Era su aniversario. Todo tenía que ser perfecto, todo tenía que salir bien.
Muy bien, haber…
Velas en su lugar
Listo
Chicos preparando la cena
Listo
Aromatizador de ambiente sabor vainilla
Listo
Y lo más importante y más valioso de todo su…
Reviso su bolsillo, espera… ¿dónde está? ¿Dónde ESTA?
-Jonghyun! Has visto el anillo?, no lo encuentro!-
-ah?... creo que lo vi por los muebles…- medio grito dentro de la cocina.
Corrió desesperado y comenzó a tirar los cojines de los muebles hasta dejarlos descubiertos. No había nada.
Se tiro al suelo y vio por debajo de los muebles color beige, tal vez ahí podría estar.
Nada.
-Jonghyun!-
-Maldita sea!, ahora qué?- salió de la cocina el chico de cabello blanco con la cara manchada de polvo de hornear y sus manos llenas de una masa pegajosa.
-no lo encuentro!, ahora que hago, dime dime! Viene en quince minutos!-
-que te tranquilices!, haber… yo lo vi por aca- comenzó al revisar por todas partes hasta llegar a la mesa de estar, movió los adornos del lugar y debajo de una revista yacía el objeto.
-ten- se lo dio- parece que estas muy nervioso, verdad?- se rio con sarna- quien lo diría… Choi Minho, nervioso-
-Cállate, solo quiero que todo salga perfecto, además tú también estabas así el día de tu aniversario…- lo miro de lado y frunció el ceño- o me dirás que no?-
-claro que no, Kibum y yo nos tomamos las cosas con calma, sobre todo yo…-
-KIM JONGHYUN! VEN EN ESTE MOMENTO! JINKI YA ROMPIO OTRO TAZON Y NECESITO MANOS! APURATE PERRO DESGRACIADO!- se escucho la voz del rubio, que por poco rompía las ventanas de lo fuerte que grito.
-no ves?- señalo hacia la cocina con su pulgar- lo tomo con paciencia- suspiro- ya voy honey-
-eres un arrastrado…- dijo simple el alto.
- pero un arrastrado que ama-
-KIM JONGHYUN!- chillo el menor desde la cocina.
-me voy, eso de hacer la cena es lo más difícil del mundo y lo peor es que ni lo comeré…, estate tranquilo ¿okay?- le dio una palmaditas en la espalda a su amigo.
-está bien- bajo sus hombros para relajarse un poco.
Minho se sentó en los muebles, después de que Kibum le exigiera ordenarlos como él lo había dejado antes de que se exaltara, estaba cansado no solo por todo el ajetreo también porque le dolía la maldita cabeza.
Saco el cofrecito color azul de su bolsillo y lo abrió. Un alienación de oro y plata con incrustaciones de diamante y zafiro, una preciosura. Le había costado una millonada pero aun así lo compro, todo sea por su ángel. Había esperado este día porque sabía que era especial para los dos y porque en una de las tantas conversaciones que tuvo con él, le había dicho que la mejor propuesta seria en su aniversario.
Minho sonrió, estaba muy feliz, por fin podría proponérselo a su Minnie, a su razón de vivir, al ser que ama más que a su propia vida.
Pero… estaba más nervioso que cualquiera.
¿Y si le decía que no? ¿Y si lo rechazaba?
Movió su cabeza a ambos lados y movió sus labios, molesto, eso definitivamente no iba a pasar.
Cerro los ojos e inhalo aire y lo soltó despacio, ya quería que llegara… pero… había tenido un día tan cansado… pero tenía que esperar a que llegue solo estaba a 10 minutos de llegar…
Sus ojos se abrían y se cerraban seguidamente….
Solo un poco…
-RANA!-
Dio un brinquito sobre el mueble y abrió los ojos exorbitados por la impresión. Dios mío… se había dormido, pero ahí estaba su gran amigo nada delicado Kibum para levantarlo.
-Hey rana, ya nos vamos, ya dejamos todo listo- señalo la mesa que estaba bien decorada y un par de velas en el centro- Mi bebe no tarde en venir, me dijo que estaba cerca- miro fijamente al alto y entrecerró lo ojos- Minho-
El de ojos grandes asintió – dime, que pasa-
-no la cagues, okay?-
-no soy como tu novio- le respondió el otro.
-pero se contagia, bueno me voy- los tres chicos salieron de la casa, Jinki pidiendo que le dejara pollo de la cena y Jonghyun agarrado de la mano del rubio.
Muy bien.
