Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Travesuras del Destino por ItouMiyu

[Reviews - 26]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Bueno.... Tengo mucho que explicar por estar desaparecida...
Solo puedo decir esto a mi favor.... Finales de examenes... Regalos de navidad y de reyes c: ! ¿Que harian si les regalan dos libros de una saga y quedar con ganas de leer mas y volverte loca comprando los demas libros? Bueno... eso fue lo que me paso y el fic quedo suspendido en el aire.

Claro, no deje de pensar en el y de como continuarlo, la verdad estaba bloqueada y no sabia como seguir, pero hace unos dias me recorrio por las venas las ganas de escribir y me puse a hacerlo, y bueno... aca esta el cap c: !

Espero les guste... La verdad, este cap (o partes del cap) lo tenia pensado desde hace muuuuuucho tiempo pero no habia podido ponerlo aun. Y bueno... fui feliz al terminarlo *-*!

Sin mas que decir... les dejo leyendo~

-Lo siento, sé que hoy quedamos en vernos pero me surgió algo y no podré ir- Escuche un suspiro del otro lado de la línea –De verdad quiero estar contigo pero hoy no puedo, lo siento-

-Está bien, no te preocupes- Sentía como mi pecho se oprimía, estaba intentando controlarme para que no notara mi tristeza.

-Mañana, te prometo que mañana nos veremos, no importa que pase pero nos veremos- Se hizo un silencio por unos segundos -¿David?-

-Nos vemos mañana Isaac, cuídate- Sin esperar a que me respondiera corte la llamada.

Con lo que estaba pasando con Alan las cosas entre nosotros no eran iguales, notaba a Isaac más alejado de mí, sé que no es nuestra culpa, ni la de Alan, estamos estresados, nerviosos, molestos y todo es culpa de Charly pero aun así me dolía que se estuviera distanciando un poco.

Mire por la ventana de mi habitación, el sol pasaba por ella dejando un rastro cálido que alejaba un poco el frio que se encontraba en mi cuerpo; estábamos ya en los primeros días de diciembre, específicamente 10 de diciembre y el clima era cada vez más frio, cada vez podía salir menos, y siempre que lo hacía tenía que ir con casi toda mi ropa sobre mí, y esto preocupaba mucho a Isaac, por eso él pasaba casi todos los días conmigo en casa, pero ahora… ahora solo nos vemos en la universidad.

Esta semana no ha sido la mejor, enterarme que Alan fue atacado por ese desgraciado me hizo sentir horrible, nos conocemos desde hace tanto tiempo y yo no pude hacer nada por él, había dejado que siguieran esos acosos, nunca pensé que llegara a tal extremo, y sé que Isaac sentía lo mismo que yo.

A pesar de que estuvimos de acuerdo para siempre acompañar a Alan, había momentos en que Isaac se alejaba de nosotros para hablar por teléfono o responder un mensaje, y siempre que lo hacía tenía una expresión de molestia y fastidio, me preocupaba su comportamiento, de momentos era amable, atento y luego estaba distante, tenía miedo, temía que no quisiera estar cerca mío.

Y eso era lo que más me dolía, últimamente me sentía feliz a su lado, me sentía más querido, más protegido, y mis sentimientos por él crecían cada vez más, Alan me había dicho que era notorio y temía que Isaac se diera cuenta y no quisiera estar mucho tiempo conmigo. Sé que es estúpido, que pienso demasiado, pero soy inseguro, no sé lo que piensa y temo por terminar con el corazón más débil de lo que ya esa.

Mire la pantalla de mi celular para ver la hora; 10:45… Podría llamar a Alan y reunirme un rato con él, hace mucho que no estamos los dos solos. Tras soltar un suspiro me lanzo sobre la cama mirando hacia el techo. Cuando era pequeño me gustaban mucho las estrellas, me la pasaba mirando mucho el cielo de noche, quería verlas siempre pero por mi condición no podía estar en el exterior por mucho tiempo; mis padres me compraron un telescopio y era muy feliz con ello.

