Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

La complicada vida de Draco Malfoy por Orseth

[Reviews - 18]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

________________

 

 

 

            -Gracias por acompañarme –dijo Draco días después cargando a Cissy y Harry cargando a Scorpius- pero creo que le sentará muy bien ver a los niños.

            -Eso creo también pero no sé si mi presencia sea buena.

            -El ya sabía que estamos saliendo, no creo que haya problema, además el señor Floyd dijo que debemos tratarlo con normalidad.

            -Ok.

            Cuando entraron a la habitación, una enfermera le estaba dando agua con una pajilla.

            -Mira cariño, es papá –dijo a Cissy, quien miraba todo sorprendida de las luces de los aparatos.

            Al principio Cissy no prestó atención a lo que Draco decía, estaba más interesada en las luces parpadeantes que estaban a un lado de la cama, pero cuando se acercaron más, miró quien estaba en la cama, recostado en almohadas; primero se le quedó viendo fijo y sin reaccionar cuando Draco la puso de pie en el colchón.

            -Es papá, mira cariño es papá -Barnett alzó una mano y tocó el pequeño pie haciendo que Cissy reaccionara y se girara a Draco comenzando a llorar- No llores cariño, es papá.

            Barnett sonreía pero al ver a la niña hacer eso su semblante se entristeció.

            -Es normal –dijo Harry entonces acercándose- está desconcertada… mira Scorpius, es papá.

            Harry puso a Scorpius en donde había estado Cissy, Barnett volvió a alzar la mano susurrando con voz ronca:

            -Scorpius…

            -Pa… -dijo entonces Scorpius tomando la mano de Barnett- Pa… pa…

            Barnett sonrió más ampliamente mientras Scorpius se le encimaba.           

            -¡Cuidado con el suero! –exclamó Draco riendo mientras Cissy se calmaba y se giraba a mirar a la cama de nuevo.

            -¿Pa? –dijo frotándose los ojos llorosos.

            -Sí cariño, es papá.

            Entonces acercó a Cissy, quien al ver a su hermano sentarse sobre Barnett, quiso acercarse también.

            -Cuidado –dijo Draco ayudándola- no lastimen a su papá.

            -Estoy… bien… -musitó tocando la mejilla de Cissy, quien ahora reía tocando la cara de su papá.

            Harry miró a Draco sonriendo.

            -¿Ya lo ves? Todo salió bien –entonces  se quitó las gafas y las metió en un bolsillo de su chaqueta, pues estaban algo sucias, pero sosteniendo a los niños no podía limpiarlas, así que decidió hacerlo después; entonces Draco se le quedó mirando un momento para luego mirar a Barnett.

            -Harry…

            -¿Mmm?

            -No, nada.

            Ambos sostenían a los niños para que no recargaran todo su peso en Barnett, quien después de un rato se quedó dormido con los niños encima de él.

            -Creo que es hora de irnos –dijo Draco sonriendo- gracias Harry.

            -Por nada.

            Cuando salieron y acomodaron a los niños en la carreola, Draco permanecía silencioso.

            -¿Pasa algo?

            -No, nada… oye Harry…

            -¿Sí?

            -¿Podrías dejarte la barba de nuevo?

            -¿Porqué, me veo mal?

            -¡Oh no, para nada!

            -Creí que te gustaba así.

            -Y me encantas, pero también me gustas con barba, te ves muy sexy.

            -Bueno… -respondió sonriendo frotándose la barbilla- de acuerdo.

 

 

__________________

 

 

            Días después, Ron y Hermione habían ido a visitar a Draco a la mansión, así que tomaban té y pastelillos en el jardín con Garia.

            -Están deliciosos, así cómo bajaré de peso –dijo Garia hincándole el diente a una empanadita de jamón y queso.

            -Sufrimos de lo mismo –dijo Hermione haciéndole los honores  a un pastelillo de crema de zarzamora.

            -Pues yo trabajo mucho, así que debo nutrirme –añadió Ron zampándose un bocadillo de camarón y mayonesa sin ninguna culpa.

            -¿Pasa algo Draco? –preguntó Garia entonces al verlo muy callado.

-¿Quieres que les diga algo increíble?

-Cuenta.

-Recordarán que Harry se afeitó la barba.

-Sí.

-Y que hace días llevamos a los niños a ver a Barnett… bueno, pues cuando estuvieron juntos y Harry estuvo sin gafas y sin barba ¿Qué creen que descubrí?

