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Omega falso (Traducción finalizada) por yuniwalker

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"¿Ya te enteraste, Lanan? Parece que el primer príncipe del Reino de Randina vino al Reino de Zara."

"¿Qué?" Preguntó al anciano que siempre venía a comprar tarta con almíbar. "¿Es enserio?"

Con una sonrisa típica de "servicio al cliente" en su rostro, Lanan recordó al joven rubio de ojos azules que había conocido esa anoche.

"Mi sobrina está trabajando en la famosa "casa de huéspedes". Me lo dijo cuando la vi ayer. Cómo sea, la familia real del "Reino de Randina" parece tener piel morena, cabello dorado y ojos azules. Quizá... ¿Riku es el hijo ilegítimo de la familia real de Randina?"

Ante esas palabras, el corazón de Lanan pareció a punto de detenerse. Sin embargo, cuando sonrió y dijo "no lo es", el anciano hizo cara de creerle.

"El padre de Riku era un viajero de Occidente. Tenía cabello rubio y ojos azules, pero... Su piel morena probablemente se parezca a la de mi abuela nacida en el este".

"Bueno pero ¿Sabes que está aquí para buscar al hijo de su hermano? El segundo príncipe que murió en un accidente el mes pasado."

"... ¿Buscan a su hijo?"

"Sí. Pienso que si Riku fuera el hijo ilegítimo del segundo príncipe, podría convertirse en un buen rey en el futuro."

Cuando hizo una reverencia al anciano, quien salió de la tienda diciendo "Gracias", comenzó a frotarse las manos para quitarse esa terrorífica sensación de miedo

(¿Y si Riku es el hijo ilegítimo de la familia real de Randina?)

Cuando Karina estaba hablando de su amante, no dijo ninguna palabra sobre Randina. Su novio era un viajero solitario del este así que solo dijo que tenía la piel morena y los ojos azules, una apariencia exótica. Sin embargo, al ir hacia el este, Lanan pensó que habría muchas personas de piel morena y ojos azules, no solo la realeza. No, en los últimos años, estaba tratando desesperadamente de pensar que no se trataba de la realeza. Cuando era joven, leyó en un libro que había una tribu de ojos azules con piel morena. Y como sus características físicas se limitaban solo a un número muy específico de tribus, se podía decir que era una característica que solo pareció aparecer en el pueblo nómada del clan de Randina, en el Reino mismo de Randina. A partir de esto, Lanan fue ligeramente consciente de que Riku tenía la sangre de Randina dentro de él. Karina, que odiaba leer y estudiar, probablemente no conocía a la familia real. Es decir, era un personaje Omega excelente y de rápido movimiento, pero su sabiduría, tal vez similar a la de su padre, solo le permitía disfrutar de la vida de manera brillante y pensar que lo único importante era estar rodeado de tesoros de oro y plata. Entonces, cuando se decidió que su casa sería demolida, se volvió loca. Causó una rabieta terrible y destruyó cosas hasta un punto en que la sirvienta pareció no poder controlarla:

"¡Esto sucedió por culpa de nuestro padre y el maldito se murió! ¡Voy a abrir su tumba ahora mismo y clavaré un cuchillo en su corazón!"

Le tomó un año para calmarse. Karina empezó a buscar trabajo ella misma y entonces, en la tienda donde funcionaba como mesera, conoció a un viajero extranjero que se volvió el padre de Riku. Sin embargo, Karina miraba su creciente barriga todos los días sin decir nada. Lanan estaba ansioso por el momento en que diera a luz a su sobrino o sobrina, pero Karina, que ya se había separado del viajero en ese momento, estaba de mal humor y suspiraba constantemente.
Cuando nació el bebé, Lanan estaba tan feliz que comenzó a llorar. Se conmovió profundamente al poder presenciar del nacimiento de una nueva vida. Y el querido sobrino que finalmente conoció era el más lindo del mundo. La partera que recogió a Riku estaba mirando al bebé rubio de ojos azules con una expresión complicada en su cara y cuando dejó las palabras "Felicidades", finalmente salió de la casa de Lanan y los dejó disfrutar del momento en familia.

