Killian murmura algo, aun durmiendo. No sé qué hora es, pero puedo escuchar los ruidos del día fuera así que debe estar amaneciendo o amaneció ya ¿Killian va a despertar ya? ¿No es más o menos la hora que despierta con Nell?
— ¿seguirás durmiendo?— le toco la frente, pero no se mueve, ni una señal de despertar. Me levanto, y Killian sigo durmiendo. Creo que nunca lo vi durmiendo tan tranquilamente. No cabe duda que una buena ronda de sexo hace milagros. No hay ningún mensaje en mi teléfono así que me relajo y voy a la cocina, tengo demasiada hambre después de la actividad física de anoche. Espero que Killian también despierte con hambre además estoy seguro que lo primero que querrá es ir por Nell. Estoy de buen humor, y aunque es temprano y apenas amanece no me importa, podría ponerme a cantar.
— ¿en serio estas cantando esa canción?— me giro, Killian está arrastrando los pies por la cocina con los ojos medio cerrados.
— ¿Qué tiene de malo?
— es vergonzoso ¿no iremos por Nell ahora?— ya lo sabía. Al menos esto es algo que puedo comprender de él.
— desayúnenos primero, ella aún debe estar dormida. Y si te tranquiliza no tengo mensajes o llamadas así que todo debe estar bien— él hace un ruido entre un bostezo y una palabra— ya terminé ¿quieres comer?— alcanzo a ver que mueve la cabeza para decirme que sí. Sirvo dos platos y los llevo a la mesa, antes de sentarme saco una botella de jugo de naranja. Killian mueve un poco la comida, sin comer— ¿hay algo malo? ¿No te gusta?
— la comida está bien.
— entonces ¿hay algo que está mal?
— no… terminare esto para ir por Nell. Sé que está bien pero no quiero abusar de la amabilidad de los demás— al menos está comiendo. Si no fuera porque tiene que comer, sigue estando muy delegado, intentaría seguir con la conversación. No siento que estemos mal o que haya algo mal pero está claro que quiere decir algo— me estas mirando de nuevo.
— ¿no puedo?— se encoje de hombros— somos muy observadores, a los hombres lobo me refiero. Estamos muy sintonizados con las personas que nos importan.
— ¿quieres hablar sobre lo… que paso anoche?— sus ojos siguen fijos en el plato.
— ¿tú quieres hacerlo? yo lo pase bien, y no me opongo a repetirlo— Killian se atraganta, intentando no hacer ruido— ¿eso es un no?
— No… es decir, no es un no… también me gusto.
— Es bueno escucharlo…— Vuelve a fijar la mirada en la comida— no lo hiciste por algún motivo como la culpa o porque sientes que me lo debes ¿Killian?— Genial, en buen momento vengo a recordar esto.
— ¿Y que si lo hice?— ¿Qué? No… eso sería…
— esa no fue mi intención, es… ¿Por qué lo hiciste? No quiero que hagas nada que no quieras, y hazlo solo porque quieres y no porque sientas que tienes que hacerlo— escucho un resoplido y los ojos grises de Killian me miran.
— lo sé, era una broma. Tiraste la cuchara.
— ¡No bromees sin poner expresiones! Estoy sintiéndome la peor persona del mundo por obligarte a hacerlo conmigo. Dios… tengo un serio conflicto entre el hecho de que ahora hagas bromas, lo que me hace feliz, y el tema de tus bromas que no es para nada gracioso.
— Lo fue. Debiste verte… Umm por si tienes dudas, yo no lo hice por ese motivo. Quería hacerlo contigo, solo eso— me levanto por otra cuchara para no seguir hablando. Hay muchas cosas que me gustaría preguntarle ¿en dónde nos deja esto? ¿Lo haremos de nuevo? ¿Qué tan diferente fue a lo que hacías? Preguntarle sobre el sexo antes está fuera de discusión, al menos por ahora. Todo lo demás creo que lo asustaría ¿o podríamos tener la conversación como los adultos que somos? ¿Debería iniciar por lo que siento? ¿Qué es lo que siento?— ¿Lon?
— ¿Qué?
— que ya iré por Nell. No quiero dejarla mucho tiempo durante el horario de trabajo de Eddie— buen punto. También tengo que hablar con Rowan.
— vayamos a buscar un auto.
— un… ¿te refieres a comprar uno? ¿Ahora?
