Luego de que Kurotsuchi-Taicho los salvara de manos de la Octava Espada Szayel Aporro Grantz, se les veía todo el tiempo juntos, cuando el pelirrojo iba de misión al mundo humano no se quedaba con Urahara sino que se iba a la casa del Quincy, hasta en la Soul Society era igual puesto que Renji le rogo de rodillas a su Taicho que emitiera un permiso especial para el Quincy y así este podría ir a visitar a “sus amigos” cuando quisiera y solo tendría que avisar que iba, pero lo que todos se preguntaban era a cuales amigos iba a visitar si solo se le veía en compañía del Fukutaicho de la sexta división en las tardes y por las mañanas se la pasaba en los jardines de la mansión Kuchiki, cortesía de Rukia ya que esta convenció a su Nii-sama de que dejara al chico quedarse cada vez que fuera a la Soul Society, nadie entendía lo que estaba pasando pero se izo tan normal que pronto lo olvidaron.
La sorpresa les llego el día del cumpleaños número 17 del Quincy, Renji se apareció por su departamento con un ramo de rosas azules, vistiendo una camisa manga larga blanca que resaltaba su musculatura, un pantalón de tela negro y zapatos negros, llevaba las rosas azules, cabe destacar naturales, en la mano izquierda mientras que con la derecha sostenía el saco por arriba del hombro derecho, tenía el cabello amarrado en una coleta y al estas este más largo y parejo le caía sobre los hombros dándole un aire exótico junto con sus tatuajes, en su cara una sonrisa ladeada y su mirada posada en la delicada figura del chico frente a él, en espera de una reacción,
Uryu no sabía qué hacer, sentía ganas de correr y tirarse en brazos de Abarai, hacia ya más de 4 meses que no se veían pues la Soul Society estaba en un percance y tenían las senkaimon cerradas, nadie salía y nadie entraba, no sabía cómo hiso Abarai para estar ahí, ya que ni Rukia que era hermana de un noble pudo salir, pero definitivamente se sentía feliz de verlo y en especial ese día, aunque su orgullo Quincy le impidiera demostrarlo por completo; solo se limito a sonreír de lado y darle la bienvenida al Fukutaicho, lo que no se espero fue que Abarai lo tomara por la cintura soltando el saco y lo pegara a su cuerpo plantándole uno de los besos mas fogosos que le habían dado en su vida, Abarai era puro fuego así como su cabello rojo lo indicaba.
Todos los presentes quedaron pasmados ante esto, no porque les incomodara sino porque no se lo esperaban de esos dos, aunque si se le prestaba atención a las señales dadas era más que obvio que entre ellos existía algo desde hace un tiempo atrás.
La fiesta termino satisfactoriamente y el Quincy en compañía del Shinigami subieron a la habitación, solo basto cerrar la puerta para que la ropa volara por los aires, estando solos todo eso solo estorbaba, la temperatura de la habitación subió peligrosamente, o eran ellos los que estaban ardiendo en deseo, como sea se necesitaban para aliviar esa calor y es que 4 meses sin verse y sentirse fueron una tortura para ambos, pero sobre todo pronóstico Renji paró en seco y jadeante alejo al Quincy de su cuerpo.
Uryu lo miro con cara de no entender que pasaba y Abarai solo pudo decir- Todavía no te doy tu regalo- la mirada del Quincy se ilumino y eso izo feliz al Fukutaicho.
¿Enserio lo conseguiste? –Pregunto extasiado el Quincy – ¿podemos ir ya o tenemos que esperar?
No seas impaciente – reprendió Abarai y luego sonrió viendo el leve sonrojo en las mejillas del chico, pero decidió cumplirle su deseo – ya hable por adelantado con Urahara-san y dijo que para dentro de 30 minutos estará todo listo, vengo preparándote esto hace 2 mese para que no tuvieras que esperar ni un día mas, además logre entrar al Departamento de Investigación y Desarrollo y conseguí el antídoto y un poco más de la Formula para Súper Humanos.