Fue Lanan quien luchó por criar a su primer hijo. Karina, que acababa de dar a luz, no podía moverse como se esperaba así que, en su lugar, Lanan estaba cambiando pañales, alimentándolo con leche en polvo y poniéndolo a dormir todo el tiempo. Sin embargo, cuando su cuerpo pudo moverse libremente, Karina le dijo a Lanan:

"Este niño está en mi camino. Yo soy libre, no una madre. Así que te lo daré".

Cuando recordaba ese momento, todavía se sentía dolorido y triste. Pero había decidido hacer feliz a Riku pasara lo que pasara. E incluso hoy, después de tener una conversación con un antigua jefa, Lanan decidió volver a intentar entrar en el burdel. 

(¡Lo haré si eso me permite hacer feliz a mi Riku!)

***
Cerró la tienda y llamó a Riku, que estaba pintando en la parte de atrás de los estantes de exhibición, como de costumbre. 

"A Riku le encanta hacer dibujos ¿Eh?"

"¡Sí! ¡Este es el barco en el que Jazmín tiene sus aventuras! Acaba de llegar al Reino de Randina".

"Sí, ya veo. Tus dibujos son hermosos".

Riku mostraba claramente las características de un alfa. Excelente en todos los aspectos, inteligente y atractivo. A la edad de tres años, podía leer, escribir, realizar cálculos simples y parecer entender lo que pensaban los adultos. Era por eso que Lanan estaba teniendo especial cuidado al criar a Riku. Ser un hijo ilegítimo cuyo padre era desconocido, ser descendiente de un aristócrata caído y verse obligado a vivir en la pobreza, que la persona que se creía era su madre fuera en realidad su tío y que ese tío estuviera tratando de convertirse en prostituto para ganar dinero, todos esos eran muchos secretos que guardar. Pero Lanan siempre quiso protegerlo y hacerlo más feliz que nadie en el mundo. Incluso si él estaba vuelto un desastre.

"Ahora, regresemos a la habitación. Esta noche, voy a hacer sopa de calabaza, ¡La que te encanta, Riku! ¿Y sabes qué? Acabo de comprar pan para eso".

"¿De verdad? ¡Mamá, estoy feliz!"

Lanan lo sostuvo contra su pecho porque su bonito hijo, que suplicaba un abrazo, era difícil de resistir.

Fue en ese momento...

¿Qué había pensado Lanan cuando escuchó un golpe en la puerta de una tienda que acababa de cerrar? Ni siquiera él mismo lo sabía. Miró hacia atrás y preguntó: "¿Quién es?" Mientras sostenía al niño con fuerza utilizando unas manos temblorosas. Entonces escuchó una tranquila voz masculina diciendo:

"Lo siento, entiendo que es tarde por la noche pero, soy un mensajero de cierta persona. Quiero hablar con el señor Lanan y el señor Riku, su hijo."

"Cierta persona ... ¿Un mensajero?"

Lanan no pudo ocultar sus pensamientos sombríos sobre el tema. Sin embargo, Margo, que pareció haber escuchado la historia desde la parte de atrás, tenía una mirada bastante sospechosa al respecto:

"Soy la dueña de esta tienda, mi nombre es Margo. El dependiente Lanan y su bebé, Riku, son como mi verdadero hijo y nieto. No puedo dejar que vayan con cualquier mensajero que se encuentren".

Dijo Margo en un tono severo. El hombres cambió sus palabras:

"Lo que dice la señora Margo es correcto. Ahora, déjeme revelar mi verdadera identidad para que esté más segura del asunto. Somos los seguidores de Aushnagit Ilroy Randina, el primer príncipe del Reino de Randina.

"¿El primer príncipe del Reino de Randina?"

"Sí. De hecho, Riku, el hijo del señor Lanan, es el niño del segundo príncipe del Reino de Randina. La posibilidad de que sea fruto de Dashahan Ikiya Randina es muy alta."

"¿Qué?"

De la sorpresa, Lanan y Margo se miraron a la cara. En este momento, Lanan estaba ciertamente sorprendido. Sin embargo, siempre hubo sospechas de que este no era para nada el caso, así que intentó sonreír. No obstante, había una pequeña sombra en su corazón. Si el padre de Riku era realmente el segundo príncipe de la familia real Randiana, Riku sería llevado al Reino de Randina como sucesor al trono.

