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TOMANDO EL CONTROL por DANI DARKRAI

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Notas del capitulo:

RESUBIENDO CAPITULOS

SALA DEL PATRIARCA

 

Con el paso de las horas, el atardecer comenzó a mostrarse sobre las colinas del santuario de Athena ofreciendo una vista del cielo bañado en un hermoso tono naranja. En la sala principal del patriarca, Hakurei podía apreciar una vista amplia desde un ventanal, observando como los trabajos de limpieza eran realizados por la mayoría de los guerreros de bronce y caballeros de plata.

Todo parecía ir de acuerdo al plan estipulado por ambos hermanos gemelos, sin embargo las intenciones de Hakurei eran muy diferentes a los ideales de su hermano menor Sage.

Ahora que sabía sobre el enlace del dios de la muerte junto con el caballero de cáncer, necesitaba cambiar algunas de sus estrategias por el bienestar de su hermano y sus demás compañeros.

Lo primero en la lista sería emparejar cuanto antes la vida de Manigoldo con Aspros de géminis, ya que no solo aseguraría el bienestar del aprendiz de su hermano con el caballero más fuerte de los 12 santos dorados, sino que también daría la posibilidad de destruir cualquier oportunidad de unir los lazos nuevamente con el dios de la muerte.

Su segundo punto era recuperar la espada sagrada de Athena, ya que tenía intenciones en convertirla en el arma principal del nuevo patriarca que impartiría justicia sobre todo el santuario, sin contar que también sería usada en la siguiente guerra santa del siglo XX.

Pero en el fondo de su ser, Hakurei deseaba que el portador de dicha arma fuese Aspros de géminis, ya que en su opinión personal, Aspros estaba más calificado en asumir tan grande puesto, pero Sage estaba más convencido en apoyar a Sísifo de sagitario por su forma pacífica en resolver los problemas. "una persona que está dispuesta a perdonar todos los crímenes de un desertor y asesino del santuario, no merece convertiste en el líder de todo un ejército"

 

Desde el comienzo del siglo XVI, hicimos la promesa con Athena de proteger a todos nuestros camaradas del sufrimiento ocasionado a manos de los espectros y dioses del inframundo – Hakurei cerro la ventana con las inmensas cortinas de terciopelo – por ahora necesitamos un líder lo bastante fuerte que pueda dirigir a los 88 caballeros de Athena en las guerras que puedan surgir, y ese no puede ser Sísifo –

 

Sin cambiar su forma de pensar, Hakurei tomo un recipiente con agua, caminando en dirección a una habitación privada de su hermano menor, con preocupación observo como aún se encontraba descansando sobre una mullida cama, ya que hace aproximadamente unas horas el cuerpo de su hermano fue llevado a su habitación por las manos de Aspros.

 

RECUERDO DE HAKUREI

 

Hakurei se encontraba de pie a un costado del trono del patriarca revisando con detenimiento un pergamino antiguo que se encontraba oculto en la biblioteca del santuario.

Mientras tanto, esperaba con paciencia el regreso de su hermano Sage para dar pie a las nuevas discusiones que surgirían en la batalla ceremonial y posiblemente la organización de la próxima unión entre los caballeros Degel y Kardia (boda), sin embargo al ver la llegada de aspros quien cargaba en brazos a un inconsciente Sage, lo hiso mostrar una mirada de curiosidad.

 

Regresaste más rápido de lo esperado aspros – Hakurei observo con detenimiento el cuerpo inerte de su hermano – ¿puedo saber que ocurrió con Sage?

 

 

 

El patriarca estaba demasiado cansado para continuar vigilando a Manigoldo, cuando ingrese a la casa de cáncer lo encontré descansando a un lado de su cama y no pude despertarlo – camino con lentitud, pasando sin problemas al lado del maestro Hakurei para dirigirse a la habitación del patriarca Sage – supongo que debe estar agotado, su rostro muestra cansancio excesivo – al llegar a su habitación, aspros deposito con cuidado el cuerpo de Sage sobre la cama –

 

Es normal, anoche Sage hablo en privado con Manigoldo sobre algunos problemas personales – tomo unas sábanas comenzando a cubrir el cuerpo de su hermano – eso debe haberlo agitado demasiado.

 

Hakurei desvió su mirada en dirección a Aspros quien parecía encontrarse distraído en sus pensamientos, ya que aún mantenía su mirada sobre el cuerpo de Sage.