Una vez le pedí a mi padre que me pintara estrellas en el techo de mi habitación, él lo hizo sin protesta, siempre cuando me iba a dormir miraba las estrellas y sentía que estaba en el patio, acostado en el césped, mirando sin preocupaciones.

La primera vez que Isaac entro a mi cuarto sentí mucha vergüenza por ello, no paraba de reírse y decir que era algo lindo que a mi edad siguiera teniendo las estrellas en el techo, esa fue la primera vez que sentí a mi corazón latir por él, no entendía porque me pasaba, pero cada vez que estaba cerca suyo mi corazón latía con más fuerza.

El tiempo paso con momentos felices y no tan felices, siempre apoyándome cuando lo necesitaba, así fue como empecé a enamorarme de él, pero tenía miedo de no ser correspondido… aun lo tengo. No sé qué piensa de mí, que siente por mí. Pero con la cercanía de los últimos días algo de esperanza había llegado a mi pecho, por eso pensé que podría declararme, solo que las cosas no son como uno quiere. Hoy quería hacerlo pero Isaac cancelo nuestra cita.

Tome el celular y marque el número que ya me sabía de memoria, me senté en la cama mientras esperaba a que contestaran.

-¿Diga?-

-Hola Alan, disculpa por llamarte tan repentinamente-

-¿David?- Su voz sonaba tranquila –No te preocupes, ¿Necesitas algo?-

-¿Tienes planes para hoy?-

-Había quedado con Gil para comprar algunas cosas- Escuche como reía –Me pidió ayuda para hacerle algo a Sarah en navidad, no sé qué espera de mí, yo sé menos de esos temas… ¿Por qué preguntas?-

-No es nada, pasare todo el día en casa y quería saber si podrías venir-

-Debo suponer que no soy la primera persona a quien llamas ¿No?- Guardo silencio esperando a que respondiera, al ver que no lo hacía suspiro -¿Quieres venir con nosotros?-

-¿Eh? No, no… no te preocupes, pasa el día junto a Gilbert yo… - Suspire –Veré que hacer, en serio no te preocupes-

-Si tú lo dices- Se notaba que no estaba muy convencido –Cualquier cosa avísame ¿Ok?-

-Gracias Alan, nos vemos-

Corte la llamada y me recosté de nuevo sobre el colchón, respire profundo mientras cerraba los ojos, podría dormir un rato y luego ver que hacer después, aún queda mucho del día… Algo se me ocurriría.

 

POV Isaac.

Odiaba todo esto, casi no podía estar con David y ahora la cita que había estado esperando con tantas ganas se había cancelado y todo era culpa de los planes de mi madre. Toda la semana diciéndome que encontraría a la chica perfecta para mí; rogaba por que se rindiera pronto pero mi suerte y yo no estábamos muy unidos.

Cuando me desperté temprano en la mañana mi madre desde la cocina me miraba con una sonrisa de oreja a oreja contándome que había arreglado una cita con la hija de una amiga que estudio con ella en la universidad. Solo la escuchaba sin prestar atención, hasta que dijo aquellas palabras que me dejaron de piedra.

-La cita será hoy en la tarde, así que hijo tienes que estar bien arreglado-

-¿Qu-qué?- No podía hablar bien y ella solo desprendía felicidad de su ser, mientras yo me iba hundiendo poco a poco.

-Lo que oíste cariño, a las 5 de la tarde Jocelyn vendrá a casa a comer, así que quiero que estés listo para ella-

-¡Mamá! ¡No puedo hoy tengo planes!- A pesar de que la cocina era un poco espaciosa, sentía que me estaba acorralando cada vez más.

-Tendrás que cancelarlos- Iba a protestar pero su mirada me lo impidió –Lo vas a hacer, no sabes lo que me costó conseguir que mi amiga aceptara esto. Lo hago por ti, quiero que puedas ser feliz junto a una gran persona- Se acercó a mí y acarició con suavidad mi mejilla –Jocelyn es una gran chica, está estudiando abogacía y le va muy bien en la carrera-

-Mamá no puedo, tengo planes hoy con Da…- Callé al ver el rostro de mi madre.

