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Dreaming por zaii

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Notas del fanfic:

Este es el primer oneshot que publico en amor-yaoi ^^ [KrisHun] (Kris y sehun de EXO)

Los sueños son algo maravilloso, desde tiempos ancestrales diferentes culturas los han considerado como algo de suma importancia por no decir sagrado, para algunas culturas los sueños son presagios, predicciones de un futuro amargo o próspero, para algunos autores los sueños son sentimientos reprimidos y que solo en ellos podemos expresar nuestro verdadero yo, para otros los sueños son simples ondas cerebrales y que tienen la función de consolidar en nuestra memoria todo lo que vimos y aprendimos durante el día.

Pero más allá de todos estos puntos de vista que la ciencia, las leyendas y nuestra misma cultura nos dan como respuestas, Oh Sehun siempre ha preferido la vieja historia que su abuela le contaba cuando era pequeño, la prefería no porque fuera un niño de 8 años a quien las historias divertidas y mágicas son las que mas le llaman la atención sino porque él mismo había experimentado lo que su abuela le contaba y cuando uno experimenta y ve con sus propios ojos algo, no hay manera de que podamos negarlo.

Cada vez que te quedas dormido te encuentras en el sueño de un extraño

Cuando Sehun cumplió 8 años, tuvo una enorme y fantástica fiesta de cumpleaños, sus padres habían decidido hacerla en un parque que se sitúa junto a uno de los tantos lagos que Jeju guarda entre sus maravillosos paisajes, ese fue un día que Sehun jamás olvidaría o eso creía... sus papás por primera vez en semanas o lo que a él le parecían años estaban con él, sus amigos de la escuela le dieron muchos regalos y juntos se subían a todos los juegos que sus papás habían adquirido y su abuela, su mejor amiga y cómplice también estaba ahí.

Sehun era un niño como cualquier otro, la curiosidad le causaba tanta ansiedad que cuando algo se le ocurría tenia que hacerlo, como cuando tenia 6 años y en la granja de uno de los trabajadores de su papá decidió abrir la puerta del ganado porque quería saber quienes eran más rápidas si las vacas o las cabras.

Y esta vez a sus 8 años no era la excepción, el lago parecía tan cristalino y los peces tan amigables que Sehun se preguntó si podía atrapar un par de ellos y regalárselos a su papá ya que a él le gustaban mucho y tenía una enorme pecera en su oficina.

Sehun se quitó su ropa y se metió al lago, ya había tomado 2 clases de natación no podía pasar nada ¿cierto?, cuando todo el cuerpo de Sehun entró en el lago y dio un par de pasos, notó algo que comenzó a aterrorizarlo y que no estaba en su plan, no sentía ninguna superficie debajo de sus pies, los peces que antes parecían lindos comenzaban a moverse a su alrededor frenéticamente, Sehun comenzó a gritar pero solo provocó que el agua comenzará entrar a su boca y el movimiento agitado de sus pequeñas extremidades llamaba a más peces, de pronto todo se volvió oscuro y cuando todo se silenció, escucho una suave voz "Todo va a estar bien" Sehun quiso abrir sus ojos pero solo vio la silueta de otra persona, los rayos del sol tapaban su rostro pero de alguna forma sabia que tenía que decirle gracias, desafortunadamente nada salió de sus labios.

Esa misma tarde Sehun recibió el peor regaño de su vida, sus papás estaban furiosos incluso escucho decir a su héroe una maldición, esto provocó que el pequeño llorara toda la noche, Sehun tenia mucho miedo de los hospitales siempre le habían aterrorizado "Cuando estas en ellos la gente siempre se enferma, todo es blanco y huele feo" dijo Sehun en el regazo de su abuela quien cambiaba suavemente las gazas de los brazos y piernas pues tenia heridas.

"Los hospitales no siempre son malos Sehun-ah, ahí también se curan las personas, así como tú te estas curando"

"Pero tú eres la que me estas curando" La abuela de Sehun sonrió y abrazo a su pequeño.

"Es hora de dormir"

"No quiero!" protestó Sehun quien inmediatamente se sentó con los brazos cruzados.

"Pero necesitas descansar"

"No quiero, sueño cosas feas"

"Que has soñado?"

