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Nunca te olvidaré. por reimorit

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-“como no recordar mi primer beso contigo…”-

-“fue lo más hermoso que me ha pasado en la vida…”-

 

-no por favor no sigas, estas poniendo en riesgo tu vida…-Bryan le decía a un pelirrojo que cada vez lo besaba con más fuerza.

-no me importa morir si es por ti, quiero disfrutar de tus besos lo que más pueda- respondió el pelirrojo llamado Yuuri Ivannov. Él era un militar que tenia un gran rango, pero se encontró con la sorpresa de que un día le toco atrapar un prófugo de la justicia que provocó grandes daños a las fuerzas armadas, y ese era Bryan Kuznetzov, un hermoso y bien formado joven de ojos y cabello lavanda, dueño de su corazón.

-pero yo no quiero que sufras por mi causa-

-ya te dije que no me importa, yo te amo!-se encontraban en un lugar que apenas le llegaban rayos de luz, pero a pesar de todo era lo bastante cómodo para un delincuente, era una celda diferente; del cual Yuuri tenia toda la autoridad para hacer lo que quisiera con el lugar y con quien estuviera dentro.

-y yo a ti, Tala. Te amo! Pero no se como hacer para que me perdones por todo lo que te he hecho pasar-Bryan no quería poner en riesgo a su amado por ningún motivo. Se conocian desde niños, tenian 13 y 15 años respectivamente cuando su primer beso surgió.

           A cada instante la cercania de sus cuerpos acrecentaba, sus manos recorrian el cuerpo que ya perfectamente conocian.

-por favor… quiero que lo hagamos-

-que?, estas loco?, sabes lo que te puede llegar a pasar, si tus superiores se enteran? Te matarían y yo no seria nada si tu no estas conmigo-

-no me importa morir por estar contigo-

-pero…-

-shshshsh!...-Ivannov callo al pelilavanda, para hacer que esa mirada se volviera llena de amor y ternura por el otro.

 

        “Sentir tus manos tocando mi cuerpo…”

                  “y mis labios tocando los tuyos…”

 

        Bryan tomó con fuerza la cintura del más pequeño para acercarla a su cuerpo y besarlo nuevamente.

         Tala respondia suavemente a cada caricia, para guardar los más lindos recuerdos de su amado.

          Poco a poco se despojaban de la chaqueta de Ivannov y de la camisa de Kuznetzov.

           El pelilavanda besaba el cuello y el hombro del ojiazul, conocido tambien como lobo, mientras este pasaba lentamente sus manos por la marcada espalda del otro chico.

-tu aroma no lo olvidare nunca-susurró el ojilavanda.

-eres tan suave, no puedo creer que este sea la última vez que…-

-shshsh! No digas eso, no quiero ni imaginármelo-callaron para seguir con esas delicadas caricias, dirigiendose juntos a una cama que habia en la celda, para besarse cada vez con más pasión, lenguas que recorrían con deseo la cavidad del otro, nexos que son difíciles de olvidar.

            Tala debajo y Bryan encima sobre la cama abrazados acariciándose suavemente, pero Tala cambio la posición, no aguantó ver esa piel sin probarla, recorrio cada centímetro del abdomen llegando a los pezones para succionarlos ligeramente, acto que con el paso del tiempo se hacia más fuerte.

            El de cabellos lavanda se incorporó un poco sentandose en la cama para sacar los pantalones y las botas del uke, Tala hizo lo mismo con el otro chico quedandose ambos solo con ropa interior.

 

             “cuanto tiempo sin sentirte…”

                                                     “cuanto tiempo sin tenerte…”

 

       El ojiazul se sento en el regazo del otro chico, acercándose lo que más pudiese ara sentir el calor que el otro cuerpo le brindaba.

-no quisiera dejar de tenerte asi-dijo el pelirrojo derramando unas lagrimas. Bryan queria llorar con él, pero no podia, no ahí, queria darle un poco más de fuerzas a su amado.

          Secó cuidadosamente las lagrimas del pelirrojo para darle un tierno beso en los labios.

-no llores mi amor. Solo te pido que después de esto busques a alguien con quien tener una linda relación, que él te ame y te respete, te cuide siempre; y ojala lo haga mejor que yo-

-no,no,no… yo te quiero a ti, yo no vivo sin ti, NO ME PIDAS ALGO QUE ES IMPOSIBLE PARA MI… amar a otro es imposible-Yuuri se aferró al cuerpo de Bryan, era un abrazo desesperado que fue correspondido de igual manera. Después de un rato deshicieron la posición y se miraron a los ojos  para regalarse un apasionado beso mutuamente.