(¡Absolutamente no!)

Lanan abrazó fuertemente a Riku en sus brazos. Sosteniendo su cabeza como si estuviera acariciando su cabello aunque era más bien, algo instintivo de defensa.

"¿Mami…?"

Riku estaba preocupado, así que Lanan le sonrió para tranquilizarlo un poco. 

"Está bien. Riku no tiene que preocuparse por nada."

Margo preguntó al hombre: "¿Sobre qué base dice semejante estupidez?"

"No es una estupidez, fue investigado por un excelente oficial de inteligencia en Japón. Y la mejor prueba es que el cabello, los ojos y el color de la piel de Riku-sama tienen características que solo aparecen en la familia real Randiana."

"¡No! El padre de Riku era un hombre occidental con ojos azules. El color de su piel es marrón como la de mi abuela"

"Señor Lanan, no puede detener a la familia real para siempre. La verdad está tanto en su corazón como en el anillo que usted tiene en sus manos".

"¿Anillo?"

Margo lo miró, diciendo que no sabía de lo qué hablaban... Pero Lanan no pudo contestar porque fue un shock bastante inmenso. Si sabían sobre el anillo que Karina había dejado ese día entre sus manos, entonces era obvio que estos mensajeros también habían investigando otras cosas. Las cejas le subieron y los labios parecieron comenzar a temblarle. Como dijo el hombre, la verdad estaba en su corazón. 

"Si lo entiende, venga a la casa de huéspedes con nosotros."

"... Entiendo. Sí entiendo así que, por favor, espere un poco mientras me preparo".

Las palabras de Lanan no tenían otra intención, pero los mensajeros parecieron sospechar. 

"Entonces, cuidaremos de Riku-sama mientras tanto. ¿Podría abrir la puerta?"

Cuando miró a Margo, con ansiedad, Lanan pareció asentir con la cabeza. 

"Claro. Pueden entrar mientras Lanan se arregla".

"Gracias".

Pero cuando Margo abrió la puerta, Lanan se encontró con un joven que ya había visto antes.

"¿Eres el hombre de...?"

Pero ya no dijo nada.

Cuando miró en su dirección, el tipo, vestido con una túnica negra y un Kufiyya, estaba inclinando la cabeza en su dirección como si le estuviera mostrando sus respetos.

"Gracias por permitirme entrar. Mi nombre es Salaan Mio. Soy el secretario del príncipe Aushnagit, que es el primer príncipe".

El joven, llamado Salaan, también salió del burdel esa vez. Era la persona que estaba al lado del hombre de cabello rubio y quien le entregó la bolsa de dinero a Lanan.

Dejó a Riku con Margo y se dirigió de inmediato a la habitación del piso superior. Como le dijeron que fuera con ellos, estaba seguro de que también necesitaría del anillo.
Al abrir el cajón, con un montón de sentimientos encontrados dentro de su pecho, Lanan finalmente encontró un anillo con una pequeña piedra amarilla incrustada en el oro. La metió en una bolsa de tela colgada en diagonal sobre su pecho, tomó los documentos que mostraban que Riku y él eran madre e hijo y se llevó también la limosna que recibió el otro día. La bolsa con las monedas tenía que devolverse al primer príncipe porque, para empezar, no las quería. Finalmente, cuando se puso un pañuelo negro desde la cabeza hasta los hombros, Lanan cerró la habitación con llave. 

En esta área, donde la luz del sol era fuerte y había muchas tormentas de arena, los hombres alfa envolvían una tela llamada Kufiyya alrededor de su cabeza y la sujetaban con un anillo llamado Ikar, hecho de cuero. Sin embargo, solo los aristócratas y los hombres alfa de alto rango podían verse así. Los hombres y mujeres omega utilizaban únicamente un turbante.

Bajó las escaleras, envolvió a Riku con un pequeño turbante negro y lo tomó con cuidado de las manos de Margo. 

"Si pasa algo, vete de inmediato".

Susurró Margo, Lanan asintió con firmeza.

(¿Qué nos pasará a partir de ahora?)