"Ayer soñé que la casa se inundaba y puppy se moría"

"Sehun-ah, no tienes que tener miedo de los sueños"

"Seungho dijo que cuando sueñas algo se vuelve realidad" los ojos de Sehun comenzaban a llenarse de lagrimas "No quiero que puppy se muera" su abuela abrazó fuertemente a su nieto y comenzó a acariciar su cabeza, "Cada vez que te quedas dormido te encuentras en el sueño de un extraño" Sehun inmediatamente se levantó y observó a su abuela atentamente, esa noche decidió que iba a poner mas atención a sus sueños.


Los sueños de Sehun fueron los más comunes de todos, siempre soñaba con las mismas personas, las mismas cosas, los mismos problemas.

Pero no fue hasta los 10 años que ocurrió algo que cambiaría el curso de su vida.

Sehun soñó que se encontraba en casa de una de sus tías, todo era normal hasta que decidieron ir de vacaciones a un lugar sorpresa, a Sehun siempre le han gustado las sorpresas, el lugar resultó ser un precioso puerto rodeado de mar, un mar oscuro con una profundidad que solo las desconocidas criaturas que habitan ahí saben cual es y ese escenario fue suficiente para que se convirtiera en una pesadilla, Sehun estaba a la orilla de ese puerto parado sobre un piso angosto y en donde la madera rechinaba con el mas leve movimiento, quería regresar, correr, pero no podía moverse todo era muy angosto, su respiración comenzaba a fallar podía sentir como el aire entraba cada vez con mas dificultad, como su pecho ascendía y descendía cada vez mas rápido y como el camino de madera se iba humedeciendo cada vez más como si el mar con todo su poder comenzara a absorberlo, ¡ayuda! ¡ayúdenme! intentaba gritar pero nada salía de su labios a lo lejos podía observar a su familia riendo y disfrutando de las vacaciones, nadie lo escuchaba, estaba solo.

"Mi amor tu abuelita ya no está aquí" Fue lo que escuchó Sehun 1 semana después, su mejor amiga, la única que lo arropaba y le contaba historias de dragones y princesas, había fallecido por un paro cardiaco una noche antes, ese fue la primera vez que Sehun lloró sin que alguien le acariciara el rostro y le susurrara palabras de aliento.

Sehun abandonó la casa de su abuela en Jeju para vivir en un apartamento de Seúl y a partir de ese momento Sehun comenzó a tener esa expresión tan seria en su rostro, su voz ya no era la misma que solía ser y cuando entro a la secundaria comenzó a hacer amistad con el tipo de chicos que no entran a clases y molestan a otros, Sehun podía comprar a cualquiera ya que a falta de presencia de sus padres su cuenta bancaria incrementaba por cualquier necesidad que su amado hijo podría presentar.

Desde los 12 hasta los 17 las pesadillas de Sehun eran cada vez más frecuentes, cada vez más sofocantes cada vez más solitarias.

Cuando Sehun cumplió 18 años algo nuevo apareció en sus recurrentes pesadillas, esta vez se encontraba en un lugar extraño, uno que él desconocía era una casa vieja, los colores eran en su mayoría rojos y dorados, el acabado de los muebles era muy diferente a los que él veía en Seúl, Sehun se asomó por la ventana, afuera había una tormenta horrible y al parecer la casa estaba en medio de un lago, inmediatamente se sentó en uno de los sillones acercando sus piernas hacia su pecho y cerrando fuertemente sus ojos, esperando a que la tormenta pasara.

"Que haces aquí?" Preguntó una voz grave y áspera, Sehun alzó la mirada y vio una silueta, no pudo observar el rostro hasta que un rayo lo iluminó, era un chico joven aunque definidamente más grande que Sehun, su cabello era rubio y tenia una expresión llena de incertidumbre y asombro.

"Yo... no puedo salir está lloviendo y ..."

"Será imposible salir de aquí" susurró el chico mientras prendía un par de velas doradas, pánico comenzó a sentir Sehun, ¿moriría ahí?

"Aquí siempre llueve" dijo aquel chico mientras extendía una mano a Sehun "Soy Kris"

"Sehun"

"¿Qué quieres decir con que aquí siempre llueve?" preguntó Sehun abrazando con más fuerza sus piernas.

"Simplemente siempre llueve, nunca he visto un día soleado por aquí"

"Y... hay mar allí afuera? ¿alguna vez se ha inundado tu casa?"

"No se si hay mar allí afuera o solo sea por la lluvia pero nunca se ha inundado mi casa, no entiendo porque aún no lo ha hecho"

Ese día Sehun despertó sin sudor en su frente pero tampoco despertó tranquilo simplemente despertó sin emoción alguna, Kris murmuró antes de tomar un baño y dirigirse al colegio.

