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Que pasaria si ... por Kaede_Sakuragi

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Notas del capitulo: personajes del rpg " El Talisman", de KamiKaze Rol ...comunidad de msngroups

¿Qué pasaría si…? ... un humano se junta con un medio ángel?

by Kaede Sakuragi y Vichy Kynthos

Hacia cuanto que estaban en aquella cuidad??? No lo recordaba, habían peleado tanto que las energías estaban muy bajas, el ataque de los lobos demonios en aquel callejón, su encuentro con aquel muchacho de sonrisa dulces y tranquila. Farel sonrió, aquel niño tonto era escandaloso y despistado, cuantas veces se había perdido solo buscando su casa??? Su sentido de orientación era pésimo, y sin decir de su memoria.

Cómo llegaron hasta allí??? Su hermana y él??? Todo por el talismán, la Lagrima del ángel ... Una piedra preciosa con el suficiente poder de destruir dimensiones y el propio mundo, arma de doble filo, debían encontrarlo antes que los demonios u otras personas lo hicieran. Eran descendientes de los sacerdotes originales de aquella piedra y como deber debían protegerla.

Suspiro desganado, debía ver como salir de aquella burbuja donde estaba encerrado...

Miro las vendas en su cuerpo, una mueca de disgusto se formo en su rostro, había sido débil, había caído en los brazos de aquel demonio con cara de ángel, arrastrándolo hasta aquellas ruinas donde una pira de sacrificio se levantaba, afortunadamente Gabriel había aparecido, pero no le gusto lo que vio ... había cambiado por completo, ya no poseía la inocencia que lo había cautivado, era mas serio y algo mas poderoso, por eso había logrado atacar a Kiara, y llevárselo hasta un refugio. Pero cuando quizo salir a buscar a su hermana, el muchacho solo se convirtió en agua y lo encerró en una burbuja de aire, con el suficiente poder para que él, un guerrero de los antiguos no pudiera romperla.

- “En seguida vengo .. Mi querido Hámster” ... – había dicho al verlo allí, en aquella esfera, para luego besar la superficie, y con una sonrisa desaparecer.

Farel solo se sentó preocupado dentro de la burbuja, aquella presencia divina todavía estaba presente y eso le fastidiaba. Bufo cansado.

-¿Cuánto mas vas a esperar? Sal de una vez por todas-ordeno.

Raphael salió de su escondite con una gran sonrisa, había visto todo y aquella risita picarona seguramente tramaba algo ...

.... En la escuela ...

....el ataque que Arlekin le había mandado a Guardiana había sido excelente, pero había una falla… su contrincante era Guardiana. Esta simplemente extendió el brazo y cada uno de sus ataques le fue de vuelto, dándole muerte.

- Pobre infeliz, no pudo con su propia fuerza.

Miro a la distancia, aquella esencia mestiza le era familiar… debía acabar con él.

Gabriel noto su fría mirada y saludo con la mano mientras su cuerpo cambiaba a liquido para trasportarse de manera rápida hacia la Guardiana ...

.... Farel miro con desprecio al Arcángel y bufo cuando este se le acerco.

-Es cruel el destino… ¿verdad?

-Si viniste a dar sermones estúpidos será mejor que te largues, no deseo escucharte.

-Realmente eres un gruñón… yo que vengo a ayudarte-con voz triste.

Farel lo miro desconfiado, enseguida el arcángel extendió si brazo haciendo aparecer su báculo y con el golpeo suavemente 3 veces el suelo, el polvo empezó a cubrir la burbuja y Farel se asusto un poco.

-¿Qué crees que estas haciendo?

-Espera y veras… hombre impaciente.

*Plof* se escucho y la burbuja se reventó. Farel estaba atónito y miro al arcángel esperando una respuesta.

-Jeje… yo soy mayor que Gabriel y más poderoso.

-Mi hermana… debo rescatar a Gabriel-salió disparado del lugar, tenia la esperanza de poder llegar a tiempo.

-Realmente es un mal agradecido-bufo Raphael frunciendo el ceño. Miro de nuevo por el lugar había salido-. Yo ya hice mi parte, ahora les toca a ustedes ...

.... La guardiana miro atentamente a Gabriel ...

-Ser imperfecto, te condeno a muerte. Yo que soy juez y verdugo te eliminare.

-Tal y como lo pensé, tú eres la hermana de mi hámster-sonrió contento.