Estaba tranquilo ahora, después de dormir un poco se sentía mejor.
La puerta se abrió.
Al entrar Taemin, Minho sintió como todos los colores se le subían a la cara, Taemin estaba más hermoso que cualquiera, estaba bellísimo, vestía una camisa crema claro y unos pantalones blancos que ceñían sus piernas, sus mejillas coloreadas de un color naranja por el tono de las velas que reflejaban a esa tersa piel blanca.
Perfecto.
-Hola...- Taemin le sonrió levemente y camino hacia él.
Cuando el menor estuvo cerca de él, le regalo un sonoro beso en su pico y se abrazó a su cuello.
-guau… todo esto es para mí?- Minho lo abrazo de la cintura y lo atrajo para besarlo una vez más.
-esto y mucho más bebe, es nuestro día, ¿lo olvidas?- unió sus labios con los contrarios sonrió encima de ellos
Taemin se descolgó de Minho y se dio media vuelta- que bueno, porque tengo mucha hambre-
Minho sonrió y asintió, a pesar que su novio no lo haya visto. Muy bien, Minho era el momento para hacerlo, después de la propuesta y que le diga el “Si” podrían comer y hasta quien sabe, hacer otras más adelante en la noche. Porque demonios, era su aniversario, tenían que celebrarlo como se debe.
-Mi amor, necesito que te sientes un momento- empujo al pelinegro hacia la sala, mientras el otro gruñía porque quería comer de una vez por todas – tengo que decirte algo importante-
El chico asintió y con un enorme puchero se fue a la sala de estar.
-Tengo hambre~- refunfuño el menor sentándose en el mueble beige
-De ahí podremos comer bebe, primero escúchame- se sentó y acaricio las mejillas de su novio.
Se sentía en el cielo, su novio era hermoso y ese color rojizo que salía de sus mejillas molestas lo hacían ver mucho más bello y a la vez infantil.
-Minnie… yo…-
O vamos, tenía que ser valiente, no es que no haya hablado de esto con Taemin veces anteriores, habían ya planeado casarse pero, una propuesta si de formal no había. Y Minho era demasiado formal.
Vamos Minho, tu puedes.
-Escúchame atentamente y no me interrumpas está bien?-
El chico asintió.
Suspiro y salieron cosas que tal vez no pensó que salieran de su boca.
-Explicarte la verdad es muy difícil para mí. Es algo que lo he sentido por más de 5 años, es un sentimiento puro lo que siento, es un sentimiento que lo llevo en mi interior y no quiero que desaparezca. Quiero que perdure toda mi vida, porque me hace ser feliz, me lleva al paraíso, me hace sentir en paz.
No puedo creer que me lo haya guardado por más de 5 años, es demasiado tiempo, pero ¿sabes? Durante todo el tiempo nunca disminuyó ese amor que te tengo, más bien incremento, cada día que pasaba cada mirada que me dabas, todo.
Cuando te conoci éramos unos niños, personas que todavía no experimentábamos estos sentimientos que te tengo en estos momentos, pero, aun así, resaltabas, tu belleza resaltaba del resto. Tus ojos profundos, tus delegados brazos, tu cabello corto negro azabache, y sobre todo esa sonrisa, esa que me tele trasporto al infinito, ese eras tú, aquel niño hermoso que me cautivo desde un principio.
El sentimiento que te tengo es prohibido, lo sé. La gente no lo acepta, pero a mí me vale madre, a mí lo único que me importa es estar a tu lado, estar contigo por siempre.
Te amo como no tienes una puta idea, y eso siempre será así, por eso…-
Se arrodillo y cogió la mano de su novio quien lo miraba con lágrimas en sus ojos.
Voy a pedirte esta noche
de una forma diferente
que te quedes junto a mi
desde hoy y para siempre
No tendrás sospecha alguna
de mi intención y mi entrega
Será para ti una sorpresa
Tanto grata como plena
El lugar y el momento
Serán justo el indicado
Se olvidaran los clichés
Las frases propias de antaño
Sencillamente diré
Que mi vida te regalo
Que la tomes cuando quieras
Que la unas a tus pasos
Será simple de expresar
El amor que te profeso
Lo sentirás en mi voz
Y en el calor de mi beso
Y al final solo tendré
Que mirar en tu sonrisa
Para saber que me aceptas
Por el resto de tus días
Taemin, hoy te digo ¿quieres casarte conmigo?
Minho sonrió y saco el anillo de su bolsillo y se lo ofreció a Taemin.
Taemin sonrió y asintió con la cabeza, Minho se abalanzo a sus brazos y lo lleno de besos.
