“Hoy en la mañana se ha encontrado 1 cadáver más en el parque de Sakuras en el parque de Wakayama, todo apunta que se trata de nuevo del asesino de la nota roja”
Akira escuchaba atento las noticias que estaban pasando en la televisión mientras cortaba las verduras para la comida que tendría con su novio el día de hoy por su aniversario número 2 viviendo juntos aunque tenían una relación de casi 6, casi no les gustaba salir, asi que siempre hacían su platillo favorito en casa con vino, no necesitaba ver la pantalla para saber cómo eran las imágenes, por el contrario de su novio que estaba demasiado atento a la televisión, viendo la noticia sin perder detalle.
—Mi amor, no deberías de estar viendo eso, vas a tener pesadillas después…—hablo terminando de cortar los vegetales y poniéndolos en la hoya.
—Lo sé, pero me causa demasiada curiosidad… —respondió el pelinegro aun con los ojos fijos en las imágenes de la pantalla—digo, no son cerca de donde vivimos pero aun asi me da un poco de miedo, cualquiera podría ser su víctima, no tiene un patrón, si son hombres o mujeres da lo mismo, si su cabello es rubio o castaño o negro da igual… eso es demasiado sospechoso, lo único que tienen en común es el mensaje que el asesino escribe en su pecho cortando la carne y que ataca cada 7 días.
—Deberías de dejar de ver series de detectives—se rio un poco y dejo el chuchillo de lado—ya hasta hablas como ellos ¿deberías de dedicarte a eso?
—Sabes que no—se rio—Es interesante, pero da miedo digo, esto es real, las series siguen siendo ficción por muy realistas que parezcan.
— ¿Por qué no mejor dejas eso y me ayudas a poner la mesa?
—Si, si ya voy—se levanto y fue al mueble de la cocina donde tenían las cosas.
Una vez todo listo comieron tranquilos, la televisión de fondo seguía hablando sobre el reciente cadáver encontrado y las 3 victimas anteriores que se habían hallado hace un mes.
Lo que Kouyou decía era cierto, no había ningún patrón.
La primera víctima fue hallada en Osaka, un hombre de estatura un poco más arriba de la media, complexión robusta, cabello negro y ondulado de 38 años; al principio creyeron que se había tratado de un crimen pasional debido a que la victima se había divorciado recientemente debido a una infidelidad, sumando además que el cuerpo se había encontrado desnudo en la cama amarrado a esta aparentemente para el inicio de un juego sexual, sus ojos, lengua, genitales y la mano izquierda habían sido retirados con una precisión casi quirúrgica, lo único que no se encontró en la escena fue la mano, a lo largo de su torso se removió la piel con sumo cuidado para que se pudiera leer la palabra “Infiel” en él, estas heridas habían sido cauterizadas y a la vez abiertas en repetidas ocasiones según los forenses por algún líquido corrosivo, solo para avivar la carne y mantenerla roja en las letras aunque en todo el borde también se encontró irritación provocada por raspaduras como para querer “resaltar” más la palabra , denotando asi que el crimen se planeó pues la víctima no murió al instante , la primera sospechosa fue la esposa pero se demostró su inocencia debido a que ella había estado de viaje cuando lo relacionado a su marido paso.
7 días después apareció la segunda víctima en Kioto.
Una mujer de 27 años, estatura media, delgada con el cabello lacio y castaño y según informes, salida de terapia por violencia contra su exnovio, el cual fue el primer sospechoso debido a las condiciones en las que se encontró el cuerpo además de que todo apuntaba a una vendetta personal, pero se descartó cuando al examinar el cuerpo en la morgue encontraron la palabra “histérica” en todo su abdomen, igual que el anterior cadáver, la piel extraída para formar la palabra, raspaduras para resaltarla y el mismo liquido para irritar la carne viva. La victima fue encontrada en el departamento que había compartido con su expareja, recostada en el piso de su sala alrededor de un montón de cosas rotas, floreros, la propia ventana, la mesita de centro, discos de música y botellas de alcohol, las piernas estaban rotas, las uñas de su mano derecha habían sido arrancadas y la mano izquierda no se encontraba en la escena.
7 días después un nuevo cadáver apareció en Hyôgo.