--------

"Que es lo que comes si no puedes salir?" Preguntó Sehun que estaba recostado sobre una alfombra con bordados rojos

"Nunca he tenido hambre" Respondió Kris quien jugaba con la cera de la vela.

"Tienes hambre?" Preguntó después de que la misma se enfriara en las llemas de sus dedos, Sehun asintió suavemente.

"Tal vez haya algo en la cocina" Kris se levantó y se dirigió a un cuarto, Sehun aprovechó el momento para analizar más el lugar, habían muchas cosas, pensándolo mejor la casa tenia el aspecto de una tienda de antigüedades.

"Encontré esto" Sehun saltó por el susto y Kris extendió su brazo con un plato que contenía comida que Sehun nunca había visto pero que olía muy bien "Se llama Rösti es un plato típico de suiza".

Sehun dio un pequeño bocado inundando sus sentidos con sabores que nunca había experimentado "¿Eres de suiza?" preguntó mientras devoraba el platillo

"No, pero he estado ahí" Kris observaba detenidamente a Sehun como tratando de atravesar no solo su cuerpo sino su alma y así encontrar algo, Sehun se sintió cohibido y dejo su plato a un lado. "Gracias estuvo muy rico"

"Que haces aquí?" Preguntó Kris pero antes de que Sehun pudiera emitir algún ruido un estruendoso trueno cayó cerca de la casa y comenzó a verse fuego, junto con eso Sehun comenzó a sentir que sus pies se mojaban "¡Kris! ¡Hay Agua!" Pero Kris ya no estaba sentado frente a él, Sehun corrió hacia la cocina y tampoco estaba ahí, el agua ahora se encontraba hasta sus rodillas, entraba fuertemente en forma de olas y Sehun podía sentir lo helada que estaba, la casa era enorme, nunca lo había parecido antes, intentaba correr pero cada vez era mas difícil por la presión del agua sobre sus piernas, el tiempo se acababa y Sehun sentía que en cualquier momento iba a morir no solo de la peor forma sino con su peor miedo, la soledad.

Cuando Sehun estaba apunto de desfallecer, una fuerte mano lo tomó del brazo y lo cargó hacia un enorme ropero "todo va a estar bien" esa frase le hizo recordar lo ocurrido 10 años atrás, era el mismo acento extranjero, la misma voz cálida, pero esta vez esa voz tenia un rostro el de Kris...


Cuando Sehun abrió los ojos agitado, observó su reloj, eran las 3:50 am "Gracias" murmuró, esa madrugada Sehun lloró lo que no hacia desde la muerte de su abuela.
Todos estos años Sehun construyó una muralla con el material mas resistente, porque en realidad necesitaba una colosal muralla rígida para proteger a su débil corazón, Sehun pudo haber crecido mucho incluso ser más alto que su padre y algunos de sus amigos pero su corazón seguía siendo el de aquel niño de 8 años que solo deseaba jugar y escuchar esas historias tan maravillosas en donde siempre se termina con un final feliz, en donde los personajes están rodeados de seres que los aman pero Sehun no tenia nada, su vida no era una historia de fantasía era real y solo estaba rodeado por las cuatro paredes de su habitación, la vida no es cuento de hadas al final del día.

"Te ves cansado hijo, has dormido bien?" preguntó su madre un día, tomando entre sus manos la de su hijo.

"Si" Sehun retiró su mano rápidamente observando como la mirada de su madre se apagaba.

"Hay algo que quieras hacer?"

"Algo como qué?" contestó Sehun sin siquiera voltear a verla.

"No sé, lo que sea"

Sehun pensó por un momento "Quiero viajar a Suiza"

Una semana más tarde Sehun se encontraba a bordo del avión viajando a la ciudad que aquel chico mencionó en sus sueños, Sehun se sentía un poco nervioso por haber tomado una decisión tan acelerada cuando su inseguridad siempre le hacia tomar decisiones lo mas paulatinamente posible, además de que sus papás estuvieron "preocupados" porque viajaría "solo" pero a Sehun solo le causó gracia la paradoja.

A las 8am Sehun pisó tierra Suiza, hacía frio pero aún con el clima Sehun sintió algo que no sentía desde hace años, emoción. Después de llegar al hotel decidió ir a los lugares que tenía marcado en su guía. Museos y Tiendas de antigüedades.

La primera semana, Sehun se las arregló para asistir a 8 museos y 4 tiendas, no encontraba nada, bueno, en primer lugar ¿Qué estaba buscando?.