       Se recostaron en la cama, el ojiazul debajo y el ojilavanda encima, descendiendo sus besos hasta el cuello, provocando suspiros en el militar.

        Solo se dejaba acariciar por esos suaves labios y manos que ya recorrían su abdomen y pezones del chico succionándolos de vez en cuando. Mientras apretaba con fuerza la piel del delincuente que pasaba su lengua por el ombligo del menor, y sus manos se dirigían lentamente por el miembro de este, cambiando los suspiros por notorios gemidos.

       Yuuri cambio la posición, dejando a Kuznetzov abajo para probar nuevamente sus labios, mientras lo hacia bajaba una mano metiéndola dentro del boxer para masturbar al chico que de apoco se desesperaba. Se sentó en le regazo de este, pero antes se quito el boxer quedando completamente desnudo.

 

                 “tu rostro es tan hermoso…”

                                                        “sobre todo cuando estamos en esto…”

 

            Bryan repitió el mismo acto que el menor, se sentó nuevamente en el regazo del otro ruso, sintiendo el rectado miembro que tenia su koi. Deshizo la posición, y bajo peligrosamente, aferró sus manos en ambos caderas de este para que no se moviera.

-ahahah…!-lamía la punta del pene que tenia en frente, desesperando al otro, mientras el otro puso las manos en la marquesa de la cama, para no moverse, queria seguir disfrutando  de esa ágil lengua que se lo lamía.

-ah… que rico…sigue …no pares…dame más…-

- que bien sabes… eres delicioso-cada caricia con esa lengua, era excitante, no aguantaba solo quería metérsela dentro de la boca que perfectamente conocía.

       Le hizo realidad su deseo, apretó con más fuerza las caderas del ojilavanda e ingreso suave y lentamente en su boca, provocando que este arqueara la espalda y abriera las piernas. El chico se satisfacía, pero lo sorprendió un poco que el pelirrojo tomara la pelvis e hiciese movimientos oscilantes.

 

               “que este momento no se acabe nunca…”

                                                                 “eso seria mi único deseo”…

 

     Kuznetzov gemía desesperadamente, mientras lentamente Ivannov dejaba esa labor.

 

              “quiero sentir tus labios otra vez…”

                         “pero si fuese por mi…”

                                       “no los dejaría de sentir nunca”

 

        Bryan tomo de un brazo a su amado para acomodarlo en su regazo, atraerlo con sus brazos, un beso largo, apasionado, con sentimiento.

        Se abrazaron un momento, no decian nada, ambos caían de ambos rostros, por más que trataran de ser fuertes no les resultaba.

 

                 “no llores…”

                                   “que la culpa pesa en mi corazón”…

 

     El ojiazul se separo de su koi, se puso en posición de gateo, llamando la atención de este rápidamente.

- no creas que te la voy a meter así, no estas dilatado aún te dolerá, y no quiero hacerte doler-

-no me importa…es lo de menos…-

-pero…-

- no … solo hazlo-se acercó a Tala, lo tomó de las caderas, penetro al chico lentamente, le dolía al principio pero a cada momento se hacia más placentero.

       Gemidos se escuchaban por toda la celda. Era todo suave, con cariño, pero al pequeño no le gustaba asi, queria con más fuerza, asi que con los pies los empujo penetrándolo más fuerte, entendió el mensaje rapidamente y lo hizo.

        “ Te amo no pares, cuanto me gustaria estar contigo para siempre. Envejecer juntos, tener un hogar,poder caminar por las calles, y besarnos en los rincones como cuando lo haciamos cuando éramos niños…”   pensaba melancólicamente el lobo, en ese momento de máxima entrega.

         “ Pero no se puede, yo te fallé, te he hecho sufrir. Arriesgas tu vida por la mía, aún yo moriré pronto. Amarte es lo mejor que me ha pasado en la vida, te amo…”  Kuznetzov estaba triste, lagrimas se derramaban de esos hermosos ojos que cada vez salian con más fuerza.

        Bryan salió de él para acomodarlo en su regazo y penetrarlo nuevamente, abrazandolo, mirandolo fijamente a los ojos para besarse nuevamente y disimular los gemidos.

       De pronto este se liberó en el chico, este arqueo su espalda al sentir  la esencia dentro de él.

