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BORRACHERA DORADA por Anonimus_Saint

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Notas del fanfic:

Hola, espero si les guste este fic.( ~0^)/

Un nuevo día se asomaba en la bella y pacifica Grecia, sí, el aire que se respiraba era confortable y agradable a esa hora del día.

Con los primeros  rayos de sol,  algunos caballeros dorados comenzaban a despertar….solo para darse cuenta de las consecuencias de la noche pasada.

-hay…mi cabeza…- el caballero del onceavo templo, lenta y pesadamente comenzaba a despertar. – Que fue lo que sucedió…- poso unamano en su frente intentando recordar algo, mas parecía imposible.

-¡¿dónde estoy?! – Se reincorporo de golpe al divisar que esa decoración no pertenecía a su recamara.

-acaso esta no es la…-entonces Camus percibió movimiento a su lado, lentamente giro su vista hacia su derecha.

-NO…PUEDE…SER… – sus ojos no podían creer lo que veía, eso tenía que ser una horrible pesadilla.

SIP ese día comenzaba a ponerse bueno.

….

-hayayay …mi cabeza…siento como todo me da vueltas. – Aioria poco a poco se despertaba. – pero que rayos…. donde estoy. – dijo mientras se  quitaba la “sabana” con la que había dormido.

-porque todo esta oscuro. – Aioria se puso en pie y camino en busca dela  salida, pero ni bien dio cuatro pasos tropezó con algo, o mejor dicho, con alguien.

-¡auch! – se escuchó,Aioria intentaba divisar algo pero era imposible; todo estaba completamente oscuro.

- ¿quien anda ahí? – preguntomás nadie respondió, Aioria trago grueso, si a él nunca le habíagustado la oscuridad.

-hable ahora,¡quien anda ahí!  -volvió a alzar la voz, esta vez con la respiración la agitada.

-si no me responde, juro que voy a…-

-¡ya cállate y deja de hacer ruido!- se escuchó la vos de la otra persona. – vas a hacer que me estalle la cabeza. –

-¿Shaka?- pregunto al reconocer la voz de su acompañante.

-sí, soy yo, pero te pido no hables tan fuerte. – Shakase reincorporo apenas.-¿Qué pasa, dónde estamos?- pregunto algo confundido.

-no lo sé…no recuerdo nada…-le dijo Aioria dejando caer su cabeza atrás.

-hay que asco siento, este lugar apesta, yo apesto, y ese horrible sabor en mi boca, -Shaka poso su mano en su boca.-qué horror siento nauseas. – Shakajamás antes había tenido sus sentidos másagudizados como en ese entonces.

-mejor busquemos la manera de salir de aquí, sí. – Aioria comenzó a tantear sintiendo muchas “sabanas”a su alrededor.

Shaka se dobló en dos mientras posaba una mano en la pared.-que desagradable sabor,  que horror…siento…siento que voy  a…voy a…. –

- Shaka espera, no vayas a….- Shaka no lo resistió más, saco todo lo que traía dentro.

-vomitar. – Aioriaresoplo con desagrado al escuchar a su compañero desahogando todo lo que traía dentro.

-hay de horrible sensación…siente que desfallezco. – Shaka se quejaba y refunfuñaba como nunca antes. Aioria solo se cruzó de brazos tratando de imaginarse en otro lugar más calmado y relajante.

¡Sostén mi cabello! – el grito de Shaka lo saco de su ensoñación.

-¿yo?- pregunto incrédulo.

-¡si, alzo! – ordeno colérico, Si, jamás antes Shaka había estado en tal estado.

AAioria no le quedómás que obedecer a regañadientes. Mientras maldecía a la persona que los había “encerrado” ahí.

 

….

-hay…me duele todo mi bello, escultural y masculino cuerpo…- se quejaba saga mientras poco a poco  comenzaba a abrir los ojos, mala idea, pues los rayos de luz solo incrementaron su malestar.

-que rayos. – tapo el sol con su mano, tratando de divisar algo a su alrededor.

Como pudo se puso en pie, para luego apoyarse en un pilar.- ¿Que se supone que ago. Aquí? – saga entonces noto que se encontraba en la entrada del templo de Aries. Había dormido toda la noche fuera, sin cobijo alguno,  y peor aún, en una mala posición, bajo unas gradas nada cómodas.