 

Solo falta un día para dar inicio a la batalla ceremonial – hablo con tranquilidad, haciendo que la atención de Aspros se centrara en él – y en este tiempo, he tomado la decisión de concederte el deseo que tanto anhelas Aspros.

 

¿Lo dice en verdad maestro? – la mirada de aspros mostraba asombro y felicidad – pero aún no he derrotado a Sísifo.

 

La victoria o derrota de Sísifo en la batalla ceremonial no impedirá que te cases con Manigoldo – sonrió levemente continuando con sus palabras – es un hecho que una vez terminada la batalla y la coronación del nuevo patriarca, se oficiara cuanto antes tu unión con Manigoldo sin excepciones – desvió su mirada hacia Sage – Sage y yo lo hemos decidido así.

 

A pesar de estar en presciencia del maestro Hakurei, Aspros no pudo evitar dedicarle una sonrisa de felicidad pura en su rostro, ya que desde hace mucho tiempo no sentía un sentimiento de alivio y calma.

 

Se lo agradezco maestro Hakurei – aspros se hinco sobre el suelo ofreciéndole lealtad absoluta – con esta motivación no perderé ante Sísifo.

 

Estoy seguro que no.

 

FIN DEL RECUERDO DE HAKUREI

 

Sus pensamientos se vieron interrumpidos al escuchar los murmullos de su hermano menor, quien comenzaba a despertar removiendo con pesadez las sabanas de su cuerpo.

 

Que fue lo que paso... - observo con detenimiento el lugar, mientras frotaba su vista al no distinguir el cuarto donde se encontraba – ¡¿dónde está Manigoldo?!

 

Manigoldo se encuentra bien, asigne la tarea de sus cuidados con Aspros – tomo asiento en un costado de su cama, entregándole un recipiente con agua – al parecer te quedaste dormido en su habitación mientras estabas vigilándolo, así que aspros te trajo de vuelta a la cámara principal para que lograras descansar un poco.

 

Sage tomo en sus manos el recipiente de agua para comenzar a beber de ella, mientras trataba de recordar el suceso en la habitación de la casa de cáncer. Era extraño para Sage el quedarse dormido justo cuando Manigoldo comenzaba a hablar entre sueños acerca de una traición.

 

No recuerdo haberme sentido cansado – suspiro cansado observando con detenimiento el agua entre sus manos – pero supongo que pude quedarme dormido sin darme cuenta, estaba muy preocupado por el bienestar de Manigoldo.

 

Debes dejar de aferrarte tanto en un alumno – la voz de Hakurei sonó comprensiva, tratando de reconfortar a su hermano – Sage hay algo que necesito hablar contigo.

 

Claro – dejo el recipiente sobre una mesa –

 

Es sobre la batalla ceremonial, antes de anunciar el encuentro oficial con los demás caballeros del santuario, Aspros hablo conmigo acerca de su deseo de victoria – la mirada de Hakurei cambio a ser más seria – el desea desposar a Manigoldo una vez que derrote a Sísifo.

 

La mirada de Sage cambio totalmente al escuchar las palabras de su hermano, a pesar de haber perdonado los crímenes de aspros contra el santuario y Athena, no podía confiarle la vida de su estudiante, mucho menos consentir una unión que probablemente sería rechazada por manigoldo.

 

¿Qué fue lo que respondiste hermano? – hablo con cierto temor al sospechar su respuesta –

 

Otorgue mi bendición – hablo con simpleza observando su mirada de preocupación – no conozco a nadie mejor para Manigoldo, que el caballero más fuerte del santuario.

 

Sage tomo con fuerza las sabanas de su cuerpo, tratando de controlar la ira que surgía de su cuerpo. Enterarse que Hakurei había consentido la unión de ambos caballeros sin haberlo comentado con él, lo hacía sentirse inservible.

 

Imposible... Manigoldo jamás aceptara Aspros como su compañero de vida – hablo con molestia observando de frente a su hermano – y yo tampoco deseo que esa unión se complete.

 

¿Estás seguro de lo que dices Sage? – a pesar de recibir una mirada molesta de su hermano menor, Hakurei no mostraba miedo o culpa por sus acciones – quiero que pienses algo, que pasaría si Manigoldo recordara que alguna vez tuvo una soulmate en su vida y que la persona en la quien más confió, fue el responsable de arrebatarle su regalo más preciado.

