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Magna x Nichrom por nezalxuchitl

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***

 

 

Sus ojos dorados miraban la escena con tristeza, con ternura. Habia sido el primero en llegar a la escena, pues siempre estaba pendiente de sus actualizaciones. No sabia si le rompia el corazón verlo asi, muchos dudaban que tuviera uno, pero si lo tenia, pertenecia a ese hombre que nunca lo tomaría porque estaba muerto.

La luz de la luna iluminaba la callejuela de Tokio, el ruido del trafico seguía a los lejos, el mundo seguía girando y las lagrimas escurrían por sus mejillas, indiferentes al mundo como este a ellas. Todavia tenia la lanza clavada en el pecho y un charco de sangre se extendia entre sus piernas.

De un salto se llego a su lado, se acuclillo, tocando su mejilla como habria querido hacerlo en vida, su cabello.

-Furyuoku 0 – le dijo como si fueran amigos y compartieran una vieja broma.

Todavia no estaba frio, a pesar de que la noche lo estaba. Le alzo la barbilla, el cuello aun flexible y se llevo una impresión horrible de verlo asi.

-Ya no puedes hacer nada, ¿cierto? Cuando estas muerto, ya no puedes hacer nada.

Se imagino cuanto se habria opuesto a que sus rostros estuvieran asi de juntos, a que lo mirara asi, a que lo besara.

Grito con furia en la noche; dolia, enojaba, que le cortaran de golpe todas sus aspiraciones, toda posibilidad. Ahora era un hecho que nunca conquistaría a Chrom, que no tendrían una vida juntos, que no serian felices.

-Namari.

La voz de Magna lo saco de sus casillas. Parpadeo mirando al cielo, negando con la cabeza.

-No te atrevas. – le dijo con voz ironica.

Magna torcio la boca y se acerco a su amigo.

-No iba a hacerlo.

No era nada de bueno con los sentimientos. Le daba gusto que el hermano ya no fuera un estorbo, pero sabia que no dejaría de ser un problema, ni con Nichrom ni con Namari.

-Lo siento. – le dijo con sinceridad; sentia que se sintiera asi.

Pero Namari estaba concentrado en Chrom.

-Te amo.  – le dijo a su rostro, que sostenia por una mejilla.

Luego le beso la otra y Magna se guardo su comentario desagradable. Se puso en pie y materializo su mascara: le impresionaba la fortaleza de su amigo. Lo imito, y en instantes, se materializo el portal y apareció Goldva.

 

***

 

No podía hacer nada por evitar que las lagrimas corrieran por sus mejillas cuando no tenia nada que hacer. El espacio entre duelos era horroroso y sabia que a Magna le disgustaba verlo asi; menos mal, asi no era el único infeliz, descontento.

Le importaba a Magna, y por eso quería lastimarlo: porque no era su hermano, porque nada lo traería de vuelta. Magna. Se acurruco en el cuando este se sento a su lado; sentir un cuerpo caliente y grande era reconfortante y doloroso. Podia engañarse con que era el, pero no quería; habia un cierto placer en ser conciente de su dolor.

Queria gritar y patalear, pero nadie lo entendería; para todos, habia pasado ya. Goldva lo habia elogiado por su desempeño como oficial. Queria llorar y berrear y ser el niño de su hermano, pero nadie lo entendería.

-Estas en una buena posición para darme una mamada. – le dijo Magna, que lo acariciaba suavemente.

A veces cumplia su voluntad, a veces no. Esta vez le valia verga lo que Magna quisiera o no. El solo quería pensar que ese cuerpo fuerte y grande era el de su hermano.

Un dedo se colo entre sus labios, separo sus dientes.

-Vamos, usa esa lengua.

Nichrom lo mordio y se enrosco, molesto.

-Eres un saco de mierda. – le dijo, poniéndole los dedos en la cinturita – Todo lo tengo que hacer yo. – protesto, revelando esas pompotas al meter los dedos bajo el elástico y jalar – Si tan solo no estuvieras tan pinche bueno… - Magna tambien estaba en lo suyo, admirando el pequeño, sensual cuerpecito: tan exuberantemente proporcionado en su pequeña dimensión, sensual.