-¿David? ¿Por qué siempre andas con él? Hijo esto es por tu futuro, entiendo que te preocupes por tus amigos pero debes de buscar a la persona que quieres a tu lado el resto de tu vida y junto a tus amigos dudo que lo encuentres- Si supieras madre… suspire.

-Yo… no quiero cancelar los planes de hoy-

-Lo harás- Dijo con firmeza –Inténtalo, conócela y veras que yo tengo razón, solo dale una oportunidad- Su voz era suave mientras continuaba acariciando mi mejilla –Llama a David y dile que no pueden reunirse hoy, llámalo ahora-

La mire dudoso, no quería cancelar los planes con él, deseaba tanto este día y ahora mi madre me lo estaba quitando, suspire vencido… Cuando se le metía en la cabeza no se le podría sacar nunca, muy probablemente me persiguiera en mi cita con David y quien sabe que pasaría después.

Saque mi teléfono del bolsillo del pantalón y marque el número de David, a los 3 tonos logre escuchar su voz.

-Hola Isaac- Se notaba alegre y eso me lo hacía más difícil.

-Hola David- Mire a mi madre que no dejaba de hacerme señas de que hablara rápido.

-¿Sucede algo?- Pregunto nervioso.

-Lo siento, sé que hoy quedamos en vernos pero me surgió algo y no podré ir- Suspire sin despegar mi vista de mi madre –De verdad quiero estar contigo pero hoy no puedo, lo siento- Al decir “contigo” mi madre me miro con el ceño fruncido, esquive su mirada.

-Está bien, no te preocupes- Note como su voz se iba apagando poco a poco, sabía que estaba triste.

-Mañana, te prometo que mañana nos veremos, no importa que pase pero nos veremos- Espere a que me respondiera -¿David?-

-Nos vemos mañana Isaac, cuídate- La llamada se cortó y sentí una punzada de dolor en mi pecho, mire a mi madre quien no dejaba de observarme analizante.

-Ya está hecho, solo la conoceré y nada más, no te garantizo nada- Me fui de la cocina hasta mi habitación escuchando a mi madre llamarme sin lograr detenerme.

La verdad es que solo la vería unos momentos, puede que una hora y luego le diría que tendría algo que hacer, iría con David y le explicaría todo, hablaría con él y le contare sobre mis sentimientos… espero que mi madre no se quede con nosotros o sino me arruinaba todo.

 

Las horas fueron pasando y seguía encerrado en mi habitación, no quería salir para nada, no quería ver el rostro de mi madre en estos momentos. Me estaba quedando dormido cuando escuche un suave golpe sobre la puerta.

-Isaac cariño, iré a comprar unas cosas. Arregla un poco la sala y luego ponte presentable- Mire la puerta con los ojos entrecerrados, no quería responderle, ella suspiro y luego escuche sus pasos alejarse de la puerta. Pasado unos minutos el departamento quedo en silencio total.

Cerré los ojos unos instantes y la imagen del rostro de David llego a mi mente, sonriendo, alegre, sonrojado, nervioso… Cada recuerdo de él me sacaba una sonrisa de los labios, luego más imágenes, triste, llorando, sufriendo algún ataque; mi pecho dolía. No me gustaba verle mal, no me gustaba que estuviera lastimado y sé… que hoy lo había lastimado con esa llamada.

Sin muchas ganas ni ánimos acomode un poco la sala que no estaba muy desordenada, algunos libros fuera de lugar, un poco de polvo por aquí, intente quitar de nuevo y sin éxito una mancha de gaseosa que había derramado David por error unos días antes de que mi madre llegara. La verdad si fuera por mí la dejaría siempre ahí, pero mi madre no soportaba verla. Dándome por vencido observe mi trabajo… La sala estaba impecable, salvo por la mancha pero no seguiré con ella.