 

Hakurei pudo apreciar el miedo en la mirada de Sage, parecía dudar de nuevo sobre sus acciones. "Si para cambiar tu opinión debo lastimarte tanto, entonces suplico que puedas perdonarme"

 

- Estoy seguro que te odiaría tanto – hablo con seriedad sin medir las consecuencias de sus palabras - no dudaría en traicionar al santuario al saber que su pareja destinada es nuestro enemigo, probablemente iniciaría una batalla en contra de los santos dorados y terminaría lastimando de gravedad a nuestros compañeros de armas.

 

- Te equivocas, Manigoldo no sería capaz de hacer algo en contra de su familia – sujeto sus propias manos intentando calmarse y pensar con racionalidad – estoy seguro que reaccionara diferente si le confieso toda la verdad, tal vez incluso pueda perdóname.

 

Sin perder tiempo, Sage tomo sus partencias para ponerse de pie y vestirse con la túnica del patriarca, "Aun puedo evitar que esto empeore".

 

 

        

 

 

No te confíes tanto Sage, es verdad que Manigoldo es un ser demasiado fuerte y se mueve por el sentido de la justicia – al igual que su hermano, Hakurei se puso de pie observando las acciones de Sage – pero tiene un problema, y eso es cuando sus sentimientos toman el control de sus acciones.

 

Hakurei tomo el hombro de Sage impidiendo que abandonara la sala del patriarca, necesitaba un poco más de tiempo para doblegar las decisiones de su hermano menor y tener su aprobación para oficiar el deseo de Aspros.

 

¿En verdad piensas que Manigoldo podrá perdonarte? – suspiro levemente continuando con sus palabras – lo manipulaste a tu conveniencia para pelear en contra de su pareja destinada; le arrebataste su bien más preciado para entregárselo al dios del sueño; y estoy seguro que continuaste mintiéndole hasta ahora – aferro con más fuerza el agarre en sus hombros al sentir un leve temblor sobre su cuerpo – Sage... sus pensamientos cambiaran totalmente una vez que le confieses la verdad, En su mente solo existirá la idea que fue usado como una arma durante la guerra santa.

 

Claro que no... él...no es esa clase de persona - la voz de Sage comenzó a quebrarse por cada palabra que salía de los labios de Hakurei, pensar que Manigoldo jamás lo perdonaría por haber tomado esas decisiones a sus espaldas, lo hacía sentirse demasiado aterrado.

 

Si en verdad piensas eso entonces no te detendré –

 

Soltó el agarre de sus manos esperando que Sage se marchara del templo, sin embargo al verlo permanecer inmóvil sobre su lugar y derramar un par de lágrimas de su rostro, lo hacían sentirse culpable. Para Sage, escuchar las crueles palabras de Hakurei le hacían perder toda la confianza en confesarle la verdad a Manigoldo.

 

Sage, la única forma de mantener la paz entre el santuario y el inframundo es jamás confesarle la verdad a Manigoldo – camino a un costado de su hermano menor para colocarse frente a él y tomar su rostro con ambas manos – se quedara en el santuario como el consorte del nuevo patriarca y tu podrás permanecer a su lado con el tiempo que nos quede de inmortalidad.

 

Pero... el jamás aceptara Aspros como su esposo – con lentitud, limpio el rastro de sus lágrimas tratando de controlar el rubor en sus mejillas, se sentía demasiado avergonzado por llorar frente a su hermano mayor –

 

Por esa razón necesito que logres convérselo en aceptar el compromiso – le dedico una sonrisa tranquila - Manigoldo te obedecerá sin dudarlo y finalmente todos podremos dejar este tema en el olvido.

 

- Supongo que no tengo demasiadas opciones. 

 

A pesar de sentir que estaba cometiendo un error, Sage asintió con la cabeza, afirmando que hablaría cuanto antes con Manigoldo sobre su nuevo plan en convertido en el consorte del caballero de géminis. "solo espero que lo acepte sin pelear demasiado"

 

La noche ha llegado más rápido de lo esperado – respondió Hakurei mirando la luz lunar que se adentraba por los ventanales de mármol – dejaremos este tema para el amanecer, por ahora necesitaremos estar listos para recibir el regreso de Cid y Deuteros con la espada sagrada de Athena.

 

SANTUARIO DE ATHENA – CASA DE ARIES

 

Entre los pilares de la entrada principal en la casa de piscis, Shion se encontraba observando con preocupación el cielo nocturno que bañaba el santuario de Athena.

