más sexy.

– ¿No crees que vamos demasiado rá- aahh – Abrí los ojos sorprendido de que ese idiota se hubiera atrevido...

– Sólo déjate llevar – Me dijo mientras me besaba.

Ese beso y sus caricias lograron que mi mente se nublara. No pensé en Sakura, no pensé en Takumi, no pensé en que era heterosexual, simplemente me dejé llevar.

Quedé dormido luego de que hiciéramos el amor y al despertar tenía una llamada perdida de Sakura, en ese momento me di cuenta de que no me arrepentía. No sentía remordimiento o culpa por haber engañado a Sakura. Sí sentía culpa, pero por haber engañado a Naruto y no decirle que estaba casado.

Me sentí como una basura. Ninguno de los dos se merecía lo que estaba haciendo. Me había terminado de enamorar de ese idiota, pero aun así sentía cariño por Sakura, no de manera romántica, sino como una amiga, siempre estuvo conmigo en los malos momentos y yo le pagaba eso siéndole infiel.

Me fui de ahí para la casa a tratar de despejar mi mente y qué mejor manera que pasando el tiempo con mi hijo.

Esa tarde estaba en el parque con Takumi mientras jugábamos con un balón cuando escuche un grito.

– ¡Sasuke! – Grito Naruto mientras venia corriendo con una sonrisa.

Me asusté en ese momento porque Naruto podría darse cuenta de que estaba casado, dejé mis manos en mi espalda para quitarme el anillo, pero me di cuenta que no lo tenía puesto, eso me tranquilizó.

– Papá, ¿Quién es el señor? – me preguntó Takumi halando mi el pantalón.

– Es un amigo – Respondí.

– ¿Por qué no me dijiste que tenías un hijo?– Dijo Naruto cuando llegó junto a nosotros mientras se agachaba a la altura de Takumi y le sonreía. – Mucho gusto pequeño, mi nombre es Naruto ¿Cuál es el tuyo?

– Takumi, gusto en conocerlo, no soy pequeño – Terminó de decir Takumi con un puchero que solo hacía verlo tierno.

– Sí claro, eres un niño grande. ¿Puedo jugar con ustedes?

– No sé – Respondió Takumi mirándome, pidiendo permiso.

– Siempre haces lo que te da la gana, idiota. – Dije alejándome con el balón para después girar a verlos.

– Pedía permiso a tu hijo, no a ti bastardo – Me dijo con una sonrisa y un tic en la ceja. Takumi solo reía.

Empezamos a jugar los tres, aunque al final Naruto y Takumi hicieron equipo. Hijo traidor.

Takumi estaba muy feliz y Naruto igual. Se habían caído bien.

Ya estaba atardeciendo y Takumi ya había caído dormido del cansancio.

– ¿Por qué no me dijiste sobre Takumi-chan? – Me preguntó Naruto acariciando la cabeza de Takumi quien se encontraba en mis brazos. Estábamos sentados en una de las bancas del parque.

– Nunca me lo preguntaste.

– Bastardo – Hizo un puchero que me causo gracia. En verdad es muy infantil. – ¿Qué otra cosa no me has dicho?

– ¿Sobre qué exactamente?

– ¿Qué hay con su madre? – Me miraba fijamente como tratando de ver si llegaba a mentir.

– Debe estar trabajando en el hospital. Es una buena mujer, nos conocemos desde que tenícatorce años más o menos.

– Sasuke, no me refiero solo a eso – Dejó de caminar y me tomó del brazo para que girara y lo viera a los ojos. – ¿Por qué estas nervioso? No veo por qué debas estarlo.

Me sorprendí que descubriera mi nerviosismo. Bajé la mirada, lo único que pensaba era que Naruto me odiaría, pero no merecía que le siguiera mintiendo. Él no se merecía a alguien como yo.

– Estoy casado. No tengo el anillo aquí, me lo quito al querer salir a divertirme o cuando salgo contigo. – Dije aparentando que me importaba un comino lo que pensará.

