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Dulce o truco por IonAlue

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Notas del fanfic:

Espero que les guste mi pequeña historia, si les gusta mas adelante hare la precuela de este :3

 

Aqui les dejo mi cuenta de wattpad ahi subo especiales y otro tipo de cosillas :3

 

https://www.wattpad.com/user/IonAlueLevantCroix

Notas del capitulo:

 

      

     Holi les traigo una especial de jaladoween espero que les guste y como ya dije si les agrada hare la pecuela :)

     

                  

 

Dulce o truco

Los rayos del sol se colaron a través de mi ventana haciendo que me revolviera en las sabanas de mi cama buscando un lugar donde estos no me pudieran dar, puse una almohada sobre mi cara para evitar que aquella luz de la mañana me impidiera continuar con mi sueño, lamentablemente ya no logre conciliar el sueño de nuevo. Perezosamente me levante de mi cama dando un gran bostezo. Voltee a mi cama y pude ver como Cía dormía plácidamente, sonreí.

Cía es una chica fantasma que un día me encontré mientras caminaba por el bosque buscando algunos ingredientes para mis pociones pues soy una bruja, para mí no es realmente sorprendente encontrarme con creaturas sobrenaturales y fantasmas pero de alguna manera con Cía fue diferente, ella era distinta, ella en vida había sido mi mejor amiga y amor platónico, ella es bastante rara comparándola con otros fantasmas. La mayoría de los fantasmas son almas errantes que dejaron algo inconcluso por lo que no pueden trascender al siguiente plano ó bien almas que fueron condenadas y cargan cadenas por los crímenes que cometieron durante su vida, Cía es del primer tipo tiene asuntos inconclusos que no ha querido contarme básicamente porque no esta interesada en cumplirlos para reencarnar, ella esta mas interesada en juguetear por ahí y venir a mi pequeña casita de madera que se encuentra al interior del bosque; en inicio solo vivía en esa casa a pesar de ser el típico cliché de las brujas porque el consejo brujil lo ordenaba pero después de un tiempo me di cuenta lo cómodo que era vivir en ese lugar, tienes todo lo que necesitas privacidad y un bosque lleno de ingredientes para pócimas.      

Cía es muy curiosa a pesar de ser un fantasma. Por alguna razón Cía es capaz de dormir, adora comer y constantemente tiene hambre, cuando murió era una chica de 19 años muy bonita su piel era de un bonito color canela, ahora su piel es mas blanca que la de una hoja de papel, sus ojos son de un intenso color amatista y su cabello es largo y de un azul cielo tan resplandeciente que parece brillar, su cara es de un tono muy dulce y su voz es suave y muy animada. Pensándolo de determinada manera parecemos polos opuestos. Mi cabello es corto y de un azul marino intenso, mis ojos son de un intenso color verde y uso lentes, mi piel es de un color canela y mi personalidad no podía ser lo mas opuesta suelo ser más pesimista ante las cosas y no suelo animarme con facilidad.

Cía a sido incluso durante el tiempo en el que estaba viva mi mejor amiga siempre estuvimos juntas hasta el día de su muerte, ese día yo me di cuenta que sentía algo mas por ella. Yo amaba a Cía y cuando murió el mundo se me vino abajo. Tuve que resignarme a no verla nunca mas y justo un día caminando por el bosque me la encontré fue como una especie de milagro. Era mi oportunidad me podría declarar, pero al pensar en que estaba atrapada en este mundo no me atreví a decírselo pues seguramente Cía me rechazaría y alejaría de ella y manteniéndome lejos no podría ayudarla a reencarnar, decidí que me tragaria mis sentimientos para ayudar a Cía hasta que decidiera o pudiera reencarnar.

-Buenos días, Eris – Me saludo Cía con una enorme sonrisa en los labios

- Buenos días Cía, hoy te vez mas animada de lo normal – Sonreí al verla pues Cía tenia un extraño buen humor

- Claro Eris, es porque ya me decidí. Hoy cumpliré mi asunto inconcluso – Dijo Cía con una cara que demostraba seriedad, yo al escucharla mi alrededor se hizo pesado y por mis ojos querían salir algunas lagrimas traicioneras, se que dije que quería ayudarla a reencarnar pero no tan pronto. Quería tenerla un poco mas conmigo, me voltee rápidamente para evitar que Cía viera aquellas lagrimas escurridizas y pregunte

- ¿Entonces me dirás cual es tu asunto inconcluso? – Dije mientras volvía a voltear para ver a Cía fingiendo una sonrisa

