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Blackbird / Pájaro Negro por Lady_andree9

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Notas del capitulo:

Bueno, al fin me anime a escribir algo en amor yaoi, espero les guste este pequeño piloto, no olviden comentar si les agrada. 
se tocarán temas algo turbios, así que se requiere discreción.

Prólogo


Se encontraba pensativo; Vegeta Sayian mientras veía gente pasar constantemente al frente suyo en el aeropuerto de Kansas, en Estados Unidos. Habían pasado 15 largos años de arduo estudio, servicio social y trabajo como médico cirujano que era tiempo de volver a su país natal; Japón. Estaba feliz de regresar en la mejor época del año, primavera donde Kioto se vestía de rosa con sus hermosos cerezos;


“Do you need anybody?


(¿Necesitas a alguien?)


I need somebody to love


(Necesito a alguien a quien amar)


Could it be anybody?


(¿Podría ser cualquiera?)


I want somebody to love


(Quiero a alguien a quien amar)”(The Beatles With a Little help from my Friends)


Involuntariamente comenzó a tararear la melodía que resonaba en la sala de espera en el aeropuerto mientras sus dedos imitaban la batería, tras un fuerte suspiro recargo su cuello en la incomoda silla para cerrar sus ojos disfrutando de la melodía. Siempre había sido un sujeto de pocas palabras y mirada asesina, aunque sus intenciones no fueran esas, entonces el tener una “pequeña ayuda de sus amigos” no era una opción, aunque alguna vez si lo fue cuando tenía 13 años; 


Kioto, Japón, 1978.


Fue en el verano que se integró a un nuevo instituto público, su madre le había peinado y arreglado el uniforme de una forma impecable, aunque la cara de Vegeta de pocos amigos no mejoraba, tenía planeado no relacionarse con alguien, lo veía como una pérdida de tiempo y dinero hasta que al entrar a su salón de clases pudo verlo; era un joven de piel blanca, cabellos rebeldes en forma de palmera, tenía el rostro relajado viendo al horizonte. Esa fue la primera vez que vio a Son Goku, la razón de muchos de sus problemas emocionales en su juventud, la razón por la que alguna vez perdió el rumbo de su vida, la razón por la que alguna vez amo tanto en su vida. 


-¿Te gustaría unirte a nuestro equipo para el proyecto de biología?- escuchó para detener su lectura y poder observarlo; era un joven alto, fornido, de cabello negro, usaba lentes de pasta gruesa y tenía una sonrisa amigable, pero eso no era lo que más le llamaba la atención; era Son Goku quien se encontraba a su lado como siempre con la mirada baja viendo hacia otro lado.


Durante su primer mes en el instituto se dedicó a observar a sus compañeros, de entre ellos Goku siempre destacaba en su mente, era el más callado, el más atento y participativo en las clases, pero, siempre se alejaba con Gohan, del mismo curso, jamás dirigiendo su mirada hacia las personas, esto hizo que Vegeta no se lo tomara personal, después de todo solo lo había observado pero jamás interactuado con él;


-¿Por qué a mí?- preguntó Vegeta. 


-Porque eres callado como nosotros- admitió el joven con una sonrisa sincera-. Mi nombre es Gohan, es un placer... 


-Vegeta- respondió el saludo con un estrechon de manos. 


-Bueno él es m-mi n-novi... mejor amigo, Son Goku- presentó Gohan señalando al joven que aún estaba distraído hasta que escuchó su nombre para encontrarse con la mirada de Sayian. 


-Es bueno conocerte, Vegeta- dijo el joven en casi un susurro inaudible.


Vegeta inevitablemente sonrío, cosa rara en él, pero era la primera vez desde el mes que llevaba en la escuela que por fin podía verle a los ojos, eran muy bonitos para ser de un chico; ¿Los chicos tienen ojos bonitos? 


De un proyecto de biología en conjunto surgió una extraña amistad, era el trío misterioso, tenían una extraña conexión que los hacía permanecer juntos la mayor parte del tiempo posible tanto que poco a poco tuvieron la confianza de revelar de sus vidas, sueños y pasiones ocultas; Gohan era la pareja de Goku dese que tenían 10 años, ambos eran homosexuales, pero a pesar de su relación jamás se besaban en público ni a solas, era una relación en la que no habían comportamientos habituales en una, solo un título que los unía en un compromiso moral. Era una lástima, ya que desde que llegó se había interesado en Goku y su interés crecía mientras más lo conocía aunque sabía que Gohan estaba con él;


-Hola, ¿tienes mucho esperando?- preguntó Vegeta. 


