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Más de media hora por Aurora Artemiva

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Notas del fanfic:

AU: CIA/Agentes de Inteligencia.

 

Notas del capitulo:

¿Como están chiquis? Vengo a traerles el primer capitulo de este fic que promete ser atrapante y emocionante.

 Las aclaraciones se las dejo al final de la lectura.

(Shingeki no Kyojin no me pertenece ni sus personajes; éstos son obra del mangaka Hajime Isayama.)

 ¡A disfrutar!

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Singapur; Oficina central de Inteligencia

 

Mayo del 2020

 

08:26 AM

 Nos encontramos en el país asiático caracterizado por su desarrollo socioeconómico y tecnológico. Un ejemplo claro del ascenso político y cultural que pudo dominar el pueblo singapurense. Su baja desocupación y pobreza lo convirtió en una potencia mundial la cual acarreó con todos sus problemas para lograr aquello.

 Como si esos atributos no fueran suficientes, también encabezó la lista de posibles aliados de la CIA, y aquel puesto lo consiguió con méritos indudables.

 Así llegamos a esta época del año 2020, donde las sedes pertenecientes al órgano más grande de inteligencia se encuentran en Singapur.

 Vayamos a lo obvio, no fue para amigarse con la nación. Estados Unidos vio al país asiático como una amenaza ante tanto desarrollo de golpe; y cierto es el dicho de que es mejor tener a tus enemigos, como amigos.

 De esta forma, Singapur en vez de enfrentarse al país norteamericano, se convirtió en aliado.

 La agencia sentó bases hace algunos años en la capital, y trajo consigo agentes bilingües  y capaces de crear un equipo de trabajo en tierra extranjera.

 -Este es un asco. Descartalo -

 Ese es el caso de Levi Ackerman.

 -Pero señor, es el último de la lista - comunicó su asistente.

 -No importa. No voy a entrenar gente inepta  - finalizó - ya voy a encontrar el indicado.

 Su asistente, algo preocupada, se retiró de la oficina con la lista de posibles agentes en mano.

 Vamos a la realidad; Levi es un agente bien entrenado, apto, sigiloso y detallista en su labor. Entró a la escuela de inteligencia a los apenas 18 años. Logró ascender y conocer el ámbito mucho más profundo que sus pares; y así, llegó a escalar alto, convirtiéndose en quién es hoy : un agente de 28 años  bien reconocido dentro de la CIA y el encargado de convocar a un equipo de trabajo en Singapur.

 Con sus objetivos claros y aspiraciones altas aceptó el puesto y se mudó hace unos meses al país asiático.

 El problema con el que lidia hoy en día es el último recluta que necesita dentro de su equipo, el cual aún no encuentra.

 Es alguien muy severo y estricto, y no va aceptar a cualquier novato con buenos movimientos dentro de su grupo.

Él sabe que necesita a alguien con doble cara; alguien que pueda sorprender y también pasar desapercibido. Alguien que sepa manejarse con facilidad pero cauteloso. Alguien explosivo pero a la vez silencioso.

 Y ese alguien no lo está encontrando.

 Eso en lo que respecta a círculo laboral. Volquemonos ahora en su vida privada.

 Es alguien tanto calculador como frío, no se deja engañar y mayormente actúa con cautela. Por otro lado, la vida con él no fue tan dura esta vez. No se murieron sus amigos, ni su madre, ni su familia cercana. En eso estaba bastante satisfecho, ya que pasar por segunda vez aquel dolor sería un infierno.

 Ah, claro, nos olvidamos del detalle más importante.

 Levi tiene recuerdos de su vida pasada.

 No muchos, pero si los claves.

 Fue difícil, aquella época le fue muy difícil. Sucedió en los años de secundaria, de manera progresiva. Primero fueron imágenes difusas, parecidas a un sueño. Luego sintió deja vus en lugares intransigentes, para finalmente golpear, de a poco y con una frecuencia de minutos, los recuerdos de su vida como capitán, con sus amigos cercanos muertos y con las marcas tanto físicas como psicológicas de la batalla.