-no quiero…separarme de ti-

-yo tampoco…te amo… Yuuri Ivannov-

-y yo a ti, Bryan Kuznetzov-el ojilavanda ya habia salido del ojiazul. Estaban abrazándose, solo se abrazaban. Sus cuerpos desnudos temblaban, sudaban. No sabian que hacer. Sollozan. Lloraban desesperadamente, no decian nada.

       “No quiero separarme de ti. Necesito tu calor. Tus besos. Porque pasó todo esto? No lo entiendo. Porque lo hiciste? Por que si yo te necesito conmigo. Los días no seran los mismos y menos las noches. Las tardes de invierno no tendrán sentido. Todo será oscuridad, todo sera frio, y lo peor de todo es que nada ni nadie me podrá dar lo que tu me diste”  Yuuri lloraba desesperadamente, llenando de lagrimas el sudado cuerpo del halcón.

      “porque mierda no lo pensé antes de aceptar ese maldito trabajo? Soy lo peor, merezco morir por eso. Pero no quiero dejarlo solo. No ahora. Que el amor de años solo llegue hasta aquí? Pero si yo te amo. Necesito tu calor, tu cuerpo. Tus bellos ojos azules y tu hermosa cabellera roja. Lo unico que puedo hacer ahora es llevarme los mejores recuerdos de esta noche”   Bryan tambien lloraba, temblaba su cuerpo no sabia de que, tal vez de miedo, no lo sabia.

      Lo soltó para secar un poco su rostro y tomar el delicado rostro del lobo, y secarlo con cuidado.

-A pesar de todo quiero que sepas que te amo! Que aún no me hago la idea de que no voy a tenerte más. Pero la culpa de todo es mía. Yo soy el bastardo que te hace sufrir y por eso merezco morir, no merezco tu amor, Yuura-

-NOO!yo no Quiero verte morir, no lo soportaría. Yo tambien te amo, y sabes cuanto. Tu sabes cuando trate de que esta investigación se cerrara… porque yo ya sabia que estabas involucrado en esos robos y en ese crimen-

-que? Como? Si era totalmente confidencial?-

-eres muy distraido. Vi los papel que  se te quedaron en casa, y además recibi una llamada de uno de los tipos con los que trabajas, si no me equivoco se llamaba Devis-

-ok! Y porque no me dijiste que sabias? Sí por mi culpa estamos así ahora-

-porque en lo que tu estas tu eliges. Queria ver si tu solo podrias salir de allí, pero ya no importa olvidémoslo, ya no hay nada que hacer-

-tienes razón, por eso quiero que me prometas que rehaceras tu vida con alguien mejor que yo, que te haga feliz…-

-no … no me pidas eso-

-inténtalo, tu eres un hombre hermoso que merece ser feliz-Yuuri no queria responder, asi que lo unico que hizo fue atraer ese blanco rostro al suyo, para besarlo y abrazar ese fuerte cuerpo que tenia entre sus brazos.

-deberiamos ducharnos juntos por ultima vez, no?-dijo el lobo soltando el nexo.

-sí yo creo, pero descansemos primero, estoy cansado-

- esta bien! Deje todo planeado porsiacaso- se recostó en la cama y abrazo a su pelirrojo dejandolo a la altura de su pecho, acariciando el cabello del uke que se quedaba lentamente dormido, mientras el otro no podia. Sentia como a cada minuto pasaba, los ultimos de su vida.

         “Prometo acompañarte siempre, no te olvidare ni te dejare solo jamás” repetia para sí, se sentia mal al haber hecho sentir mal al ojiazul, y por eso se sentia un poco feliz, liberaría de sufrimientos al chico que tanto amaba.

 

“-Hey! que haces?-pregunto un lobito de solo 13 años algo sorprendido.

-mmm…tengo que hablar contigo, es urgente!-un halcón de 15 años se expresaba con un tono serio que asusto un poco al pelirrojo. Estaba más decidido que nunca hace mucho que estaba esperando este momento.

-de que? No me asustes. Suenas algo extraño, estas bien?- el pequeño se preocupo, pasó lentamente su mano por el rostro del chico que estaba en frente, provocando que este se sonrojara.

-es difícil, pero ya no aguanto más, y no me importa si alguien aparte de ti se enterara, es lo que siento y no me avergüenzo de ello-el ojilavando abrazo al más pequeño y lo atrajo para sí arrinconándolo en la pared de un callejón.