Me fui a dar un baño rápido con agua tibia mientras tarareaba algunas melodías que escuchaba en los ensayos de la banda. Así paso el tiempo y solo podía suspirar a cada minuto sentado en el sofá que hasta hace momentos estaba sin una sola arruga.

Mire por no se cuanta vez mi celular esperando alguna señal de David, pero no tenía nada. Seguro estaba molesto y no le iba a protestar por estarlo. El reloj de pared sonó anunciando una nueva hora… 5 campanadas, mi “cita” estaría pronto a llegar y no hay noticias de mi madre.

El timbre del apartamento suena y con pesar camino hasta la puerta, me mire en un espejo mientras pasaba, el cabello aún se encontraba húmedo y se iban formando algunas ondas. Mi pequeña inspección de apariencia fue interrumpida por el paso de una llave, voltee a ver la entrada del apartamento por donde entraba mi madre y detrás de ella una joven que debía de ser Jocelyn.

-Hola cariño- Se acercó a mí y me dio un beso en la mejilla -No deberías dejar a tu cita esperando mucho tiempo en la puerta-

-Señora no se preocupe, recién llegaba-

La chica era linda, no podía negarlo; cabello negro recogido en una trenza que le caía por un hombro, ojos de un castaño oscuro, piel clara con algunas pecas en su rostro que la hacían ver un poco tierna. Le sonrió y noté un pequeño sonrojo en su rostro… Por lo menos una parte de lo que mi madre planeaba se estaba logrando.

-Pero aun así, tenía que abrir antes- Me da una pequeña palmada en el hombro –Este es mi hijo, como te darás cuenta- Contuvo una sonrisa –Su nombre es Isaac, espero se lleven bien-

-Gracias mamá, pero sé que puedo presentarme yo mismo- Intente no sonar brusco.

-Lo hice porque te quedaste callado mirándola- Me dirigió una sonrisa de victoria, porque para ella esto significaba que ya me había encontrado pareja, futura esposa, y madre de mis hijos –Bueno no quiero ser molestia para ustedes así que me voy yendo- Besa mi mejilla, le toma las manos a Jocelyn con cariño y luego desaparece por la puerta.

Nos quedamos un momento en silencio, era un poco incómodo para los dos, le mire fijamente notando que se movía inquita, todo en ella tenía el aura de tímida… Rasque mi nuca y carraspeé para aclarar mi garganta.

-Mejor vamos a sentarnos y hablemos un poco- Me miro y sonrió.

-Está bien- Una vez sentados miraba el living con curiosidad –Mi mamá me contó que eras el capitán del equipo de Rugby de tu universidad-

-No tengo mucho tiempo en ello, casi un año en realidad-

-¿Sabes? La verdad no quería venir el día de hoy- Me miró fijamente –Mi mama me obligo, pero si hubiera sabido como eras no era necesario tantos momentos incomodos con ella para que viniera-

-Y-ya veo- Eso no me lo esperaba, ella seguía viéndome y lograba ponerme algo incómodo.

-Por cierto, no me presente- Sonrió un toque de picardía –Mi nombre es Jocelyn, pero estoy segura que ya sabias eso ¿No?- Asentí –Bien…- Se acercó un poco más a mí en el sofá, tenía su rostro muy cerca del mío y yo solo intentaba alejarme sin mucho éxito –Eres mi tipo- Sonrió abiertamente y todo ese aire de timidez desapareció. Madre ¿En qué problema me has metido?

 

POV David.

A pesar de estar tan abrigado, al apenas salir por la puerta de la casa el viento frio me causo escalofríos, revise entre mi bolso de la universidad si tenía mis medicamentos y lo necesario para poder estar tranquilo en el exterior en este tiempo.

Estar solo en casa todo el día me estaba poniendo nervioso, así que mejor dar un paso por el parque, luego al centro y después regresar antes de que sea oscuro. Camine a paso tranquilo durante unos 7 minutos hasta llegar a un pequeño parque, busque un banco donde sentarme. Mire a las personas que iban y pasaban frente a mí. Familias, amigos, parejas… El parque estaba lleno de personas paseando, jugando con sus mascotas, hablando con sus amigos o parejas.