 ¿Que cómo lo sobrellevó? Sólo.

 Decidió hacerlo solo.

 Al comienzo intentó con el psicólogo para comprender sus sueños. Pero cuando entendió de a poco de lo que se trataba, se sintió más tranquilo y no recurrió a especialistas.

Se amigó con aquellas vivencias lejanas y externas para que formaran parte de su pasado y pudiera continuar con esta nueva oportunidad de vida.

 Es así que al día de hoy frecuenta las oficinas ubicadas en la metrópolis de Singapur como agente de la CIA.

 Esa mañana hacía más frío que de costumbre, y si bien la Isla tiene climas horrendos, ésta vez sopló corrientes frías con mayor fuerza. La nubosidad grisácea y el viento le dieron un despertar algo crudo; y luego de bañarse y salir de su apartamento, arribó a la Sede central.

Se levantó de su sillón negro de cuero a servirse un té con la maquinaria situada al costado del escritorio (pava eléctrica y tazas de cerámica).

 Ajustó su blazer gris entorno a su cintura buscando más calor mientras se calentaba el agua, hasta que unos golpes sutiles y pequeños a su puerta de vidrio le hacen dar la vuelta.

 -¿Así que rechazaste al último candidato que tenías? - preguntó con amabilidad su compañero.

 Este es otro dato importante; Erwin Smith no sólo coincidió en esta vida para ser compañero de Levi en la CIA, sino que también reencarnó, aunque sin recuerdos.

 Eso fue punto a favor para Ackerman, quien se sintió bendecido por poder compartir otra oportunidad junto a su amigo.

 -Sí...era horrible. Ni siquiera sabía cómo sujetar bien un arma - comentó sirviendo el té.

 -Jajajaj. Lo entiendo, yo tampoco aceptaría a alguien ineficiente en mi círculo - le dijo adentrándose a la oficina recubierta de paredes de vidrio.

 Smith tomó asiento frente al escritorio negro decorado con un cenicero de marmol, alcohol en gel y un lapicero metálico.

 Digamos que Levi no era muy familiero a la hora de llevarse objetos personales al trabajo.

 -¿Entonces qué vas hacer ? - preguntó Erwin - te quedan dos semanas para encontrar al último integrante. Sino, te van a -

 -Ya lo sé; me van a devolver a Estados Unidos. Lo tengo presente - afirmó Ackerman.

 Tenía muy claro y presente el hecho de que si no conseguía formar un equipo de trabajo antes de la fecha acordada, su misión habría terminado y fracasado en Singapur; devolviéndolo a EE.UU 

 Le ofreció una taza de café al rubio, y expuso su problema.

 -No encuentro al indicado. Todos lograron pasar mis pruebas, pero necesito alguien que me sorprenda. Esa es mi condición para aceptar al último- comentó.

 El contrario dio un sorbo a la taza y habló.

 -¿No crees que ese es el problema? -Levi lo miró confundido - estás buscando a un agente que no solo llene tus expectativas, sino que las sobrepase. Puede que ese alguien no exista y estés ahora buscando a un recluta idealizado.

 -Puede que tengas razón - afirmó dubitativo - pero vine a Singapur con un propósito, y fue armar un equipo de trabajo especial. Conseguí reclutas de cada parte del mundo, y pienso seguir buscando.

 Erwin le sonrió con empatía y se llevó la taza sucia para lavar. Ya estaba al tanto de la manía de limpieza de su compañero.

 -Suerte con eso Ackerman.

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16:02 PM

 El día laboral no fue ajetreado para él. Casi nunca lo era, y eso es debido a que aprecia y disfruta de su trabajo.

 A veces le molesta el ruido y el bullicio de la ciudad, pero puede soportarlo. Sin ir más lejos, recuerda el grito ensordecedor de los titanes, así que un par de bocinas o voces chillonas no le afectan.

 Cuando pensó en aquello quedándole menos en una hora para retirarse de trabajo, dejó los informes que llenaba para la próxima reunión y se enfiló a la ventana contemplando la ciudad.