Beso el punto mas cóncavo de su espalda, cerrando los ojos y mostrando todo amarillo en el área pintada. Era un bello niñito; sus dedos se deslizaban por su caderita oronda, tan pequeño, que casi la abarcaba con sus manos. Lo mismo las nalguitas, que alzo para arriba, dejándolas rebotar: iba a metérselo hasta la espalda, a su delicioso niño.

Se inclino sobre el, era tan pequeño que lograr el contacto con el era difícil. Fue tierno con el, besando su carita linda, su cuellito lindo. Sus hombros diminutos. No quería que sufriera, no cuando lo tenia a el, que era mejor que su hermano. Mucho mejor, en tantos sentidos. Le disgustaba ver esa carita triste, esa carita hermosa que tan intensamente lo habia atraído desde la primera vez que lo vio.

Sus besos solo hacían que sus lagrimas manaran mas copiosamente, pego un puñetazo desesperado en la cama, justo al lado de el. Con fuerza suficiente como para matarlo. ¿Cómo podía tener fuerzas para matarlo pero no para traerlo a la vida, a la felicidad que lo habia seducido cuando lo veía jugar solo en la calle?

Le habia parecido que solo era feliz, a diferencia de el que no lo habia conseguido. Pero no era asi, aunque su hermano no estuviera con el a su lado, estaba en espíritu.

-Quiereme… - le pidió, entre tiernos besos, besos amorosos que manifestaban lo que realmente sentia por el.

Nichrom empezó a sollozar y lo abrazo. Lo pelo, por fin, llorando triste, agarrándosele.

-Hazme olvidar. No quiero sentir dolor. ¡No quiero sentir esto!

Magna tomo sus labios, su lengua era grande dentro de su boquita, incluso ahí se notaba asi la diferencia de tamaño; sus manos lo recorrían en un santiamén, un santiamén delicioso, el turrito se le frotaba, durito.

Su polla era tan pequeña que entre su pulgar y su índice podía manipularla muy bien, caliente y resbalosa, con esa humedad que hacia escurrir de su glande, para abajo.

-Saca la mia. – le pidió, disfrutando de ver esas manitas liberar, sobar, su enorme verga. La arrimo a la de el – Mira que grande es.

-Matame con esa cosa. – le pidió Nichrom, estimulándosela a dos manos. Todo su torsito, su trencita, se sacudia – Quiero reunirme con mi hermano.

-Te voy a matar de veras como sigas diciendo esas cosas. – dijo, apretándole el bracito, deteniendo su movimiento.

Era tan pequeño que  su mano lo cubria casi por completo, el delgado antebracito.

Pero Nichrom lo miro con tal desamparo que el, que el que estaba igual no supo que hacer. No sabia que hacer: nunca habia superado el abandono, la crueldad de sus padres, simplemente lo negaba, lo ignoraba, realizando cosas placenteras, divertidas. Cosas para las que unos padres nunca le darían permiso.

Solto a Nichrom, que se la sigio jalando, concentrado, viendo fascinado como su polla enrojecia, como el brillo perlaba, repartido a cada rápido pason de manos. Veia el antojo crecer en su cara, y finalmente hizo lo que quería, acerco su boquita petera a su punta, justo a su punta, chupándosela, y le supo a gloria.

Con esmero, podía lograr que Nichrom hiciera su voluntad; valia la pena exforzarse, pues tenia que hacerlo. Nichrom era un niño mas inteligente de lo que toda esa bola de zopencos con los que habia vivido creía, estaba mas dolido de lo que el podría estarlo por alguien que se le muriera y no quería verlo asi. Queria de vuelta al niño alegre, rebelde, con los ojos vivos…

Con el pulgar, le acaricio suavemente para que terminara de cerrar el ojo. Las lagrimas no dejaban de manar, pero, al menos, el ojo ya no estaba visible; solo el cabello exuberante, lo mismo que el cuerpecito. Ese cabello suave, esa boquita a la que hacia tomar mas de con lo que podía, sujetándole la cabeza y hechando la cadera adelante, poseyendo, dominante, el orificio de su uke, la cavidad calida.

