Kwon Ji Yong y Choi Seunghyun, tan diferentes pero a la ves tan iguales, con maneras de pensar muy distintas pero a la ves muy parecidas.
Ambos amantes del teatro, y como tal, parte del club de teatro, la obra que ahora llevan a cabo es Romeo y Julieta, pero al ser una escuela exclusiva de hombres, a Ji Yong le toco hacerle de Julieta y a Seunghyun de Romeo…mala combinación, pero ninguno quiere dejar su papel protagónico.
El director está eufórico, el quiere ver amor en sus miradas cuando hagas esas escenas donde Romeo y Julieta se profesan amor eterno, pero solo ve competencia en sus ojos, competencia por ver quién es el mejor.
Tiene muchos amigos en común, cuando están en grupo Ji Yong y Seunghyun pueden convivir bien, pero nunca los dejes solos o la tercera guerra mundial se desata.
Muchos de sus amigos se burlan de ellos diciendo que parecen una pareja de casados, haciendo que estos enfurezcan mas y la pelea sea interminable.
Muchos lo notan o otros no tanto, y otros, otros simplemente lo ignoran, pero pasa por la mente de muchas personas, entre Ji Yong y Seunghyun hay una tremenda tensión sexual ¿Y como no va a haberla? Si los dos son hijos directos de Dios…Seunghyun es alto, de cabello negro, cejas pobladas y unos ojos que con una sola mirada te derrite, una nariz perfectamente derecha y afilada, labios finos que se curvan en las orillas dándole una apariencia traviesa, una fuerte mandíbula, sin vello fácil que arruine las perfectas facciones, ¿Su cuerpo? No se sabe mucho de el, nunca le ha gustado mostrarlo, nadie realmente sabe como es, pero lo que la extrema cantidad de ropa deja ver, se puede decir que es de espalda ancha, cintura delgada, caderas parejas y unas largas piernas que dejan volar tu imaginación….Y Ji Yong, mediano de estatura, facciones muy finas, casi como las de una chica, pero con ese toque masculino, cabello rubio, teñido, obvio, pero hecho por un profesional, ojos cafés, pero no el típico café común, si no uno mas claro, uno que al ponerlo bajo el sol brilla mas, nariz respingada, labios delgados, pero esponjosos, eso que te invitan a que les robes un beso y una blanca y enorme sonrisa que cuando la ves te contagia, cuello largo, piel muy blanca, pero suave al tacto, un cuerpo menudo, no es musculoso pero tampoco es rellenito, suelen decir que tiene una cintura muy pequeña, casi como la de una mujer, una cintura que cada noche gustarías de acariciar, una cadera sobresaliente, pero no tanto, al final de cuentas es hombre, unas piernas ni muy largas ni muy pequeñas, simplemente perfectas.
Y el director que no soporta mas su actitud los manda a ensayar juntos, después de muchos quejas por parte de ambos y amenazas por parte del directo, aceptaron ensayar fuera del teatro, han quedado esa noche de verse en casa de Ji Yong, vive solo, a comparación de Seunghyun que vive con su hermana que quiere ser doctora, se citaron a las 7pm, Seunghyun intesta ser puntual, está cansado y no quiere discutir, 3 minutos tarde, suspira antes de tocar la puerta, uno, dos, tres toquidos bastaron para que el rubio abra la puerta, Ji Yong amablemente lo invita a pasar, el tampoco está de humor para pelear recientemente a terminado con su novios, Seungri, un gay de closet que no quiere salir a la luz por el miedo del que dirá, Seunghyun lo nota, el menor no transmite la misma energía de felicidad que lo caracterizan, pero Seunghyun no quiere preguntar, no es como si tuvieran tanta confianza, Ji Yong le ofrece algo de tomar y el mayor se niega, pues solo quiere ensayar e irse, cree que el menor necesita estar solo.
Ambos toman sus guiones y comienzan a hacer las acciones y a repetir los diálogos, no les gusta como queda y lo siguen intentando, hasta que inevitablemente comienzan a discutir…”Que no es así”, “No, tienes que moverte así o asa” “Ese no es el tono de voz correcto” “Esa no es tu línea” “Me tocaba a mi” “No te sabes tus líneas, practica más”, grito tras grito, y no se han dado cuenta que con cada palabra, con cada movimiento, con cada acción han quedado uno pegado al otro, son consciente de ello cuando sienten la respiración ajena sobre la sus labios, se observan a los ojos, y hasta entonces son conscientes de esa tensión sexual de la cual todos hablan, recorren el rostro ajeno con la mirada y sin poderlo evitar juntan sus labios, es una beso bastante necesitado, hambriento, apasionado, como si se hubieran aguantado siglos para poder hacerlo, las bocas se mueven en un salvaje compas, labios, saliva, lenguas, lenguas más que nada, incluso hasta dientes están en el juego, les gusta y no quieren separarse, pero ¡Oh! preciado oxigeno, es la primera ves que odian algo que es tan necesario para el ser vivo, se miran a los ojos, como pidiendo permiso para seguir, sus labios están rojos e hinchados y se sienten orgullosos de ello.
