Odio que hyung traiga a su novio a la casa, no porque no me caiga bien si no que trae a su mugriento hermano y mientras ellos “Se divierten” lo obligan a que me vigile mientras hago los deberes de la casa. Lo que más me molesta es que siempre esta gritándome y ordenándome cosas.
-Hyung, no quiero que venga el hermano de Key umma –Dije haciendo pucheros.
-Tae, cuando aprenderás a llevarte bien con Jjong?
-Nunca!, él es un enano del mal que solo me grita.
Me retire de ahí, no quería un sermón de parte de Onew. Me tire encima de mi cama que aun estaba desarreglada esperando la tortura.
Escuche la puerta de afuera abrirse y supuse que esos dos ya habían llegado, suspire pesadamente esperando que a lo menos hoy no hubiera que hacer nada en casa.
-Tae! Baja que ya llegaron –Grito mi hermano desde abajo.
Bien, que la tortura comience.
Bajo a paso lento las escaleras y ahí están esos dos.
-Tae! Que son esas fachas –Me grita mi hermano y hasta ahora me doy cuenta que aun sigo en pijama.
-No me fastidies Onew, puedo quedarme en pijama todo el día si quiero.
-Ommo, Tae! –Key grita y se tira encima de mí abrazándome, haciéndome caer al suelo.
-Umma, no me dejas respirar –Me levanto con él aun abrazándome.
-Aigo~ mira qué bonito estas, aún en pijama eres tan lindo –Me pellizca las mejillas.
-Key, no hagas eso –Lo separe haciendo pucheros lo que hizo que me volviera a abrazar.
-Key ya suéltalo, ese enano por mas que se esfuerce nunca será lindo –Y ahí está, el enano ese había hablado por primera vez.
-Cállate, él siempre es y será lindo.
-Bueno, ya no siendo más me puedo retirar? No soporto estar cerca de un sin cerebro como él
–Obviamente señale al enano ese y lo mire con odio.
-Bueno espero que disfrutes pasar tiempo con este sin cerebro porque va a cuidarte esta tarde mientras nosotros salimos.
-Eish, ya estoy grande porque sigues invitando a ese enano aquí –Bufe molesto.
-Pues este enano tendrá que cuidarte hoy así que vas a ver lo bonito que es pasar tiempo conmigo.
No quería seguir discutiendo así que subí a toda velocidad a mi cuarto, estaba molesto y Onew lo único que hacía era salir a divertirse con Key.
Me tire boca abajo encima de mi cama y escuche la puerta de afuera abrirse, supuse que ellos ya se habían ido. Espero que el enano no se atreva a subir a mi habitación o lo cogeré a patadas.
-Tae, Tae. Baja un momento.
Eish ese odioso engendro, como se atreve a llamarme así, me las va a pagar.
Baje a toda velocidad las escaleras encontrándolo apoltronado en el sofá de la sala, apenas llegue ahí me pare enfrente de él.
-Que carajos quieres! –Le grite molesto.
-Bueno, tu hermano me ha dicho algunas cosas que debes hacer y lo primero en la lista es hacer algo para comer, deberías apurarte porque tengo mucha hambre.
-Eish, eres molesto lo sabías?
-Tal vez, pero también soy muy lindo.
-Hahaha si claro, sigue soñando.
A regañadientes me dirigí a la cocina para hacer algo de comer, y ese inútil bueno para nada seguía ahí viendo la televisión de lo más cómodo pero me las va a pagar ya lo verá.
Mmm, como sería mi venganza? Tal vez si le pongo algo a su comida, Bingo! Si eso haré para que aprenda a no tomar confianzas conmigo.
Prepare pasta, nada del otro mundo pero a el plato de él le eche pimienta y mucha, espero que con esto sepa que conmigo no se juega.
-Oye, Enano. Ya está la comida.
Él se levanto y corrió hasta la cocina, se veía que tenía mucha hambre. Le serví un buen plato espero que lo disfrute.
-Eso se ve muy bien, gracias Tae –Se sentó y comenzó a comer como desesperado. Me pregunto cuánto se demorara en sentir la pimienta. Oh. Espera, creo que sus caras raras me indican que la venganza es dulce.
-Hahahahaha, deberías ver tu cara, me diviertes mucho –No podía de la risa, sus caras eran tan graciosas, caí al piso riendo como loco.
-Aigo, este niño si, casi me matas!!!!!