Sin protestar, Nichrom se atragantaba, y el le saco la verga de la boca, mirando su cavidad casi desencajada, la gran cantidad de saliva y pre semen que escurria por su barbilla, que conectaba a su verga. Abrio los ojos tristes y el le dio cariñosos golpecitos de verga para que se alegrara, el pequeño lo interpreto como que quería que se la mamara, y tomándolo con sus dos manitas, con sus dos diminutas manitas, lo detuvo por el tronco, frotándolo, en lo que con los ojos apenas abiertos, una rendijita como los de Thalim, veía el objeto de su afecto, esa verga poderosa que mamaba, momentáneamente olvidado de todo lo demás.

Solo existía su grosor, su calor, su textura, esos ¿mocos densos? Pegándose, sabiendo tanto a el, a Magna, el único que no le habia quitado a su hermano, que lo entendia. El deseo por complacerlo crecia en el como solo habia crecido por otra persona, oírlo gemir, ver sus gestos con los ojos un poco mas abiertos lo calentó. Su pollita estaba de nuevo dura, su agujerito lubricando, aunque el mismo creyera ser todavía muy joven.

Magna lo hizo mirarlo con una caricia en su rostro.

-¿Quieres que te llene la boca de leche?

Realmente le estaba preguntando su opinión. Considero que un par de dedos de Magna eran mas que suficientes para llenarle la cola.

-Si – pero se trepo sobre el como una pequeña alimaña, como solia hacerlo con su hermano, con la diferencia de que a Magna le ofrecio la cola, meneándola frente a su cara… a unos treinta centímetros.

El de la pintura facial amarilla entendio lo que el pequeño quería, e insertándole el dedo medio, lenta, inexorablemente, le dio gusto. Y empezó a masturbarlo a la vez que el lo complacia con su boca; lo ladeo y se ladeo un poco, para ser capaz de ver ambos frentes, su dedo entrando entre esos carnosos volúmenes y su polla entre esos diminutos labios.

Vivo se veía, activo, mamandosela animadamente, meneando la cola golosa para encontrar mas, para apretar su dedo: sabia que quería otro, pero lo enseñaría a rogar, a pedir de su magnanimidad para complacerlo con su delicioso cuerpo, como siempre debio ser.

A punto de correrse, sintió deseos de hacerlo en esa cola glotona que no dejaba de pedir mas, asi que súbitamente abandono el culo de Nichrom, quien solto un gritito al sentir el guarro aire frio penetrarlo, contuvo el que pugno por abandonar sus labios cuando Magna lo alzo por el aire, haciendolo aterrizar en su polla, abriéndolo rápida, dolorosamente. Lagrimas volvieron a adornar sus pestañas, pero esta vez de dolor físico; Magna era un bruto, era enorme, y lo movia tan rápido, sin darle tiempo a acostumbrarse a su portentosa virilidad.

Dolia pero le gustaba; solo existía la verga de Magna, su enorme tamaño, su ardiente friccion; gritaba entrecortadamente, a cada sentón que Magna le hacia dar: rebotaban su pelo, sus nalgas, su pollita erguida; un adornito casi, de aquel enorme pollon que se perdia por detrás. Gritaba y gozaba, y Magna le decía puta, y pronto sintió como el calor llegaba hasta su ombligo, como inundaba todas sus entrañas esa leche caliente.

Magna le permitio desplomarse sobre el, acariciandole los pezoncitos, olfateándole el pelo.

Y poco a poco, Nichrom volvió a recordar, a querer hacerse a un lado y sumirse en su dolor.

 

*****

14 meses atras…

 

Estaban sentados frente a frente, en el piso, mirándose y rozándose ocasionalmente las narices; un cuadro de felicidad que el habia deseado para si mismo.

Pero Thalim habia elegido a Silver como novio, y como ellos seguían siendo amigos y vivía en su casa, el turro por el que suspiraba lo visitaba en la misma.

Nichrom estaba en la escuela, asi que el veía la tele, o lo intentaba. Por el rabillo del ojo  no dejaba de observar a su amigo y a su novio, poniéndose cada vez mas amelcochados.