— cuando recojamos a Nell. Necesitamos uno, no podemos seguir caminando a todos lados. No me opongo a caminar, me gusta caminar, pero tenemos que salir más temprano y pronto comenzaran las lluvias, no quiero que te enfermes por mojarte— como le estoy mirando, veo como pone los ojos en blanco y suspira. Le miro, alzando las cejas.
— ¿hola, viví en la calle con climas intensos?
— Sí, y la última vez tuviste una neumonía. Eras una cosita asustada en la cama que tosía y apenas podía ponerse de pie.
— eso no fue así. Si podía ponerme de pie— me rio y Killian me da una patada en la pierna, o un golpe suave en la pierna es más apropiado. Es… maravilloso el cambio en su humor, ya había estado mostrándose más abierto pero esto está a otro nivel. Afuera el clima es más cálido a pesar de estar tan cerca del bosque. El calor será insoportable cuando lleguemos a la clínica— ¿tienes algo que hacer?
— No, a menos que quieras que hagamos algo.
— sé que es sábado pero podemos buscar una guardería para Nell.
— Ah, buena idea. Conozco las zonas así que podemos enfocarnos en un área que quede cerca a la mayoría, así no tenemos que preocuparnos en caso de que no podamos pasar por ella y todos estarán cerca en caso de que tengamos alguna emergencia.
— ¿emergencia?
— Umm… ¿Cómo explicarlo para que no te alarmes?... Nell es una de nosotros, así que en caso de que tengamos problemas como antes o algo nuevo, iremos por ella para protegerla. Por instinto protegemos a los miembros que no pueden defenderse.
— Lo entiendo. Está bien, si eso funciona para los demás estoy de acuerdo pero ¿ella está en peligro? Ayer lo noté, cuando nos encontramos con los esos lobos, tú estabas más preocupado de lo que me dejaste ver y me estuve preguntando qué significa que lleguen otros lobos, por Nell.
— hay algunos lobos que no dudarían en atacar a los débiles de otra manada, en especial cuando la misma manada es pequeña y débil, otros se enfocan en los adultos y si ganan los pequeños son tomados por la nueva manada ¡pero no esperamos que pase algo de eso! estamos en un lugar donde pocas cosas pasan desapercibidas y no quedamos tantos como para intentar hacer algo como eso— aunque quedan manadas grandes, resulta desgastante e innecesario tomarse la molestia.
— ¿estás seguro de eso?
— sí.
— entonces confiare en ti.
— puedes hacerlo, no dejare que nada les pase… Hey, creo que… tal vez podríamos… olvídalo— me adelanto, avanzando más rápido. Killian me sigue el paso unos momentos, pero no caminamos ni dos calles y ya está jadeando— Killian…
—un momento…
— necesitas ejercitarte.
— necesito un momento— jadea.
— ¿sabes? A veces hacemos algo de jogging por las mañanas, puedes unírtenos.
— ¿hacemos?
— Bradley, Jenny y Murray al inicio, Eddie se nos unió después. No te preocupes por el ritmo, podemos ajustarnos— hace un sonido entre resoplido y jadeo, que me deja claro que no va a aceptar, al menos no hoy. Se endereza como si nada y exhala una última vez.
— vamos, es tarde.
— tal vez el auto sea una mala idea después de todo— por supuesto que él me ignora. Caminamos más despacio, hasta que llegamos a la clínica. Es sábado y está cerrado, hay un letrero en la entrada anunciando que hoy permanecerá cerrado. Escucho la televisión desde que me paro en la puerta, como está cerrado tengo que llamar al timbre y esperar.
— al fin, te habías tardado— Rowan parece solo un poco de mal humor, Killian se echa un poco hacia atrás para cubrirse con mi cuerpo. Bien, al menos una señal de sus instintos de supervivencia.
— gracias por ofrecerse a cuidarla, estoy seguro de que no fue ninguna molestia.
— Eddie está por salir.
— ah, por eso tienen cerrado hoy— entramos. El interior está fresco y con el característico olor a desinfectante… y serpiente— Debes estar en pánico por quedarte a solas con Nell ¿a quién llamaste para cubrir a Eddie?
— ¡No llame a nadie! Puedo cuidar de una niña sin problemas, y ella es tranquila, es fácil cuidarla así que no tengo problema con que se quede aquí, fue divertido incluso.