-¿Qué Barnett es el hermano perdido de Harry? –exclamó Ron sin dejar de ver la charola, viendo cual sería su siguiente bocado.

-¿Eh?... ¿cómo lo supiste?

Draco vio como los tres se miraban entre ellos para luego sonreír y rodar los ojos en actitud condescendiente, todo sin dejar de comer.

-¿Y apenas lo notas? –dijo entonces Hermione compadeciéndose de su confusión- Draco, desde hace ¡meses! Todos vimos que esos dos son casi como dos gotas de agua… si no fuera por la diferencia de edad, diría que fueron separados al nacer.

-Si a Barnett le ponemos gafas y le pintamos un rayito en la frente, sería Harry –dijo entonces Garia- sólo es un pelín más bajo.

-Pero parece su hermanito –dijo Hermione riendo.

-Si mi difunto suegro estuviera vivo, le preguntaría sino hizo fechorías por ahí.

-¿Entonces ya lo habían percibido? –Preguntó ceñudo- ¿Por qué nadie me lo dijo?

-Porque es taaaan obvio, Draco –exclamó Hermione rodando los ojos- todos nos preguntábamos hasta cuando te ibas a dar cuenta… pero bueno, ya pasó.

-Bueno, pues es… raro…

-Solo asegúrate de que cuando estés con Harry, no menciones el nombre de Barnett por error.

-¡Cielos no!... ¡Oh mierda, ahora lo pensaré!

Todos comenzaron a reír a expensas de Draco, quien tardo algo en darse cuenta de que estaban molestándolo a propósito, así que decidió dejarlo pasar o nunca lo dejarían en paz.

 

 

__________________

 

 

 

            -Buen día abuelo –dijo Calem días después- ¿podrías acompañarme hoy a un lugar? -Allister había acordado acompañar a Calem a donde fuera que le pidiera, sabía que no estaba en posición de poner reparos a nada, así que simplemente asintió- Tranquilo, no te voy a secuestrar –añadió sonriendo.

            -Eso espero.

            Salieron de la mansión y llegaron hasta el centro de Londres, a un boulevard transitado pero acogedor y entraron a un edificio; Allister iba intrigado y curioso de saber a dónde iban.

            Llegaron a un salón con grandes ventanales, gente en sillas y a un hombre de pie enfrente arriba de un templete que estaba hablando, ellos entraron y sin decir nada tomaron asiento entre la gente.

            -Hay padres que están preocupados con el adoctrinamiento ideológico de sus hijos en las aulas… diversidad afectivo sexual, promover relaciones homosexuales entre niños de diez años… etc.… -dijo el hombre al frente que tenia aproximadamente treinta años- Y la idea que hay detrás de éstas declaraciones es que la orientación sexual es algo que se aprende, en otras palabras un fenómeno social o educativo, pero ¿Qué hay de cierto en esta idea? ¿La homosexualidad es algo con lo que se nace o algo que se hace?

            El hombre comenzó una serie de explicaciones de funciones cerebrales que a algún desinteresado podrían aburrir, pero Allister miraba todo muy atento sin decir nada, viendo de tanto en tanto a la gente que estaba en las sillas y había desde gente mayor como él, hasta jóvenes y niños; luego el hombre dio paso a otro.

            -Hola a todos, me llamo Ben Curry y soy australiano, tengo treinta y dos años, soy judío y me sometí a tratamientos de conversión cuando me di cuenta de que me  gustaban los hombres en lugar de las mujeres… acudí a un centro especializado en donde hicimos muchos tipos de actividades con la meta de aumentar la masculinidad y dejar atrás comportamientos considerados como “no sanos”… nos ayudaban a buscar traumas en nuestro pasado que explicaran porqué nos sentíamos homosexuales, usaban el psicodrama para sacar estos traumas y poder solucionarlos… -continuó hablando de más tipos de terapias que había experimentado- estas terapias estaban hechas para crear ese subidón de sentirte parte de la comunidad de hombres y luego volvía a la vida real ya “curado”… pero tenía un bajón total, siempre, al ver que yo seguía sintiendo lo mismo respecto a los chicos… era un circulo vicioso, me sentía mal y acudía a estos grupos en donde me “reponía” entonces regresaba a casa y todo iba en picada de nuevo, entré en un estado de depresión muy fuerte en donde incluso atenté contra mi vida… todo por querer cambiar quien soy en realidad, por intentar ser como los demás me decían que debía ser, fueron años de tortura, de odiarme a mí mismo… de negar quien soy en realidad.

            Después de este hombre varias personas más subieron al   templete.