 

Porque estoy haciendo esto – suspiro levemente tratando de controlarse – siempre que hay algún problema entre Albafica y Manigoldo yo también termino afectado.

 

RECUERDO DE SHION

 

Una vez que Aspros ingreso a la casa de cáncer, Shion y Albafica continuaron con su conversación en los campos de entrenamiento. Ahora que sabían sobre la existencia de un traidor sobre el santuario necesitaban ser más precavidos.

 

¿Cuál es tu idea Albafica? – lo observo con seriedad –

 

Necesito tu ayuda para ingresar al inframundo – respondió con simpleza, colocándose la pulsera sobre su muñeca –

 

¿Que? – sin poder evitarlo, Shion soltó una risa graciosa al escuchar las palabras de su compañero – debes estar bromeando Albafica – coloco sus manos sobre su labios tratando de controlar su sonrisa – yo no tengo el poder para usar las ondas infernales y tú lo sabes; los únicos que pueden llegar al inframundo son los maestros y Manigoldo.

 

Pero puedes tele transportarte gracias a tu poder de telequinesis – la mirada de Albafica no mostraba emoción alguna ante las risas de Shion – y eso es suficiente para mí.

 

La mirada de Shion cambio totalmente por una expresión de confusión, ante las palabras de Albafica, le parecía extraño que pudiese ayudarlo a bajar al inframundo solo con el poder de su telequinesis.

 

 

        

 

 

¿Qué es lo que planeas hacer?

 

Manigoldo no es alguien débil, estoy seguro que despertara en cualquier momento – Albafica desvió su mirada hacia la casa de cáncer – cuando lo haga, lo primero que intentara será regresar al inframundo, estoy seguro que evadirá la vigilancia del patriarca Sage junto con la de Aspros, es demasiado astuto en escapar del santuario.

 

Sin poder evitarlo, Albafica sonrió levemente al recordar sus experiencias de escape a los ojos de sus maestros cuando eran más pequeños.

 

¿Qué necesitaran de mí?

 

Una vez que la noche llegue al santuario, probablemente el patriarca regresara al templo de Athena junto con la compañía de Aspros, cuando eso pase necesitare de tu poder para telestrasportarme a la casa de cáncer – levanto su mirada observando con inquietud como el cielo cambiaba su color azul por un tono naranja – también necesitare que ocupes mi casa zodiacal – coloco sus manos sobre su barbilla observando con detenimiento la estatura de Shion, al parecer era más alto que Albafica (solo por 3 cm) - tu presencia podrá evadir la atención del patriarca Sage.

 

Sabes, tus planes de escape sin demasiados detallados... cuantas veces han escapado del santuario de Athena sin el permiso de los maestros –

 

Solo una vez.

 

Al pasar algunas horas en conversación con algunos de sus compañeros de bronce, Shion pudo mirar a lo lejos como aspros abandonaba la casa de cáncer cargando en brazos al patriarca Sage mientras regresaban al templo de Athena "¿acaso él maestro Sage también se encontrara agotado?"

 

Ya es hora Albafica -

 

Hablo en voz baja, colocando su mano sobre el hombro de Albafica para usar su poder y telestranportarlos hacia la casa de cáncer.

Al arribar en uno de los salones principales, Shion y Albafica caminaron con discreción por los pasillos de la casa zodiacal buscando la presencia de Manigoldo sin demasiado éxito.

 

Tal vez ya abandono el santuario – respondió Shion, continuando buscando algún rastro de su compañero

 

No lo creo... - respondió con serenidad caminando hacia la habitación principal de manigoldo –

 

En pocos segundos, unos gritos de dolor llenaron los pasillos de la casa zodiacal haciendo que ambos caballeros dorados apresuraran su paso. A medida que continuaban acercándose a la habitación principal de Manigoldo, se podía apreciar el cambio de un cosmos totalmente diferente al de su compañero.

Ya que la energía percibida por ambos caballeros era más agresiva y poderosa; una vez derribada la puerta principal, observaron como Manigoldo se encontraba de pie mirándose frente a un espejo asombrado ante el cambio notable sobre su cuerpo.