 Era muy diferente. Absolutamente todo era muy diferente en esta época para él. Sin embargo, prefería este tipo de vivencia a que librar una constante guerra.

 Dejó ir un suspiro que empañó la ventana, y lo limpió para divisar como las luces apagadas de las calles, ahora se encendían con una luminiscencia blanca. A lo lejos el contraste de luces se volvió turquesa por la combinación de fuentes energéticas, y un pensamiento traicionero jugueteó en su cabeza

 "Azul como los ojos del mocoso "

 Se reprochó a sí mismo por pensar en él. Tenía que olvidarlo. No podía sufrir por Eren también en ésta época. Así es como en pocas ocasiones creé extrañarlo y se remonta a recuerdos perdidos para verlo sonreír y estrechar los ojos.

 Volvió a buscar su teléfono para corroborar la hora y comenzó a guardar sus carpetas y documentos dentro del bolso. En medio de sus acciones, escuchó un llamado:

 -¡Ackermaaan!-

 Reconoció fácilmente la voz de Erwin. Se rió al pensar que incluso en esta época, el cejon era infumable.

 -¡Ahí voy! - le devolvió sabiendo que sería escuchado a través de los cristales.

 Una vez en la oficina de Smith, éste le hizo señas para que se acerque juntó a él frente a la notebook de trabajo.

 -Creo que encontré algo que te va servir - le dijo cuando se paró a su lado presenciando la pantalla.

 Levi esperó segundos mientras cargaba un vídeo de cámaras de seguridad, y dio con una grabación de 15 segundos dentro de un centro comercial. Lo único llamativo de aquello era el momento donde un hombre chocaba sin intención a otro, otorgándole una disculpa enseguida.

 -No entiendo para qué mierda me mostras esto - le dijo a Smith.

 -Mira de nuevo y presta atención a ese hombre - contestó señalando al joven que chocó con otro.

 En la segunda rebobinacion, Ackerman puso atención al golpe de hombro entre los ellos, y pudo visualizar aquello de lo que hablaba Erwin.

 -¡¿Acaba de sacarle documentos del bolsillo?! - preguntó asombrado.

 -Exacto. Lo hizo en menos de un segundo y ni siquiera vos pudiste notarlo a la primera - aportó.

 Volvió a ver la grabación más de cinco veces sintiéndose incrédulo. Aquel joven era un experto en lo suyo.

 -¿Porque tiene la cara desenfocada en la grabación? - preguntó al notar que el rostro del joven se había tapado para darle anonimato.

 -Esa es la mejor parte - aclamó Erwin - es un agente encubierto.

 -¿Qué?- interrogó ansioso - ¿Es un agente? ¿De dónde?

 -Es de Argentina. Pertenece a la AFI* - Informó satisfecho - así que… ¿pensás pedirselo a la agencia como candidato?

 -Obviamente sí - confirmó - ¿Hay más grabaciones como estas?

 -Sí, hay algunas más subidas en el foro de candidatos.

 -¿Como se llama el chico? - preguntó Levi anotando las indicaciones que le daría a su secretaria ese mismo día para hacer las llamadas correspondientes a Argentina.

 -Lo tienen en anonimato. Parece ser bastante bueno. Es el agente 104. Llamalo por esa combinación cuando lo pidas como voluntario.

 Terminó de anotar las indicaciones en un papel sobre el escritorio de Smith y le otorgó aquella tarea a su secretaria.

 La última esperanza que necesitaba la había obtenido, y tal vez gracias a aquel muchacho podría conformar aquel equipo de trabajo que tanto necesitaba.

 Esa misma noche indagó en el foro de voluntarios y analizó todos los videos del agente 104. Tal como había ocurrido en la primera grabación; Levi se sorprendió con las demás. El chico sabía cómo obtener información, sabía defenderse en un ataque y sabía cómo maniobrar un arma. Era justo lo que quería; alguien que lo sorprendiera. Notó algunos desbalances en cuanto a la posición del cuerpo pero con algo de entrenamiento lo podría mejorar fácilmente.