Me miro sorprendido, pude ver en sus ojos decepción, tristeza, odio.

– Nos seguiremos contactando por correo. Quedan dos meses. No creo que necesites contactar conmigo para algo más en el sistema. – Estaba muy serio, no lo había llegado a ver así. Sin más que decir solo se alejó. Por un momento quise detenerlo, pero cuando abrí mi boca, nada salió de ella.

Sentí un fuerte dolor en el pecho...

– No sé qué sentir, por un momento sentí decepción – Dijo Tsuki mirando seria a Sasuke.

– Lo sé cometí muchos errores. – Dijo Sasuke con una sonrisa triste

– No hablo de eso, ¿Por qué saltaste la parte del sexo? – Dijo exaltada apoyando las dos manos en la barra. Sasuke solo maldecía a Sakura. – Pero también siento tristeza. Pobre de Papá.

– Después de eso, como dijo Naruto, no nos comunicamos. Aunque sí hice algo que me costó una semana en el hospital.

– No me digas que...

– Sakura es una bruta, aunque me lo merecía. Luego de salir del hospital me dedique al sistema. No salía del apartamento que estaba arrendando. Muchas veces dejé de comer. Estar concentrado programando, enviando algunos detalles al mi equipo de trabajo me ayudaba a dejar de pensar en la mirada de Naruto la última vez que nos vimos. Un día Sakura fue a visitarme.

… Abrí la puerta a Sakura con algo de precaución por si decidía golpearme de nuevo. Ella simplemente entró con algunas bolsas, al parecer iba a cocinar. Definitivamente venía a matarme de manera cruel.

– Yo cocino. – Dije de inmediato.

– He mejorado – Dijo como si la hubiera insultado.

– Sí claro, por eso es que Takumi come en casa de Tenten.

Sakura solo giro la cara. Empecé a ver lo que ella traía para empezar a cocinar.

– Quien debería encerrarse en una habitación o estar adicta al trabajo debería ser yo. Yo fui la engañada. Pero tú estás haciendo mi papel y ni siquiera visitas a Takumi. Él te extraña mucho. – Dijo reprendiéndome. A veces creía que ella se tomó el papel de ser mi madre.

– Lo que pasa es que tú ya no estas enamorada de mí – No me contradijo – En cambio yo... – Dude de decirle, pero era mi amiga de todos modos, mi ex, pero mi amiga. – Mi amante me dejo encuanto supo que estaba casado.

– ¿No sabía que eras casado? Creo que ella me empieza a caer bien.

– Muy graciosa. No quería tener nada, pero insistía mucho. Me contrató para un trabajo, nos empezamos a ver seguido por los requerimientos, pero empezó a invitarme a salir y no tengo idea de cómo me convencía. Así nuestra relación se fue estrechando hasta que un día nos besamos. – Sakura solo me veía alentando a que continuara – Ese idiota logro hacerme sentir cosas que jamás había sentido, me asusté de que empezara a sentir algo así por un hombre y-

– Alto ahí, ¿Me engañaste con un hombre? – Me dijo en un tono amenazante que en ese momento pensé que me golpearía de nuevo. Herí su orgullo femenino después de todo.

– S..Sí, es un idiota, torpe, adicto al ramen, demasiado ruidoso, atolondrado, algo listo en cuestión de negocios, amable, terco, testarudo, cursi, guapo, seductor, sexy, salvaje, tiene un cuerpo de infar... – Me sonrojé al darme cuenta de lo que estaba diciendo, vi a Sakura y esta tenía un gran sonrojo y un pañuelo en la nariz.

– Me lo hubieras dicho desde el principio y te hubiera perdonado – Pero que demo – Dame detalles muy específicos de sus relaciones, si tienes vídeos y fotos mejor.

– Maldita pervertida.

– Pervertida no, solo tengo una mente sexy. – Me dijo sonriendo mientras ponía sus manos en sus caderas. – Pero regresando al tema del principio, ¿No lo has buscado?