— Consigue otro bebé si quieres, Nell es nuestra— me detengo, Rowan también, e incluso se gira a mirarme sin ocultar la sorpresa. Killian sigue avanzado, subiendo la escalera, completamente ajeno a lo que acaba de pasar— no es… no pretendía…— no sé qué más decir, la sorpresa por la agresividad con que hable…
— está bien— Rowan alza las manos— no voy a quitarles a la niña ¿Quién demonios crees que soy?— pone los ojos en blanco y también sube la escalera.
— ¡No fue así como lo dije!
— como digas— no le respondo más porque Killian nos está mirando, y Nell camina ahora hacia mí. Escucho a Eddie en la habitación, algo cae al suelo y luego la puerta se abre. Eddie solo se despide rápidamente antes de bajar— sobre los dos que encontraron ayer….
— no se mucho más, no parecía haber una manada allí, pero sería bueno investigarlo por si acaso. Si se establecen allí debemos tener la mejor de las relaciones y establecer los límites.
— Lo sé, no me agradaría que lo hicieran. Una manada tan cerca de la nuestra no es la mejor de las noticias. Iré esta noche, explorar la zona y cerciorarnos, no tiene caso perder la cabeza aún.
— Voy contigo— pase por algunas manadas en las que el conflicto por el territorio absorbía todo. No hay una regla que impida vivir en algún lugar considerando que hay mucho espacio para todos— Baruch vendrá también ¿no? ¿Alguien más?
— Kevin, Rita y Murray. Solo es una exploración amistosa.
— ¡Yan!— el grito de Nell llama mi atención. Ella está caminando frente al televisor, y Killian nos está mirando.
— me sentiría mejor si no se quedaran solos esta noche.
— hay habitaciones libres en la casa y los demás están allí. Le pediré a Beau que se quede esta noche allí. Jennifer y Bradley están allí.
— Umm… no tengo… no tengo problemas con quedarme en otro lugar, ni con Jenny y Bradley, pero en esa casa está… Umm… el lobo— Killian no nos mira, me divido entre el orgullo que siento por escucharlo expresarse y la aprensión por sus palabras. El tema de Donelly es algo delicado: por más intentos que han hecho no hay cambio alguno en el lobo. Sigue tan salvaje como el primer día que lo conocí— no temo por mí, pero podría… herir a Nell.
— supongo… Donelly puede ser encerrado— sé lo poco que le gusta eso, y lo mucho que Kalila va quejarse por eso. Todos tienen opiniones diferentes sobre el tema y no hay forma de ponerse de acuerdo en que hacer.
— gracias— Killian no se ve muy convencido, pero si un poco más tranquilo ¿nunca vio el lugar donde esta Donelly? No, estoy seguro de que siempre se mantiene alejado. El bolso con las cosas de Nell está en el sofá, así que lo tomo.
— nosotros solo venimos por Nell, nos vemos en la noche y gracias por cuidarla— dejo que Killian baje primero y lo sigo. Nell se ve muy contenta ahora que está de regreso con él, y ni hablar de Killian, quien por fin parece estar cómodo ¿quizá estaba preocupado? Bien, sé que se preocupa por dejar que los demás cuiden a Nell, no por que piense que no pueden cuidarla, sino porque no quiere molestar. Estoy pensando en tantas cosas que no me doy cuenta de que no hablamos en todo el camino de regreso, hasta que Killian abre la puerta. No sé qué decirle. Me limito a ver como deja a Nell en la alfombra llena de juguetes y comienza a traer cosas de la habitación.
— Lon.
— no estaba escuchando ¿decías?— él no me responde, sus ojos grises están fijos en mi ¿buscando algo? veo como pasa su mirada a Nell y sigue doblando ropa y guardándola en mochilas. Hay… algo diferente— Killian.
— ¿sí?
— no tienes por qué estar asustado— eso detiene sus movimientos. Esto es nuevo, Killian asustado, aunque es algo tenue ¿más nervioso que asustado?— si no te sientes cómodo en la casa no tienes que ir, puedo pedirle a alguien que venga aquí y se quede contigo.
— no es… la casa. Pero estoy preocupado por Nell, sí hay otra manada, si vuelven a… tener problemas como la vez anterior…— no necesita terminar, sé exactamente qué es lo que dirá y por eso mismo no dejo que termine de hablar. En tres pasos llego y le abrazo. Escucho la inhalación que da, algo entre sorpresa y quejido. Creo que nunca… nunca le abrace de este modo ¿en la playa? ¿Anoche? Killian se siente demasiado frágil en mis brazos, algo que no tiene que ver con su físico. Esta inmóvil, sin respirar, demasiado rígido por el contacto.