-esta bien solo dilo-tomó con un brazo la cintura del chico rodeándola y con la otra mano atrajo el rostro que miraba atentamente para proporcionarle un pequeño pero tierno beso en los labios, para hacerse más profundo y apasionado.

-TE AMO YUURI-

-………-no sabia que decir, pero claramente los sentimientos eran los mismos, decidió declararse, hace mucho que sentía algo por Bryan y ahora era al mejor momento para decirlo.

       “Él se atrevió, porque yo no? si siento lo mismo y podría llegar a decir que lo que yo siento es más fuerte”

-puedo decir lo mismo, igual te amo! BRY! desde la primera vez que te vi. Aún lo recuerdo como si fuera ayer, je!- Tala pronunciaba a pausas tratando de recuperar el aliento que le fue robado por ese apasionado beso.

-entonces estarías dispuesto a ser mi novio?-esa pregúntale llego como balde de agua fría. No se la esperaba tan pronto.

-mmm… déjame pensar 5 segundos… eto… haber…-

-esta bien, sabia que no ibas a querer…-

- no hagas más esa tonta pregunta, me escuchaste?- la azulina mirada que estaba feliz ahora se torno seria y casi con una leve expresión de enojo, cosa que deprimo al ruso que lo miraba.

-porque es obvio, o sea obvio que… quiero ser tu novio-una gran sonrisa en Bryan se reflejo, lo único que hizo debido al desconcierto fue abrazarlo con fuerza y regalarle otro beso.

-que bueno!!! No sabes lo feliz que me haces, y cuanto tiempo esperaba esto-

-y yo también, te amo Kuznetzov!-

-y yo a ti, Ivannov!-“

        Ambos seguían recostados en la cama, Yuuri arriba y Bryan abajo, en silencio; y sin querer citaron el mismo recuerdo: su primer beso. De tanto se quedaron dormidos.

 

           Eran las 7 de la mañana y Bryan se despertó, mientras el que estaba sobre él seguía dormido.

-que suave es tu piel, tu cabello. Eres como un ángel caído en mi vida- pronunciaba el de orbes color lavanda.

- y tu lo eres para mi!- Tala tambien se despertó realmente casi no había dormido en toda la noche, de la preocupación y la angustia, le dio un fuerte abrazo.

-a que hora es?-el halcón preguntaba preocupado.

- a las 9 a.m.- el lobo dijo con amargura. No quería que ese momento se acercara, no, no ahora.

-ven vamos a ducharnos! queda poco tiempo, y no quiero que te pase algo malo-

-ok! vamos!- se levantaron, Tala detuvo al chico con un fuerte abrazo en la espalda, al sentirlo tan cerca le dieron ganas de llorar, se dio vuelta para mirar a los ojos al autor de ese abrazo y besarlo con desesperación, sus lengua jugaban a una danza por dominar, reacomodando sus rostros para besar esos labios con más profundidad. Separaron el nexo y caminaron un  pequeño baño en el cual habia una ducha, dejaron correr el agua por sus cuerpos calientes, mientras el sabor de los labios ajenos era lo que más importaba. Acariciaban sus cuerpos mientras el jabón y el shampoo hacían su trabajo. Salieron de la ducha, tomaron una toalla y secaron sus cabellos mutuamente como solían hacerlo.

-Bryan, me tengo que ir-

-lo se. Ve!-

- te amo!-

 -yo tambien te amo-un beso fue nuevamente protagonista del momento, el beso de despedida, ya eran las 8:30 a.m.

-tratare de hacer lo posible para remediarlo-

-no te preocupes por mi, lo que más me importa eres tú, de que seas feliz. Quiero que sepas que te amo y que siempre lo haré y que eres lejos lo mejor que me ha pasado en la vida-

-como no preocuparme por ti, eres lo más importante que tengo. Tú fuiste el que me movió a salir adelante en los momentos en los cuales yo ya no quería vivir. Tú lo eres todo para mi no se que será de mi ahora.-

-me cuesta despedirme de ti, Yuuri Ivannov-ambos derramaban lagrimas, un abrazo y un tierno beso que se volvió salvaje al correr de los segundos.

-a mi también! Fue un placer conocerte Bryan Kuznetzov!-abrió la puerta de la celda y salio corriendo del lugar con destino a su oficina para encerrarse en ella, lloraba y gritaba, el dolor de su corazón no lo aguantaba lo mataba a cada segundo.

     “porque me pasa esto a mi, si yo lo amo tanto” .