No podía contestar aún estaba muy entretenido riéndome de su cara roja.
De repente él se tiro encima de mí y de inmediato mi risa se esfumo.
-Oye! Qué crees que haces, quítate de encima –Trate de moverme pero no pude.
-No quiero y creo que no me puedes obligar así como estas.
Lo mire directamente a los ojos, este enano hacia que mi mal humor saliera a flote.
Nos quedamos mirándonos un buen rato y sin saber porque se me formo una pequeña sonrisa que no paso desapercibida.
-Me gusta tu sonrisa –Me dijo mientras se iba acercando poco a poco a mi cara. Estaba nervioso, no sabía que iba a hacer así que lo único que hice fue cerrar los ojos con fuerza.
Sentí algo mojado recorrer mis labios. Abro los ojos lentamente y él estaba ahí sonriendo como si nada y lo volvió a hacer pero esta vez no cerré los ojos. Había pasado su lengua por mis labios, se sentía raro pero no dije nada.
No hizo nada mas, se levanto y se fue a la sala como si nada hubiera pasado. Yo me quede paralizado en el suelo, no sabía qué hacer ni cómo reaccionar así que me levante lentamente y me senté a comer un poco de la pasta que había hecho (la que no tenia pimienta claro).
Todo era confuso, por qué lo había hecho?, no tenia respuestas, lo único que espero es que nada raro vuelva a pasar.
Lave los platos después de terminar y arregle la cocina. Cuando me dirigí a las escaleras para subir a mi cuarto el molesto ese me llamo diciendo que tenía más tareas que hacer.
-Ahora, según lo que me dijo Onew tienes que arreglar la sala dijo que no quería ver ningún reguero cuando llegara.
No dije nada, solo asentí, me sentía raro ya ni lo podía ver a la cara.
Traje la escoba y comencé barrer, cuando termine comencé a sacudir el polvo. Por alguna razón me sentía muy nervioso, después de lo que paso en la cocina me quede sin palabras.
Cuando deje todo en su lugar lo mire por primera vez después de lo que paso, esperando que me diga que más tenía que hacer.
Pero él se quedo mirándome como si nada, no pronuncio ni una sola palabra y ya comenzaba a fastidiarme.
-Oye! Di algo, que mas tengo que hacer? –Le dije con algo de molestia.
-Pues, tienes que bañarte y arreglar tu habitación, eso es lo último de la lista.
-Está bien, iré a bañarme entonces.
Entre a mi habitación saque otro pijama del cajón, ya era tarde así que para que cambiarse.
Me dispuse a entrar a la ducha cuando escucho un ruido, no le tomo importancia.
Enciendo la ducha y espero a que el agua se caliente. Vuelvo a escuchar el mismo ruido y curioso por saber que es abro la puerta del baño y ahí está ÉL! Esta acostado en mi cama.
-QUE CARAJOS HACES TÚ AQUÍ! -Le grite a todo pulmón.
-Acaso no puedo ayudarte a ordenar tu habitación?
-SI PERO ESTAS AHÍ ACOSTADO HACIENDO NADA!
-Bueno si, es que planeaba ayudarte en otra cosa –Se levanto y camina hacia mí, ommo, creo que lo prefería ahí sin hacer nada.
-Que-e estás haciendo, aléjate!
Se acerco tanto a mí que podía sentir su aliento cerca de mí. Ommo me puse nervioso y porque no estarlo si estaba besándome el cuello!, este enano se enloqueció o qué?
-Oye-e qu-ue ha-aces-s –No podía hablar bien, maldición que carajos está tramando.
-Shhh, te ayudare para que quedes bien limpio.
No pude procesar lo que me dijo pero lo que paso después no me lo espere, me estaba besando. Estaba en shock por lo que no le correspondí de igual manera estando consciente no lo hubiera hecho tampoco… o sí?
Me besaba despacio, de una manera muy suave y tierna pero yo seguía sin corresponderle.
Apenas se separo milímetros de mi, estábamos pegados frente a frente.
-Escucha Tae, todo lo que he dicho que no podrías ser lindo ni por qué quisieras era mentira, creo que eres el ser más hermoso de este mundo. Me gustas mucho.
OMG ahora si creí que se me iba la respiración, acaba de decir que le gusto?, eso no me lo espere de hecho creía que me odiaba.