—no dejare que nada le pase, ni a ti— froto su espalda en movimientos lentos— hare todo lo que pueda para que estén seguros ¿confiarías en mí?— siento como exhala, espacio y su cuerpo se relaja, sin moverse aún.
— lo hago…sí. Yo… confió en ti. Lo siento.
— Este bien, es una situación nueva, te preocupas por Nell y pudiera haber peligro. Es totalmente valido sentirte inseguro. Hey, si las cosas se llegan a poner mal siempre podemos conseguirte una estancia temporal en otro lugar.
— gracias. Estoy bien… solo… esto es nuevo…— no lo dice, pero sé que no se refiere a tener miedo por Nell. Para mi está implícito que lo nuevo para él es confiar en alguien. Quiero decirle que yo también conozco bien el sentimiento de no encajar, de no poder confiar en nadie en el mundo. En cambio, le aparto un poco y le beso la mejilla.
— ¿salimos a un paseo?— Killian parpadea.
— pero acabamos de llegar.
— Sí… Aún tenemos varias horas para que salgamos de nuevo y me siento un poco inquieto, ve por Nell e iremos al bosque— sus cejas se alzan.
— ¿al bosque? ¿No es eso peligroso?
— que va, no iremos al fondo, solo estaremos cerca, incluso cerca de la casa— No tomamos mucho cuando salimos, cuando pasamos frente a la casa de Rowan, Murray nos saluda pero no nos detenemos— hay un pequeño espacio más allá, podemos pasar el rato— Killian no dice nada, sostiene a Nell, quien parece feliz por estar aquí. Caminamos esquivando árboles y arbustos hasta que llegamos. Inhalo profundo, relajándome con el olor del bosque. Killian se sienta, jadeando.
— no haces ruido.
— ¿Qué?
— cuando veníamos, tu no hacías ruido. En cambio, mientras yo caminaba parecía que había un elefante en el bosque— ni hago el intento por aguantar la risa. Me duelen las costillas de reírme. Killian me mira, no está sonriendo pero parece muy alegre.
— es costumbre… puedes decir que estamos sintonizados con la naturaleza y nuestros instintos nos hacen ser más cuidadosos.
— ya veo… olvido que sus sentidos son mejores que los nuestros— Nell gatea en el pasto, balbuceando bajito— ¿Cómo es eso de los instintos?— me reclino en el pasto, mirando los árboles y partes del cielo.
— es un poco difícil de explicar ¿parecido al dichoso sexto sentido? somos más... Sensibles a cambios que los humanos no suelen notar, posturas, olores corporales, miradas… y solo actuamos en base a eso. No siempre es lo mejor ni lo correcto, pero es lo que hay. Es más intenso con personas importantes para nosotros. Como el instinto de proteger— menciono casualmente— es muy peligroso para nosotros, en especial con… bueno, con humanos, porque no lo entienden. Si alguien se te acerca a ti o a Nell podría considerarlo un peligro y tener una reacción violenta. Y no tiene nada que ver con los celos.
— ¿Por qué?— resoplo, centro mi atención en Nell.
— Porque me gustas— él no dice nada. Ya no estoy seguro de si no sabe que decir, se pone incomodo o solamente le gusta el silencio y su cara no dice mucho tampoco, todo un reto— ¿aún es difícil creerlo?
— no tanto… puedo creerlo. Es solo que aun siento que todo esto va a…— levanta las manos y hace un gesto como estadillo— y tendré que volver a sobrevivir sin un hogar. Y sera más duro porque tuve esto, y siempre estaré recordando cómo es tener una casa, trabajo, a-amigos y un a-a-amante.
—oh, Killian— ruedo para mirarlo y alcanzo su mano. No quiero soltarlo nunca— voy a mantenerte feliz todo el tiempo— le veo poner los ojos en blanco y mirarme.
— No eres responsable de mi felicidad. Ni quiero que lo seas, no es una forma sana de llevar una relación— gimo, cubriéndome la cara con la otra mano. Tiene razón, pero a la vez es inevitable para mí querer hacerlo.
— entonces, ¿estamos en una relación?— le escucho murmurar un “idiota” que me hace reír— me encanta cuando sale ese temperamento tuyo, pero es verdad que no me queda muy claro que piensas de las relaciones amorosas, quizá no quieras una y prefieras algo mas como amigos con beneficios.