Al escuchar eso los ojos del Quincy se opacaron un poco y con angustia y tristeza pregunto- pero que te asegura de que todavía está vivo, Mayuri dijo que avía muerto en el instante en que atravesó su corazón y yo vi como le clavo a Ashisogi Jizo y luego la rompió quedándose con el mango – la mirada del Quincy se torno triste y húmeda.
Nada se pierde con intentar, tienes más que ganar de lo que perder –le dijo un sonriente Renji.
Ese idiota sabia como subirle el ánimo, comenzaron a vestirse nuevamente, esperar unas horas mas no matarían a nadie, y mirando el reloj echaron en marcha hacia lo de Urahara.
Se encontraban el subterráneo de la Urahara Shop, en frente de la garganta abierta por Urahara, este miro al Quincy y le deseo feliz cumpleaños, Ishida solo sonrió de lado.
Atravesaban la garganta a toda velocidad, cuando pisaron la desértica superficie de Hueco Mundo a lo lejos vieron las ruinas de lo que era Las Noches, y comenzaron a acercarse a toda velocidad el Quincy con su Hirenkyaku y el Shinigami con Shumpo, buscaron directamente la entrada que los llevaría a donde se encontraba el regalo del Quincy.
Al fin pudieron entrar y a lo lejos lo vieron en todo su esplendor, sus ojos todavía abiertos de ese color ámbar, el cabello largo hasta los hombros color rosa, su hueco mascara en forma de lentes de montura cuadrada dándole ese aspecto científico que a Ishida tanto lo cautivo, Fornicaras se encontraba a sus pies pues al parecer había perdido tanto reiatsu que no podía mantener su espada liberada, Abarai se acerco y tomo a Fornicaras lanzándola lo más lejos posible, no serviría para lo que ellos avían ido ahí.
Tomo el antídoto de la Formula para Súper Humanos y lo destapo, mientras Ishida sacaba lo que quedaba de Ashisogi Jizo del cuerpo del Octavo Espada y lanzándola lejos también, tomo el cuerpo en sus manos y se sentó en el suelo recostándolo en sus piernas mientras Abarai se arrodillaba a su lado y dejaba caer un poco de antídoto en la boca abierta del Espada.
Los segundos pasaron, el liquido se deslizo por la garganta Szayel, nada pasaba, pasaron los minutos, 5 , Ishida llevaba la cuenta, se sentía triste y deshecho, comenzó a levantarse cuando sintió al espada en sus piernas moverse y por primera vez en la vida se permitió gritar de la felicidad.
¡SIIII! ESTA VIVO ABARAI, ESTA VIVO!! –Ishida sonreía de oreja a oreja, al fin tendría su regalo.
Abarai saco otro frasquito más de su pantalón diciéndole al Quincy que era una infusión para la regeneración a alta velocidad, la puso en los labios de Szayel y como paso con el antídoto se deslizo por su garganta, la única diferencia, el efecto fue inmediato.
La Octava Espada abrió sus ambarinos ojos, enfocando primero a Ishida y luego a Renji, cuando su mente comenzó a funcionar luego de su letargo se levanto rápidamente tambaleándose pues todavía estaba débil, Abarai lo sostuvo entre sus brazos y Szayel se sorprendió.
¿Por qué me ayudan?¿Qué hacen aquí todavía? –pregunto un tanto intrigado- si mis cuantas no me engañan va más de año y medio desde que sucedió nuestro primer encuentro.
Abarai fue quien hablo- venimos a proponerte un trato- el espada lo miro sin comprender- Ishida esta de cumpleaños hoy, y hace unos mese atrás me pidió un regalo de cumpleaños que hasta hoy yo creía imposible poder conseguir, pero aquí estamos…
El espada no lo dejo terminar de hablar- no sé que buscan pero yo no tengo nada, ese asqueroso sujeto al que tu llamas Taicho- le dijo a Abarai- tubo que haber saqueado mi laboratorio.
Renji solo sonrió- lo que Ishida me pidió no estaba en tu laboratorio.
Como veras tampoco tengo a Fornicaras- respondió exasperado el espada- ¿si lo que quieren no estaba en mi laboratorio, y por lo que me dice tu cara tampoco es Fornicaras, entonces que es lo que quieren?.
