Se contempló por última vez en el espejo, dando un pequeño giro en cámara lenta para poder apreciarse del todo. Estaba bien, su vestimenta era casual pero no le sentaba mal, giró su rostro hacia la derecha y visualizó su maleta que casi estaba lista para emprender viaje junto a él. Sería mucho el tiempo que estaría fuera de su hogar, quizás el más largo hasta ahora.
Escuchó que tocaron la puerta de su habitacion y se dirigió a abrirla, encontró a su padre del otro lado, le hizo pasar, era el momento de despedirse de él, pero como siempre la misión estaba antes que la despedida.
-Crees poder con esto?- Preguntó antes de decir nada.
-Sí, padre-
Ya estaba acostumbrado a ese trato, a aquella relación cada vez más alejada a la que debería tener un padre con su hijo, más que familia, eran socios.
Se hizo un silencio mientras ambos pensaban en qué manera despedirse, ya que a ninguno se le hacia facil poder sentir y mucho menos demostrar sus sentimientos.
-Sasuke…- Llamó su padre haciendo que el nombrado vuelva de sus pensamientos y lo mirase a los ojos .
-Que sucede Fugaku?- Era triste pero ya no lo llamaba “papá” , lo llamaba por su nombre como un empleado a su jefe, como un desconocido a otro.
-Llévate esto- Dijo extendiendo su mano la cual sostenía un sobre.
Sasuke lo tomó curioso dispuesto a abrirlo, cuando pudo extraer de él los papeles que se encontraban allí , se dispuso a leerlos con calma al principio, y luego cada vez mas rápido, sus ojos se iban abriendo cada vez más a medida que leía la información del documento.
-Ésa será tu nueva identidad, cúmplela- Ordenó el mayor de los Uchiha
Borró todo indicio de sorpresa, volviendo a su rostro neutro y calculador, asintió y se dedicó a guardar el sobre en su maleta de viaje. Estaba a punto de cerrarla cuando Fugaku volvió a hablar.
-Olvidas el arma-
Sasuke se maldijo mentalmente por su error, ¿como pretendía cumplir su misión sin su arma? Tendría que usarla si su objetivo se negaba a cooperar con él, no temía lastimarle o incluso matarle, todo por el éxito de su nueva misión.
Se giró y tomó el rifle que tanto tiempo le había pertenecido, desde que era apenas un crío aprendió a utilizarla, la familia Uchiha era conocida por ser el clan más peligroso de todo Japón, cometían delitos para fines de propio lucro, ya fuese poder o incluso dinero.
El próximo objetivo era, obtener información del clan Uzumaki, y para esta misión quien mejor que el gran Sasuke Uchiha, reconocido por su arte del engaño y manipulación en las personas, además de ser uno de los mejores en torturar a su presa si ésta se negaba a cooperar, si era necesario obtendría información de cualquiera de ellos de la forma más retorcida que alguien podría imaginarse.
Acercarse al menor de el clan, Uzumaki Naruto, formar algún tipo de vinculo con él y poco a poco ir acercándose a la información que necesitaban y luego simplemente alejarse con ella.
-Me voy- Dijo en forma de despedida, sin siquiera conectar miradas con su padre, era una misión de suma importancia, si no la cumplía Fugaku no querría verle el rostro nunca más.
-Si- Contestó simplemente pero antes de que Sasuke saliera por la puerta lo tomo por el cuello de la camisa y se acercó a él.
-Los sentimientos son debilidad... Recuérdalo- Susurró muy cerca del oído de su hijo - No cometas el mismo error que tu hermano, o no dudaré en matarte tal y como hice con él- Terminó para luego soltarlo y dejarlo libre.
Sasuke asintió y salió por la puerta, yéndose poco a poco a su destino.
Fugaku rogaba porque no cometiese el mismo error que Itachi…
Enamorarse del enemigo…
CONTINUARA