Guardiana hizo caso omiso al comentario de Gabriel y lo tomo fuertemente del cuello y con la otra mano estaba a punto de atravesarle el estomago, pero Gabriel se trasformo el agua cayendo al suelo y de inmediato volviendo a su forma original.

-Si te llevo así mi mascota tal vez no le caiga bien, él espera ver a su hermana… tengo que ver como hago para volverte a tu forma humana.

La Guardiana sacudió su mano para sacar un poco lo mojado, con la otra hizo que la tierra se abriese haciendo que el semi-arcángel cayera dentro y cerrándose rápidamente

-Un ser inferior como tú no debía vivir-se dio vuelta para seguir con sus cosas.

De repente algo hizo erupción, saliendo un enorme chorro de agua hirviendo, en su cúspide Gabriel la miraba.

-Te comento que acabas de romper los caños maestros…-no pudo terminar su comentario ya que Guardiana volvió al ataque.

Solo dio un soplo que hizo que Gabriel cayera al suelo, volvió a soplar pero aquel aliento se trasformo en llamas rodeándolo. Guardiana se elevo.

-Invoco a las sombras de los muertos, pájaros hambrientos de carne humana; venid a mi, complaced a su ama… ¡matad!

Pero parece que hoy no era el día perfecto para la Guardiana, otra vez su presa se escaria.

Las flamas que rodeaban a Gabriel funcionaron un escudo, protegiéndolo del ataque demoníaco, dentro del campo de fuego apareció el arcángel Miguel con Amelia muerta en brazos. Esta escena hizo que Gabriel se espantara y se molestara al mismo tiempo.

-¿Quién eres farsante?-tomo el rostro de Gabriel con extrema violencia y lo obligo a besarle, este forcejeo para intentar zafarse-.Tu no eres el verdadero Gabriel, no debes de cumplir con sus deberes.

Dicho esto el campo se consumió por completo desapareciendo con todos los que estaban dentro de el.

-Estúpidos seres celestiales, los castigare sin piedad.

Farel corría lo más rápido que podía, pero sabia que era muy probable que no llegara a tiempo, Gabriel lo había dejado a las afueras y la escuela estaba en el centro, intento apurar mas su paso.

En el horizonte una figura se hacia visible, lo estaba esperando a él, apuntándole con un arco sin flecha.

-Otro chistoso mas-apuro mas su andar.

Uriel disparo y una corriente de aire que viajaba en contra de Farel que lo dejo tumbado en el suelo. Cuando abrió sus ojos se encontró con el rostro de Uriel en frente de él.

-Tu bienes con migo.

Lo tomo del brazo y ambos desaparecieron.

En un lugar muy lejano Gabriel abría sus ojos y vio un cielo verde… ¿verde?...

¡¿Verde?! Se levanto sobresaltado, pero aparte del cielo verde algo no estaba bien… el suelo era acolchonadito, miro abajo esperando ver algo diferente a lo que su tacto sentía.

-Nop… es acolchonadito…-pensó unos minutos, buscando alguna respuesta coherente-…- y los minutos se trasformaron en horas-. Definitivamente estoy soñando.

Se volvió a tira el aquel suelo extraño y cerro sus ojitos, pero algo lo golpeo sacándolo de su recién comenzado sueño.

-¿Quién osa despertar al gran Gabriel de su sueño?

-Eres patético-Miguel estaba mirándolo con enojo y con una almohada en la mano.

-Eres tú… ¿A dónde me trajiste?

-No eres Gabriel, por lo tanto no debes de tener sus poderes ni cumplir con sus obligaciones. Te quitare el resto de Gabriel que tienes en tu cuerpo y volverás a ser lo que eras… un humano.

-A… ¿si? ¿Y como piensas hacerlo?-se mostró desafiante, pero su rostro cambio al ver que el arcángel se desvestía, estaba asombrado y de inmediato dio unos paso para atrás-. ¡Dios tiene una manera pervertida de sacar los poderes!-Miguel se termino de desvestir por completo y el rostro del muchacho volvió a cambiar, esta vez mostró decepción-. Estem… a vos te falta algo-apuntando hacia abajo.

-¿Qué?-el arcángel miro hacia donde apuntaba y se sonrojo-. ¡Idiota! Los ángeles no tenemos sexo-lanzándole la almohada en la cara.

Gabriel se saco la almohada de la cara y dejo ver su rostro, sus ojos vidriosos y decepcionados por la información.

-Ya quita esa cara…¡acá el pervertido sos vos!