En algún momento entre los comerciales, Thalim ya estaba sobre las piernas de Silver, y se abrazaban, besándose.

-Hey, no coman delante del hambriento… - les dijo, sentido.

Silver separo su boca de la de Thalim y este se volteo a verlo, estirando la mano en su dirección.

-¿No quieres comer tu tambien?

Chrom levanto mucho las cejas, se llevo el dedo al oído, dudando de haber oído bien.

Detrás de la carita gentil e invitante de Thalim estaba la sonrisa picara de su amigo, contenida, dudosa de que el fuera a aceptar. Thalim gateo el espacio (suyo, frente a la tele) que los separaba, y sentado sobre sus propias piernas, a su lado, le agarro el rostro y lo beso. Lo beso justo delante de su novio, que veía y estaba de acuerdo, deseoso.

-Oye, oye… - dijo Chrom, sintiendo que el alma se le iba todavía por el beso de Thalim – que tu y yo hayamos desfogado cuando no teníamos novia es distinto…

-¿Ah si? ¿Desfogaron mucho? – se le abrazo Thalim, deseoso. Tocandole el pecho fuerte por entre su camisa abierta.

-Ya sabes… - se sonrojo Chrom, quien se habia avergonzado mucho cuando Thalim los descubrió desfogándose, antes de que fueran novios. Incluso llego a preguntarse si por eso se habrían hecho, o algo, para que no se le fuera a volver joto su futuro marido.

-Lo se, no me molesta… - ronroneo Thalim, su rostro tan cerca, su mirada atenta a el.

-Era solo desfogar. – se acerco Silver, acariciándolos a el y a la turra con cada mano – Podriamos hacerlo los tres juntos.

-P-pero, ustedes son novios…

-Y nosotros amigos – lo beso frente a su novio, para excitarlo mas – Ademas, Thalim te aprecia mucho. – este asintió vivamente.

-Solo haríamos cositas – dijo, tocándose la frente – por esto.

Ninguno de los dos lo veian, pero Kalim si, y como dejara de ver la cinta que probaba la virginidad de su hermano en su frente, celebrarían un funeral en vez de una boda.

-Solo serian manoseos – dijo Silver – no queremos dejarte de lado.

-Ni que te sientas mal. – puso carita afligida Thalim. Chrom se la alzo con cariño, por evitársela haría lo que fuera.

-Esta bien – dijo Chrom, entendiendo lo que hacían por el – disfrutemos el noviazgo juntos como hemos disfrutado la amistad.

-Exacto – dijo Silver, y Thalim no dijo nada porque Chrom tomo sus labios.

Silver habia dudado de que sentiría al verlo, pero eran su mejor amigo y su novia, las dos personas que mas quería, y compartir el placer con ellos se le hacia natural.

Acariciaba las espaldas de los dos mientras se besaban, seme y turra, los dos generos que le gustaban; le parecía tan armonioso y sensual el cuerpo musculoso como el delgado, y ambos lo sabían, lo aceptaban asi. Beso la mejilla de su novio, de su amigo, juntándolos entre si, con las manos debajo de sus largas coletas, tan distintas tambien, aunque fueran iguales.

Thalim dejo sus labios y lo miro un momento, antes de besar a Silver. Era una mirada de cariño, no de amor, un doloroso recordatorio, pero de eso a nada… Ademas, siendo honesto consigo mismo, el único noviazgo del que participaría, seria ese. Aun si hubiera otra turra que le gustara, se debía a Nichrom, y bueno, tal vez la generosidad de sus amigos le ayudara a sacarse la espinita, si el tambien podía besar y tocar al hermoso novio, seguir haciendo eso que tanto lo excitaba con Silver… lo habían descubierto juntos todo, ¿Por qué no el noviazgo?

Chrom beso el cuello de Thalim, tan fresco, tan delicado. Y luego el de su amigo; recio, excitante: entendia perfectamente que a su amigo le gustaran los semes, porque a el mismo le gustaban, aunque prefiriera a las turras. Tenia el toque de lo prohibido, como lo que estaban haciendo, mas prohibido aun. La turra se le sumo en besar el cuello de Silver, y entreambos lo acariciaron, haciendolo sentir en la gloria. Thalim le habia desabotonado varios botones y los dedos de ambos se colaban por entre la tela, rozando su pecho.

