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Almas gemelas por Usagi Masamune

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Notas del fanfic:

Hola a todos!


Tras ver de nuevo Hybrid Child, se me ocurrió una bella idea para un fic. Espero que lo disfruten tanto como yo.


Los personajes aquí expuestos no son de mi autoría. Todos pertenecen a Shungiku Nakamura.


Un beso!

RITSU POV

Mi nombre es Onodera Ritsu. Trabajo como periodista en un importante periódico de Tokio. En pocas palabras me describo como un chico responsable y perfeccionista. Me gusta tener en orden las múltiples dimensiones de mi vida. Soy egresado de la Universidad de Tokio y obtuve el premio como el mejor estudiante de mi promoción. Dado lo anterior, no se me dificultó obtener un empleo en el periódico Marukawa. A nivel personal, mantengo una relación desde hace 6 con Yukina Kou, un pintor reconocido también egresado de la universidad de Tokio. 

Mi relación con Kou siempre ha sido buena. A pesar que soy mayor que él por unos cuantos años, nos entendemos bien. La forma que nos conocimos fue un poco particular. Mi mejor amigo Kisa Shouta organizó una fiesta y nos invitó. Durante toda la noche quiso que estuviéramos juntos. Se podría decir que actuó como una celestina para mí. A pesar que al inicio me sentí intimidado por su belleza, poco a poco fui abriéndome más a él. Es una persona hermosa, se preocupa mucho por mí y siempre busca que sonría. Si bien en el pasado no tuve buenas experiencias en cuanto a relaciones, con Kou es diferente. Me siento muy tranquilo a su lado y amanecer con él todos los días es una de las mejores sensaciones que se puede sentir.

En cuanto a mi familia, mantenemos una buena relación. A pesar que no somos tan cercanos como quisiera, siempre me brindan apoyo. Mi padre es una persona muy perfeccionista y gracias a él soy así. Según él, el éxito sólo se alcanza si las cosas se hacen con pasión, pero si se hacen bien. En cuanto a mi madre, es una mujer muy responsable y cariñosa. Al enterarse de mi homosexualidad, tanto ella como mi padre siempre estuvieron para mí. Nunca les importó que saliera con hombres. El día que les presenté a Kou, lo amaron. Y desde ese día hasta hoy insisten que me case con él. Debo mencionar que el hecho de imaginarme dicha situación, causa que mis mejillas tomen un color carmín.

Mis amigos han sido mi apoyo todos estos años. Kisa Shouta es mi mejor amigo de la infancia. Es una persona un poco infantil, pero es muy leal conmigo. Él también trabaja en Marukawa, pero en la parte de finanzas. Otro de mis amigos más cercanos es Usami Akihiko. Una persona que en un inicio se muestra fría, distante, pero cuando se le conoce bien es una persona muy afectuosa. Tanto así, que es como un hermano mayor para mí. Aún recuerdo el día que le comenté que estaba saliendo con Kou, casi se desmaya. Estuvo casi dos horas hablando en privado con él para preguntarle sus intenciones conmigo. A fin de cuentas y según palabras de él “No te entregaré a cualquier idiota”.

El molesto sonido del despertador hizo que mis ojos se abrieran. Al despertarme, me percaté que Yukina me abrazaba con el típico afecto que le caracteriza. Una pequeña sonrisa se asomó en mis comisuras. Él de verdad era muy lindo conmigo. Me volteé para quedar enfrente de él y deposité un tierno beso en su frente. Vi que sus orbes cafés se fueron abriendo poco a poco y un pequeño rubor apareció en mis mejillas.

-Buenos días amor- agregó mi novio con un pequeño bostezo al final. Su voz siempre me gustó, era como si fuera una melodía para mis oídos.

-Buenos días amor. Perdona levantarte- dije apenado. Noté que mis mejillas ardían. Frente a mi reacción mi novio soltó una pequeña risa

-No te preocupes.-besó de forma superficial mis labios.-Te quiero. Eres muy lindo-añadió mientras acariciaba mi rostro.

-N-No me digas eso-comenté mientras tapaba mi cara de la vergüenza.

-Sólo digo esto a la persona que me gusta-comentó con un tono victorioso.-Me levantaré a hacer el desayuno amor. Si quieres arréglate- agregó con una enorme sonrisa. 

-E-Está bien, pero la próxima vez yo te cocino-comenté mientras el mayor se levantaba de la cama y se dirigía a la cocina. Tenía un cuerpo esbelto. Sus brazos eran fuertes y tenía marcado el abdomen. A él le gustaba hacer ejercicio. Cuando me quedé solo en la habitación me levanté y me arreglé. Fui a la ducha y tomé un baño. Dejé que el agua caliente bajara por mi piel, mientras algunos pensamientos de mi trabajo invadían mi mente.

No duré mucho en la ducha. Me vestí con unos jeans, una camisa vinotinto y un suéter que Kou me regaló en mi cumpleaños. Era muy lindo y según él, contrastaba con mis ojos verdes. Sonreí al recordar la manera en la que me entregó el regalo. Él se veía muy apenado, pero fue una de las ocasiones en las que se veía más lindo. La dulce voz de mi novio me sacó de mi trance.