Cuando pensó en eso, en realidad deseó huir ahora mismo debido a la ansiedad. Sin embargo, cuando se volvió hacia el frente, Lanan los miró fijamente y solo suspiró. Riku bajó las cejas de un modo ansioso, como si hubiese sentido lo extraño del ambiente, y agarró el turbante de su madre con muchísima fuerza entre sus manitas.

"Mami..."

"Está bien, está bien. Yo... Mamá definitivamente protegerá a Riku."

Mientras susurraba y frotaba las mejillas del niño, Riku se aferró al cuello de Lanan con una fuerza más potente de lo habitual.

"Entonces, por favor, suba al carruaje."

El auto, impulsado por Salaan, era tan magnífico que pareció estar brillando incluso en las noches oscuras. El cuerpo del carruaje estaba delicadamente dorado y las grandes ruedas parecieron estar envueltas con caucho. Los cuatro caballos, en los que el cochero sujetaba la cuerda, estaban tan tranquilos que apenas y se notaba su presencia y cuando subió a la plataforma para ingresar al carro, notó que el interior se unificaba en todas direcciones con un terciopelo azul oscuro que representaba el color de un noble. 

"Mamá, es una silla muy suavecita."

Cuando la puerta del carruaje se cerró y la carrocería comenzó a moverse lentamente, Riku, que estaba sentado a su lado, abrió la boca de modo que comenzaron a verse sus dientitos.

"¡Wow!"

"Bueno, ciertamente es una gran diferencia si lo comparamos con las silla de madera de casa ¿No?"

Cuando habló, el niño comenzó a reírse. Salaan estaba sentado en el asiento opuesto y junto a él, había un hombre fuerte que pareció estarlos vigilando a los dos ¿Era para evitar que escaparan? La confitería y su habitación se alejaban más y más y de pronto, el carruaje llegó hasta el castillo.

Cuando el espacio abierto, sin pavimentar, provocó que el carruaje traqueteara, entonces pudieron ver las paredes y la enorme puerta de hierro del palacio. Las rejas se cerraron rápidamente para evitar que pasara alguien indeseado y luego, el carruaje entró hasta llegar a la entrada misma del castillo. Incluso Lanan solo había entrado una vez cuando era noble porque eran muy estrictos con todo ¿Y estar allí de esa manera tan improvisada que significaba exactamente? Después de todo, ¿Riku sería llevado de su lado? En este país, el vínculo entre madre e hijo se consideraba precioso así que deseaba aferrarse a eso para evitar separarse de él. Pero, ¿Qué pasaría con las leyes del Reino de Randina? ¿Y si el vínculo entre madre e hijo era frágil allá? ¿Y si no les importaban sus sentimientos?

"Llegamos."

Al mismo tiempo que Salaan habló, el carruaje se detuvo frente a un edificio blanco con una cúpula enorme encima. Al igual que el castillo real, este edificio con cúpula dorada pareció ser más bien, un lugar para invitados. Lanan, que había estado en el castillo real antes, lo sabía. Estaba seguro de que era el hogar temporal del primer príncipe del Reino de Randina, que vino a buscar al hijo de su hermano menor.
Los latidos de su corazón comenzaron a sonar aún más fuertes que antes.

Al bajar del carruaje, Lanan siguió sosteniendo a Riku entre sus brazos. Si mostraba una oportunidad, seguro iban a llevárselo así que estaba muy asustado al respecto. No iba a soportar si se robaban a su niño.

Cuando se abrió la puerta de la casa de huéspedes, descubrió que había sido decorada con una alfombra roja, pinturas de personas famosos y bellas esculturas. Sin embargo, aunque los tapices bordados tradicionalmente eran hermosos, Lanan sabía por su abuelo que todos eran réplicas. Cuando este país dejó de ser un centro comercial y se volvió financieramente escaso, todas las cosas caras que se fabricaron se vendieron a otros países.
En la parte trasera del edificio, había una habitación estrictamente custodiada por soldados con armadura así que rápidamente se dio cuenta de que era la habitación donde estaba el primer príncipe del Reino de Randina. El escudo de armas del Reino de Randina, que había visto en libros de texto, estaban tallados en cada uno de sus trajes.