El iba mas abajo de la espalda, rodeando con descaro las firmes nalgas de ambos, los dos modelos; Thalim, mas carnoso y suave, Chrom, carnoso y firme. Entre los dos le quitaron la camisa, recorriendo con sus bocas su pecho, encontrándose sobre este para fugaces besos.

Chrom le agarro el paquete antes de pensar que eso podía ser demasiado, y un excitado Thalim se abrazo de muslos al suyo, frotándose y abrazandolo mientras lo veía hacer, por lo que volvió a bajar su mano hasta el paquete de su amigo, sobándolo, haciendolo poner tentadoras caras de placer en su hermoso rostro.

Era bello su amigo, se lo comio mientras Thalim se lo comia a el; comidas de cuello, frotaditas, todo muy inofensivo. Finalmente Silver clavo los ojos en el, agarrándole el paquete y besándolo para mas excitación de Thalim, a quien sentia bien duro frotándose contra el. Luego Silver, quien ya habia compartido mas de eso con Thalim, lo agarro por la cintura y lo recostó en la alfombra, poniéndose sobre el y luego a su lado, invitándolo a recostarse sobre el otro lado para acariciar entre los dos a Thalim, besarlo.

Este estaba encantado entre dos semes, dos hermosos machos solo para el, apapachándolo, acariciándolo. Se sentia irreal, que fueran cariñosos entre ellos solo lo hacia mejor, sabia lo mucho que se estimaban y cuanto placer se daban, placer que ahora compartían con el, focalizaban en el, veinte dedos y dos pares de labios recorriéndolo, desnudándolo un poquito, poniéndolo nervioso.

Su camisa blanca se fue, poniéndolo inquieto, eso era mucho, no quería llegar a tanto con los dos, pero ellos estaban muy excitados, comiéndole las tetitas incipientes, acariciandole el vientre, hasta abajo, su vientre de turra, bien redondeado entre la V de los huesos de su cadera.

Sus inseguridades volvieron, era demasiado huesudo, demasiado flacucho para ellos, tan fuertes.

-¿Les gusto? – pregunto con timidez.

-Te adoro – declaro fervientemente Chrom y Silver le agarro la mano y se la puso sobre su paquete – Me encantas. – le dijo.

Viendo donde le habia puesto la mano su amigo Chrom se escandalizo, pero luego perdió la vergüenza y se la llevo al mismo lugar; la manita delicada de la turra acunaba ese lugar como ni la de el ni la de Silver podían hacerlo, la turra le sobaba el paquete y el sentia que se derretia, deseando mas, mucho mas.

Calar dos paquetes mientras los machos ponían cara de placer era de lo mejor que le habia pasado: se sentían tan duras, tan grandes, tan calientes… y todavía no las sacaba.

Como si le hubiera leído el pensamiento Silver susurro:

-Por favor, jalanoslas.

Sonrojado, Thalim busco su cierre y al sonido de la cremallera Chrom se abrio la suya, sin creer su poca vergüenza al liberar su polla delante de un virgen para que se la jalara, besándolo con ternura cuando se volteo a verlo, tomándola en su mano.

-Si… - susurro Silver, sin especificar si se referia a la sensación o al beso que presenciaba.

A dos manos, a dos pollas, era mas difícil de lo que parecía, pero tambien mas placentero: agarrar esos dos troncos duros lo excitaba montones, ni siquiera tenia que tocarse, lo gozaba intensamente, manipular esos penes y ver a los dos semes complacidos, estirando los cuellos. Lamio el de su novio, el de su amigo, contento de poder darle esa satisfacción.

-Dejate ir… - le dijo Silver a Chrom.

-Casi me corro cuando me la saco. – confeso avergonzado, y a Thalim le encanto.

