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Escucho que comentan por ahí
Que no eres para mí
Que merezco algo mejor.
Estaba muy feliz por fin hoy podría compartir con mi mejor amigo, casi hermano que soy el chico más dichoso del mundo ya que a mi lado está el mejor hombre del mundo, sé que no será fácil cuando todos nuestros allegados se entere que me casare con Thomas Kaulitz, pero sé que a pesar de todo Andreas estará a mi lado y me apoyara.
—Andy, necesito confesarte algo muy especial para mí — le dije a mi mejor amigo, mi voz sonaba llena de felicidad como nunca antes lo había estado.
—Dime Billy— enarco una ceja mientras sonreía pícaramente — ha de ser algo muy importante para tener esa enorme sonrisa en el rostro — Señalo la enorme sonrisa plasmada en mi rostro y para qué negarlo si es verdad y volví a sonreír.
—Estoy enamorado de Tom. — respondí con felicidad y con una enorme sonrisa.
— ¿Qué? — Gritó lleno de sorpresa mientras abría los ojos ampliamente— ¿Q-qué dijiste?
—Que estoy enamorado de Tom, y me casare con él— le repetí.
—¡Estás loco Bill! — Gritaba Andreas fuera de si— ¿Cómo que estás enamorado de Kaulitz? Y ¿Cómo qué te vas a casar con, con él?
Le vuelvo a repetir que sí, que estoy enamorado de Tom y que me casare con el pero parece no entenderme, más bien no querer entenderme y eso me llena de dolor.
—Si Andreas y no me importa lo que piensen— replique dolido — además, se supone que tú eras quien me iba a comprender mejor que nadie— lo señale — y mira eres el primero que me juzga como si estuviera confesando ser un asesino serial— le reclamé, mi voz reflejaba el dolor ante su falta de comprensión.
Que, que me puedes ofrecer
Que, que me puedes dar
Que, estoy pensando yo
—Bill, pero ¿Qué te puede ofrecer? Es un viej…— le lancé una mirada de advertencia ante su próximo comentario y lo entendió — ok, — corrigió rápidamente — es mayor que tú, tienes toda la vida por delante y el ya no, bueno, a lo que me refiero es que ¿Qué estás pensando? Hay hombres jóvenes que te pueden ofrecer mejores cosas, además es Kaulitz — concluyó como si eso fuera a explicarlo todo.
Me lleno de dolor que Andreas tratara inútilmente de convencerme, pero es que acaso ¿Hablo algún otro idioma y es por eso que no me entiende? Me duele su incomprensión y el que rechace a Tom es como si me rechazara a mí.
—Primero que nada no es viejo— le reproché indignado — segundo, me duele que precisamente tú no me comprendas, — le señale y sentí como las lágrimas se empezaron a acumular en mis ojos — yo que miles de veces me arriesgue por ti, que miles de veces te defendí y otras tantas creí en tu palabra y te apoye solo por el hecho de ser importante para ti, — mi voz se quebró — además ya no tengo vida si no es a su lado, Entiéndelo Andy ¡EL ES MI VIDA Y LO AMO!, Le amo y para mí no hay ningún hombre que no sea Tom.
Luche por controlarme y poder contener mis lágrimas no quería llorar delante de él y yo que pensé que Andreas, mi mejor amigo a quien considero mi hermano y única familia después de la muerte de mis padres no sea capaz de entender que en realidad amo a quien fuera nuestro profesor de música, y a pesar de lo que piense de nuestra relación no le dejare.
—Bill, yo — trató de justificarse — solo trato de protegerte no quiero verte llorar de nuevo — agacho su cabeza avergonzado.
— Pues felicidades Andreas — siseé — lo has logrado, pero descuida ya no llorare más — sonreí de lado— ah por cierto si rechazas a Tom me rechazas a mí — le vi abrir enormemente su ojos por la sorpresa — adiós Gühne.
Le oí gritar mi nombre al mismo tiempo que me desaparecía por la puerta, no quise estar ni un minuto más ahí así que me dirigí a mi departamento.
Escucho murmurar por ahí
Que, que busco de ti
Que esto es un error
Que, que me puedes resolver
Que, que me puedes dar
Al llegar a mi departamento libere mis lágrimas, como es posible que a quien pudiera confiarle mi vida con los ojos cerrados sea tan, tan , tan grrr, no sé ni que es no puede ser el mismo Andy que conozco y eso me duele, que a pesar de todo lo que pasamos juntos no sea capaz de comprender lo que yo siento, todo lo que le dije no fue para echárselo en cara, si no para hacerlo entrar en razón, pero mis esfuerzos fueron en vano ahora veo que perdí a mi mejor amigo… a mi hermano.