Mire hacia un árbol a la distancia encontrándome con una pareja, la joven le hacía cosquillas a la chica quien no paraba de reír, luego de un rato se abrazaron y besaron, ver eso me hizo sentir algo triste ¿Alguna vez podríamos pasar un momentos así nosotros dos? Tenemos algunas cosas en contra de ello, somos hombres y una relación de homosexuales no es bien vista para algunas personas.

Me levante y empecé a caminar para despejar mi mente, sin darme cuenta llegue a un lago que estaban cubierto de una pequeña capa de hielo, no pude evitar recordar el día en que Isaac y yo entramos en uno a horas altas de la noche y termine en una recaída. Sonreí con pesar… Todo lo que estaba viendo lo relacionaba a él.

El viento se levantó fuerte y el frio me dio de golpe, uní mis manos para darles algo de calor con mi aliento, al tenerlas un poco más cálidas saque de mi bolso unos guantes y me los puse. Ajuste mi bufanda y la coloque en mi rostro tapando un poco más arriba de la nariz.

-Sera mejor ir al centro, estar en este parque me hará mal- Tras hablarle a la nada y reírme de mí mismo me dirigí a un nuevo destino… El centro comercial.

Al llegar una pequeña risa quiso salir de mi garganta, a unos pasos de donde me encontraba podía ver a Alan y a Gilbert discutir sobre algo que se encontraba en la vidriera. Él me había dicho que vendrían a comprar algo para Sarah, mire hacían donde estaba por lo que ellos peleaban y me sorprendí al ver un hermoso vestido rojo con encajes negros. Me acerque a ellos sin que me notaran.

-Si están pensando darle ese vestido a Sarah, déjenme decirles que es demasiado corto- Alan se volteo hacía mí sorprendido.

-¿David que haces acá?- Me encogí de hombros –Bueno por lo menos estas bien abrigado-

-Algo es algo ¿No?- Mire a Gilbert –Hola ¿Cómo estás?-

-Estoy bien ¿Cómo andas David?-

-Paseando un rato- Observe como Alan buscaba a alguien con la mirada –Estoy solo-

-No estaba buscando a Isaac… por las dudas- Me reí al ver un pequeño sonrojo -¿Por qué no andan juntos? Es muy raro verlos separados-

-Pasaron cosas… creo- Mire a otro lado, a la vidriera donde estaba aquel vestido.

-Oh… Ya veo- Alan no dijo más y agradecí eso, no quería hablar ahora de ello… Por lo menos no con Gilbert presente –Entonces… ¿Estás de acuerdo con Gil de no comprar el vestido?-

-Alan ya te dije que es corto, Sarah no querrá usarlo- Alan coloco los ojos en blanco.

-¿No será que eres tu quien no querrá que lo use?- Reí un poco.

-¿Quieren que les acompañe a buscar algo para Sarah?- Gilbert dudo un poco pero luego sonrió.

-Gracias-

Fuimos de tienda en tienda viendo que darle a ella, la verdad yo me mantenía más en segundo plano y hablaba cuando veía que Alan se empeñaba en que compraran algo que Sarah no utilizara o no fuera de su gusto, a veces pensaba que lo hacía para molestar a su hermano, esa sonrisa en su rostro lo demostraba.

Al final decidió comprarle unos accesorios de oro blanco, eran muy bonitos y todos estuvimos de acuerdo con dárselo. Cuando Gilbert estaba pagando el teléfono de Alan sonó, él lo reviso y leyó el mensaje que llegó, una pequeña sonrisa se mostraba en su rostro a la vez que un pequeño sonrojo.

-¿Es Andrew verdad?- Me miro nervioso.

-¿Qu-qué te hace pensar eso?-

-Tu cara- Sonreí al ver que se sonrojaba más.