-Miguel por favor vístete-Uriel había aparecido cargando a un Farel inconsciente como si fuera una bolsa de papas-. Traje al muchacho, déjalo que primero hable con él y después quítale los poderes… recuerda que si primero haces eso terminara perdiendo la memoria definitivamente.

Miguel bufo, pero su compañero tenía razón. Volvió a vestirse rápidamente.

Uriel dejo caer a Farel en aquel suelo acolchonado.

-Cuando su conciencia vuelva termina de hablar con él… después de eso te trasformaremos en humano.

-Esto seria como la ultima cena para el condenado, ¿verdad?

-Algo así…

-Antes de que se vallan quiero saber donde esta mi hermana.

-Tú no tienes hermana-dijo Miguel molesto-. Esa mujer es Gabriel, el verdadero. Estamos reparando todos errores que cometimos. Gabriel te metió en esto, nosotros te estamos sacando.

-¡¿Y quien les pidió a ustedes que me sacaran?!-grito molesto-. ¿Acaso mi opinión no vale? A mi nadie me pregunto si quería salir de esto o no.

-Lo que pienses a nosotros no nos importa, vos sos un humano.

-¡ARCANGELES DE MIERDA! ¡VAYANSE AL INFIERNO!

El insulto que Gabriel les dio no había llegado a sus oídos ya que desaparecieron antes.

Y ahí estaba él al lado de un desmayado Farel.

-Tu eres mi ultima cena… es el mejor plato que me pudieron haber traído-se acerco lo suficiente como para poder sentir su aroma-. Oh! Tú que tienes el nombre de un ángel. Déjame probar de tu poder.

Estaba a punto de besarlo, pero una mano que cubrió su rostro y lo lanzo hacia atrás lo impidió.

-Pervertido, aunque me hallas salvado una vez no significa que tenga que pagarte con cosas raras.

-Pero tú eres mi última cena-dijo con ojos llorosos.

-¡¿Quién es tu ultima cena?!-le lanzo la almohada en la cara dejándolo tumbado, Farel se sentó sobre el y lo agarro por el cuello de su camisa-. ¡Grandísimo estúpido, agradece que estas vivo! ¿Qué pretendías haciéndote el héroe queriendo pelear con mi hermana?

-Yo solo cumplo con lo que debía. Tengo que ayudarlos.

-Deja de estar jugando, esto no es un chiste.

Gabriel lo abrazo con una de sus manos, mientras que con la otra se había el cierre del corset, Farel al escuchar ese sonido se tiro para atrás.

-¿Qué pensas hacer pervertido?

-¿Pues acaso no es obvio?

-Pervertido, no estoy jugando-dijo molesto.

-Yo tampoco… ¿sabes lo que aprieta esta cosa? Mi hermana tenía un talle muy pequeño.

Farel se dio vuelta agarrándose el pecho intentando que no viera su cara de susto, mientras que pensaba “este esta jugando con migo”. Aprovechando la postura de un desprevenido Farel, Gabriel salto en sima de él.

-Te recuerdo que sos mi ultima sena, querido hámster-comenzó a besar su cuello y a levantar su remera para acariciar su pecho. De la boca de Farel salió un gemido que tapo con sus manos, no debía dejarse hacer eso; empujo a Gabriel y se incorporo.

-Pervertido, deja de estar jugando de esa manera con migo…-sus ojos se volvieron vidriosos-, yo me preocupo por vos y así me pagas.

Gabriel no podía creer lo que veía… ese no era el hombre rudo, mal agradecido y gruñón, no pudo aguantar mas su ganas y se tiro en sima de él.


-YA PARALE A ESTA BROMA... - Farel grito mas fuerte, pero esta ves Gabriel había logrado sostener sus manos por en sima de su cabeza.

-Mi hermosa mascota, quien se puede resistir a esos ojos que tienes-lamió con la punta de la lengua los labios de Farel-. No puedo esperar a probarte...-volvió a besar su cuello nuevamente, para después mordisquear sus orejas.

El pelinegro se retorcía debajo de aquel ser celestial, ¿¿¿pero que se creía??? De puro no tenia nada... ni la lengua que recorría su rostro y dejaba una sensación dolorosamente placentera.



-¡¡¡Detente!!! - dijo molesto, pero su propio cuerpo traicionaba y temblaba, pero no sabia a que... si el miedo de ser poseído por el muchacho loco, o por que... se sentía extraño y placentero


Gabriel pudo ver que su plato no se resistiría mas, así que decidió dejar de tomar sus brazos y las ocupo en acariciar el torso del muchacho mientras que su lengua intentaba seducir a que la boca de Farel se abriera para poder recorrer su interior.