Pareciera como si alguien lo hubiera sacado de los doce templos, como si fuera un borrachín de cuarta.

-nada más me entero de quién es responsable de esto…y me las va a pagar….-saga furioso como nuca antes comenzó a subir los templos, en busca de su “agresor”.

…..

 

En un lugar muuuuuy apartado del santuario…

 

-señor…señor. – llamaba insistentemente el encargado de la tienda a un pececito por demás dormido.

-cinco minutitos más…- se acomodó nuevamente.

-señor por favor despierte, que no ve que ya amaneció y si mis jefes ven este desastre van a despedirme. – suplicaba el encargado, mas afrodita parecía no prestarle atención.

-por favor ya retírese. – el encargado comenzó a jalonear a afrodita.

-suelta, suelta, yo puedo solo. – afrodita se levantó haciendo caer muchos artefactos al suelo.

-don…donde rayos estoy…y que les paso a mis zapatos? – afrodita apenas y se recuperaba del malestar que sentía.

-no lo sé señor, solo quiero que se vaya ya sufriente tuve con usted ayer, mire nada mas como dejo el negocio, si el patrón se va a molestar mucho. –le decía el joven muy afligido. - Yo no sé cómo le va a hacer pero de que paga este destrozo, lo paga.-

-que atrevido muchachito. – afrodita lo miro altivo. – fíjate que ¡yo! soy un caballero dorado, así que si hay quejas bien puedes ir al santuario a presentármelas, sí. – afrodita poco a poco salía de ese establecimiento dejando caer más cosas al suelo, apropósito.

……

 

-hay…creo que dormí chueco- hablo Aioros levantándose apenas, haciendo girar su cuello. Antes de abrir los ojos solo para darse cuenta de que había dormido encima de uno de sus compañeros.

-¿mu? – Aioros se puso en pie mientras agitaba a su compañero, esperando que no se haya asfixiado por depositar todo su peso sobre él.-mu despierta.-

-hay…que dolor….siento como si me hubieran aplastado. – Aioros solo silbaba desentendido, mirando en otra dirección.

-¿pero te siente bien? –

Mu negó con la cabeza.-no…me duele la cabeza y todo me parece tan extraño…dime el piso se mueve o es mi imaginación... – mu se tambaleaba, si apenas podía ponerse en pie.

-yo creo que la fiesta de ayer estuvo muuuuy descontrolada. –

-¿a qué te refieres? –pregunto mu,  Aioros le señalo  las condiciones en las que se encontraban sus demás compañeros.

-solo míralos…- mu, al igual que Aioros miraban a los demás incrédulo…Aldebarándormíadebajo de la mesa además de tener una lámpara en la cabeza, Shuradormía boca abajo  todo desparramado  en un sillón pequeño, Kanon  parecía dormir plácidamente en el suelo usando de cabecera una mesita, Death dormía en la mesa (luego de haber tirado todos los cubiertos  al suelo) aun sosteniendo un vaso, Doko al igual que Kanon dormía en el suelo, tanto mu como Aioros se quedaron viendo a Doko asombrados y confundidos. No solo por la incómoda posición en la que dormía si no en las condiciones en la que dormía.

-deja eso de lado! mira el salón!- mu poso sus manos en su cabellera. – Si Athena y Shion ven esto van a matarnos…- Aioros solo miraba todo anonadado.

-wau…si, tienes razón…esto está muy mal…pero podemos arreglarlo antes de que lleguen de sus vacación, no? – Aioros silbaba despreocupado mientras miraba todo el desastre que habían provocado.

….

Como por arte de magia, una presencia se hizo presente en el santuario.

-listo mi diosa, ya llegamos. – hablo Shion algo agobiado por el largo viaje que realizo con su diosa aparte de los cinco de bronce más kiki.

-al fiiiin. – Athena se destensaba notoriamente agotada. – qué horror, estas fueron las peores vacaciones de la historia, recuérdame no llevar juntos a los de bronce de nuevo. –le dijo a Shion.

-pero Saori, digo Athena, nosotros no hicimos nada malo. – hablo Seiya en su defensa.

-mejor no hables Seiya, que tú fuiste el que se metió en más problemas que los demás. – Athena lo miro algo molesta, Seiya solo se encogió de hombros.