Viendo a uno y otro seme a sus lados, oyéndolos, sintiéndolos, con sus pegajosos y calientes fluidos lubricando la carne caliente bajo sus dedos, los conducia al orgasmo. Llego primero Chrom, lo miro, tan hermoso, lo beso, desatendiendo un poco a Silver, pues quería disfrutar su momento tambien, y en cuanto termino con Chrom se volvió con el, besándose y luego mirandolo mientras lo hacia terminar, mirándolos tambien Chrom, viendo como la mano que no estaba ya llena de semen terminaba de estarlo tambien.

Thalim vio sus manos llenas de fluidos de macho, las acerco para olerlas, sintiéndose muy avergonzado, embarrándoselas a sus respectivos dueños en el pecho para limpiarse.

Luego, ante los ojitos de la turra, Silver se inclino sobre su pecho para limpiarlo a lamidas.

-Delicioso, como siempre. – le dijo, sonrojándolo.

Luego, viendo la excitación de la nena, hizo lo mismo con Silver. Al terminar, pego su pecho al de el, besándolo. Luego sigio la invitación de su amigo a mirar a la turra, al paquete de la turra.

-Solo te tocaremos si tu lo quieres. – le dijo, sorprendiéndose de tomar la iniciativa. No era el novio.

-¿¡Que me van a hacer?! – pregunto asustado, emocionado.

-¿Qué tal si te lamemos tu deliciosa polla entre ambos?  - propuso Silver, que siempre habia querido hacer eso.

-Kyaaa! – exclamo Thalim, cayendo para atras.

Chrom se apresuro a tomarlo entre sus brazos y Silver a bajarle la bragueta. Thalim lo beso algo asustado, gimio, y los sonidos inequívocos de su amigo le indicaron que pasaba. La promesa habia sido hacerlo entre ambos, asi que bajo para saborear esa parte de la turra que podían saborear sin riesgos. Silver prontamente la compartio con el, sus lenguas se encontraron sobre la resbalosa piel de Thalim, sus ojos sobre su erección, las miradas complices, unidas. Lamieron por uno y otro lado la polla de la turra, su puntita por ambos lados, haciéndola taparse la boca con una mano para ahogar el chillido, excitándose tanto que Chrom se avorazo a la puntita, devorándose toda la pollita y sacándola de su boca con un sonido para ofrecerla a Silver, que hizo lo mismo, alternando ambos de chupada hasta que comenzaron a hacerlo de dos, de tres, turnos de chupadas de ambos bellos semes que amenazaban con matarlo, la sensación era increíble, hasta que finalmente sostuvo la cabeza de Chrom ahí, pues en la boca de Silver ya habia acabado, gimoteando y empujando con su caderita, embistiendo la boca sensual que lo chupaba, heciendolo correrse en un grito mudo, exhalado en los labios de Silver, que lo sostenia muy  de cerca, adorándolo.

-Tenemos un problema cariño – dijo cuando vio que volvia en si – Doble.

La turra, desguansada, levanto la cabeza para ver las dos imponentes erecciones de los machos.

 

***

 

Magna lo habia agarrado muy feo. Aun le dolia el cuellito y tenia miedo de que su hermano fuera a ver el moretón, que ya se le notaba. Solo por hacer un control, por lastimarse con la preferencia que su hermano daba a otros, intento abrir la puerta de su casa: cerrada, obviamente. Trepo por las imperfecciones de la pared exterior y fuera de la ventana del cuarto de Silver se oian ruidos, ruidos de tres.

Desapasionado, bajo de un gran salto y se fue a buscar a la única persona que podía ayudarlo.

-Namari. – llamo por su ventana.

En un pueblo tan pequeño, nadie vivía lejos. Namari no estaba ocupado, estaba solo y eso le alegro.

-Entra. – le dijo.

Su habitación era muy bonita. Muy femenina, llena de lujos, como cortinas de cuentas y puffs redondos en los que le encantaba sumirse a dormir como un gatito.

-¡Oh! – se tapo la boca, desorbitando los ojos - ¿Quién te hizo eso?

-Magna.

-¡Es un bruto! ¡Voy a patearle el trasero! Eso no se va a cubrir con maquillaje ni un millón de años.

Y eso que tenia un corrector indeleble no pache realmente bueno.

Examino al niñito: no se veía traumatizado ni nada, asi que Magna solo debía haberse puesto pendejo o brusco, sin querer: habia quedado con unos cuantos moretones por semes toscos el mismo.