Una noche Sehun se encontraba viendo el techo de su habitación del hotel pensando en nada, pero sintiendo mucho, buscó debajo de su suéter un collar, una cadena con una pequeña pluma de plata que su abuela utilizaba todo el tiempo "Abuela... de verdad cuando dormimos estamos en el sueño de otra persona?" tal vez.... solo tal vez ¿Kris es real? un desconocido que vive al otro lado del mundo y que le ha hecho compañía durante sus pesadillas, esa es la respuesta del por qué Sehun está en Suiza, la respuesta se llama Kris.

Durante su segunda semana Sehun decidió disfrutar de Suiza, los museos comenzaban a fastidiarlo además eran enormes, en su mayoría castillos.
Todo en el país Europeo parecía irreal, las casas, los caminos, las personas todo era igual a esas historias que su abuela solía contarle, por alguna extraña razón se sentía más en casa aquí rodeado de toda esa magia que en Seúl, esa noche Sehun volvió a soñar con él...

"¿Dónde has estado?" Preguntó Kris mientras limpiaba unos jarrones de cristal.

"No lo sé, donde has estado tú?" Preguntó Sehun quien observaba la lluvia por la ventana.

"Yo siempre he estado aquí" Respondió Kris.

"Cuantos años tienes?"

"22 ¿Y tú?"

"Cumplo 19 la próxima semana" sonrió nostálgicamente Sehun

"¿Tendrás otra fiesta de cumpleaños?" Preguntó Kris para inmediatamente tensarse y voltear a ver a Sehun con cierto temor, y este frunció el ceño "A que te refieres con otra fiesta" Kris suspiró y se acercó a Sehun tomando sus manos entre las suyas, Sehun es un chico alto pero no tanto como Kris, sus manos se veían tan delicadas entre las suyas pero eso no fue lo que le quitó la respiración a Sehun, fue la leve casi invisible sonrisa de Kris, era algo hermoso no solo porque Kris era un chico serio casi todo el tiempo sino porque se veía sincera, cálida, perfecta.

"Desde la primera vez que te apareciste frente a mi supe que eras ese pequeño niño, lo que no entiendo es como llegaste aquí..."

"De que hablas?"

"Sehun, este es mi sueño, ¿Que haces aquí?" Sehun parecía confundido, todo este tiempo pensó que era el suyo, que Kris era el que invadía a Sehun pero al parecer era al revés.

"Sehun... Recuerdas cuando te dije que yo siempre me encontraba aquí?" Sehun asintió "Siempre estoy aquí porque este es mi sueño, un sueño del que no puedo despertar. Este lugar esta lleno de todos los recuerdos que he vivido, cada pequeña pieza que se encuentra aquí forma parte de mi vida, de mi pasado, pero yo soy la única persona encerrada en este lugar, hace dos años tuve un accidente en Suiza y a partir de ahí no he podido despertar, en algunos momentos escucho las voces de mi madre y padre pero siempre son lejanas, vienen de fuera de la casa pero por más que intento salir no puedo y entonces un día tú apareciste aquí, en esta casa, en esta prisión" la voz de Kris se quebraba con cada palabra que decía "No... No quiero perderte, que te vayas y no verte más" fue lo ultimo que dijo antes de abrazar fuertemente a Sehun.


"Creo... creo que ambos deseamos que alguien nos encuentre" susurró Sehun entre sollozos. "Yo también me siento aprisionado, no tengo a nadie a mi lado, no sé como te encontré pero tampoco quiero perderte" Lentamente Kris tomó entre sus manos el rostro de Sehun y limpio sus lagrimas, los ojos del menor eran tan pequeños por haber llorado que Kris pensó que nunca antes había visto a una persona tan hermosa, después de unos segundos de observarse a los ojos, Kris acercó sus labios a los del menor, aun en sus sueños la sensación de aquel beso los envolvía completamente, sus labios eran suaves, cálidos, su pecho era firme y podía escuchar los latidos de su corazón, por primera vez en mucho tiempo ambos se sintieron completos.

Ese día Sehun despertó con una sonrisa en los labios.

-------

"Fresa!"

"Ew no me gusta la fresa"

"¿Chocolate?" preguntó Sehun mientras ambos compartían helado a la luz de las velas y platicaban sobre lo mucho que Sehun odiaba sus clases de física.

Sehun había estado soñando diario con Kris, ambos habían aprendido mucho el otro, como que Kris era un fotógrafo profesional y que desde niño había viajado alrededor de todo el mundo, acurrucados en el sillón veían el portafolio de Kris, las fotos mas artísticas y hermosas que Sehun había visto,.