 - Por supuesto que si Eris – Cía asintió fuertemente con la cabeza – Mi asunto inconcluso es muy sencillo y solo lo puedo cumplir hoy –

- ¿Solo puede ser cumplido hoy? – Pregunte curiosa

- Si, pues mi asunto inconcluso es que no fui a pedir dulces el día de brujas o Halloween como gustes llamarlo – Dijo Cía como si fuera el asunto mas importarte del universo

- ¿Enserió Cía te quedaste en este mundo solo porque querías pedir dulces? – Le pregunte al borde del colapso no podía creer que el motivo por el que Cía se había quedado en este mundo era tan infantil.  Yo había pensado en algo mas fuerte como un amor no correspondido ó tal vez ayudar a alguien pero pedir dulces por favor solo Cía podía tener tal motivo para no reencarnar pero bueno eso era justamente lo que yo amaba de Cía su inocencia y sus ocurrencias.

- ¡Sip es un motivo muy importante esos dulces no se comerán solos! – dijo Cía tratando de hacerme comprender la importancia de comer dulces

- Esta bien Cía te ayudare con una poción para que los humanos te puedan ver además de que vas aparentar tener 8 años, ya sabes a los niños pequeños siempre les dan lo mejor – Sonreí aunque de alguna manera por dentro me estaba muriendo de tristeza pues ya no tendría mas a Cía conmigo y mis sentimientos tendrían que ser enterrados sin siquiera ser confesados, y todo por mi propia cobardía y pesimismo.

 - Muchas gracias  Eris – Cía me abrazo fuertemente – ¿Perdón debo se bastante fría verdad? – me soltó rápidamente y disculpo infantilmente al recordar que como fantasma era realmente fría.

-No te preocupes me gustan las cosas frías – Sonreí para hacer sentir mejor a Cía

-¿De verdad?- me volvió a abrazar – Acerco su cara a la mía y mientras me miraba fijamente me pregunto – Eris irías tú conmigo también a pedir dulces – Accedí al instante antes de que Cía pudiera notar el sonrojo que empezaba a adornar mi rostro ya que se encontraba demasiado cerca, Cía salto de alegría separándose de mi – Eris regreso en un instante, iré por unos disfraces para nosotras - salió volando lo mas rápido que podía en su condición de fantasma. 

Cuando me di cuenta ya había aceptado tal tontería, decidí ponerme hacer las dos pócimas ya que no podía dar marcha atrás y primero era capaz de aventarme a un precipicio antes que creyeran que la bruja del bosque es alguien infantil que le gusta ir a pedir dulces como si se tratara de una niñita pequeña.

El tiempo paso rápidamente entre que hacia mis asuntos y deberes pendientes como haciendo las pócimas para ir a pedir dulces, Cía regreso cerca de la 6 de la tarde con 2 disfraces que nos quedarían perfectos en cuanto nos tomáramos la poción, uno era de una princesa y otro era de una bruja. Reí para mis adentros pensando en lo original que era Cía en conseguirme un disfraz de bruja tomando en cuenta que era una bruja real, seguramente ese sería mi disfraz pues Cía sabia perfectamente que como buena bruja adoro las cosas obscuras.

Después de acomodar los disfraces en la cama para que no se arrugaran, nos tomamos la poción esta nos dio una apariencia de niñas de 6 años – Creo que me pase de rejuvenecin – dije para mi misma no tomándole mucha importancia pues seguramente regresaríamos a nuestras formas originales a las 11 de la noche cuando mucho.

Cía tomo el disfraz de bruja y me entrego el de princesa, no pude evitar quedarme petrificada, con la boca abierta y la mirada desencajada mirando ese vestido blanco y pomposo, esa tiara llena de joyas rosadas y esa peluca de rulos de un rubio perfecto. Mire a Cía – Porque yo tengo que ser la princesa – Pregunte aun en shock

-Eso es fácil es porque tu eres una bruja seria absurdo que tu fueras la bruja- Dijo como si fuera lo mas lógico

- Cía, si es así tengo un  disfraz de vampira no tengo que ser una princesa no es que no me gusten, si no que ya sabes soy una bruja me gustan las cosas mas obscuras – dije tratando de justificar el porque no quería usar ese ridículo disfraz para no herir los sentimientos de Cía

- Eris, yo quiero que seas una princesa – dijo con  los ojos llorosos

- Tú ganas- dije dándome por vencida – pero me vas a dejarle cambiar los colores verdad, prefiero ser una reina malvada – sonreí, Cía lo pensó por un instante y acepto con mi magia el vestido blanco paso a ser negro, la peluca paso a ser una negra de pelo lacio y largo y por la ultimo la tiara se convirtió en una corona dorada con joyas tan rojas e intensa como el color de la sangre.