-¿Qué paso?

-No se. – Nichrom se habia sentado en su puff favorito con las manos entre las piernas y las piernas colgando – Y quiero saber. – lo miro a los ojos.

A veces miraba como un adulto ese niño. Y esa era una de esas veces. Suspiro.

-Dime exactamente que te hizo Magna.

Escucho, poniendo los ojos en blanco y negando con la cabeza.

-Ese puerco – dijo – Solo te manoseo, aunque tu eres muy chiquito para que te manoseen.

-No soy chiquito. – dijo ceñudo.

-Si, lo eres. – Namari se sento en la cama frente a el y saco el barniz de uñas, no pache, otro de los lujos que conseguia en la ciudad, “con su cuerpo”, aunque no entendia exactamente a que se referían los adultos cuando decían eso, y se le hacia grosero preguntárselo.

-¿Qué es cuando te meten el pilin en la boca? – le pregunto y a Namari se le quedo el barniz en el aire.

-¿Magna te hizo eso?

-No, pero quiero saber.

-Es una mamada. – se encogio de hombros, llevando el barniz a su uña - ¿Dónde lo viste?

Si Namari le contaba cosas, era justo que el tambien le contara.

-En casa.

Esta vez el esmalte se le cayo.

-¡¿Queee?!!!

-¡No grites! – Nichrom le pego un manazo.

-¿Quién se lo pone en la boca a quien?

-Todos. – dijo Nichrom.

-Crei que solo vivias con Silver y con tu hermano.

-Thalim va a casa a jugar con ellos y me sacan.

Namari ni cuenta se daba que su carísimo barniz se hacia charquito en la alfombra.

-¡¿Thalim?! ¿La poca cosa esa del café?

Nichrom asintió.

-Antes me caia bien. Pero ya no.

-¿Por qué juega con tu hermano? – se apresuro a preguntar. El turrito asintió - ¿y que otra cosa hacen?

-Se frotan los pilines, se los juntan, se los ponen entre las pompas… - a Namari se le desencajaba la mandibula - … se soban, se manosean, se besan todo el tiempo – dijo con rencor.

-¿Los tres? ¿Juntos? – Nichrom asintió y el sintió que le iba a dar algo: la excitación, el chisme, el coraje - ¡Mira a esa zorra solapada! – exclamo - ¡No solo me quita a Silver sino tambien a Chrom!

-Silver y mi hermano jugaban a eso…

Namari abria la boca. Antojado.

-… pero menos que ahora. Desde que empezaron a jugar con Thalim, no quieren hacer otra cosa.

-¡¿Pues que tan buena esta esa zorra?! ¡Con esos pinches ojitos de rendija! Y ni tiene teta!

Nichrom hizo gesto de recordarlo. O de pensarlo.

-No, no tiene tanta como tu. – con la camisetita de tirantes que llevaba Namari, era fácil apreciarle el pecho.

-Tampoco tiene tanta cola. – dijo parándose, y poniéndose de ladito. Llevaba una faldita. Pegada.

-Cola si tiene. A mi hermano le encanta: a mi no me quiso limpiar la colita desde cuando cumpli 6, pero en la cola de Thalim sume la cara por horas.

-¿¡Horas!?

-Naa, no son horas. Pero si lo hace. Y me da coraje.

-¡A mi tambien!

-Quiero saber que es.

-¿Qué es que?

-Cuando sume la cara en la cola.

-Seguramente le esta comiendo la cola.

-¡¿Comiendo?! – abrio mucho los ojitos Nichrom.

-Si. Se siente rico, y a los semes les gusta.

-Suena asqueroso.

-No lo es cariño: solo hay que tener limpiecita la colita.

-¿Por qué mi hermano no me lo hace?

Namari abrio los ojos y luego se rio.

-Cariño, si te lo hiciera a ti, tendríamos graves problemas. Eso no se le hace a un hermano. Todas esas cosas que has visto con tu hermano, Silver y Thalim, no se le hacen a la familia.

-¿Por qué?

-Porque son sexo. Hacer bebes.

Nichrom puso una carita intrigada.