 

- ¡¿Q-Que demonios me paso?!... – tomo con desesperación sus propios cabellos observando el cambio notable en su color – ¡¿porque la mayoría de mi cabello esta blanco?! – al observarse con mejor detenimiento, pudo apreciar un cambio notable sobre uno de sus ojos, el azul obscuro que una vez poseyó sobre su mirada, fue sustituido por un color carmesí que comenzaba a extenderse a su ojo derecho – m-mis ojos... también están cambiando – hablo en voz baja al quedar totalmente en shock –

 

Tanto Shion como Albafica quedaron sorprendidos ante la nueva apariencia y poder que surgían del cuerpo de Manigoldo, sin embargo, pensar en las represalias que tomaría el maestro Hakurei junto con el patriarca Sage los hacia sentirse totalmente aterrados.

 

Sera imposible ocultarle esto al patriarca... - respondió Albafica con preocupación mientras se acercaba a un costado de Manigoldo tratando de hacerlo reaccionar – ¿Qué fue lo que te paso en el inframundo? – observo con asombro como el trozo de cabello que había cortado de su cabeza volvió a crecer sin problemas.

 

No solo es su apariencia – al intentar tomar uno de sus brazos para calmar a Manigoldo, Shion fue alejado de inmediato por un choque eléctrico que lastimo superficialmente sus manos – tu cosmos es más fuerte, sin contar que tu energía se volvió más oscura.

 

No puede ser... – asustado tomo sus propias manos examinando cómo le fue posible lastimar a Shion sin hacer un menor esfuerzo – lo lamento, no puedo controlarlo Shion.

 

No tienes por qué temer de tu nuevo poder querido Manigoldo – hablo con tranquilidad –

 

Entre las sobras de la habitación, verónica hiso acto de presencia frente a los 3 caballeros dorados dedicándoles una sonrisa de felicidad y burla; estar de regreso en el santuario de Athena era demasiado peligroso para verónica, por lo que uso una gran cantidad de su poder para crear una barrera sobre la casa de cáncer, cualquiera que tratara de ingresar seria detenido de inmediato.

 

Ese poder es uno de los regalos de mi señor Thanatos – verónica hiso uso del poder de su armadura para volar hacia los caballeros dorados – incluso el cambio de tu apariencia se debe a que te ha otorgado su bendición – verónica coloco un par de sus dedos sobre la frente de Manigoldo, haciendo que apareciera la estrella obscura del dios Thanatos – sin embargo tus ojos no deberían cambiar de color.

 

Sin perder tiempo Manigoldo alejo de un manotazo las manos de verónica, siendo seguido por un golpe directo de Albafica, quien lo hizo caer sobre el suelo y ser encarcelado por la prisión de cristal de Shion.

 

¡¿Que hace un espectro aquí?! – hablo con molestia mientras continuaba encerrándolo en su prisión de cristal –

 

¿Lo conoces? – Albafica desvió su mirada hacia Manigoldo esperando alguna respuesta, pero se sorprendió al ver una reacción de fastidio en su mirada –

 

Es alguien inofensivo – camino con lentitud acercándose a la prisión de cristal y golpeándola con frustración– quieres explicarme porque el maldito de Thanatos me hiso esto –

 

Con un solo golpe de Manigoldo, la prisión de cristal comenzó a presentar fisuras sobre sus cuatro paredes asustando levemente a Shion.

 

- No estoy seguro que fue lo que mi señor Thanatos puso sobre ti – sonrió divertido, levantando sus manos en señal de rendición – mi tarea es solo vigilar que te encontraras bien Manigoldo, ("y veo que estas mejor que nuca") pero si en verdad deseas saber qué es lo que te está ocurriendo, te recomiendo bajar al inframundo y preguntárselo en persona.

 

¡Por supuesto que iré a ver al maldito dios de la muerte, necesito que me regrese a la normalidad antes de que el maestro Sage me vea así – con una señal de sus manos, Shion libero a verónica de su prisión, mientras su presencia era ignorada por Manigoldo y Albafica – cuando lo atrape lo golpeare como nunca lo he hecho en mi vida 

 

Molesto, Manigoldo invoco gran parte de su cosmos para llamar la armadura dorada de cáncer y hacer uso de ella nuevamente.

 

 

Esta vez no llegare ante él como un humano débil - al sentir el poder de la armadura dorada recorrer todo su cuerpo, lo hacía sentirse ligero y lleno de energías para viajar de nuevo hacia el inframundo –

 

 

Eres más hermoso cuando vistes la armadura dorada de cáncer – respondió verónica con un leve rubor en sus mejillas – es una lástima que seas la pareja de mi señor Thanatos, de lo contrario me hubiese fascinado salir contigo.