            -Hola a todos, soy Sam y desde que hice mi transición hace veinte años, todos los días de mi vida he recibido un acto de violencia o discriminación en la calle…

            -Hola, soy Sandy, en una ocasión estábamos tomándonos una foto mi pareja y yo frente a un monumento y alguien pasó y gritó “¡hay niños!”… la situación de decirle a los niños que nuestra orientación está mal es limitar el amor y los sentimientos que el niño puede sentir… me hace sentir triste porque la gente que no enseña a sus hijos que el amor es diverso, que ante todo debe haber respeto aunque no estés de acuerdo, es crear personas intolerantes que no ve que ante todo, somos seres humanos tan merecedores de amor como ellos…

            -Me llamo Tom y yo no soy homosexual, mi hermana Anna si lo era y se los digo yo porque ella ya no puede… mis padres la rechazaron y la echaron de casa, tenía solo dieciocho años y hace un año se suicidó.

            Hubo varios testimonios más en los que nada de lo que se decía era alentador, hasta que un joven como de veinte años se subió.

            -Hola, me llamo Jeff y mi propósito no es causar la envidia de todos ustedes –dijo sonriendo, lo que provocó la risa de los presentes- es solo que quiero compartir que no todo es malo, que hay padres que pueden superar esta barrera de prejuicios… quiero contarles que hace un mes salí del armario ante mi padre… no mentiré, sentía que me cagaba en los pantalones –dijo haciendo que varios volvieran a reír- pero estaba decidido a no vivir ocultando mas lo que soy… así que le preparé su postre favorito y ahí en la cocina, le dije: papá… soy gay… lo dije muy serio y no les miento, las manos me temblaban por lo que agarre el trapo de limpiar… mi padre me miró unos minutos en silencio y luego dijo “Hijo… ¿Acaso creen que no lo sospechaba?... ustedes los hijos creen que estamos ciegos… pero antes que nada déjame decirte una cosa, tu puedes ser lo que tú quieras, estar con quien tú quieras siempre y cuando estés feliz y seguro… yo te amo por sobre todo ¿y sabes por qué? Porque soy tu padre, porque yo te vi nacer y no te crié todos estos años para que vayas por ahí avergonzándote de quien eres… yo te crie para que caminaras orgulloso y feliz ante el mundo… suficiente tendrás con la gente idiota que te discriminará como para que tu propia familia lo haga también, por eso no me importa tu orientación, eres mi hijo y te amo tal como eres” –Para ese entonces el chico lloraba y varios de la audiencia también- Soy feliz y soy afortunado y desgraciadamente también soy parte de ese porcentaje pequeño que es aceptado por su familia… cuando alguno de ustedes tenga problemas, pueden acudir a mí, si alguien es echado de su casa, mi familia y yo estamos dispuestos a brindarles un lugar en donde reciban alimento y abrigo hasta que puedan ponerse en pie de nuevo, dejaré mi información de contacto con los organizadores.

            Más personas pasaron a hablar hasta que la reunión llegó a  su fin, varias personas pasaron a repartir bocadillos y bebidas en charolas y una chica de cabello multicolor se acercó a Allister y sonriendo le acercó una charola de cup cakes.

            -Mi abuela los hizo, están deliciosos, pruebe uno.

            Allister la miró y luego miro a Calem que le sonreía mientras tomaba uno, así que hizo lo mismo.

            -Gracias.

            -Por nada.

            Y luego, sin decir una palabra salieron de ahí.

            -No quiero regresar a la mansión –dijo entonces Allister- Vete tú, yo quiero caminar un poco.

            -¿Seguro? ¿No quieres que te acompañe?

            -No, estoy bien.

            Calem asintió y dándole una palmada en el hombro se fue.

 

 

______________

 

 

 

            Barnett dormitaba mientras una enfermera cambiaba el suero que tenía, en eso llegó un joven como de treinta años, alto, de cabello castaño y grandes ojos color miel  vestido de blanco.

            -Hola Sally.

            -Hola Tom.

            -¿Será tu paciente?

            -Así es.

            -Bueno, ya terminé, los dejo.

            -Gracias –cuando la enfermera se fue, el joven se acercó a la cama y comenzó a hablar- Hola, lamento despertarte.

            -No estaba dormido –respondió Barnett con voz baja y abriendo los ojos.

            -Me llamo Tom Cavill y seré tu fisioterapeuta, mi función es apoyarte y ayudar a recuperarte y a tener una buena calidad de vida, espero que formemos un buen equipo.