-¿Se hacen bebes comiendo la cola?

-¡No! Afortunadamente.

Nichrom abrio mucho los ojitos, asustado:

-¡¿Mi hermano quiere tener un bebe con Thalim?!

-Ni de coña – dijo – apostaría que esa zorra ladina tiene un encantamiento de virtud encima y que lo burlan con mucho cuidado.

-¿Qué es un encantamiento de virtud?

-Un conjuro de furyoku que te ponen encima para controlarte, te delata si tienes sexo: el que te lo pone, ve un hilo dorado en torno a tu cabeza, o tu muñeca, o el lugar que elija, y cuando tienes sexo, desaparece y te chivatea.

-Que raro. – dijo - ¿Estas seguro que mi hermano no quiere tener un bebe con Thalim?

-Bastante. Despues de todo, Thalim es novio de Silver.

-¿Silver se lo presta porque es su amigo?

-Supongo. – bufo Namari.

-Mi hermano se quejaba de no tener novio, mas cuando ellos se hicieron novios.

Namari recontrabufo.

-Tu hermano no es mi novio porque no quiere.

-¿Por qué?

-Porque es un idiota. Porque ya tuve sexo. ¡Y el muy hipócrita va y tiene sexo con ese!

Nichrom tambien se puso molesto.

-¿Entonces le hacen o no le hacen un bebe a Thalim?

Namari se sento y trato de olvidar su enojo personal para explicarle al turrito.

-Sexo es todo, desde lo que te hace Magna hasta lo que hacen ellos, pero hay grados, para que me entiendas, es malo vender una manzana pache y es malo matar a alguien, pero es mas malo matar a alguien, ¿entiendes?

-Si.

-Lo que Magna te hace es como vender una manzana pache, o, robar una manzana real, porque eres chiquito, y hacer bebes es como matar a alguien: para hacer bebes, te meten el pilin en la cola

-Auch… - se toco su caderita.

-Si, duele un poco, pero se siente bien. Muy bien. Es lo que mas rico se siente, según muchos, y es lo mas que puedes hacer. Es lo que detectan con el encantamiento ese que te dije.

-Ah.

-Cuidate de que tu hermano no te ponga uno. Aunque supongo que en tu caso si estaría bien que se enterara… - se llevo la mano a la barbilla.

-¿A ti te pusieron uno?

-Si.

-¿Tu familia te corrió cuando lo rompiste?

Namari se puso serio.

-Si.

-¿Por eso ningún seme se quiere casar contigo?

Namari rodo los ojos en blanco.

-Si.

-Lo siento mucho. – lo abrazo Nichrom – Tu eres muy bonito y muy bueno. – se sonrojo de decir eso.

-Awww – le acaricio la cabecita - ¿Te gustaría que me casara con tu hermano?

-No.

-¿Por qué?

-Porque es mi hermano.

-Tu hermano ya se la vive “jugando” con ese par.

-Si tambien jugara contigo entonces si que ya no me daría tiempo para nada.

-Ay, cosita… - le encantaba llamarlo asi, pero se limitaba porque a Nichrom no le gustaba – Si me casara con tu hermano, solo jugaríamos el y yo. En teoría.

Nichrom lo vio con ojitos acusativos.

-¿Ves? Ya tienes ganas de jugar con ellos y dejarme solo tu tambien.

-No te dejaría solo. – le sacudió la melenita.

-Si me quitaras a mi hermano, ya no te querria.

Lo abrazo.

-¿Por qué me haces eso? – le reclamo en son de broma – Solo me aguanto porque cuando crezcas voy a jugar contigo – Nichrom lo miro con excepticismo y el sigio  – Te voy a manosear como Magna y vamos a hacer tijeras.

-¿Qué son tijeras?

-Cuando juntas la cola con otro.

-Ah.

 

 

***

 

Continuara...

Notas finales: Holi, los invito a ver mi tuiter para alimentar mi gran ego... naah! Para que vean dibujos de los paches, de otras lindas y muy talentosas personas y mios. Todo lo que veo de los paches lo retuiteo. Es el hilo de Ariadna para encontrar el oro jajaja
 
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