Te queremos a ti- esta vez fue Ishida quien respondió dejando frio al espada, Renji lo sintió tensarse pues todavía lo tenía sujeto.
Mira es muy fácil, nos prestas tu cuerpo por un tiempo y te dejamos libres, serás el rey de las noches, Aizen esta sellado en la Soul Society, Barragán está muerto, Ulquiorra se desintegro, de Grimmjow no se sabe nada, la mayoría de los espada murieron frente a los ojos de mis superiores- le dijo Renji- podrás hacer lo que quieras de este lugar y volver a revivir tu colección de bichos raros y experimentos.
Pero si te niegas- dijo Ishida esta vez- volveremos a dejarte como te encontramos y esta vez nos aseguraremos de matarte con la misma Fornicaras.
Szayel trago en seco, se lo pensó un momento, no era tan mal trato, claro si es que lo cumplían, total ya no tenía nada que perder.
Acepto –fueron sus palabras, y la señal para la pareja de que la fiesta había comenzado.
Renji tomo firmemente a Szayel y lo beso, esos labios delicados tenían un sabor dulce, que no savia identificar que era, Szayel se estremeció la boca de Renji sabia a canela, la escancia favorita del Octavo Espada, Ishida se acerco por detrás de Szayel repartiendo suaves besos por sus hombros, sobre su ropa, luego hiso el cabello rosa a un lado y comenzó a saborear la piel de su nuca ya que Abarai había abierto la camisa que cubría hasta su cuello y la bajo lentamente por sus hombros dejándola deslizarse de su blanca figura, al lado de la piel de Ishida, Szayel tenía tez rosada pálida, hacían un contraste hermoso juntos y por primera vez deseo poder tenerlos a los 2 para toda la vida pero el savia que eso si era imposible.
Ishida se despojo de su camisa y Szayel mas cooperativo comenzó a desnudar a Abarai, cuando llego a sus pantalones se agacho dejando que Ishida besara a Renji mientras el bajaba el zíper del pantalón con sus dientes y soltara el botón dejando caes los pantalones por las torneadas piernas del Fukutaicho, tomo el elástico de la ropa interior de Abarai con los dientes y la bajo hasta dejar libre su miembro, lo que vio lo dejo sorprendido, el cálculo como 24 centímetros de falo erecto con una base de vello rizado color rojo, los tatuajes de Abarai llegaban hasta su ingle, le dio por probarlos con su lengua y delinearlos y así lo izo, sintiendo el falo en su mano endurecerse un poco más.
Szayel sonrió tomo en pene de Abarai con firmeza y paso su lengua desde la base hasta la punta varias veces para humedecerlo, la mirada de Abarai estaba sobre él.
Nee.. Szayel t-tu no p-pensarasss mmm-meterte t-todo eso enn l-laaaaaahhh mmmm por Kami que bien lo haces- Szayel tomo el miembro y como si fuera Fornicaras lo fue introduciendo en su boca, pasando por s garganta hasta pegar sus labios a la base del pene de Abarai, el Quincy miraba la escena atónito y Abarai estaba excitadísimo, tomo la cabeza de Szayel y comenzó a embestir poco a poco, el placer que sentía era indescriptible, esa boca húmeda arropando su miembro, la lengua del Espada rosando su glande cada vez que sacaba el pene completo se su boca para meterlo entero otra vez, las vibraciones en su miembro cada vez que Szayel se quejaba por las mordidas y caricias que Ishida le daba, pero Abarai no quería que todo terminara así, saco su miembro de la deliciosa boca de Szayel.
Se agacho a su lado besando al espada agradeciéndole la felación de unos minutos atrás, Ishida se entretenía en esos momentos con el miembro erecto de Szayel unos 9 o 10 centímetros más pequeño que el de Abarai, lo tomo en su boca apretando el glande con los labios, metiéndoselo en la boca todo lo que pudo, definitivamente la presencia de Fornicaras en la vida se Szayel le avía a ayudado a fortalecer su garganta, Renji se encontraba succionando el pezón derecho del espada mientras apretaba el izquierdo con sus dedos, la espalda de Szayel se arqueaba del placer que sentía y sin poderlo evitar se derramo en la boca del Quincy, el sabor de la semilla del Espada era un poco amargo pero delicioso.
