Capítulo I "Por eso digo que mejor lleguemos temprano..."
Las almas valientes llegaran a ser merecedoras de vivir. Aunque para algunos las complicaciones rutinarias con respecto a los que nos rodean sean petulantes aun así hay personas que con una mirada al cielo delatan un millón de sentimientos encontrados, relativamente efímeros, que eventualmente se detendrán con una sonrisa.
Dos jóvenes, Kim Kibum y Lee Taemin, ambos influenciados por el mundo en el cual fueron criados, sin embargo, irónicamente, no les falta nada… nada que el dinero no pueda comprar, tan materialistas se han vuelto, que ni los caramelos o juguetes sacian su sed de vivir, de eso se dieron cuenta cuando a penas tenían 8 años.
Tiempo despues, ambos se dirigían a su instituto esbozando una sonrisa triunfal, incluso un hombre maduro se quedo atontado con lo reluciente los dientes de Kibum, que no vio venir un poste y se golpeo.
Desafortunadamente, llegaron tarde, de nuevo, y el director los estaba esperando en su despacho.
En cuanto se encontraron cara a cara, ambos abrieron la puerta, la cual se empujaba hacia delante, dándole un sonoro golpe en la nariz a alguien quien venia saliendo muy molesto de ahí.
-Agh, ¡Mi linda nariz!
-¿Te pegaste?-Pregunto Taemin asustado.
-No, es que me encanta andarme golpeando.-Respondió sarcástico.
-De acuerdo.-Kibum sonrió maliciosamente y le asestó un leve puñetazo en la mejilla derecha.
-¡Oye!-Exclamó el chico sobándose su mejilla.-No hablaba enserio.
-Suficiente Lee Jin Ki, déjalos pasar.- El aludido chisteo con molestia y asintió, fulminándolos a ambos con la mirada, para luego retirarse. Ambos entraron, peleándose por quien pasaría primero, el director volvió a reprimirlos ahora a ellos. -¡Déjense de niñadas!- En ese momento ambos se sentaron frente a el. El hombre meneo la cabeza exhausto, mientras se tocaba las sienes para apaciguar la inminente migraña venidera que le ocasionaban sus propios gritos. -Escuchen.-Hablo mas tranquilo.-Ustedes son lo peor de este instituto…
-¿Cómo vamos a ser lo peor? ¡Somos lo mejor que tiene este lugar! ¿Qué no ha visto a los demás hombres? ¡Es obvio que no tenemos competencia!
-¿Tenemos? Mucha gente…-Bufo Kibum lascivamente.
-No hablo de infantilismos, sus calificaciones no acreditan para pasar el año, que esta por concluir, y no dan merito al prestigio de este instituto, debería expulsarlos ya mismo por las numerosas faltas que han juntado ambos.
-¡¡No!!- Kibum golpeo sus palmas contra la mesa exasperado.
-¡Mi madre me matara! –El hombre sonrió pletórico.
-En ese caso, me temo que deberán tomar un curso, que terminara con un evento de caridad, junto a otros estudiantes, pasaran ahí el resto de sus vacaciones y no volverán hasta juntar todos los créditos necesarios, y por supuesto que no lo disfrutaran, también tendrán clases diferentes.
En ese momento, ambos no podían pensar en otra cosa que no fuera mujeres. Se miraron sonriendo a la par y asintieron.
-¡Acepto!-Exclamaron al unísono, sorprendiendo al director, quien sonrió nuevamente.
Así paso el resto de la semana, mientras ellos disfrutaban cada día, de vez en cuando se miraban a lo lejos, como si de un enemigo se tratara.
Cuando el día tan esperado llego, llegaron en taxi con maletas a un lugar que parecía a simple vista un campamento, con cabañas rusticas e incluso establos de animales.
-Espero que no sea un campamento de matemáticas o me suicido.-Se susurro Taemin a si mismo, cargando con sus maletas. Ingresando al lugar, una muchacha le tomo los nombres y apellidos, y por supuesto, escuela de procedencia. Le indico donde dejar sus maletas y que pasara a la sala común para tomar su almuerzo.-Oye, tienes novio?-La chica lo miro azorada.
-Tengo treinta y cinco.-Taemin se quedo mudo.
-Entonces adiós.-Y la paso de largo sintiéndose aliviado.-Fiu, de la que me salve.