— como si tú te fueras a conformar con eso— se me escapa una risita. No, no me conformaría pero aceptaría eso temporalmente— no pensaba mucho en eso ¿bien? ahora tengo más cosas que manejar, pero se siente… como si es lo que debería hacer— sigo sujetando su mano, jugando con sus dedos— y que no seas responsable por mi felicidad no significa que no me guste pasar tiempo contigo y que ese tiempo sea… feliz.
— me alegra escucharlo. Killian, si tu… hare lo posible para que no regreses a las calles, pero si lo llegaras a hacer, ten por seguro que yo iré contigo y no estarás solo ¡Pero eso no va pasar! Vamos a vivir aquí o quizá nos mudemos pero no soy el único que estará contigo ¿crees que los demás van a dejarte viviendo en la calle? se las verían conmigo solo de pensarlo— allí esta, su sonrisa.
— Gracias. Y solo para que no haya un malentendido, dije que a veces, no lo pienso siempre. Y sé… creo que no podría volver a vivir como hice. Encontrarlos fue… un punto sin retorno ¿Cómo se les llama a esos encuentros que te cambian la vida?
— ni idea ¿encuentros que te cambian la vida?— me burlo. Killian suspira ¿eso fue un resoplido?
— el punto es que no tengo esos pensamientos todo el tiempo. Me cuesta reconocer que estoy feliz, pero lo soy. Con Nell. Y contigo— Nell camina hacia nosotros, riendo y sosteniendo una roca para mostrárnosla— Es bonita— observo como ella se la da. Esto es… sin duda un encuentro de los que cambian la vida. Hasta que no conocí a Killian no pensaba en tener una relación así, mucho menos terminar siendo una de las figuras paternas de un bebé— Lon… si pudieras cambiar algo en tu vida ¿lo harías?
— supongo que no.
—… ¿no extrañas a tus padres? Me pregunto mucho si Nell… sobre lo que le diré cuando pregunte por ella.
— dejando de lado que aún quedan algunos años para que eso pase, a veces si lo hago. No fueron malos padres pero hubiera deseado que me entendieran y quizá hubiéramos tenido comunicación cuando me fui.
— ¿no hablas con ellos?
— no desde que me fui. No es que pudiera enviarles cartas para que un cartero humano se metiera a la boca del lobo. Había algunos teléfonos pero dudo mucho que aprecien mi llamada. Cuando eres un lobo, la manada es lo más importante, si te vas dejas todo. Aun así es la mejor decisión que he tomado ¿y tú? ¿Extrañas a tus padres?
— Sí— parece que va a decir algo más, no lo hace. Yo tampoco añado más— estas… ¿estás seguro de que… quieres una relación conmigo? No voy a sentirme mal o algo si tu solo querías algo de una vez.
— ¿no deje claro en la mañana que no era algo de una vez? me gustas, mucho. Y quiero tener una relación formal contigo— ¿relación formal? ¿estamos en una entrevista de trabajo o qué?— tu entiendes, noviazgo, solo nosotros…
— no eres muy bueno con eso ¿cierto? no puedo decir mucho porque tampoco lo soy.
— esa no es una respuesta.
— creo que ya hacemos muchas de las cosas que haría una pareja.
— lo hacemos ¿sabes? me gustan los retos, resolver cosas difíciles… ese fue el principal motivo por el que yo me sentí atraído por Liam— Nell rueda en el pasto, riendo. Killian me suelta para ayudarla a levantarse, antes de que vuelva a rodar por el pasto.
— Súper ¿Liam?
— ¡Espera! No, no lo estoy diciendo de esa forma. Tu eres más interesante y…
— ¿entonces te gusto porque soy más difícil de resolver que tu anterior interés amoroso?
— ¡No! Killian, escucha…— un sonido diferente me interrumpe. Me deja confundido por un momento antes de darme cuenta que lo que escucho es su risa: carcajadas. Son más bien silenciosas y discretas, pero me quedo mirándole, maravillado al escucharlo.
— Deberías haber visto tu cara.
— debemos hacer algo con tus bromas, en serio— le doy un jalón para abrazarlo— voy a arriesgarme y sonar cursi y repetitivo, pero lo que sentía por Liam fue algo platónico. Lo que siento por ti es intenso, y aunque quiero protegerte siempre, mis sentimientos no tienen relación con eso. Es como si tú y Nell faltaban en mi vida y no me había dado cuenta hasta que llegaron— es tan simple que me sorprende no haberlo notado antes. Sé que no podré vivir de nuevo solo.
— entiendo— no dice nada más. Le sigo abrazando, en el bosque, hasta que sea el momento de regresar.