Pero… yo si lo odiaba... o no? tal vez lo odiaba tanto porque lo amaba. Esto es confuso tenía una guerra en mi interior el pareció notarlo y agacho la mirada.
Ya había tomado mi decisión. Le cogí de la barbilla, nuestras miradas se encontraron y lo besé.
Creo que llegue a esa conclusión que aun que él fuera un mandón enano gritón lo amaba y mucho.
Continuamos así por varios minutos lo único que pasaba por mi mente era lo dulces y deliciosos que eran sus labios.
-Oye, que te parece si nos bañamos, al fin y al cabo es otra tarea que te dejo Onew –Susurro sobre mis labios, yo sonreí y lo cogí de la mano para meternos en el baño.
Revise que el agua ya estuviera caliente, iba a quitarme el pijama pero me dio vergüenza porque él ya no tenía nada de su ropa.
-Tae, si quieres te ayudo.
Se acerco y comenzó a besarme, yo le correspondí de inmediato sus manos bajaron hasta mi cintura, llegando al borde de la camisa y en un sutil movimiento me la quito arrojándola por ahí.
Sus besos fueron bajando hasta mi cuello, sentí que con sus dientes comenzaba a morder y lamer por todo lado a lo que solo atine a soltar un gemido.
-Ah… Jjong
-Minnie, esto te está gustando verdad? -susurro sobre mi cuello.
-Mmmm si –De un salto me colgué en su cuello y cruce mis piernas en su cadera.
-Tu amiguito se está despertando verdad Jjong? -lo dije ya que sentí un bulto debajo de mi trasero.
-El tuyo también –Me paso la mano por encima de la tela del pantalón.
-Ah, no hagas eso –Comencé a restregarme contra él.
-Tu-u no hagas eso, ah minnie, me vuelves loco.
No dije nada más me baje de encima de él y lleve mis manos a su muy despierto amigo, comencé con leves roces pero sin llegar a tocarlo bien.
Estaba disfrutando de esta situación pero me di cuenta de algo… el agua de la ducha aun estaba cayendo… desperdiciándose como si nada y caí en cuenta de que nos podríamos divertir un rato, igual estaría cumpliendo con lo que me dijo Onew.
Detuve mis manos a lo que él me miro extrañado y sin decir palabra lo jale dentro de la ducha no sin antes quitarme el resto de mi ropa.
Apenas sentí el agua en mi cabeza mis músculos se desentumieron sentí como me relajaba en un solo segundo.
Sentí que se posaba detrás de mí y sus manos rodearon mi cintura a lo que yo solo atine a sonreír.
-Jjong, tengo que ducharme, no te acuerdas lo que dijo Onew?
-Si lo recuerdo perfectamente, por eso te voy a ayudar para que sea más rápido.
Él cogió el jabón y comenzó a hacer espuma entre sus manos, comenzó a pasarlo suavemente sobre mi espalda y mis brazos. Fue bajando hasta llegar a mi cadera, con ambas manos restregó el jabón a ambos lados de mi.
Llego a mi espalda baja y continuo bajando dejando un camino de espuma finalmente llegando a mi trasero el cual acaricio y pellizco a su gusto.
-Jjong!, por qué haces eso! Deja de hacerlo o te ira mal.
-Y que me puedes hacer eh?
Jum, este enano cree que no me puedo vengar por eso?, ha! Pues se equivoca. El juego apenas comienza.
-Jjongie –Ronronee en su oído pasando mis brazos alrededor de su cadera, paseando de arriba abajo mis dedos por toda la extensión de su espalda, lo oí suspirar… La venganza empieza.
-Tae –Soltó otro suspiro. Quieres jugar conmigo verdad?
-Amm –Trace un camino con mi lengua desde su clavícula hasta el ombligo *sin tocar sus pezones* lamiendo con parsimonia.
Seguí trazando todo su pecho con mi lengua pero nunca tocando sus pezones a lo que él se retorcía inquieto.
-Que pasa Jjongie? Acaso no te gusta?
-Eres un pequeño malvado, sabes que esto te costara mucho.
-Tal vez, pero me gusta jugar… y mas contigo -Sople sobre su pezón derecho.
-Ah, creo que… no me gusta este juego
-Hahaha, Jjongie, eres un amor lo sabes? -Ahora pose mis manos en cada uno de sus pezones y suavemente con los dedos comencé a hacer una leve presión en ellos.
-Tae! –Gimió. Ya no aguanto más.