Una mujer de 34 años, de estatura baja, cabello rubio evidentemente decolorado y de una complexión común que había sido acusada de robo a la guardería en la que trabajaba hace 2 años, se encontró culpable, pero salió bajo fianza la semana pasada antes de que la mataran, la mujer tenía muchos enemigos debido a que no había sido la primera acusación por robo, pero si la primera que paso por un proceso judicial.
A ella la encontraron colgada en su casa, dándole la espada a la entrada de la habitación con manos y pies atados también, suponiendo para que no intentara liberarse, al principio pensaron que era suicidio, pero al revisar el cuerpo, se encontraron con que le faltaba la mano izquierda, tenia la boca y garganta llena de billetes y en el abdomen la palabra “Ladrona” con el mismo modus operandi.
El día de hoy había aparecido el 4 cadáver en Wakayama.
En esta ocasión fue un indigente de 49 años, se había reportado varias veces por insultar y tratar de violentar personas que se negaban a darle dinero o comida. La autopsia había revelado que toda la caja torácica estaba completamente destruida, los huesos habían perforado los pulmones y el corazón matando a la victima en 2 minutos después de los múltiples impactos que le habían hecho con algún objeto pesado que no se encontró en la escena, en su torso como en las anteriores 3 víctimas estaba escrita la palabra “Vago” con el mismo, al principio creyeron que el hombre había muerto por causas naturales debido a que lo encontraron “dormido” al pie de uno de los tantos arboles de Sakura pero cuando vieron la sangre en su boca supieron que en definitiva no estaba dormido, al moverlo solo les comprobó que había sido una víctima más del asesino de la nota roja pues su mano izquierda no estaba.
Cuando terminaron de comer apagaron la televisión, Kouyou lavo los trastes mientras que Akira ordenaba un poco la casa, recibió una llamada a su teléfono asi que contesto; la llamada no duro mucho, llamando asi la atención del pelinegro.
— ¿Ocurre algo malo amor? —pregunto secando sus manos.
—Era del trabajo amor—dijo acercando separa dejarle un beso, Kouyou frunció el ceño.
—No me gusta cuando haces eso, un beso después de decir trabajo significa que te iras de nuevo…
—Solo serán unos días bebé, me tendrás aquí rápido—un beso más y Kouyou soltó un suspiro.
—No hace mucho regresaste y ahora te quieren volver a alejar de mí, no es justo…—dijo bastante decaído, pero al mismo tiempo berrinchudo.
—Mi amor…—dijo en un tono suave, odiaba que Kouyou.
—Odio a tu jefe…
—No lo odies amor, tengo un buen puesto debido a que me recomendó.
—Si, pero eso te hace viajar mucho, casi no te veo y ahora hay un asesino suelto y me da miedo que te pase algo…
—No me va a pasar nada, cielo—sonrió enternecido ante la preocupación de su novio.
Akira sonrió y volvió a besarlo, abrazándolo por la cintura, acariciando su nívea piel por debajo de la ropa, Kouyou sonrió solo un poco, se sentía algo mañoso, pero no iba a negar que las caricias del rubio siempre lo calmaban.
—Te lo compensare, lo prometo, cuando vuelva te llevare a un lugar lindo, tal vez un Onsen para que te relajes y te sientas bien ¿okey?
— ¿Y porque no me haces sentir bien ahora? —jadeo sobre los labios de su novio, apegándose mas al fornido cuerpo de su novio.
— ¿Intentas provocarme? —paseo sus labios por los tan peculiares de su novio para después moverlos por su mejilla hasta su oído donde mordió el lóbulo.
— ¿Lo estoy logrando? —pregunto coqueto jugando con el cabello rubio de su novio.
—Y con honores—bajo su boca al cuello de su novio para comenzar a besar ahí, Kouyou se encogió un poco soltando un jadeo, el cuello era uno de los tantos puntos sensibles que Akira había descubierto a lo largo de esos años juntos.
—Vamos a la habitación mi amor…—pidió excitado ronroneando esas palabras.
El rubio no espero más, tomo una de las manos de su novio y se lo llevo a la habitación, tendría que complacerlo muy bien para que al volver no lo recibiera con malas caras por volver después de tantos días como la vez pasada, en esa ocasión incluso recibió golpes antes de que pudiera volver a sentir las manos de su novio de una manera romántica y no violenta.
Aunque bueno, a Kouyou nunca le había fallado, ni le fallaría.
Era mas probable que matara a alguien antes de fallarle a su amor verdadero.
Fin del capítulo 1.