“La oficina” donde trabajo es más una galería donde tenemos algunas exposiciones y nuestros escritorios. Al fondo tenemos algunos artículos para venta. Por suerte seguimos estando en una zona muy concurrida así que si bien no siempre tenemos mucho trabajo logramos tener lo suficiente para mantenernos.
— ¿estás seguro de que quieres cubrir el evento del sábado?
— Ethan ya tiene planes y tú cubrirás el otro evento, no es que podamos permitirnos rechazar un evento— Laurent retuerce una servilleta de papel que venía en su desayuno— relájate, no es la primera vez que trabajo el fin de semana.
— pero… es su aniversario.
— No estamos casados, no creas todo lo que Noel te dice— me burlo. Es verdad que nuestro aniversario es pronto, pero es el viernes y no el sábado— estoy seguro de que sobreviviremos sin tener una cena elegante o algo así.
— es una boda, si lleva a su novio les darán un plato elegante sin necesidad de pagar… de hecho le estarían pagando igual— Ethan tiene razón, la mayoría de los eventos privados nos dan comida aunque no venga en el contrato ni la pidamos. Supongo que es alguna clase de etiqueta social que se me escapa— ¿vas a llevarlo?
— Aun no le digo— los dos hacen una mueca— ¿Qué?
— ¿no sería mejor decírselo ya? Si Noel tiene planes para el fin de semana serán arruinados por este trabajo— Laurent asiente para mostrar su acuerdo con lo que dijo Ethan. Quiero creer que algo como tener un trabajo de última hora el sábado en la noche no es motivo para tener una gran discusión o un problema serio con Noel, pero a veces él aun me sorprende con algo. Puerta se abre, no tenemos una campana pero si una vista directa a la entrada, así que dejo que Laurent atienda a los recién llegados— díselo, Alex.
— lo hare— miro mi teléfono, sin ninguna notificación— vuelvo en un momento— Ethan solo me levanta el pulgar. Últimamente parece haber mejorado el ambiente entre nosotros, es como si al final se hubiera dado por vencido con lo de su atracción por mí. Tenemos un pequeño cuarto trasero donde a veces tomamos descansos, me siento en el piso y marco el número de Noel.
—Hola, estoy cocinando ahora.
— ¿cocinando? No es… bien, solo ten cuidado.
— ¿me extrañabas? Casi nunca me llamas cuando estas en el trabajo ¿paso algo?
—no. tengo un evento el fin de semana. El sábado, por la tarde y noche— escucho solo el ruido de algo en la estufa que me pone un poco nervioso— es una boda, te lo digo para evitar alguna cancelación de planes.
— ah, pues mientras no sea tu boda con alguien más todo bien— me rio, sintiéndome ligero.
— puede, quizá me canse de esperar y decidí casarme. Tú serás el padrino, prepara el discurso— su carcajada aun atravesó del teléfono es ruidosa— no puedo esperar para que conozcas a mi novio. Es genial.
— ¿sí? Que extraño, no recuerdo que lo mencionaras.
— qué raro, estoy seguro de que lo menciono mas de una vez al día. Mala coordinación entonces. Tenemos unos días para ensayar un vals, porque además de la boda pronto será nuestro aniversario.
— pobre de tu novio, eso suena a tortura… así que están de aniversario ¿tienen planes?
— no estoy seguro. Tal vez vayamos a cenar, hay lugares muy románticos. Y mi novio podría regalarme flores.
— escuche que hay un paseo romántico, dura algunas horas y solo hay que seguir las indicaciones que te dan, hay una cena en la playa que suena muy interesante… digo, por si quieres comentarlo con tu novio. Bien, entonces no me queda otra opción más que acompañarte el sábado para conocerlo. Por suerte tengo un traje que puedo usar ese día.
— genial. Nos vemos en un rato. Intenta no quemar la casa, los números de los restaurants están guardados en tu teléfono.
— ya lo sé, también los puedo buscar en internet— la llamada termina, Noel me ha colgado. Guardo mi teléfono y regreso. Los clientes aún están aquí, Ethan esta al teléfono. Voy a mi silla, sintiendo que tengo la sonrisa tonta. No habíamos hablado sobre lo que haríamos en los próximos días, y el paseo que menciono Noel recuerdo haberlo visto publicitado en algún lugar. La cena en la playa no suena nada mal.
Falta exactamente una hora para ir a casa cuando la puerta se abre de nuevo. no presto atención porque ha sido así durante todo el día: las personas entran, ven o preguntan por los servicios, hemos agendado dos eventos mas así que sigo viendo las reseñas del paseo y dejo que alguien de los demás se encargue.
— ¿Alex?— levanto la vista a tiempo para ver a Laurent señalarme sin decir nada. Quien llego es un repartidor, su uniforme es reconocible aunque no conozco el negocio: flores. Me levanto y me acerco. Me pasa una hoja que tengo que firmar para recibir un ramo de flores. El repartidor se va sin decirme nada.
— vale ¿te han mandado flores?
— Estoy tan confundido como tú— no es un ramo grande, es mas bien mediano, con un montón de flores de diferentes colores con pétalos delgados, atado con un lazo rojo. En medio de las flores hay un papel doblado.
Para el consorte del rey de las flores:
¿Qué clase de rey de las flores no le envía flores a su amado?
La mujer que me recibió dijo un montón de cosas sobre las flores, al parecer enviar un tipo de flor tiene diferentes significados dependiendo la flor y el color ¿puedes creerlo? Ahora me da pavor enviar unas rosas amarillas y que se interprete como que quiero terminar. Así que al final opte por unas margaritas ¿Qué daño puede hacer una margarita? Al menos, estas no tienen alcohol, y para evitar cualquier problema elegí de todos colores. Pensándolo mejor, dudo mucho que alguno de nosotros sepa que significa cada flor y cada color, así que da lo mismo: yo solo quise enviarte flores.
El rey de las flores.
— por la cara que pones supongo que si son para ti y quien te las envía.
— Noel— corroboro. Me había olvidado de ese día haciendo flores para una de las fiestas de mi hermana y que nos habíamos autonombrado los reyes de las flores— ¿tenemos algo para ponerlas? Aun falta una hora para salir.
— debe haber un recipiente en la parte de atrás— me dice Ethan.
— yo quiero que me envíen flores— Laurent suspira y la escucho quejarse aun cuando me pongo a buscar algo para ponerlas. Encuentro un cubo para el agua, me pongo a llenarlo en la llave del baño y busco mi teléfono. Le escribo a Noel.
>>tenía entendido que ambos somos los reyes de las flores ¿Qué clase de rey de las flores no sabe que significan?>>
>> Me gustaron, gracias>>
Su respuesta me llega dos minutos después: una fila de emojis de corazón y un beso.