Cuando Salaan se acercó al lugar, el soldado que custodiaba la puerta bajó la lanza como si fuera la costumbre.

"Quiero ver a Aush, el señor Lanan y Riku están aquí".

"Entra."

En respuesta a las palabras de Salaan, se escuchó la voz poderosa de un joven desde el interior. La tensión de Lanan se disparó: "Dokun, dokun" era como si su corazón estuviera golpeando su pecho. Su boca estaba seca y sus labios no dejaban de temblar. El joven Riku podría haber adivinado algo porque aplicó más energía al brazo que sostenía a Lanan. Y al final de la puerta que se abrió solemnemente, encontró a un joven acostado en un diván dorado. 

"¡Eres tú!"

El joven abrió sus ojos azules y se levantó del diván de un salto. El príncipe del Reino de Randina era el mismo hombre que se había compadecido de él hasta el punto de darle limosna a las afueras de un burdel nocturno.

"Yo, en ese momento no sabía que eras un príncipe."

La humillación de la limosna aún permanecía, pero Lanan se inclinó ante él de todos modos porque pensaba que probablemente se había preocupado de él como persona en lugar de mostrarle compasión.  Entonces, el príncipe llamado Aush se acercó a él y a su hijito:

"Levanta la cabeza. Nunca hiciste nada incorrecto".

"Sí, pero ..." Cuando tomó su pecho con la mano opuesta a la que sostenía a Riku, Lanan sacó una bolsa de terciopelo azul oscuro de los pliegues de su ropa y dijo: "Te devolveré esto. No he tocado nada de lo que está adentro."

Recordando la miseria y el arrepentimiento que sintió cuando recibió la bolsa, el tono de su voz se le volvió tenso. 

"Eres un Omega muy fuerte." Aush lo miró por un segundo y sonrió divertido al momento siguiente. Luego, acarició suavemente la cabeza de Riku y se sentó en el diván una vez más. Mientras le entregaba la bolsa a Salaan, respondió: "No se puede evitar. Pero, desafortunadamente, este dinero no sirve de nada. Iré al mercado mañana y compraré todas las semillas de Nigella que tengan."

"¿Quieres reemplazar todas estas moneda con semillas de Nigella?"

"Sí. Aunque tú no las quieras, al menos debo hacer con ellas algo que pueda contribuir al país."

Aush se tocó la barbilla y luego ordenó que pusieran una silla detrás de Lanan y su niño. Sin embargo, solo Lanan se sentó porque puso a Riku en su regazo. 

"No me mires así. No me voy a comer a tu hijo, tampoco a ti".

"Pero... Lo quieren".

"Sigue siendo tu hijo".

Sin decir nada, miró fijamente a los ojos de Aush. Era mortalmente profano mirar al frente cuando se trataba de un príncipe de otro país ¡Pero Lanan nunca le daría a Riku! Y por eso, con determinación, encaró esos ojos azules que le recordaban tanto el fondo del mar.

"Bien, esos ojos son hermosos. Me gusta la mirada directa de un guardián ante su bebé." Mientras se acariciaba la barbilla con la mano, Aush movió su mirada de Lanan hacia Riku. "Tienes una buena madre. Mi querido sobrino".

En realidad, era el hijo de su hermana, pero solo la partera que lo presenció lo sabía. Nadie conocía este secreto excepto ella. Había vivido escondido en Kanmura, así que nunca interactuó con otros lo suficiente como para revelarlo. Y ahora, por ley, Lanan era la madre y no había ningún otro miembro de su familia además de ellos dos. Cuando demolieron la casa, ni siquiera su tío,  se acercó para ayudarles así que, por lo tanto, cuando la familia de Lanan perdió su condición de aristócratas su propia existencia fue borrada también. 

"Por cierto, Lanan, tengo algo que preguntarte."

"¿Qué?"

Aush abrió lentamente los labios, cruzó sus largas piernas y dijo: 

"Dashahan. La última vez que viste a mi hermano Dasha. ¿Cómo era? ¿Qué fue lo qué dijo? ¿Cómo se veía?"

"¿La última cosa...?"

