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Ramza por dark kirito

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# Ramza #
Final Fantasy Tactics pertenece a Square Soft/Enix. Escrito en el móvil, errores son sin querer. Muchísimas gracias a Yayoi y a todos los que leen por el apoyo :D.
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Ramza
Él es más que solo un héroe olvidado por la historia.
Final Fantasy Tactics
Delita x Ramza (muy leve)
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Ayer se anunció por todo Ivalice que la reina Ovelia había sido asesinada, las versiones oficiales hablan de un rebelde que será enjuiciado y seguramente ejecutado en privado, para no hacer de la tragedia un circo; ciertamente dicho culpable en realidad ostenta ahora la corona como único y al casarse con la desafortunada chica, legítimo sucesor. Pero no todo es miel sobre hojuelas para Delita, han transcurrido un par de días y no ha podido dormir en lo absoluto. El rostro de su esposa apareció en sueños a cada segundo, cada instante recordándole el pecado. El actual rey estuvo siempre consciente de que no llegaría tan lejos sin ofrendar tributo pero, hasta ahora era gente que lo merecía, aún si él no era nadie para decidirlo pero, ¿por qué acabar con la vida de una inocente chica que no debió estar ahí en primer lugar?
—Un sacrificio necesario.
Ella lo sabía, estaba al tanto de sus fechorías, ¿desde cuándo? No podía estar seguro pero eso, había sellado su destino.
Da un par de vueltas en el lecho intentando conciliar el sueño, más es imposible. Sale de la cama, se retira la pijama para cambiarla por el ropaje real. Da una caminata por el palacio que de alguna manera termina al borde de un risco, con los suaves rayos de sol matutinos y la refrescante brisa salada del mar. Cierra los ojos.
—Teta…
Decir que todo lo hizo por ella sería justificarse inútilmente; si, ella fue la causa pero en realidad ha sido un gran egoísmo de su parte, para no tener que sentirse así nunca más, para tener el poder, el verdadero poder, uno con el que se escuche su voz, con el que nadie pueda oponerse. Para no ahogarse en frustración, impotencia y arrepentimientos. Para no mirar el rostro de Teta en una nueva víctima de la nobleza a la que no le importa pisotear a los plebeyos porque, según ellos entre estos y los animales no hay diferencia. Vaya falacia, incluso los caballos en los establos de los Belvoube estaban mejor alimentados que varios de los pobladores que apenas si se las arreglan para sobrevivir.
El monarca respira hondo y a su nariz llega un olor familiar, abre los ojos, vira y se encuentra con un fantasma, una ilusión de su mente que le hace una jugarreta mostrándole a la persona que más desea ver. Un joven rubio sin expresión en particular le contempla en silencio pero, no puede estar ahí, es imposible pues ha muerto en el inframundo o quizá, ha venido para llevarle con él y no le culpa, también fue víctima de todas sus acciones.
—Ramza… — dice con tono lastimero.
—Asesinaste a Ovelia.
El moreno da un respingo casi imperceptible, sin embargo hace uso de toda voluntad para no evidenciar la sorpresa. Gira de nuevo en dirección al mar, el otro se coloca a su lado. Se hace un silencio de varios segundos.
—A estás alturas lo sabes todo — inicia el rey — ¿Has venido a matarme? ¿Harás justicia?
—¿Justicia? — una tenue risilla escapa de sus labios — Me has recordado lo ingenuos que éramos, cuando creía que hablando con mis hermanos podía solucionar las cosas, o cuando eras el fiel…
—¿Sirviente de los Beoulve? — no me avergüenzo del pasado, sabes que no es eso lo que me molesta.
—Mi padre y yo los consideramos familia.
—Y mira como acabó.
—La familia también se traiciona…
Las olas rompen en el acantilado con fuerza, el rubio niega.
—Si bien no estoy de acuerdo en tu proceder, no soy quien para echarlo en cara. Tienes las manos manchadas de sangre inocente… también he matado y por si fuera poco se ha ensuciado mi nombre. Nadie confiará en un Beoulve, mucho menos en mi, el gran hereje de la iglesia que provocó todo este caos.
—Aun podrías decir la verdad.
—¿Para qué? Habrá quien se aproveche de ello para desestabilizar de nueva cuenta, para buscar el poder, intentarán usarme y una vez que no les sirva me desecharán e intentando evitar ello, provocare otra guerra que quizá dure más tiempo, tal vez no viva para ver el final. Al menos ahora la realeza es alguien a quien le confiaría mi vida.
—¿Después de todo lo que hice?
—Jamás fue en tu beneficio. Si hay o no egoísmo en tu proceder es algo que solo a ti te concierne pero, no buscas riquezas, ni fama, mucho menos el poder absoluto solo por ego; realmente buscas un cambio. A pesar de ser el único miembro de la familia real, escuchas al pueblo, buscas la manera de ayudarlos, eres una figura confiable a la que se pueden sujetar en tiempos de post guerra, cuando muchos han perdido a sus seres queridos, cuando las figuras que debían protegerlos se desviaron, los traicionaron y desaparecieron. Si no eres tú, ¿quién?