Sus labios se vuelven a juntar, pero está ves con mas tranquilidad, disfrutando de la sensación de los labios ajenos, memorizando su textura y sabor, Ji Yong pasa sus brazos por el cuello del mayor, enrredando sus dedos en el espeso cabello ajeno, confirmando aquel rumor de lo suave que es el cabello de Choi Seunghyun….¿Y Seunghyun? Él solo pasa sus brazos por la pequeña cintura del menor, reafirmando aquello que todos dicen sobre la estrecha cintura de Ji Yong, esa cintura que quiere acariciar toda la noche.
Sus manos no logran estarse quietas, recorren el cuerpo ajeno sobre la estorbosa ropa, Ji Yong comienza a caminar con dirección a su habitación, necesita sentir el cuerpo caliente del mayor sobre el suyo, pero nunca le ha gustado hacerlo en otro lugar que no sea la cama.
Llegan entre tropezones y pequeños golpes con los muebles, golpes que quizá al día siguiente serán moretones pero en ese momento es lo que menos les importa.
Logran entrar a la habitación y Seunghyun no lo piensa dos veces antes de aventar al otro chico sobre la cama y colocarse sobre este, es dominante, le gusta ver a su “victima” debajo de él suplicando por mas placer, ambos entre caricias comienzan a deshacerse de la ropa ajena hasta que los dos están por completo desnudos, sus pieles calientes, sensibles y excitadas se restriegan una con otra, las sabanas de la cama hace mucho que dejaron su sitio por todo el movimiento que hay, extremidades entrelazadas, unos par de brazos en el cuello de uno y el otro par en su cintura, piernas enredadas estratégicamente para que sus erectos miembros se rocen, gimen, les gusta la sensación de dureza del miembro del otro restregándose contra el propio.
La fase de “calentamiento” ha pasado, Seunghyun está entre las piernas de Ji Yong jugando con su entrada, mete y saca sus dedos del interior del menor, le encantan las expresiones y los gemidos que el rubio hace y suelta, le hacen querer enterrarse muy profundo, la manera en que la entrada del menor se contrae contra sus dedos es delicioso, si así se sienten sus dedos su pene debe sentirse el doble de bien, Ji Yong suplica entre gemidos que pare, quiere sentir toda la extensión del mayor en su interior, como se abre paso entre sus carnes, y Seunghyun no se hace del rogar, saca sus dedos remplazándolos por su miembro, ambos sueltan un gran y fuerte gemido, están seguros de que todo el edificio los ha escuchado, pero no les importa, al contrario les excita mas el saber que alguien los pueda estar escuchando, incluso se imaginan a esa persona masturbándose al ritmo de sus gemido.
Comienza el vaivén en las caderas del mayor, saliendo por completo para después enterrarse de una sola vez, repite esa acción varias veces, pero ninguno de los dos aguanta, y la velocidad de las embestidas aumentan, haciéndose cada ves mas rudas y rápidas, a una velocidad casi bestial, se mueve como poseso, la calidez y estreches que el cuerpo de Ji Yong le ofrece a maravillosa, no quiere que esto acabe......
……Y Ji Yong tampoco, quien mueve sus caderas al ritmo impuesto por el mayor, mientras se masturba aumentando el placer que su cuerpo siente, nunca antes había sentido tanto placer como el que está sintiendo, pero como todo lo que empieza tiene que acabar, unas cuantas embestidas por parte del mayor y varios movimientos de su mano sobre su propio miembro y ambos llegaron al orgasmo.
El mejor orgasmo que hasta ahora han experimentado, es exquisito, ambos puedes decir que vieron el Olimpo, que subieron y bajaron en un instante, que los mismos dioses sienten envidia de tanto placer que sus mortales cuerpos han sufrido; Seunghyun se deja caer sobre ji Yong y este lo acepta en sus brazos sin chistar por unos momentos solamente, el mayor no quiere abandonar tan cálido lugar, pero no le queda de otra que salir del cuerpo del menor y comenzar a vestirse bajo la atenta mirada del rubio, quien solo puede sonreír de completa satisfacción.
El mayor termina de vestirse, se acerca al menor que sigue en la cama observando de manera calculadora cada uno de sus movimientos, un beso largo y apasionado, pero a la vez lento y profundo, disfrutando de nuevo el sabor ajeno, un “Hasta pronto, nos vemos mañana…estudia tus líneas” y una sonrisa por parte de ambos es su despedida, Seunghyun le asegura que vendrá al día siguiente a la misma hora y Ji Yong solo le sonríe y asiente con la cabeza, estando de acuerdo con lo que el mayor dijo.
Seunghyun sale de la casa de Ji con una gran sonrisa en los labios y Ji Yong…el solo sonríe mientras cae profundamente dormido en los brazos de Morfeo.