Sintió algo húmedo, quería resistirse, pero la corriente que corría su cuerpo era mas fuerte, cerro sus ojos fuertemente, y quiso pensar en otra cosa, pero las manos que recorrían su cuerpo por sobre las ropas lo estaban seduciendo, lo estaban llevando hasta un punto inexplotable de la sexualidad. Se sintió condenado por tales pensamientos, se quedo quieto traicionando su propia garganta haciéndolo gemir.

Aquel gemido fue la puerta que Gabriel necesitaba, metió su lengua y saboreo su interior, jugueteo con la lengua de un Farel ahora sumiso.

Con sus manos comenzó a desabrocharse la caminas y los pantalones de Farel, mientras que pensaba "que sabroso que es... su boca es muy dulce".

-Quiero que seas mío... no quiero compartirte con nadie.

Le quito la remera y beso su pecho con ternura.

- ahhh... - gimió despacito, al sentir que los dientes del otro mordisqueaba sus tetillas ahora erectas por la sensación de excitación que provocaba aquella boca. No se dio cuenta cuando sus manos buscaron la cabeza de Gabriel para empezarla a acariciar, abrió un poco sus piernas para que su " ahora amante" se acomodara entre ellas y tuviera un mejor acceso a su cuerpo.

Gabriel comenzó a bajar con tiernos besos hasta que llego a ese lugar tan esperado, de un solo tirón le bajo los pantalones y sus boxers y se alegro al ver su miembro erecto. Lo tomo con su mano y empezó a acariciarlo, lentamente comenzó a saborearlo... era dulce, todo el cuerpo de Farel era dulce. El escuchar los gemidos intensos de su pareja lo volvían loco y lo hacían ir un poco más rápido.

- ahhh... no... - casi grito, sintiendo qué su cuerpo iba a convulsionar en cualquier momento, una experiencia nueva en todo sentido.

Gabriel paro y se puso en cima de Farel nuevamente para besarlo mientras que se bajaba los pantalones. Se poso sobre el... miembro contra miembro y comenzó a mover sus caderas. Era hermosa la sensación que se tenía y tan solo pensar que era solo el comienzo. Beso cada parte de su cuerpo que tenia a su alcance, lo acaricio, lo mordisqueo. Los gemidos de ambos se intensificaban en cada momento.

-Que me haces... - murmuro entre gemidos, sosteniendo las caderas del otro, ya que la fricción que hacia era torturante. Sintió los labios de Gabriel y no pudo evitar corresponderle, acaso ¿¿¿esto era hacer el amor??? ... Su mente dio un pequeño clik, recordando donde estaba y porque - ... No ... no ... déjame ... - dijo despacito, tratando de regular sus impulsos fallando rotundamente -… basta...

-Eres delicioso, eres completamente dulce-lamió su cuello-. Te amo tanto, serás mío y no te compartiré con nadie-busco su boca desesperadamente y lo beso sin piedad-. Esta será la primera y ultima vez que nos veamos-dijo entre gemidos-, después de esto volveré a ser un humano con la memoria borrada... déjame tenerte.

Gabriel estaba molesto y caliente... en todo sentido, extendió uno de sus brazos y lanzo un chorro de agua helada, dejándolo en el suelo.

-Recuerda que todavía tengo mis poderes-de nuevo volvió a sentarse sobre el y amarrándole las manos-. Estas temblando de frío... déjame calentarte... mojado te ves muy apetitoso.

Lo beso con tremenda pasión, no lo dejaría escapar y mas sabiendo que esta seria la única chance que tendría para estar así con él.

Farel se resistió, no quería perderse nuevamente en aquellas nuevas sensaciones, pero tenia razón estaba temblando, pero no de frío... si no de miedo... sin siquiera evitarlo, dos lagrimas traviesas cayeron pos sus mejillas. ¿¿¿Acaso no lo entendía Gabriel??? Todo eso era nuevo... todo eso... dolía y no sabia el porque, nunca había sido amado, y nunca amo a alguien para decir por lo menos... que sabia que era todo lo que le sucedía en ese momento

Gabriel miro a Farel en un momento y vio lagrimas caer... en ese momento se detuvo y se sentó al lado de él.

-Si lloras no tiene sentido, no quiero obligarte ha hacer algo que te duela tanto como para hacerte llorar-no podía verlo, ahora se sentía avergonzado.