            Barnett rodó los ojos al oír al hombre hablar con tanto optimismo.

           

 

 

_______________

 

 

            -Lo hubieras oído hablar –dijo a Calem cuando lo visitó al día siguiente- esperaba que en cualquier momento el tipo vomitara arcoíris.

            -No seas tan cínico, es optimista.

            -Bueno ¿y cuando me voy a casa?

            -De eso quería hablarte, mañana mismo estarás en la mansión.

            -¿En serio? –pregunto sonriendo.

            -Sí.

            -Pero…

            -Por el abuelo no te preocupes, no tiene vela en este entierro.

            -¿A intentado verme?

            -Sí pero la abuela parece el can Cerbero  ante tu puerta, si la hace enojar capaz que le arranca un brazo de una mordida… ¿quieres verlo?

            -No… hace tiempo decidí que no necesito de su mala actitud… ¿y a qué hora nos vamos mañana?

            -No lo sé, pero  tu tranquilo, yo me ocupo de todo.

           

 

 

__________________

 

 

            Al día siguiente Barnett fue trasladado a la mansión en donde su habitación había sido totalmente adecuada a sus necesidades.

            -Tendremos enfermera las veinticuatro horas –dijo Ayla mientras le acomodaba un mechón de su cabello- y el fisioterapeuta vendrá todos los días, así que tendrás todo lo que necesitas.

            -Ok, gracias.

            -¡Hola, hola! –saludó Draco entrando a la habitación con un niño en cada mano sosteniendo sus pequeños pasos.

            Barnett sonrió al verlo y los niños comenzaron a brincotear contentos deseosos de que los subieran a la cama.

            -Buen día –dijo Tom entrando en ese momento.

            -Buen día señor Cavill –respondió Ayla al ver al fisioterapeuta- ¿ya listo para comenzar?

            -Más que listo, pero por favor llámeme Tom.

            -Claro, será un gusto ¿quieres que nos llevemos a los niños?

            -Pueden estar aquí en lo que preparo mis cosas.

            -Bien, dile a Draco cuando deban comenzar.

            Barnett no se lo había dicho a nadie pero estaba muy nervioso de comenzar sus terapias, a pesar de haber sido evaluado por el sanador Floyd y puesto al tanto, temía ver con sus propios ojos que tan “inútil” había quedado, por lo que cuando lo vio listo para comenzar, miró a Draco cuando éste levantó a Cissy de la cama; Draco vio el temor en los ojos verdes, por lo que tomándole una mano susurró:

            -Eres fuerte y has salido de algo mucho peor, puedes con esto y con más, yo confío en ti, todo saldrá bien.

            Barnett sonrió agradeciendo los ánimos, en verdad los necesitaba.

            -Escucha –dijo Tom cuando quedaron solos- será un camino complicado y doloroso, pero a la larga veremos grandes resultados ¿cuento contigo?

            -¿Puedo decir que no?

 

 

_______________

 

 

 

            Con el transcurso de las semanas la familia extendida fue programando visitas cortas para verlo, ya que solo habían podido enviar correspondencia, el abuelo había pedido verlo varias veces y él mismo había dicho que no.

 

           

__________________

 

 

 

            -¡Qué lugar tan elegante! –dijo Draco cuando Harry lo invitó a cenar una noche pidiéndole que fuese vestido de acuerdo a las normas del restaurante.

            -Me pareció adecuado a los que antes solías concurrir.

            -Antes, tú lo has dicho.

            Pidieron la cena y mientras bebían una copa de vino, Harry tomó su mano y lo miró a los ojos.

            -Draco, quise que esta ocasión fuera especial.

            -¿Por qué? –preguntó comenzando a sentir mariposas en la panza.

            -Llevamos ya medio año de relación y como te dije una vez, iba a ser muy fácil enamorarme de ti.

            -¿Ah si? –preguntó sonriendo como bobo.

            -Sí… Draco, hoy quiero decirte que no solo me gustas, que no solo me encantas… te amo... y quiero pasar mi vida a tu lado –añadió sacando un estuche de su saco.

            -Oh por Merlín –susurró viendo un discreto anillo de platino con diminutos diamantes incrustados a todo su alrededor.

            -¿Y bien? -Draco lo miró sonriendo y sin decir nada extendió los brazos y lo abrazó- ¿puedo tomar eso como un sí?

            -Sí… claro que acepto ¡Claro que acepto!

            Cuando se separaron, Harry le dio un beso y le puso el anillo.

           

 

________________


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).