Ishida llego hasta la boca de Szayel besándolo dándole a probar de su propia semilla junto con el sabor de vainilla de su boca, la octava casi desfallece, si la canela le gustaba, la vainilla lo volvía loco, si algo savia en ese momento era que había tomado la decisión correcta al aceptar ese trato con ellos.
Luego de las preliminares Renji se acomodo entre las piernas de Szayel, subió sus piernas hasta que los muslos del espada estaban pegados a su pecho, así podía tener más acceso a esa entrada que se contraía en anticipación a lo que vendría, paso su lengua por fuera del pequeño nudo, presiono con la punta la entrada y Szayel soltó un gemido, Abarai penetro con su lengua la entrada de Szayel mientras esta succionaba el miembro de Ishida que era del mismo tamaño que el suyo, Szayel sintió 2 largos dedos entrar en su cavidad y tocar su próstata y gimió aun mas fuerte sacando el miembro de Ishida de su boca y subiendo mas las caderas.
Mmmm SI!!! Aaahhh ABARAI!!, motto! Onegai!, dame mas AHI mmm- Szayel sentía los dedos de Renji jugar con su próstata produciéndole un inmenso placer.
Renji no pudo más y bajo las piernas de Szayel a su propia cintura para que esta lo rodeara, acomodo su glande en la entrada semi-dilatada del Espada y de una sola estocada entro.
AAAAAAAAhHHH mmmm Kamiiiiii!!!!!!! Mmmm aaahhh si qué bien se sienteeeeeeehhh- era lo que salía de la boca de Szayel, el miembro de Abarai lo llenaba completo sentía que lo partía en 2 pero le encantaba, como dicen era un dolor placentero. No se había sentido así desde la vez que lo izo con Zomari en su laboratorio, pero por Kami que la de Renji era más grande y gruesa, sabrá Kami si ese obsceno que se hace llamar científico en la Soul Society no experimento anterior mente con Abarai para dotarlo de tan majestuosa herramienta.
Renji besaba a Ishida y poco a poco lo situó de espaldas a él, sobre el miembro de Szayel, poco a poco lo ayudo a auto penetrarse y mientras Renji entraba y salía del delicioso agujero de Aporro, Ishida cabalgaba su miembro como el más experimentado de los jinetes.
El tiempo pasaba rápido, las pieles sudadas y calientes, los dos penes dentro del agujero del Quincy mientras este gritaba de placer y pedía por mas y era totalmente obedecido, Renji debajo de él y Szayel encima suyo los dos penetrándolo con fuerza, mordiéndolo, arañándolo dándole un placer indescriptible, no quería que eso acabara, pero todo lo bueno termina un vez, y eso no sería la excepción, sintió su cuerpo tensarse los músculos de su abdomen endurecieron, su entrada se contrajo apretando placentera y dolorosamente los miembros del Espada y el Shinigami, anunciando el que sería el último de sus orgasmos por esa noche, la estreches de su ano llevo a Szayel y a Renji hasta la cima del clímax y ambos se derramaron al mismo tiempo dentro del Quincy, sonidos guturales salían de sus gargantas, jadeos, gemido, maldiciones.
Estaban tan cansados los 3 que decidieron quedarse allí en donde estaban, Renji y Szayel salieron del cuerpo de Ishida, haciendo que todo el semen que guardaba dentro de su entrada saliera junto con un poco de sangre.
Lo siento –Abarai se disculpa y besa la frente de Quincy- debí tener más cuidado.
No hay de qué preocuparse Abarai- responde Ishida medio dormido- ha sido el mejor regalo de cumpleaños de toda mi vida.
El espada sonríe y recuesta al Quincy en su pecho, Renji se acomoda en la espada de Ishida y así los tres entran en el mundo de los sueños.