-No realmente, me sorprende que Gohan no haya llegado- respondió Son, levantándose de la banca.


-Tienes razón siempre es muy puntual...- Vegeta no pudo evitar mirar la bonita ropa que llevaba el chico; su abrigo invernal color vino, una bufanda blanca, pantalón y botas grises, un atuendo perfecto para el invierno.


-Sí... pero a veces su madre es el problema- confesó estirando de forma rápida el abrigo de la manga derecha. 


-Sería mejor que te pusieras guantes tu muñeca parece estar hinchada- dijo Vegeta tratando de tomar la mano de su amigo.


Goku al contacto de forma abrupta se alejó para mirarlo a los ojos; 


-Estoy bien Vegeta...


“Esa era su frase de siempre, cuando realmente nada estaba bien, esas muñecas, pies, piernas, brazos, torso, pecho y espalda, siempre estaban llenas de crecientes heridas que negaba” 


Kansas, E.U, 2000.


-Vegeta- exclamó el joven sacudiéndolo ligeramente liberándolo de su trance.


Adormilado pudo visualizar a Kyabe, su compañero prodigio en la universidad y actual ¿pareja? ¿consuelo?, realmente no tenían algo formal como un noviazgo, pero ambos salían y tenían relaciones sexuales, pero, nunca recordaba haberle confiado a Kyabe el tema de Goku en su vida.


-Vaya, ahora si estás muy despistado gruñón- admitió en tono burlón. 


-Basta, solo necesitaba dormir un poco mientras esperaba mi café y el vuelo- dijo Vegeta incorporándose del asiento.


-Sobre eso, lamento decirte que solo encontré cappuccino y... 


-Que bueno que no lo trajiste- contestó aliviado.


-Te conozco, Vegeta Sayian...


“Eso crees Kyabe” 


Kyabe era 5 años menor que él, con 30 años de edad. Para él era emocionante mudarse a Japón, después de pasar la mitad de su vida en un país extranjero, sabía que con Vegeta nada le haría falta, ambos eran médicos en servicio desde hace 2 años pero esta vez su gran oportunidad había comenzado al obtener un llamado de uno de los mejores hospitales en Japón.


De nuevo más preguntas llegaron a su cabeza;


“¿Por qué no le he dicho nada sobre Goku?  


¿No le tengo la suficiente confianza?


¿Me conoce? 


¿Qué somos?


¿Qué éramos Goku y yo?” 


Kioto, Japón, 1981.


Ese día Gohan nunca llegó, en los periódicos locales salió la tragedia, se había estampado contra con un carro, su cuerpo estaba irreconocible y la autopsia lo determinó como un suicido. Gohan se había lanzado a la autopista con un alto consumo de LSD y su cabeza fue lo primero que impactó con el suelo de concreto dejando un charco de sangre, mientras a un lado de su noticia en el periódico se anunciaban a los ganadores de la lotería. 


La familia organizó un pequeño funeral donde tanto Goku como a Vegeta asistieron y para sorpresa de éste último; Goku ante los ojos de la pequeña familia de Gohan, era conocido y odiado por ser el novio del fallecido, les repudiaba su condición sexual y como alguna vez introducía a Gohan a ese bajo mundo.


Para sorpresa del más bajo de estatura, Goku no se había tirado al drama ante el ataúd de su ex novio, sino que al contrario se le veía serio y tranquilo. A pesar de ser el peor momento sabía que el negro quedaba perfecto con la piel nívea y perfecta del joven Son; 


-Lo siento- susurró Vegeta colocando su mano en el hombro del más alto.


-Gracias Vegeta- agradeció mirándolo a los ojos.


-¿Por qué lo hizo?- preguntó al aire confundido. 


-Todos tenemos un límite- contestó para voltear su rostro y quedar frente a Sayian-, y nos puede llevar a un escape apresurado.


 


 

Notas finales:

Espero les haya agradado se que es corto pero es una pequeña introducción al misterio que envuelve a cada uno de los personajes, muchas gracias por leer.


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