Lanan nunca había conocido a Dasha.  Cuando Karina estaba saliendo con él, le contaba historias sobre ellos pero nada tan concreto. Sin embargo, si no podía responder, se revelaría que no eran mamá e hijo. Y Riku sería fácilmente alejado de Lanan. 

"Él... Dasha..."

Cuando tragó saliva, Lanan entró en el juego.

"Él era muy amable, le gustaban los animales. Fuimos a un zoológico cercano el último día y estaba... Realmente tranquilo en ese momento. Nunca pensé que se iría repentinamente al día siguiente".

No sabía por qué Karina y Dasha rompieron. Un día, Karina de repente se enojó, rompió cosas en la casa, se volvió loca, y lloró mientras gritaba: "¡Qué debo hacer con un hijo!" En esta situación, Lanan se enteró de la catástrofe entre los dos. Sin embargo, no le dijo la razón por la que se separaron así que mezcló la verdad con la mentira y la explicó como si fuera el amante de Dasha.

"¿Dasha desapareció repentinamente?"

"Sí".

No era cierto. Tal vez, Karina se despidió. Sin embargo, Lanan, que no sabía la verdad, solo pudo decir lo primero que se le ocurrió.

"Oye..."

"Señor."

Cuando llamó a Salaan, Aush le susurró al oído algo aparentemente importante. Salaan asintió con la cabeza un par de veces y después, los dos comenzaron a mirarlo.

"Entiendo, Gracias. No sabíamos el final de Dasha porque se hundió con un barco de pasajeros después de que dejamos el palacio real. Por lo tanto, siguiendo sus pasos, mi hermano... No, el segundo príncipe del Reino de Randina, debió haber estado por aquí primero. Ese tonto."

De repente, los ojos azules de Aush se cruzaron con la línea de visión de Lanan. Extremidades altas, esbeltas y largas, envidiables. Quizá le gustaran las artes marciales porque su cuerpo está tan bien entrenado que podía ver sus músculos incluso desde la parte superior de su larga túnica. Sus mejillas dibujaban líneas limpias y su nariz estaba en orden. Sus cejas afiladas y las largas pestañas que bordeaban sus ojos eran de color dorado oscuro mientras que su cabello tenía el mismo color que la luna flotando en el cielo nocturno. 

(Leí en un libro que la familia real Randiana era muy hermosa... Pero verlo en vivo es impresionante.)

Aush se rió y miró a Lanan con una mirada bastante divertida. 

"¿Hay algo en mi cara?"

"¡No! ¡Para nada!"

Tal vez fue porque miraba demasiado su rostro bien organizado, pero Lanan se tiñó las mejillas y bajó los ojos.  Entonces una linda voz resonó por encima de sus rodillas. 

"¡La cara de ese hombre tiene mis mismos ojos y nariz, mami! ¡Y su boca! Oye, mamá. ¿Por qué tiene el mismo color de ojos que Riku? Los colores son iguales, ¿Verdad?"

Confundido por Riku, mirando hacia arriba con sus ojos inocentes, Lanan contestó:

"Eso es porque es el tío de Riku."

"¿Tío?"

Riku, que había vivido sin parientes, no sabía que era un tío. 

"Así es. Es el hermano del padre de Riku. La familia de Riku."

"¿¡Familia!"

"Así es, muchacho. Puedes llamarme Aush". 

"¡Oye, mami! ¡Tenemos familia!"

"Así es ..."

Pero aunque la sensación de crisis de que Riku fuera robado de su lado no podía ser abandonada, Lanan dibujó una sonrisa hermosa. 

"¡Wow, increíble! ¡Aush es el tío de Riku!" Cuando de repente saltó de su regazo, Riku abrazó a Aush sin siquiera darse cuenta de que su túnica negra se había caído al suelo. "¡Eres mi tío!"

Aush, quien sostuvo a Riku y le hizo sentarse en una de sus rodillas, habló, con con una mirada sorprendentemente gentil.

"Así es. Seguramente tu papá hubiera deseado mucho estar contigo y verte crecer, pero... Piensa en mí como si fuera él. Porque voy a criar a Riku como si fuera mi propio hijo".

"¡Espera un minuto!"

Lanan apresuradamente cogió su bolsa y sacó la libreta donde decía que eran madre-hijo


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