-ahora solo quiero entrar a mi recamara y descansar, estoy muy cansada. – Athena abrió la puerta del salón engrande solo para encontrarse  con la peor de las escenas. Su salón estaba completa y totalmente destrozado.

-pero…pero que….- Athena ingreso a paso lento mirando detenidamente su salón, además de observar a sus caballeros tirados y dormidos.

-¡Athena!- tanto Aioros como mu se sobre saltaron al ver a su diosa parada justo en frente de ellos con cara desencajada.

Athena por poco y se desmaya pero en cuanto recupero el auto control, lleno sus pulmones de todo el oxígeno posible.-¡PERO QUE RAYOS PASO AQUiiiiI! – el grito de Athena hiso que los caballero que aun dormían despertaran de golpe.

-¡Athena!- estos también se sorprendieron al ver a su diosa parada con los manos en su cintura y con una cara de pocos amigos.

-¡antes de que los vuelva a mandar al Hades, me van a decir que rayos fue lo que paso aquí!

Todos se miraron entre sí, con caras de completo pavor e incertidumbre, como rayos contarían algo de lo que no estaban seguros, si ninguno de ellos recordaba absolutamente nada.

-¡respondan!-grito Athena nuevamente…Shion solo veía todo incrédulo, eso jamás antes había sucedido.

-vaya ejemplo nos quieren dar Caballeros dorados,  miren no más, cayéndose de borrachos. Qué vergüenza. – dijo ikki mirándolo con reprobación mientras negaba con la cabeza.

-oye muchachito más respeto para…  para nosotros, que somos! tus!   Su…superiores, he. – Le hablo Kanon  algo molesto sin dejar de escupirle al rostro y balancearse de una lado a otro.- además nadie se está cayendo de borracho. – tras decir esto Kanon se cayó de espaldas, los demás solo negaban con la cabeza más que avergonzados.

-¡como que borrachos!- Athena se puso más molesta y furiosa, rápidamente se acercó a Aioros y lo olfateo, para luego mirarlo con reprobatoriamente.

-pero esto es inconcebible, mis caballeros de más alto nivel en estas deplorables condiciones. Qué vergüenza, que deshonor, que humillación, que…

-¡ratas! – el grito emitido por Shura llamo la atención de todos. – estos son unos ladrones, ya me volaron todo mi dinero. – se puso en pies muy molesto. – donde esta, hablen quien fue el desgraciado que me lo robo. – Shura miro a sus compañeros, furioso, los demás solo lo miraron confundidos.

-¿de qué dinero hablas? – le pregunto  mu.

- pues del que traía en este bolsillo. – Shura saco el bolsillo de su pantalón derecho, todo vacío. – se llevaron mi dinero, tenía 5000 pesos, así que exijo que me lo devuelvan ahora mismo. Seguro fuiste tú! – Shura acusaba a todos los ahí presentes incluso a Athena esta última solo enfurecía mas.

-si no aparece mi dinero a la cuenta de tres les juro que voy a…-

-¡ya! Silencio. – Athena esta vez no se controló. – después hablas de tu dinero, ahora tengo un terrible dolor de cabeza, solo quiero ir a mi recamara y tratar de descansar…- Athena lentamente caminaba hacia la puerta de su recamara con los demás caballeros a sus espaldas.

-pero Athena… nosotros no tenemos la culpa de…-

-cállate Seiya! Tú tampoco me tienes contenta, todos me han decepcionado, yo no sé cómo se me ocurrió resucitarlos si todos son unos inútiles. –

-pero…-

-ya no quiero escuchar nada más, solo quiero entra a mi recamara.- abrió la puerta de su recamara y…- dormir una siesta en…-Athena abrió los ojos como platos al ver a dos de sus caballeros en su recamara, uno ya vistiéndose y otra aun roncando despreocupado.

Los demás caballeros sé que se asomaron por la puerta. No pudieron evitar el mirarlos anonadados además de que sus quijadas ya estaban en el suelo, sip, nadie se esperaba tan escena.

-¡Athena! - Camus se sobre salto de sobre manera al verla junto con sus demás camaradas. – hee esto no es lo que parece. – Camus jamás antes se había sentido tan apenado ni avergonzado.