-Cada vez que me escribe o me llama me siento estúpido-

-Eso es que te gusta… Yo siento lo mismo, cuando estoy con Isaac me pasa igual- Esquive su mirada, ahora era mi turno para sonrojarme, sentía mi rostro caliente.

-¿Paso algo entre ustedes?- Volví a mirarlo un poco triste -¿Quieres hablar de ello?- Mire a donde Gilbert.

-Hoy teníamos… -Me mordí el labio –Teníamos una cita- Mis ojos se dirigieron al piso, no quería ver su rostro.

-¿Tenían?-

-Me llamo en la mañana para cancelarla- Sentía que mis ojos ardían un poco –Habíamos esperado por mucho tiempo este día y él lo cancelo- Mi cuerpo tembló un poco. Sentí los brazos de Alan rodeándome.

-No sé porque razón lo hizo, pero estoy seguro que tendrá una buena razón para hacerlo, al fin de cuentas él no dejaría ni cancelaría una cita contigo por nada- Me separé un poco y le mire con duda.

-¿Por qué lo dices?- Se puso nervioso y me soltó.

-Digamos que tengo una corazonada- Sonrió, quise protestar pero llego su hermano.

-Ya está, se tardaron más de lo quería por que no se ponían de acuerdo con el papel del envoltorio- Suspiro -¿Qué quieren hacer ahora? Ya es un poco tarde, son casi las 6 y está oscureciendo- Me mira -¿Quieres que te lleve a casa?-

Sabía que no debía estar mucho tiempo fuera de casa con este clima, ya tenía 2 horas en la calle y me iba congelando poco a poco, pero no quería volver a casa, no aún.

-Gracias pero tengo algo que hacer primero-

-¿Quieres que te lleve a ese lugar?- Negué con la cabeza –Está bien… Alan vamos que te llevo-

Después de despedirnos y prometerle a Alan que volvería a casa pronto comencé a caminar por calles que conocía demasiado bien, podía ir por ellas sin problema alguno, de día, de noche, con luz o sin ella… No podría perderme ya que he estado tantas veces por acá.

Me detuve frente a un gran edificio, mire hacía el último piso… Era realmente alto, tras un suspiro entre en el, salude al recepcionista y me dirigí hasta el ascensor, marque el número 7 y espere a llegar hasta mi destino, la música del ascensor me estaba taladrando los oídos, era algo de lo que siempre me quejaba al venir acá, deberían de cambiarla.

Las puertas se abrieron y camine hasta la puerta del apartamento C, busque entre mi bolso las llaves que tenía del apartamento, me las había dado Isaac hace un tiempo atrás diciendo que podría venir siempre que quisiera y sin preocuparme nunca por usar la llave. Luego de destrabar la puerta la abrí encontrándome con algo que rompió mi corazón en mil pedazos.

Frente a mi observaba como una chica estaba colgaba del cuello de Isaac y este ponía sus manos en sus caderas, mi corazón no dejaba de latir con fuerza, ellos se estaban besando, no se habían dado cuenta que había entrado, lo que fueron solo segundos para mí fue una eternidad, Isaac la aparto de él con los ojos muy abiertos, cuando fue a hablar mi bolso se resbalo de mis manos cayendo al piso y llamando su atención.

Isaac palideció, su boca temblaba un poco, sentía que poco a poco mi fuerza se iba perdiendo, mis ojos ardían cada vez más y la imagen de ellos se hacía borrosa y distorsionada, lágrimas comenzaron a caer de mis ojos y con cada respirar mi corazón estaba siendo apuñalado.

-Da-david… Yo…-Miro hacía la chica quien estaba en silencio observándonos –No es lo que crees, en serio-

Di unos pasos atrás, mi vista iba de él a ella y regreso a Isaac, negaba con la cabeza y coloque mi mano sobre mi boca para evitar que se escucharan mis sollozos, por esto era que él había cancelado nuestra cita, la cancelo para tener una cita con una linda chica, seguramente con ella era que siempre hablaba antes, seguro por ella estaba cambiando conmigo, seguro era ella la causante de que lo que nunca empezó entre nosotros se despedazara como un vidrio al caer al piso.