En un movimiento brusco sentí como uno de sus dedos se había dirigido a mi entrada, penetrándome sin piedad alguna.
-Ahhhhhh! –Grite, no sé si por el dolor o porque me estaba gustando.
-Que paso minnie?, acaso no querías jugar? –Comenzó con sus movimientos bruscos entrando y saliendo de golpe.
-Ah, ah, ah, Jjongie ah! –Esto me estaba excitando de sobre manera y lo único que quería era tener más contacto con ese dedo que me estaba dando placer.
Comencé como loco moviéndome tratando de que ese dedo penetrara más adentro lo que Jjong noto y lo saco de golpe.
-Oye-e! Es-o me estaba gustando –Hice un puchero.
-Ya lo sé, pero acaso no querías jugar? Y eso es lo que estamos haciendo. Ahora, ponte en cuatro corazón.
Le hice caso, me gustaba su lado mandón y además no resistía más.
Sentí su lengua pasearse por mi trasero luego comenzó a pasearse por mi entrada luego comenzó a entrar y salir con suavidad.
-Ah! Ah, Jjongie, entra ya! Por favor -Tenia mis ojos cerrados creí que ya no soportaría mas y así fue, no pude evitarlo y me corri.
-Vaya, alguien estaba desesperado, está bien, está bien, para que veas que soy bueno lo haré.
Creí que al fin iba a penetrarme pero me equivoque. Comencé a sentir que su mano se paseaba por mi pene poniéndolo duro otra vez. Ni siquiera me había repuesto de mi orgasmo y ya comenzaba a tener otro.
-Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaah! –Me corrí con más fuerza que la vez anterior y caí rendido en el suelo de la ducha, estaba seguro de que ya no podría tener otro más.
-Jjon-g, eres un GRAN hijo de puta. Ya no puedo mas –Seguía respirando con fuerza, eso ya había sido demasiado para mí.
-Espera, espera, aún falta lo mejor –No tuve ni medio minuto de descanso porque el muy desgraciado ya me había penetrado de una sola estocada.
-Aaaaaaaah!, Jjong eres un maldito.
-Lo sé, pero tenía que castigarte de alguna manera -Comenzó a penetrarme si no hubiera mañana, era demasiado BESTIA pero me encantaba su manera de ser.
-Ah, ah, Jjongie, más rápido.
Y dicho y hecho comenzó con movimientos más bruscos y rápidos.
De repente salió de golpe, me cogió y me voltio dejándome de espalda al suelo y entro de nuevo siguiendo con su vaivén.
Como pude atraje su cara y comencé a besarlo mientras él con sus manos torturaba mis pobres pezones.
-Minnie, creo que… ya no puedo más –Comenzó a embestirme con más fuerza y se corrió dentro de mí, yo sin mucho esfuerzo termine corriéndome otra vez sintiendo que las fuerzas se escapaban de mi. Caí rendido con él encima. Salió con cuidado me levanto del suelo, apague la llave de la ducha y con la toalla nos secamos mutuamente.
Cuando ya estuvimos listos con nuestras ropas normales *Y yo con mi pijama* nos recostamos en mi cama tapándonos con las cobijas. Yo con mi cabeza sobre su pecho y el rodeándome con sus fuertes brazos.
-Jjongi-i-e, esto fue demasiado, ciento que podría morir en este mismo momento de tantas veces que me corri.
-Hahaha Minnie no seas dramático, pero a mí me encanto, espera, espera. Hay algo que debo preguntarte primero.
Okey, ya me asuste. Su voz sonó con un tono tan serio que supuse lo peor.
-Que pasa Hyung?, acaso hice algo mal?
-Hahaha, claro que no Minnie, solo te quería preguntar si: Quieres ser mi adorable novio?
Ommo, esto si me tomo por sorpresa pero claro que iba a aceptar, porque después de todo lo amaba y mucho.
-Claro que quiero Hyung, me extraña que después de lo que paso preguntes eso, Te amo Hyung.
-Yo te amo mas minnie –Me dio un dulce beso en la frente y se acomodo mejor en la cama, supuse que quería dormir, poco a poco sentía que mis parpados no durarían mucho y fui cayendo dormido en los brazos de morfeo.
Los dos nos quedamos dormidos abrazados sin importar que Onew o Key Hyung entraran a la habitación. Nada nos impediría estar felices de ahora en adelante.