– Me odia. – Regresé a ese aire deprimente.

– ¡Qué diablos te pasa! ¡Ve y búscalo, pídele perdón! ¡Dile que lo amas, que lo extrañas, que lo anhelas! ¡DILE QUE QUIERES QUE TE FOLLE Y TE PARTA EN DOS! – Esto último ya me lo dijo con su cara muy cerca a la míacon sus ojos llenos de rabia y sus manos en mis hombros apretando más de lo normal.

– Haré lo primero, pero lo último no. – Finalmente dije soltándome de Sakura para luego tomar mis llaves y dirigirme al apartamento de ese idiota...

Cuando llegué al apartamento, no sabía si tocar la puerta o no. Toqué su puerta, pero nadie contestaba.

– Naruto, perdón. ¿Sabes?, me cuesta decir esto. Me he separado de Sakura, la madre de Takumi, aunque aún no nos hemos divorciado. Te extraño demasiado. No tenía planeado enamorarte, no tenía planeado tener una relación más allá de un revolcón, lo único que buscaba en esos bares o discotecas era salir de la monotonía, quería divertirme, cosa que no había hecho cuando era más joven. Tal vez fue cosa del destino o yo que sé, pero te conocí y me empecé a divertir de muchas otras maneras junto a ti y sin que me diera cuenta... me enamoré. En serio lo siento. Te amo Naruto. – Finalicé apoyando mi cabeza en la puerta. Pasé mi mano por mi cara y tenía lágrimas. No sé en qué momento empecé a llorar. Me limpiéme iba a ir cuando

– Yo también te amo, Sasuke. – Dijo Naruto detrás mío.

Giré y este tenía una pequeña sonrisa. No pude aguantar y me lance a besarlo, me corespondió. Abrió la puerta entre el beso para luego cerrarla y llevarme a su habitación. No hubo más palabras, nada más gemidos y alguna que otra vez diciéndonos un 'te amo'.

Luego de eso.

– Debiste hacerle caso, con eso de seguro te hubiera follado en el pasillo– Me dijo Naruto luego de que le contara qué fue lo que me hizo ir allá. Yo lo golpeé por idiota. Aún estábamos en la cama.

– Es una maldita pervertida, no puedo creer que le guste eso en la vida real.

– ¿Qué quieres decir?

– Siempre le había visto leer esos mangas yaoi. Es una fujoshi.

– Me cae bien tu mujer. – Dijo burlándose, lo volví a golpear por ello. Luego Naruto me volvió a besar. – Dilo de nuevo.

– Ya quisieras…

– Me alegra que hayan terminado bien – Dijo Tsuki con una sonrisa.

– A mí también. Naruto y Sakura se cayeron muy bien y Takumi estaba contento de tener a Naruto como un tío. – sonrió – Ahora, ¿qué piensas hacer luego de escuchar esto? No digo que te vaya a pasar lo mismo.

– Hablaré con Hinata, no pienso ser una esposa infiel ni tampoco ser cachoneada. – Se levantó rápido.

– ¡Ya llegué! – Dijo Naruto entrando a la cocina.

– Bienvenido papá. Llamaré a Hinata – Dijo Tsuki luego de darle un beso en la mejilla a Naruto e irse corriendo a su habitación.

– Me están robando a mi hija. – Dijo con lagrimones en sus ojos.

Sasuke sólo sonrío, si supiera lo que estaba a punto de hacer. Se paró, rodeó el cuello de Naruto con sus brazos y dijo cerca a sus labios.

– Te amo, idiota – Luego lo besó. Naruto estaba sonrojado, ya que, Sasuke pocas veces tenía esos gestos.

– Lo de idiota sobraba, bastardo – Dijo Naruto luego de separarse.

Tal vez su destino siempre fue no disfrutar su juventud para luego experimentar todo aquello junto a ese idiota.

 

Notas finales:

Mi primer Oneshot largo. Espero les haya gustado :D

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).