—Eres Ramza Beoulve, hijo de Balbanes Beoulve, el gran héroe de la guerra de los cincuenta años y… Saint Ajora… tu eras su…
—Lo que soy, lo que fui no interesa, esto no trata de mi. Esta vez seré una sombra en la historia, una mancha necesaria y estoy bien con ello, para que exista un héroe debe haber un villano. Sin embargo hice y aún puedo hacer algo. Proteger la felicidad y prosperidad que Ivalice merece.
—¿Qué hay de lo que se hablará de ti de ahora en adelante? Tendrás que vivir escondiéndote.
El rubio se encoge de hombros.
—Como si no lo hubiera hecho antes al cambiar mi apellido, Ruglia no me sienta mal.
—Y sin embargo había personas que conocían tu rostro, como Gafgarion.
—No soy el mismo de antes, no me subestimes.
—Entonces no te tomes las cosas tan a la ligera.
—Ah vaya, que nostálgico. Y aquí viene uno de los sermones de Delita.
—¿Pero qué…? — interroga molesto, el otro sonríe.
—Un rey no debería perder la compostura por una simple broma.
—Tienes razón… tú… ¿a dónde irás?
—¿Te preocupa que pueda hacer algo en tu contra? Tal vez deberías encarcelarme.
—Para de jugar por un segundo, ¿quieres?
Un deje de tristeza se asoma en los ojos ámbar.
—¿Qué nos pasó? Recuerdo como si fuera ayer las clases en la académica, el tiempo que pasamos juntos y ahora, somos enemigos — niega con la cabeza — ¿Lo somos? Me usaste para tus propósitos pero al mismo tiempo solo seguí el camino que yo mismo elegí. Somos personas muy distintas, mientras yo intentaba salvar a Alma, a lo único que me quedaba de la familia, mientras no pude evitar ayudar a quien se me ponía en frente, tu… tu tienes una visión mucho más amplia de la situación y es por eso que no hay nadie mejor que tú para ser rey. Aún así soy testigo de lo que la autoridad hace a la gente, mi hermano Dycerdag no siempre fue así. Después de hoy no vas a verme nunca más pero estaré ahí, vigilándote porque yo también tengo la responsabilidad… Teta… jamás voy a perdonarme por eso…
—Pero tu no…
—Si no se hubieran involucrado con los Beoulve… si Dycerdag no hubiera hecho tantas cosas a escondidas, si Zalbag hubiera protegido a quien debía, si no hubiese dado prioridad al orgullo… si hubiéramos llegado antes… No, no me haré el desentendido. Y a pesar de todo no me siento miserable, las dos personas que más me importan aún viven.
—¿Dos? — arquea la ceja confuso.
—Bueno mi estimado amigo — camina al borde del risco — ha sido un placer volver a verte pero ya he tardado demasiado y debe estar preocupada.
—Te refieres a…
—Si tienes dudas da un paseo por el bosque, tal vez alguien esté cerca escuchando y aunque no recibas una respuesta te ayudará a despejar la mente.
—¡Espera! Aún hay demasiadas cosas qué…
—Adiós.
El rubio se lanza al vacío ante la mirada atónita y aterrorizada del moreno.
—¡Ramza! — busca con la mirada lo que sea, ropa, carne, sangre; nada. Después de tantas adversidades no moriría de una manera tan estúpida, ¿cierto? Se frota las sienes con las yemas de los dedos — En verdad eres un dolor de cabeza.
Y así, inexplicablemente vuelve a palacio con el corazón más ligero, ideas frescas y espíritu renovado. Después de todo es cierto, si permite que le atrapen los demonios del pasado nada habrá tenido sentido. La muerte de Teta fue algo que cambió el pequeño mundo de su hermano en primer lugar pero luego, realmente transformaría todo lo demás.
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No muy lejos de ahí.
Una chica contempla la playa, a la orilla del lado izquierdo viene un ser caminando, le espera con paciencia hasta que llega a ella un joven escurriendo de agua.
—¿Han discutido? — cuestiona la fémina.
—No.
—¿Han hecho las paces?
—Tampoco es como que estemos peleados.
—¿Le dijiste lo que sientes por él?
—¡Achú! — se frota los brazos en un ademan que denota frío — Necesito una muda de ropa.
—¡No cambies de tema!
—Sera mejor que nos demos prisa o no podremos preparar la cena.
Ramza da la espalda, Alma reposa su rostro en ella.
—No es justo, si tienes tantas ganas de estar a su lado…
—No piensa en morir, eso me basta.
—Eres un tonto pero no te preocupes, estará bien, aún te tiene a ti.
—Eso le di a entender pero este fue el adiós. Mi papel ha terminado, yo no existo más.
—¡Pero…!
—Soy un simple chico sin apellido ni estatus y muy pobre ja, ja, ja. Pero yo, ya estoy en paz.
Esas fueron las palabras que dijo el mayor héroe de la humanidad al poner sus asuntos en orden, al dejar de pensar en el legado de su familia y todo lo que ello conlleva. Ultimadamente Ramza Beoulve solo es y siempre será… Ramza.
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Notas finales.
Me habría gustado hacerlo más yaoi XD pero siento que se habría visto demasiado forzado, aún así no me engañan, yo sé que se aman 7//////7. Tanto si conocen el videojuego como si no, de antemano muchísimas gracias por leer la historia que como todo lo que hago es con amor de una fan a otros :D. Nos leemos en alguno de mis fics, que tengan bonito año para no errarle :3.


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