 Cerró su laptop cuando acabó de anotar los detalles de la transferencia del chico ( en caso de que aceptara trabajar con él) y bajó el aparato electrónico de la cama.

 Se acostó tapándose con el acolchado rojo de su cama y por esa noche, pudo descansar tranquilo al despreocuparse de encontrar un candidato adecuado.

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10:28 AM

 Tres días habían transcurrido desde el pedido de Levi del agente 104 a la Agencia Federal de Inteligencia.

 Tuvo la aprobación de ésta, sólo faltaba la decisión del agente para transferirse de Argentina a Singapur.

 Levi entendía aquello; era una decisión difícil. De estar trabajando de encubierto en tu propio país a mudarte miles de kilómetros y trabajar en suelo desconocido no era fácil. Por eso entendía que tal vez la confirmación del agente tardaría un poco, o en el peor caso, no aceptaría.

 Sin embargo, sus ansiedades se fueron a la basura cuando recibió un llamado a su oficina esa mañana informándole que el agente había aceptado.

 Ya estaba hecho, el agente iría a Singapur para formar parte de su equipo.

 Teniendo Levi esa noticia en manos, movió a su personal para tener lista la llegada del chico en menos de dos días.

 La hospitalidad y los gastos habituales correrían por cuenta de la Agencia, así que aquello fue un problema menos.

 

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La sala de reuniones ya estaba lista. Levi llevó los papeles necesarios para que el agente firme ante un pedido de silencio y confidencialidad mutuo.

 Se sentía relajado y tranquilo, sabía que estaba tomando una decisión correcta al llamarlo como integrante de su grupo. Sólo faltaba corroborarlo en aquella entrevista personal que tendrían.

 Además, tenía que saber quién era, ya que aún no había podido ni verle la cara. Le pareció algo justo y lógico, ya que la identidad de los agentes casi nunca era revelada al público en general por una cuestión de seguridad.

 Así decidió esperar en la amplia sala conformada por una extensa mesa de madera, lámparas cristalinas y sillas negras.

 Preparó un té el cual degustó mientras esperaba y se miró a sí mismo en el reflejo del vidrio. Lucía bastante bien y presentable. No le gustaba llevar el traje desaliñado así que lo planchó esa misma mañana al igual que la camisa blanca y la corbata azul que llevaba puesta.

 En medio de la espera, su asistente abrió la puerta.

 -Señor, el agente 104 ya llegó - informó la mujer.

 -Gracias Elena. Hacelo pasar-

 Fue hasta la máquina Nescafé a prepararle uno al chico en señal de comodidad, hasta que escuchó abrirse la puerta por segunda vez.

 -Good morning. Nice to meet you* - dijo el joven al ingresar a la sala.

 Ackerman imaginó que ocurriría eso. El agente intentaría establecer conversación en inglés.

 -Ni te gastes en hablar en inglés. Sé español - le dijo aún de espaldas sirviéndole el café en una taza.

 -¡Ah! Disculpe. No lo sabía. En ese caso; buenos días. Gusto en conocerlo - recitó el chico.

 En ese mismo momento a Levi le recorrió un frío electrizante por la columna. Aquella misma sensación albergó en los vellos de sus brazos y en su pecho el cual se agitó. La sensación de ardor de la taza ya no le parecía nada en comparación a la parálisis que sufría su cuerpo, y cuando recayó en lo que estaba sucediendo, un solo pensamiento le llenó la consciencia:

 "Es su voz... Es su puta voz..."

 Giro el rostro sabiendo que tenía una faceta consternada, pero no pudo modificarla.

 Así, para cuando observó el rostro del chico por primera vez, supo que estaba totalmente perdido.

 Ante el silencio del mayor, el chico confirmó lo que para Levi ya era obvio.

 -Disculpe que no me presenté todavía señor. Soy Eren Jaeguer -

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Notas finales:

-AFI*:Agencia federal de Inteligencia argentina.

 -Good morning. Nice to meet you*: Buenos días. Gusto en conocerlo.

 Hasta acá por hoy bellezas! En la semana subo la continuación.

 Besos y fuerza!


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