"Que paso aquel día?" preguntó una noche Sehun

"En ese entonces yo tenia 12 años, mi papá es biólogo y siempre que viajaba me llevaba con él, ese día estábamos en el lago de Jeju yo decidí explorarlo y termine del otro lado justo donde se llevaba a cabo tu fiesta, creo que fue el momento en el que me di cuenta que me gustaban los hombres" ambos rieron, pero Sehun se sonrojó un poco, "Tu sonrisa en ese momento era enorme y tan bonita, que decidí acercarme más, cuando comenzaste a quitarte la ropa me voltee pero entonces comencé a escuchar tus gritos y ya estabas en el agua así que entré y te llevé hasta la orilla del lago, una mujer mayor fue la primera en llegar" El corazón de Sehun dolió por la nostalgia "tu estabas inconsciente llamaron a la ambulancia y todo fue un caos, cuando los paramédicos vinieron por ti y tus papás subieron en la ambulancia fue esa mujer la que me dijo algo que en ese momento no entendí"

"Que te dijo?" Pregunto Sehun lleno de curiosidad

"Todos los días nos encontramos con personas que pueden salvarnos la vida pero cuando esto vuelve a ocurrir se llama destino, gracias por ayudar a Sehun-ah esta vez" Sehun sonrió y besó los labios de Kris

"Esa mujer era mi abuela me alegro que la hayas conocido"


"Me alegro de haberla conocido, puedo ver en tus ojos que es muy importante para ti"


"Lo es, me enseñó muchas cosas, creo que de alguna forma me dio la clave para volverte a ver" Dijo Sehun mientras recordaba aquella primera plática que tuvieron sobre los sueños.

Esa vez ocurrió lo más extraño que puede ocurrir en un sueño, "Tengo sueño" "Yo también" respondió Sehun mientras bostezaban y tomaban una cobija para cubrirse y abrazarse debajo de ella.

Cuando los sentidos de Sehun comenzaron a reaccionar algo le molestaba, algo brillante sobre su rostro, Sehun abrió los ojos y un cálido rayo de sol se asomaba por la ventana, se levantó inmediatamente y se asomó por ella, había sol... no habia lluvia, todo era claro y tan azul que los ojos de Sehun dolían

"Kris!! Kris!! ¡¡ha dejado de llover, tienes que venir!!" Pero Kris no estaba ahí su corazón comenzó a latir con fuerza y la desesperación a oprimir sus venas.

Sehun corrió por toda la casa buscando a Kris pero no encontró nada, pasados unos segundos se escuchó un fuerte ruido como si un tornado se encontrara dentro de la casa, y así era.... cada pieza de la casa de Kris era absorbido por este, cada fotografía tomada, cada pieza de arte, cada centímetro de ese lugar desaparecía poco a poco, Sehun intentaba buscar una salida, pero el viento era tan impetuoso que aún con toda su fuerza comenzaba a arrastrarlo, no quería ser tragado por ese tornado, no quería desaparecer de ahí como todo lo demás.

Sehun despertó con mucha dificultad para respirar y corrió a vaciar su estomago en el baño de la habitación, estaba mareado y desorientado, Tengo que encontrar a Kris.

Esa misma tarde Sehun hizo toda una lista de posibles hospitales en Suiza

"Sehun llevas más de 6 meses allá, tienes que volver a Corea"

"Sí..." Encontrar a alguien en un país desconocido y con poca información de él, (poca información en cuanto a contactos) porque todo este tiempo Sehun había aprendido demasiado de Kris y por primera vez Sehun se abría de nuevo a alguien sin temor alguno, como si Kris fuera un poderoso caballero que poco a poco va destruyendo la fortaleza del corazón de Sehun.

La ventaja de los sueños es que el tiempo puede durar lo que nosotros deseemos y Kris y Sehun han tenido el suficiente como para haber formado un lazo muy fuerte uno llamado amor.

"Antes de ir quisiera visitar un ultimo lugar... mamá perdón por los problemas que he causado estos últimos meses"

"Mi amor, los únicos que tienen que pedir perdón somos tu padre y yo... perdón por no estar contigo cuando mas nos necesitaste"

"Mamá... hay alguien muy especial en mi vida"

"Es por esa persona que estas ahi?"

"Si... pero... es, bueno es un chico"

"Lo amas?"

"sí..."