-maestro…usted… y…es que esto… no lo puedo  creer. – hyoga se cayó de espaldas, jamás de los jamases se hubiese esperado encontrar a su maestro en tal condición comprometedora.

-vaya Camus, sí que tu tuviste una noche de-sen-fre-nada jajaja, creo que el que se llevó la mejor parte es el alacrán, no? – Kanon se acercó a milo mientras los observaban con  una sonrisa burlona.

-¡cállate! – Camus no sabíadónde esconderse, si quería congelar ese momento y salir corriendo lo másLejos posible.

-pero que vergüenza. – Doko se cruzó de brazos, sin dejar de negar con la cabeza. – Jamás antes había visto tal falta de consideración, pudor ni decencia, y todavía frente a  Athena, no, no, esta  generación es la peor de todas las generaciones…-

-maestro, si se da cuenta de que esta en calzoncillos. – le susurro shyru. Doko entonces se dio cuenta de las fachas que traía.

-ya me robaron la ropa…- dijo posando sus manos en su cintura mirando a los demás causadoramente. Los demás solo negaban con la cabeza incrédulo.

-¡shyru dame tu ropa ahora!!- grito autoritario. ––  shyru solo lo miro confundido.

-pero maestro yo…-

-¡dije ahora!- ordeno tajante.

-sí, maestro. – shyru lentamente le entregaba su ropa a su maestro ante la mirada atónita y perpleja de los demás.

-esto es en verdad inconcebible. – Athena estaba por tener un colapsos hasta que un ruido atrajo su atención.

-Habrán…habrán la puerta, por favor. – Athena rápidamente fue hacia el pasillo y abrió la puerta (aquella que permanecía trancada con barios muebles)

De ahí salió aioria a gatas, echando un hondo y sonoro resoplido.

-que horrible, casi…casi muero asfixiado ahí dentro. – aioria apenas se reponía, aioros al verlo corrió rápidamente hacia él para socorrerlo.

-pero que hacías ahí dentro? – athena estaba por gritarle a Aiora hasta que se vio salir a shaka igual a gatas.

Todos los demás solo miraban de un lado a otro, primero a aioria y luego a shaka. Ideas locas corrieron por sus cabezas.

-no lo puedo creer Aioria…acaso tu y shaka…- aioros ni siquiera podía terminar de formular su pregunta.

- no es nada de lo que creen, - se apresuro a decir aioria.

- sí, algún desgraciado nos encerró ahí dentro. ‘-hablo shaka apenas reponiéndose de su malestar. – solo me entero de quien fue y sufrirá mi ira. –

-¡haaaaaaa! – el sonoro  y estrepitoso grito de athena alerto a todos los presentes.

-como…cómo es posible…- se arrodillo mientras sostenía algo entre sus manos. – toda…toda mi ropa esta… mis hermosos y carísimos vestidos…todo esta arruinadooo….- athena entonces se puso a llorar como niña chiquita,

-no te preocupes saory, digo, no es para tanto seguro estas manchas se quitan son una lavadita. – seiya fue el único que se acerco a para “consolarla”.

Tanto aioria como shaka se quedaron anonadados. Todas esas mantas viejas que habían usado para limpiarse y taparse  no eran otra más que la ropa de su diosa, eso no les podía pasar a ellos.

Athena  ya resignada, y después de llorar como magdalena, se puso en pie.  Serena, se desempolvo el vestido, miro fijamente a cada uno de sus caballeros.

 -¡rodara la cabeza del culpable!-

 Todos tragaron grueso al sentir el cosmos de athena agrandarse cada vez mas  mientras se acercaba a ellos.

Saga ya se acercaba y afrodita también, de seguro si supieran lo que les espera de seguro  se quedarían tranquilitos donde están.  Milo aun con los gritos y la cosmos energía  de su diosa amenazante, no despertaba.

sip, lo que les esperaba no era nada bueno….¡Pero esperen! aun faltaba aclarar que había pasado, porque nadie recordaba nada de lo ocurrido la anterior noche…

-jejeeje- una sombra, junto con otras, miraban todo lo sucedido muy entretenidos.

-esta vez van a pagar caballero dorados, esta vez ustedes serán los humillados jajajaja. – las risas acoro se dejaron escuchar estrepitosamente.

 

…continuara…

Notas finales:

GRACIAS POR LEER


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