Arreglándonos y llegando al pueblo nos dieron las 8 de la noche ya solo nos quedaban 3 horas mas con el aspecto de unas niñitas, Cía se veía hermosa disfrazada de brujita  su vestido era como el de las brujas buenas de los cuentos de hadas era de lila muy suave, un delantal blanco, unas medias de rayas naranjas y rojas, un sombrero de pico negro, una capa larga y negra, zapatitos negros, una peluca de un morado intenso y por ultimo tenia pintada la carita de verde. 

Cuando nos veían pasar los adultos decían que éramos un  par de niñas muy lindas, nos daban un pequeño pellizcó en la mejilla y depositaban dulces en los calderos que triamos para la recolección de dulces, algunos nos decían que les parecía curioso ver a una reina malvada y una bruja cuando la mayoría de las niñas de aquel pueblo parecían sentir cierta fascinación por las princesas o bien por las hadas.

Fuimos tocando de casa en casa diciendo llenas de alegría y energía – Dulce ó truco – Ya que si seria la ultima vez que vería a Cía disfrutaría al máximo este día cuando terminamos de pedir dulces nuestros calderos estaban repletos de dulces y incluso teníamos las bolsas que llevamos por si se llenaban nuestros calderos también llenas, justo como lo había pensado a los niños siempre les toca lo mejor.

Caminamos por el bosque lentamente, disfrutamos de la luna llena que se podía ver tan cercana y grande en lo alto del cielo. Fue una caminata en silencio un silencio realmente cómodo es como si ambas supiéramos que esa sería nuestra ultima noche juntas, mejor dicho lo sabíamos pero tal vez no queríamos aceptarlo.

Llegamos a mi casa en medio del bosque, nos quitamos los disfraces pues la poción estaba apunto de perder su efecto. Volvimos a nuestras apariencias normales de chicas de 19 años, me vestí rápidamente pues no quería que Cía me viera totalmente desnuda, en cambio Cía solo tuvo que pensar en que ropa quería y aparecía al instante había veces que envidiaba esa habilidad de fantasma.

Después de un rato y de disfrutar juntas un buen té me pregunte si su asunto ya se había cumplido porque Cía no parecía poder ir al mundo espiritual, me volteo a ver y dijo – Creo que ya es hora de irme Eris, me podrías hacer un ultimo favor – yo solo asentí al borde de las lagrimas ya no podía seguir fingiendo que todo estaba bien, Cía tomo la corona que había dejado en la mesita de noche me quito el sombrero y posicionó la corona sobre mi cabeza mientras ella se ponía mi sombrero de bruja tomo su caldero donde guardaba sus dulces, saliendo de mi casa yo solo fui siguiéndola. En la puerta ella me pidió que me metiera y le abriera mi casa para darle dulces pues mi casa era la única a la que todavía no decía dulce o truco y después de atenderla ese seria el adiós.

Cerré la puerta y escuche los suaves golpeteos de Cía a la puerta de mi casa, no quise atenderlos de inmediato después de unos minutos mas, volví a oír el suave golpeteo  de Cía a mi puerta, mire al reloj que se encontraba en una de las paredes y me di cuenta que si no atendía a Cía se quedaría atascada en este mundo durante un año mas pues faltaban tan solo 15 minutos para que fuera otro día, con lagrimas en los ojos abrí mi puerta.  

-Dulce ó truco Eris – Salto llena de alegría estirando sus brazos con el caldero lleno de dulces

- Por supuesto que dulce – Dije con una sonrisa forzada y aun con lagrimas corriendo por mis mejillas

-  Eris, por favor no llores – Dijo Cía con una cara preocupada

- Lo siento Cía, no quiero que te vallas de mi lado – dije mientras mi llanto se volvía mas fuerte

- Eris sabes que nunca me iría de tu lado, incluso si tú no puedes verme mas yo estaré contigo por siempre cuidándote – Cía me abrazo suavemente y después me dio la sonrisa mas radiante que tenía, yo asentí ligeramente y al verla comprendí que no podía ser tan egoísta si yo de verdad amaba a Cía la dejaría descansar aunque no la pudiera ver mas porque como Cía dijo aunque no este yo siempre la tendré dentro de mi en mi corazón, volví a meterme a mi casa y cerré la puerta Cía comprendió que quería que volviera  a pedir dulce o truco.