Salí corriendo en dirección al ascensor, escuche a Isaac gritar mi nombre, apreté con fuerza el botón para que llegara más rápido, apenas las puertas se abrieron entre y oprimí sin dudar el “PB”. Las puertas se iban cerrando pero una mano se interpuso entre ello. Isaac hizo una mueca debido al golpe que recibió al chocar contra el ascensor, entro en el y las puertas terminaron de cerrarse a su espalda. Estábamos los dentro y un silencio se formó entre los dos.

-Déjame explicarte lo que paso allá-

-¿Explicarme? No sé qué deberías de explicarme, yo vi bien- Mis lágrimas seguían saliendo y las quite con rabia.

-No, tú no sabes lo que pasó en realidad- Le mire fijamente, con todo el dolor que podía expresar en mi mirar –Llegaste en un mal momento-

-¿Mal momento?- Hablé con fuerza –No creo que lo fuera, estabas muy tranquilo besándola-

-¡Por Dios David!- Se revolvió el cabello –Ella me besó, yo la estaba apartando de mí-

-No… no tienes que decir algo así… yo les vi- Mi cuerpo temblaba y más lagrimas corrían por mis mejillas.

-¡Maldición!- Golpeo el vidrio del ascensor y este se quebró un poco, causando que su mano se lastimara un poco, mire asustado como la sangre comenzaba a salir de sus heridas –Sabia que esto era una mala idea- Suspiro –David, escúchame… Mi madre tiene una semana viviendo conmigo, está empeñada en encontrarme una pareja, quiere que me case y tengo hijos, quiere tener nietos…-

-¿Pa-pareja? ¿Hijos?- Le mire con la ira creciendo cada vez más en mi interior -¿Acaso necesitas ayuda para buscarte pareja? ¿Acaso eres un niño por el cual su madre tiene que hacer sus cosas?-

-Po-por favor David cálmate, déjame terminar- Suspiro, yo me quede en silencio, solo mirándolo y mi corazón latía con más fuerza, no sabía ya si era por lo que pasaba o era por algo de mi salud, en estos momentos no me importaba –Hoy en la mañana me dijo que había conseguido una cita, Jocelyn… La chica que estaba en mi departamento es hija de una compañera de mi madre de la universidad- Las puertas del ascensor se abren y vemos a una señora con un perro chihuahua que no dejaba de labrar –Lo siento señora, el ascensor está fuera de servicio-

Isaac cerró las puertas y oprimió el botón para dejar el ascensor detenido, estaba nervioso pero a su vez se notaba que estaba molesto.

-Quiero hablar sin interrupciones- Miro a nuestro alrededor –No creo que sea el mejor lugar pero saliste corriendo- Suspiro –David yo no quería esto, mi madre me obligo a aceptar esta cita, por eso te llame en la mañana, yo… No quería perder mi cita contigo, solo iba a aceptar para conocerla, para hablar un rato y luego terminar con esto, una hora nada más, luego iría a buscarte, sabía que si no aceptaba mi madre era capaz de seguirme hasta donde estabas-

-¿Cancelaste nuestra cita para tener una con otra chica que ni conocías?-

-David ¿Escuchaste lo que dije?- Le mire con mucho dolor.

-Espere… espere por muchos días este en especial, quería tener nuestra cita ¿Sabes cómo me sentí cuando me cancelaste?- Las lágrimas volvieron a caer por mis mejillas -¡Respóndeme!-

-Entiendo que estés molesto- Esquivo mi mirar –Yo… no sé si sea el mejor momento pero… Quería hacerlo hoy, quería decirlo hoy- Sus ojos se fijaron en mí, sus ojos que en tantos momentos me parecieron estrellas por la claridad que tenían, me puse nervioso –David… Tú me gustas, y no lo digo en sentido de amistad, ni nada de eso- Secó las lágrimas que tenía en el rostro –Estoy enamorado de ti-  

-¿Qu-qué?- Se acercó a mí.