-Ritsu, el desayuno ya está listo-comentó en tono alegre mi novio.

-Ya voy Kou-comenté mientras me dirigía al comedor. Yukina siempre había tenido buenos detalles conmigo y esta no era la excepción. La mesa estaba adornada con claveles como centro de mesa y el desayuno estaba dispuesto de forma meticulosa. Adoraba que tuviera esos pequeños detalles conmigo. Era lo que muchos consideran como tipo romántico, pero a mi no me molestaba que lo fuese. Después de tantos años juntos, era bonito que siguiera igual.

-No tuviste que hacerlo-comenté con un sonrojo en mi rostro.

-No digas bobadas Ritsu. Lo hago porque eres tierno, especial y la razón más importante porque te amo-mencionó mientras depositaba un beso en mi mano.

El desayuno fue tan ameno como siempre. Hablamos un poco de nuestros proyectos. Kou me comentó que una de sus obras iba a estar en exposición la semana siguiente en el museo y que le gustaría que estuviera allí con él. Me alegré mucho por él. A diferencia de mí, los padres de Kou no lo apoyaban mucho en su carrera como artista. Lo cual siempre le causó un poco de inseguridad sobre si seguir en su carrera. Nunca me rendí con él y con el apoyo de Kisa logramos que cumpliera sus sueños. Saber que la persona que amas está cumpliendo sus sueños es una de las sensaciones más lindas. Por mi parte, le comenté que tendría que ausentarme unos días por un reportaje que tenía que hacer en Kyoto. No me gustaba mucho alejarme de él, pero eran cuestiones de trabajo y era una nota muy importante para mí.

Al finalizar el desayuno me despedí de él con un cálido beso. Él me abrazó con ternura y me dijo que me tendría una sorpresa cuando regresara a casa. Tomé el metro desde nuestro piso hasta la estación más cercana al periódico. Era un día bastante frío. Caminé enfrente del parque que estaba a dos cuadras de mi oficina y en menor tiempo del que esperaba llegué a mi destino. Saludé con amabilidad al guarda y tomé el ascensor encontrándome con uno de mis compañeros Ijuuin Kyo.

-Onodera-san buenos días--comentó alegre el mayor.

-Buenos días Ijuuin-respondí de forma amable.

-Onodera-san, ¿oíste que el día de hoy se van a integrar a nosotros estudiantes que están realizando su pasantía?-preguntó curioso.

-¿Qué?-pregunté sorprendido.-Pensé que llegaban hasta el otro mes. Estamos con muchos trabajos pendientes-agregué con un poco de frustración. No me molestaba que hubiesen pasantes en la empresa, pero teníamos muchos artículos y reportajes pendientes. No teníamos tiempo suficiente para acompañar a los estudiantes y explicarles con detalle ciertos aspectos importantes. Al ser perfeccionista, siempre que llegaba alguien al periódico a realizar sus prácticas me esmeraba al máximo para ser su apoyo y estar pendiente de esa persona todo el tiempo.

-Creo que por eso mismo lo hicieron-respondió con una pequeña risa el mayor. -Isaka-san quiere aligerar nuestro trabajo haciendo que ellos se “quemen”-agregó

Al llegar al piso de nuestro destino nos separamos por un rato. Él tenía que sacar unas copias y me había comentado que Isaka-san quería hablar conmigo respecto a los pasantes. Él siempre me otorgaba dicha función puesto que él me consideraba la persona más paciente para ejercer dicha labor. En sus palabras, que era el único que estaba permanentemente pendiente y acompañando a los novatos.

Llegué a la oficina de él de forma segura. Al ingresar me di cuenta que los pasantes estaban ahí. Eran tres chicos, un ojiverde que se mostraba muy emocionado. Un ojimiel que se mostraba muy indiferente a la situación y un ojiazul que estaba manteniendo una plática amena con Isaka-san.

-Buenos días-comenté ganándome la atención de todos.

-Buenos días-respondieron todos haciendo una venia, menos el ojimiel que se notaba algo irritado ¿Qué le pasaba a ese chico?

-Ritsu, quise llamarte para presentarte a los chicos que los van a acompañar durante este tiempo. Chicos por favor preséntense-comentó mi jefe.

-Mi nombre es Takahashi Misaki. Un gusto-comentó nervioso el ojiverde mientras daba una venia 

-Mi nombre es Kusama Nowaki. Un gusto Onodera-san. He escuchado muchas cosas buenas de usted en la universidad-Sonrió galante el ojiazul generando que un pequeño rubor apareciera en mi rostro.

-Takano Masamune-comentó de forma cortante el ojimiel. Definitivamente tratar con ese chico iba a ser más difícil de lo que pensé.

CONTINUARÁ….

 

Notas finales:

Espero que les guste el cap.


Cualquier comentario que tengan me gustaria leerlos.


Un beso enorme.


Usagi Masamune


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