"Entonces ve por él, la vida es muy corta Sehunah no puedes permitirte limitarte en las cosas que amas, tu padre y yo estaremos esperando por ti en Corea cuando estes listo" Gracias fue lo ultimo que dijo Sehun para colgar el teléfono y llorar en silencio, sus papás siempre lo han amado y él siempre ha amado sus padres pero muchas veces por alguna razón nos limitamos a demostrar ese amor filial, pero de ahora en adelante eso no iba a suceder más en su vida.

El hospital de Sonnenhof era el ultimo al que Sehun iba a ir, era un día frío y la neblina impedía ver la vista completa del edificio, normalmente Sehun hacia las llamadas para preguntar por Kris pero esta vez por ser el ultimo decidió ir por su propia cuenta, Sehun suspiró antes de entrar y observó como el vapor de su respiración entraba en contacto con la fría atmosfera, esto fue suficiente para recordar lo cálido que se sentía el cuerpo de kris junto al suyo, como su cuerpo se ajustaba perfectamente al de Kris, como en cada abrazo podía colocar su cabeza en el cuello y dar pequeños besos que hacían temblar y sonreír al mayor.

"Buenas tardes, quisiera saber si hay algún kris hospitalizado aquí"

"Sabe sus apellidos?"

"No... pero nació en China"

"Un momento" La señorita a cargo buscaba en su computadora y mientras el corazón de Sehun latía a mil como esperando esa respuesta...

"Si, ¿podrías dejar tus datos? esta en la habitación 405" Las piernas de Sehun temblaban, cada paso que daba cada gota de sudor que recorría su espina, por primera vez vería a Kris en este mundo, aun dormido y sin poder despertar Sehun quería verlo, tocarlo, conocerlo una vez más y darle las gracias por todas las veces que lo ha salvado porque ¿Esto es el destino verdad abuela?.

Cuando Sehun abrió la puerta de la habitación no se encontró con el Kris que se había imagino uno durmiendo pacíficamente y con una expresión serena, no, se encontró con un Kris enderezado, leyendo un libro y con una enorme almohada presionada sobre su espalda, los ojos de Sehun en ese momento eran enormes y la sangre de sus venas habían dejado de circular¿Qué?.. Kris lo miraba fijamente y un poco confundido, pero entonces Sehun se dio cuenta de la presencia de otro hombre que inmediatamente se levantó de un pequeño sillón frente a la cama de Kris y tomó a Sehun del brazo arrastrándolo fuera de la habitación.

"Disculpa por sacarte así de la habitación pero no habíamos recibido visitas de otra persona que no fueran los padres de Kris, y bueno puede confundirlo bastante el ver a otra persona" Al parecer aquel doctor pudo reconocer la expresión tan aturdida de Sehun que empezó por presentarse.

"Soy Alezander el doctor de Kris y tu eres?"

"Sehun... Oh Sehun"

"eres amigo de Kris? de Corea?" Sehun asintió no tan convencido por su respuesta

"Crei que Kris estaba bueno, en coma..."

"Lo estaba, hace una semana despertó, desgraciadamente no recuerda nada, ni siquiera a sus propios padres... Pero, ayer su madre platicó conmigo y me dijo algo que Kris no nos reportó ni siquiera en terapia, Kris recuerda a un chico, recuerda todo de él," Sehun sentía un nudo en la garganta el nudo era tan grande que dolía respirar "Kris le dijo a su papá que tenia miedo de que no fueran recuerdos de algo que de verdad ocurrió sino solo fantasías de sus sueños, porque durante todo este tiempo Kris soñó con aquel chico, nosotros pensábamos que tal vez era él mismo, pero no... porque lo describió y chico, luces exactamente como su descripción" Para ese momento Sehun sollozaba fuertemente, ese tornado al final no lo había absorbido junto con todos los demás recuerdos, Kris hizo todo lo posible por guardarlo, por protegerlo, por tenerlo a su lado y preservarlo hasta lo ms profundo de su ser.

"Ahora que sabes todo, entra, no creo que te pregunte quien eres" sonrió levemente el doctor.

Al entrar a la habitación Kris lo recibió con una sonrisa y en este mundo era una aún mas brillante, más sincera, Sehun corrió hacia la cama y abrazó fuertemente al amor se de su vida, al chico que siempre había estado a su lado, salvándolo de aquel terrible y profundo mar, porque Kris era esa guía, esa bocanada de aire que volvió a la vida a Sehun, era lo que su abuela llamaba destino.

"Por fin nos encontramos" dijo Kris para besar suavemente los labios de su amante.


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