Caminaron entre pasos torpes hacia su cuarto, la cena, todo se iría al carajo, el necesitaba a Taemin, porque lo había hecho la persona más feliz del mundo.
Taemin dio un salto y entrelazo sus pierna en las caderas de su ahora prometido y entre besos y caricias en la espalda de parte de Minho, chocaron contra la puerta de su cuarto. Minho como pudo trato de abrir la puerta, dando empujones, pues la maldita puerta no quería abrir.
-Mph~ abre la puerta- le dijo Taemin- volviéndolo a besar.
Minho forcejeo la puerta y cuando pudo abrirla se abalanzo con Taemin en brazos hacia la cama. Cayeron a la cama uno encima del otro. Los dos tenían unas ganas inmensas de consumar su amor, Minho lo sentía en la piel, lo sentía en el cuerpo.
-Te hare mío, Taemin, solo mío- con voz ronca Minho le dio un mordisco y paso su sin hueso por todo el contorno de su oreja pequeña, se sentía delicioso se sentía bien.
-Minho… si hazme tuyo…- se sentía en el éxtasis, sentía como su pequeño daba pequeños brinquitos sobre él, aún seguían en ropas, no quería pensar en lo que sería cuando ya se hayan despojado de ellas.
De pronto una voz tenue y lejana se escuchaba a lo lejos.
-Minho... Minho…- escucho su nombre a lo lejos – Despierta, tontito durmiente~-
¿Qué carajos?
~*~*~
-Minho… Minho… - removió el menor una vez más el cuerpo dormido de su novio, movía sus labios de una manera lasciva y provocadora, sentado moviendo sus brazos como si estuviera abrazando a alguien, mientras veía como un bulto crecía y crecía bajo sus pantalones.
-Minho…- lo empujo un poco más fuerte.
-ah… Taemin… sigue así… así bebe…- jadea su novio.
¡Rayos! Estaba teniendo un sueño erótico, y él no estaba haciendo nada.
-Choi Minho!- empujo al mayor hasta hacerlo caer del sillón.
-ah!- grito el de los ojos grandes al sentir como su trasero chocaba fuertemente con el piso.
Minho abrió los ojos y vio que todo estaba apagado, solo las dos velas de la mesa encendidas y la comida servida, volteo hacia arriba y vio a Taemin mirándolo fijamente y con el ceño fruncido.
¡Se había dormido!
-¿así que teniendo sueños eróticos conmigo, no?- se cruzó de brazos y comenzó a pisar fuertemente contra el piso con uno de sus pies.
-no es que yo… tú estabas y yo… y entonces…-
No lo podía creer, entonces… ¿no había escuchado nada de su propuesta? Se había inspirado tanto en eso que ahora solo resulto ser un lindo y profundo estado de sueño que hizo su subconsciente y ahora su Minnie no había escuchado absolutamente nada?
Mierda.
Minho se reincorporo y agarro las manos de Taemin- escúchame Taemin, lo siento por dormirme pero hay algo que tengo que decirte, porque es nuestro aniversario… yo lo que quiero decirte es…-
-lo escuche todo- dijo el pelinegro- escuche tu propuesta- se solto de las manos de su novio y se llevó una a su mentón- a decir verdad, es la primera vez que te escucho hablar solo y durmiendo… y la verdad hablaste muy claro- soltó una pequeña risita.
Los ojos del castaño se quintuplicaron de tamaño.
¿Lo había escuchado todo?
-que… pero… como- no sabía cómo había pasado, como se había quedado dormido y sobre todo para no escuchar a Taemin entrar por la puerta…
EL NO TENIA EL SUEÑO PESADO!
Trato de rebobinar todo y controlarse, ¡todo lo que Kibum predijo paso! ¡Había cagado su propuesta!
-Lo siento…- bajo la mirada el alto- mi propuesta estuvo fatal… no te merezco…-
Taemin con ambas manos sostuvo el rostro de Minho he hizo que lo vea a los ojos.
-Minho lo que más deseo es estar a tu lado, y si en tus sueños te dije que sí, porque para que te hayas excitado- señalo su entrepierna que estaba más alta del monte Everest- pues aquí también te lo diré, Te amo y casarme contigo seria lo más perfecto que sucederá en mi vida, te amo Choi Minho-
Minho sonrió y saco de si bolsillo aquel cofrecito que contenía el sello que marcaría la unión de ellos dos y se lo puso en dedo largo y delgado de su ahora ya prometido.
-Te amo-
-Te amo más-