Tanto Taemin como Kibum, se encontraron nuevamente cara a cara en la puerta de la sala, afortunadamente era realmente extensa y no tendrían que pelearse por ver quien pasaría primero.
Ambos entraron sintiéndose los mata pasiones del lugar, para su sorpresa, se quedaron boquiabiertos, al ver una enorme cantidad de hombres medio desnudos, comiendo como caníbales.
-¡Parecen cavernícolas!
-¿Crees que conozcan los cubiertos?
-Lo dudo.-Respondió Kibum hastiado de tener que convivir con ellos.-Es raro, no veo a ninguna chica por aquí…
-Yo tampoco
-Buen día señores.-Apareció un hombre vestido de militar con traje diario.-Soy el sargento Kwon Ji Yong, y se referirán a mi como Señor Kwon.-Les extendió la mano para saludarlos, pero en cuanto ellos lo imitaron, el les dio un manotazo muy molesto.-Primera regla, nunca se igualen a sus superiores.-Se giro de vuelta a recibir mas muchachos, pero Kibum se le adelanto.
-¡Espere!…Señor Kwon… No veo ninguna chica, ¿Ellas comerán en otro lado?-El sargento sonrió de lado victoriosamente, mofándose de su inocencia.
-Aquí no admitimos mujeres.-Y sin mas se fue, dejándolos pasmados e incrédulos.
-Un verano entero…
-Sin chicas….-Completo Taemin, mientras sentía que le temblaban las manos de la impresión.
Resignados, se acercaron a la barra y cogieron una charola cada uno, la comida no se veía apetecible, parecía un revoltijo de sobras nada vistoso.
-Diugh, ¿Qué será esto?-Pregunto Taemin intentando hacerle platica, pero Kibum lo ignoro, tratando de dejarlo solo. Al adelantarse, no se fijo contra quien choco, embarrándole el estofado de comida en la ropa.
-¡Imbécil! ¡Esta es una camisa nueva!-Exclamo el chico limpiándose con las manos la comida, Kibum ni si quiera se había inmutado, pero se le notaba que se burlaba por dentro.-¿Te parece gracioso?-Tomo un poco de lo que quedaba de comida en su camisa y se la embarro en la boca.-¿Dime que se siente ahora? ¿Delicioso cierto?-Y sin mas lo empujo, alejándose de el.
-Vaya Kim, parece que comenzaste con el pie izquierdo.-Bufo Taemin, pero Kibum se alejo molesto de el, buscando como sea, encontrar a alguien tan refinado como el.-Cielos, esto no será fácil….-Hablo Taemin suspirando desganado. Cuando levanto su mirada, noto que otro chico se burlaba de el, cruzado de brazos. Se acerco hasta el indignado y le reclamo.
-¿Te parezco gracioso?-El chico frunció el entrecejo, sin ocultar su sonrisa, se descubrió la cara mandando su flequillo para atrás, y Taemin abrió sus ojos de par en par, recordando al otro chico a quien Kibum había golpeado hace algunos días…
-Así que ya me recuerdas.-Hablo Jin Ki pletórico.-Ja, quien diría que no podrías adaptarte al cambio tan fácilmente. Descuida, no te guardo rencor a ti, pero a tu amigo, ese me las va a pagar.- Taemin miro hacia otro lado.
-El… no es mi amigo…-Jin Ki sonrió.
-En ese caso, podrías ayudarme a hacerle la existencia pesada. –Taemin dudo unos segundos, pero no quería quedarse solo por todas las vacaciones, así que solo asintió, el otro paso su brazo por el cuello de Taemin agradecido, llevándolo a comer con otros compañeros suyos.
En cuanto el otro chico se dirigió al baño a enjuagarse la camisa, se encontró con un viejo amigo.
-Ey, Minho, ¿Qué te ocurrió?
-Un idiota me embarro esta porquería.-Comenzó a lavarse las manos, sacándose la camisa de encima.-Maldición, a penas vamos comenzando y ya tengo al primero a quien agregare a mi lista negra.
-Tienes suerte, yo no he tenido acción en varios días, se podría decir que me tenían en cautiverio, hay que hacerlos sufrir lo que les resta de existencia frente a nosotros.-Ambos palmearon sus manos entrelazándolas en signo de promesa
-Eso es todo Jonghyun. Desde hoy ellos sabrán lo que es sufrir de verdad.