 

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-ven aquí!-un soldado le puso unas esposas en las muñecas que estaban en la espalda, llevándolo al peor lugar.

       Era un lugar amplio y solitario, que solo era ocupado con un solo propósito, la muerte.

        Lo arrodillaron, y vendaron al chico de orbes lavanda en los ojos, le hicieron una marca en el corazón.

        De pronto llegó el mayor con otro joven de cabellos rojizos y mirada azulina, era Yuuri Ivannov. Sus ojos reflejaban una gran angustia al ver al halcón vendado y esposado.

        Entraron los principiantes con sus armas cargadas, formados en el lugar que les correspondía, ciertos recuerdos llegaban a la mente de los chicos que sufrían la separación.

- me amas?-preguntaba un regalón Yuuri de 14 años.

-oh! Que pregunta, claro que te amo! Oh quieres que te lo demuestre de otra forma?- respondía un coqueto Bryan de 15 años.

-mmm… con un beso? porque de que otra forma se puede hacer?-en esos tiempos Yuuri era un niño muy inocente, lo que cambio radicalmente en 10 años.

-un beso es lindo! pero hay otra forma y la más importante, quieres que te la muestre?-

-claro! Quiero saber! Sabes que soy curioso! xD!-

-pero, estas dispuesto a todo?-

-a todo!!!-respondió un seguro lobito.

-esta bien pero después no te quejes de algo!-

-OK!-“ 

        Su primera vez, era lo que pasaba por sus mentes en ese momento.

-cargar armas-grito uno de los soldados.

-apunten al objetivo-cada principiante hacia caso a su mayor.

  “TE AMO” surgió en la mente de cada uno al momento que el soldado dijera:-FUEGO!-todos dispararon, matando rápidamente a Bryan Kuznetzov. Cada bala era como una puñalada en el corazón del joven militar que se le llenaron sus ojos de lagrimas, quería gritar, pero no podía, vio como el cuerpo sin vida de su amado caía al suelo, como ese hermoso rostro caía pesadamente al frió cemento.

       No aguanto más y corrió a su oficina y espero a que todos se fueran del lugar en que yacía el cuerpo de Bryan.

       Tala lloraba al llegar al lugar pasados 30 minutos.

        Estaba tal cual lo vio por última vez. Le sacó la venda de los ojos al igual que las esposas. Se arrodilló y tomó el cuerpo que fue de él tantas oportunidades, cruzó sus brazos por la espalda del chico sujetando con una de sus manos la cabeza de este.

- Bryan… quiero que sepas nuevamente que te amo, no me canso de decírtelo. Y si alguien me ve aquí, no me importa. No te olvidaré nunca. Eres el gran y único amor de mi vida. Intentaré ser feliz sin ti, cosa que lo veo… muy difícil. Sin ti soy nada. Nadie me va a hacer tan feliz como tú lo hiciste. Contigo aprendí todo lo que se. No quiero despedirme de ti, pero tengo que hacerlo-acercó sus labios a los que ya estaban perdiendo temperatura para regalarle un tierno beso.

-cuanto te amo…cuanto te deseo… porque mierda me pasa esto a mi, adiós Bryan, mi amor… NO!- abrazo el cuerpo de su halcón que ya estaba muerto, trato de hacer lo que pudo para que no lo mataran, pero no pudo revertir la situación.

         Después de unos momentos dejo el cuerpo del chico en el suelo, ya que un par de soldados se acercaron para avisarle que lo necesitaban urgente y que ellos tenían ordenes de encargarse de el cuerpo de Kuznetzov. Sin importarle la presencia de los dos chicos besó por última vez los labios del hombre que lo hizo tan feliz y un fuerte abrazo y salio corriendo de allí sin poder aguantar las ganas de llorar.

          Corrió hasta el primer baño que encontró, se sentó en el helado suelo y abrazo sus piernas. Lágrimas derramaban esos lindos ojos azules, pero de pronto sintió una suave y calida caricia recorriendo su rostro, recordándole a su koi, su aroma llego a su nariz un inolvidable aroma, solo pudo sentir eso, solo eso, pero cuando abrió sus ojos no vio a nada ni a nadie, solo el recuerdo de la esencia de Bryan Kuznetzov.

 

                       ***Reimorit-Chan***

Notas finales:

 

gracias por leer. 

weno y que viva el yaoi.

                se lo dedique a un amigo emo que le decimos kiba...

            bye

               reimorit-chan


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