- No entiendo... - murmuro despacio, aun en la misma posición en la cual había quedado - ... porque duele... porque se siente raro... - dijo quedito, avergonzado, cubriendo sus ojos con una mano, mientras que con la otra apenas tocaba su hombría ya despierta - , no entiendo que es lo que mi cuerpo quiere decirme con... ahhh....- gimió sin querer al tocarse dándole una descarga sin siquiera preverlo.

-El tiempo se ha acabado, espero que hallan arreglado sus asuntos-Miguel apareció de la nada-. Es momento de que vuelvas a ser un humano-miro la escena y pensó "¿que estuvo haciendo este pervertido?”

Gabriel miro a Farel.

-Por favor, jamás olvides que te amo-se levanto y camino hasta Miguel.

Uriel y Raphael aparecieron detrás de Farel.

-Es hora de que vuelvas a la tierra, tienes que seguir con tu destino.

Uriel tomo a Farel del brazo.

Se dejo guiar cual muñeco, con la vista nublada, y con la sensación extraña en su cuerpo. ¿¿¿Acaso era todo??? ... se maldijo de ser tan débil, de creer que es fuerte y poder proteger lo que mas quiere... ¿¿¿Acaso ese era su forma patética de existencia??? Miro a Uriel, con semblante serio, y solo pudo ver en sus ojos una sonrisa, pero que no le pertenecía. Giro su rostro para ver mas allá que sucedía, y pudo percatarse del perfil de Gabriel, que iba junto al otro arcángel, sonriendo fingidamente. ¿¿¿ Acaso las palabras dichas eran reales??? ¿¿¿Quién era para juzgar y saber que eran verdad??? Recordó algo quizás olvidado hacia mucho, pero movió sus dedos dándole forma de símbolos formando un pequeño círculo. Se soltó del brazo de Uriel, y corrió en dirección contraria, donde aquel lugar se tornaba oscuro, solo atino a lanzar aquel objeto que invoco, para que aquel arcángel que le gritaba desesperado que no se fuera por aquel camino peligroso, pero no hizo caso... él debía huir.

Miguel guió a Gabriel hasta un lugar distinto, no había arriba o abajo, no había luz ni oscuridad; un lugar neutral. Miguel se quito sus vestimentas y se acerco al muchacho.

-¿No pensas hacer alguna broma de mal gusto?

-No...-cerro los ojos.

Miguel lo abrazo.

-Por el poder que se me ha concedido, ordeno disolver esta forma humanoide y mostrar la verdadera esencia de un arcángel.

El cuerpo de Miguel desapareció por completo, ahora un pesado y denso aire habitaba, miles de esferas luminosas de colores recorrieron el cuerpo de Gabriel, este se sentía en paz, pero no podía olvidar la ultima imagen que tubo de Farel... llorando sin entender nada, deseo que aquel final fuese otro. Las esferas dejaron de girar abruptamente y el cuerpo de Miguel volvió a materializarse.

-¿Quién se atreve a entrar?

Farel corría tan rápido que no se había percatado en donde estaba metido, sus defensas estaban bajas, su cuerpo reaccionaba ante cualquier cambio, y eso le molestaba, no quería ser tan débil.

-¿Que haces acá? Vos tenes que volver a la tierra.

Gabriel lo vio asombrado no pudo evitar sonreír y derramar lagrimas de felicidad al verlo. Vino... vino a rescatarlo, su príncipe vino a rescatarlo, no podía ser más feliz.

Corrió hasta el y lo abrazo con fuerza, pero Farel estaba débil y cayó de inmediato al piso.

-Parece que ustedes no terminaron de hablar...-dijo Miguel sin entender muy bien lo que había pasado entre ellos- les daré unos minutos mas-movió su brazo y nuevamente se encontraron en ese lugar donde el cielo es verde y el piso acolchonado-. Debo dejar de ser tan bueno...-tomo sus ropas nuevamente y desapareció.

-Te amo tanto Farel...

Escucho aquel murmullo, no muy lejano, sentía un aliento tibio en su rostro, apenas abrió sus ojos... el estaba escapando de esa sensación, empezó a llorar sin querer, abrazándose a Gabriel, indefenso, como un niño pequeño

- Soy débil... soy inútil... - murmuro despacio, ante el abrazo y la vos dulce que tenia el otro para tranquilizarlo - … Duele... duele mucho... - llevo su mano hasta su entrepierna y gimió lastimosamente.

-¿Por que dice eso? Eres la persona más fuerte que conozco, tu valor y tu inteligencia... no te tires abajo de esa manera. Te amo Farel, por ser como eres, fuerte, valiente, inteligente, dulce y hermoso.