 

Guarda silencio Rarito, yo no soy nada de ese estúpido dios – aunque respondía con molestia, en el fondo de su ser Manigoldo era consiente que sentía algo romántico por el dios de la muerte – es hora de irme, lamento pedirles esto pero necesito que me cubran.

 

Antes de usar la técnica "ondas de inframundo" sus movimientos fueron detenidos por el agarre de Albafica quien le impedia marcharse, a pesar de nunca mostrar interés en los viajes que hacia manigoldo hacia el inframundo, en esa ocasión podía apreciar una mirada de seriedad por parte de su compañero. "¿está dispuesto a seguirme?"

 

Yo iré contigo – los ojos de Albafica mostraban decisión y necesidad de seguirlo en el inframundo – necesito verlo de nuevo.

 

Un momento caballero de piscis, tú no puedes entrar al inframundo – verónica se levantó del suelo mirando con curiosidad la escena comprometedora entre manigoldo y su compañero – apenas pongas un pie en los reinos del señor hades, sufrirás un colapso repentino ya que tu cuerpo no está acostumbrado a soportar demasiada presión, no soportaras una hora en el inframundo sin la bendición de algún dios.

 

Antes que Manigoldo insultara a verónica por su impertinencia ante su mejor amigo, Albafica levanto su brazo mostrando la pulsera que manigoldo le había entregado al haber regresado al santuario de Athena.

 

Supongo que esto será suficiente – le sonrío en forma divertida mientras desviaba su mirada hacia Shion quien se mostraba preocupado por el bienestar en ambos caballeros dorados – te encargamos todo Shion.

 

Una vez la técnica de manigoldo trasporto ambos caballeros hacia el inframundo, Shion suspiro cansado al saber que no solo debía realizar el trabajo acordado por Albafica, sino que también tendría que convivir con el extraño amigo de manigoldo.

 

Yo me iré de aquí, supongo que tú cubrirás el rastro de manigoldo... - hiso un gesto de despedida con sus manos, desapareciendo en seguida hacia la casa de piscis –

 

FIN DEL RECUERDO DE SHION

 

Espero que ambos se encuentren bien... solo tienen pocas horas antes del amanecer – cerro sus ojos tratando de pensar en la forma correcta de disculparse con Dohko una vez que Albafica regresara al santuario – que habrá pasado con Aspros...

 

LIMITE DEL SANTUARIO DE ATHENA – BOSQUE DE ENTRENAMIENTO

 

Entre la oscuridad y vegetación del bosque que rodeaban las orillas del santuario de Athena, se encontraba Aspros junto con pandora, esperando la llegada der ser que prometía ayudarlo en su deseo de conversarse en el nuevo patriarca.

 

De saber que tardaría demasiado, hubiese preferido estar en compañía de Manigoldo.

 

Mi señor jamás ha faltado algún compromiso.

 

Sin esperar más tiempo, un viento con demasiado poder comenzó hacer acto de presencia sobre todo el bosque; hizo volar a las pocas aves de sus nidos y destruyo las pocas flores que se encontraban a su alrededor. "supongo que solo debía quejarme un poco"

Frente ambos guerreros, un portal comenzó abrirse dando la bebienda al dios del sueño quien parecía estar interesado en las reacciones del caballero de géminis, ya que Aspros no parecía mostrar miedo o respeto.

 

 

        

 

 

Es una sorpresa que el dios del sueño Hypnos se presente ante un caballero de Athena – respondió aspros con cierta burla -

 

Si estoy aquí es para hacer un trato caballero de géminis – en un movimiento de su mano, Hypnos logro hacer dormir a todos los seres vivos que se encontraban a su alrededor – que es lo que deseas.

 

Deseo poder para vencer a mi rival en una batalla ceremonial, yo quiero convertirme en el nuevo patriarca del santuario de Athena.

 

¿Porque deseas más poder? – lo miro con curiosidad al sentir un poder maligno emerger de su cuerpo - ya eres lo suficientemente fuerte para ganarle a quien tu desees.

 

Porque deseo desposar alguien, y para hacerlo necesito ser el más fuerte de todos los caballeros de Athena.

 

Sin poder contenerse Hypnos soltó una risa de burla ante el deseo de aspros, era claro que el caballero de géminis había perdido el control en sus pensamientos y probablemente sería abandonado muy pronto por su armadura dorada.

 

¿Puedo saber quién es el afortunado en convertirse en tu pareja?

 

Manigoldo de cáncer.

 

Notas finales:

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