-Solo me gustas tú, solo quiero estar contigo, solo quiero llegar a vivir siempre contigo ¿Qué si quiero besar a alguien? Solo a ti, ¿Qué si quiero casarme con alguien?- Se sonrojo –Solo contigo, si me lo permitieras alguna vez… Solo tu David, solo tu ocupas mi corazón, eres quien lo hace latir todos los días, eres en quien pienso cada mañana al despertar, cada noche al dormirme. Solo tú-

Mis ojos ardían si se puede más, mi visión era borrosa, no lograba verle con claridad, mi corazón golpeaba mi pecho con gran fuerza y a un ritmo acelerado al igual que mi respiración, mi cuerpo temblaba un poco.

-¿No dirás nada?- Su mano sobre mi mejilla se sentía cálida.

-También… yo…- dije en susurro.

-¿Qué?- Tome su mano con la mía y me apoye en ella.

-Todo lo que dijiste… yo… también lo siento… Yo- Apreté con fuerzas su mano –Isaac verte besarla me dolió, aun duele recordarlo-

-Y a mí me duele verte así- Sin darme cuenta ya estaba rodeado entre sus brazos, me sentía pequeño entre ellos, lo abrace con miedo de que fuera mentira, de que esto no estaba pasando.

-¿D-de verdad m-me quieres?- Él soltó un poco la fuerza con la que me abrazaba, levanto mi rostro desde el mentón con una mano -¿Isaa…-  Fue todo lo que pude decir antes de sentir un sinfín de emociones dentro de mí.

Sus labios estaban sobre los míos de una manera sutil, cariñosa, delicada. Me deje llevar por el beso cerrando mis ojos de los cuales no paraban de salir gotas saladas. Su boca, sus labios, por fin podía sentirlos, probarlos, llenarme de ellos.

El beso fue corto, pero lleno de tanto, aun sentía como mi estómago se sentía en una montaña rusa, mi rostro estaba muy caliente, mis manos temblaban mientras me aferraba a su espalda.

-No te quiero… Te amo-

Y si antes ya estaba con el cuerpo revuelto, ahora me sentía dentro de un tornado de emociones, me sonrió de esa manera que adoraba, mordí mis labios y cerré los ojos con fuerza mientras escondía mi cara entre su pecho. Él acaricio mi espalda y coloco su quijada sobre mi cabeza mientras una pequeña risa salía de sus labios.

-¿D-de que te ríes?-

-De lo tierno y hermoso que eres-

Bueno… supongo que la corazonada de Alan estaba en lo correcto, mire hacia un lado encontrándome con el espejo que antes había golpeado Isaac. Veía nuestro reflejo, y para mi suerte Isaac hacia lo mismo, sonrió al espejo de manera dulce, yo correspondí su gesto y me pegue más a su cuerpo. Aguante una risa, seguro la señora y su perro seguían esperando el ascensor, pero yo quería que este momento durara un poco más… Además ese perro nunca me agrado.

 

Notas finales:

OHHHHH!!!! ~~~ ¿Que les parecio? *-*! Por fin estos chicos estan juntos! mucho se torturaron a ellos mismos, era hora de que pudieran declarar su amor... Claro que no lo tendran muy facil ¿No? Aun queda la mamá de Isaac... ¿Como haran? ¿Como se lo diran? Por ahora es mejor dejarles tranquilos dentro de ese ascensor a que todas sus emociones se calmen un poco xD!

Bueno... la verdad este cap es como una ofrenda para que no me maten... una ofrenda de paz en donde hay mucho amor entre David e Isaac... espero la acepten (?) x3

Nos vemos en otra actu, y espero... de verdad espero poder actualizar pronto u.u!

Gracias Kaiku_kun por escribirme, ojala la ofrenda sea de tu agrado (?) xD

Bye bye~~ =w=/


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).