- Duele... quema... no lo entiendo... - se dejo llevar por aquel aroma raro de Gabriel

-Eso te pasa por salir corriendo-rió al entender el porque de su dolor-. Déjame terminar con eso-recorrió su cuerpo con caricias y besos-. No tienes porque tener miedo, yo jamás haría algo que te hiciera dolor-bajo sus pantalones y los de Farel, lo miro con una sonrisa picara-. Jamás te haría doler ya que lo que yo quiero es tu placer-empezó a penetrarlo.

- ¡¡¡Duele...!!! - grito desesperado, acaso no le dijo que jamás iba a herirlo, aquello dolía demasiado, lo estaba desgarrando

-Solo aguanta un momento, todo el dolor que tienes se ira, no seas impaciente-termino de meter su miembro y se quedo parado solo un momento, lamió las lagrimas de su amante-. Esperare a que ya no sientas dolor y empezare a moverme-lo beso en los labios con ternura.

Aquellas palabras eran algo tranquilizadoras, pero sentía la presión en su trasero que no sabia si gritar y maldecirlo. Pero los besos, los toques cálidos, eran sensaciones que recorrían su cuerpo en forma eléctrica, placentera...

-Duele... - murmuro despacio, tratando de moverse, provocando que el dolor sea acompañado con una pequeña corriente eléctrica, erizando la piel, gimiendo sin entender porque.

Gabriel empezó lento y tranquilo, comenzando a subir la velocidad de sus embestidas cada vez que sentía un gemido de Farel, al mismo tiempo que lo acariciaba y besaba, pero el tampoco podía evitar el tremendo placer y no era capas de esconder sus gemidos.

Arqueo su espalda cuando sintió que algo tocaba en su interior, no entendía nada, pero en ese momento se sentía bien, extraños sonidos salían de su boca, moviéndose también él, para lograr tocar aquel punto que lo hiciera gemir nuevamente. Se abrazo al cuerpo de Gabriel, sintiendo la piel cálida y el corazón agitado, subió su rostro, con los ojos cerrados y lo acerco al otro, para sin querer besar sus labios tímidamente

Gabriel aumento mas la velocidad, la excitación que tenía se lo pedía... se acercaba el final para él, pero no quería terminar sin saber que su amante no terminaba antes o al mismo tiempo.

-Farel me queda poco tiempo, voy a terminar-dijo sin dejar de gemir.

Sintió como tomaba su hombría y empezaba a friccionarla mas rápido, las embestidas eran más placenteras logrando aferrarse aun más al cuerpo del otro. Gimió mas fuerte, escondió su rostro en aquel cuello mordiéndolo espacio, dejando marca que estaba disfrutando por primera ves aquel encuentro.

- Gabriel... - murmuro extasiado.

-Farel...-en ese momento sintió su fin y el fin de su amor desparramarse por el pecho de ambos.

Se sentía tan bien, estaba totalmente agotado. Beso cada parte de su rostro y salió de sus adentros, pero aun así no podía separarse de él.

-Su tiempo se termino, espero que ya no quede nada mas entre uste...-Miguel quedo en estado de shock al ver la escena, giro sobre si mismo y camino-. Mejor vuelvo en otro momento...

-Tenemos unos minutos mas... quiero dormir a tu lado...

- Tengo sueño... - murmuro despacio, casi desvaneciéndose del agotamiento - ... debo despertar de este sueño... - dijo apenas mientras sentía que era abrazado, besado tiernamente - ... Gabriel... - suspiro despacio

Gabriel y Farel finalmente se durmieron abrazados esperando que ese momento jamás termine. Mientas que en lugar neutral Miguel aparecía con cara de "no podes".

-¿Que pasa?

-Los humanos tienen una forma muy extraña de "hablar".

Los otros 2 no entendían muy bien a que se refería, pero pensaron que era mejor esperar un poco más antes de terminar con su trabajo.

Una figura se escabullo entre aquel lugar celestial, sonriendo ante la escena que estaba viendo. Se acerco despacio, despejando los cabellos de ambos con sus largas uñas, dibujo símbolos en el aire, cerca de los rostros de ambos.

- No importa que se olviden, volverán a encontrarse y recordaran lo más importante de ustedes... - aquella figura de ropas negras desapareció lo más rápido posible, no debía darles tiempo a los arcángeles que estaba allí, y que había traspasado las barreras celestiales.


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