Volví a escuchar el ligero golpeteo de Cía a mi puerta, respirando hondo, logre contener mi llanto y abrí la puerta poniendo la mejor sonrisa que podía poner en ese momento Cía volvió a saltar gritando - Dulce o truco –

-Por supuesto que dulce – Dije mientras estiraba un paquete de chocolates rellenos de licor de cereza sus favoritos para depositarlos en su caldero fue cuando me di cuenta que esta vez no lo traía con ella el caldero si no que lo había posicionado a un lado de ella, decidí dárselos directamente en su mano. Se los di y ella con una dulce sonrisa dijo – Tomare el dulce que mas deseo -  Dicho esto Cía me dio un suave y largo beso en los labios – Este será mi dulce favorito, tus dulces labios, tus dulces besos porque yo a ti, te amo enserio no sabes cuanto te amo Eris – Ante tal confesión mis lagrimas comenzaron a fluir de nuevo estaban mescladas entre emociones de alegría y de frustración por no haber podido ser yo la que le confesara antes sus sentimiento por miedo y por mi propio pesimismo que era constante en mí, si me hubiera declarado hubiera podido disfrutar mas el tiempo con la persona que amaba .

El tiempo que le quedaba a Cía eran escasos 2 minutos tomando todo el valor que tenía – Dulce o truco – dije para después darle un apasionado beso a Cía – Yo también te amo Cía, te amo con todo mi ser – Los colores se subieron a nuestros rostros en el caso de Cía al ser un fantasma solo era un ligero tono rosa mientras yo era el vivo retrató de un tomate maduro.

Nos sonreímos mutuamente y fue entonces cuando Cía comenzó a convertirse en pequeñas esferas luminosas de colores que subían al cielo, mientras suavemente volvía a darme un casto beso – Siempre te amare Eris- fue lo ultimo que susurro cuando se convirtió por completo en esferas de luz que desaparecieron en la inmensidad del cielo. Sonreí mientras mis lagrimas seguían fluyendo y le susurraba a la inmensidad de la noche – Yo también te amo Cía –

El tiempo paso rápidamente había veces en las que podía escuchar la voz de Cía siendo traída por el viento susurrándome cuanto me amaba y suaves caricias a lo que yo contestaba en un  ligero susurro yo también te amo.

Así paso un año y otra vez era 31 de octubre, Halloween. Oí un suave golpeteo en mi puerta, seguramente serian los niños mas valientes que se atrevían a venir a la casa de la bruja por un dulce aperitivo y ante tal valentía obviamente no se los iba a negar. Abrí mi puerta y escuche un alegre - Dulce o truco – mi sorpresa fue grande al darme cuenta que quien se encontraba en la puerta era Cía, no podía pronunciar palabra alguna ante la sorpresa, después de algunos minutos solo pude balbucear un – ¿por que sigues vagando en la tierra? – lleno de sorpresa

Cía sonrió – Cuando llegue al mundo espiritual, me dieron la opción de seguir en la tierra como un fantasma de bosque embrujado pero para ello tenia que entrenar un año, así que no te pude decir nada hizo un pequeño puchero  pero por lo menos se que si recibiste los te amo que te mande a través del viento-

-Cía pero de esa manera no podrás reencarnar – Dije bastante preocupada

 - Claro que si, podre reencarnar en 400 años mas cuando se acabe mi contrato y eso esta muy bien después de todo las brujas viven aproximadamente 400 años así que cuando acabe mi contrato podremos reencarnar juntas para nunca jamás separarnos, por que yo siempre quiero estar junto a ti –

-Ya entiendo Cía, yo también quiero estar junto a ti, te juro que siempre te amare-

- Y yo Eris te juro también que nunca me separare de ti y siempre te amare-

- Regresando a lo anterior Eris- Esbozo una sonrisa juguetona - Dulce o truco – Dijo Cía ampliando mas su sonrisa

- Por supuesto que dulce – Dije sonriendo mientras le daba un apasionado pero dulce beso

-Definitivamente este es mi dulce favorito – Dijo Cía con un leve sonrojo y yo comencé a pensar que definitivamente esa actividad ten infantil que me parecía el ir a pedir dulces y hacer travesuras de ahora en adelante seria mi fecha favorita, porque de ahora en adelante siempre amare probar los labios de Cía al pedir dulce o truco.

  

      

     

     

                  

Notas finales:

Muchisimas gracias por leer, Espero que les haya gustado se aceptan todo tiepo de comentarios, si alguien lee mi fic de la bruja y la rosa actualizare en una o dos semanas :) 

Nos vemos mattane!! :3

 

Si les gusto mi pequeño one shot dejare aqui mi cuenta de wattpad que sra donde publique y este mas activa :3

 

https://www.wattpad.com/user/IonAlueLevantCroix


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