Escucho el sonido de la puerta abrirse y sé que es Tom ya que es el único que puede aparecerse aquí porque le otorgue una copia de las llaves, no quiero que me encuentre llorando así que cambio mi rostro por uno neutral no quiero que me pregunte como me fue, no quiero volver a llorar.
—Sé que estabas llorando — me dice calmadamente — por cierto tu amiguito Gühne fue a reclamarme.
Mis ojos se agrandan de la impresión ¿cómo es posible que haya hecho eso?
— ¿Q-que hizo? — tartamudeé.
—Fue al colegio a reclamarme, más bien a exigirme que te deje en paz que mereces algo… bueno alguien mejor — su voz cambio y eso no me gusto.
—Y ¿qué le respondiste? — creo que es la primera vez que no deseo escuchar una respuesta le veo esquivar mi mirada y me asusta, él no es así.
— Creo, qué Andreas tiene razón— admite muy a fuerzas y su voz vuelve a ser fría como cuando estábamos en el colegio.
— ¿Disculpa? ¡¿Cómo que Andreas tiene razón!? — levanto la voz y le miro su mirada era fría y trataba de ocultarme la verdad, le conozco demasiado bien para que trate de engañarme.
—Sí, él tiene razón aunque me cueste admitirlo, —hablo arrastrando las palabras — esto fue… mágico lo que vivimos, me diste una nueva oportunidad — por un breve segundo juraría que se le quebró la voz— ahora hago lo mismo te libero del compromiso.
Mis ojos se abrieron totalmente llenos de sorpresa, no lo podía creer Thomas me estaba dejando, mis ojos se volvieron a llenar de lágrimas ¿acaso no puede ver que de verdad le amo? Me acerco a él y le miró fijamente.
Cuál es mi explicación
Es sencillo lo que anhelo
Sabanas mojadas eso me puedes dar
Puedes ofrecerme el tiempo de tus madrugadas
Mi cuerpo cansar
Y que el sello de tu besos se queden marcados eso me puedes dar…
— Tom, no me importa lo que pienses— me voltea a ver y sus ojos muestran una genuina sorpresa ante mis palabras — Gühne no tiene razón, pero no te puedo forzar a que sientas algo más por mí — siento un nudo en mi garganta— si ya no me amas lo entenderé, solo dime la verdad, si ya no sientes nada más por mí yo aceptare romper el compromiso.
—Te amo más que a mi propia vida— me dijo mientras me toma suavemente de los hombros— por eso te libero, ya estoy viejo para ti— cerro los ojos y tomo un respiro— eres una excelente persona, eres un excelente músico y tienes un mundo de oportunidades por delante, además algún día encontraras a alguien mejor que yo y más joven— desvió de nuevo su mirada— ese día me dejaras y sin duda moriré.
Sonreí ante su declaración de amor es lo más sincero que le he escuchado decirme, me ama y eso es todo lo que necesitaba escuchar.
—Eres un idiota — sonreí aliviado —voltea a verme— ordene suavemente y tome su rostro entre mis manos y le obligué a verme directamente a los ojos— te amo ¿que no lo entiendes? Es sencillo lo que anhelo y no me importa lo demás, lo único que necesito de ti son sabanas mojadas después de hacerme el amor no me importan los reconocimientos ni la atención del mundo solo me importa lo que tú me puedes ofrecer y eso es el tiempo de tus madrugadas y mi cuerpo cansar y que el sello de tus besos se queden marcados en mi piel eso me puedes dar y eso es lo único que necesito.
—Es muy romántico lo que me dices ahora — su voz sonaba fría y distante— pero Bill reacciona ya no estoy joven y tu si, solo quiero lo mejor para ti.
En vez de oros y riquezas
Yo quiero amanecer con tu camisa puesta
—El que no entiende ni reacciona eres tu— le acuso con el dolor impregnado en mi voz — que no entiendes que lo único que quiero y necesito eres tu, no necesito el reconocimiento del mundo si no te tengo a mi lado para disfrutarlo, ¡por Dios! Solo quiero tenerte a mi lado, tener tus besos y tu compañía, Thomas .
— Reacciona Tom— me acerco a él y tomo su rostro— solo quiero amanecer con tu camisa puesta…
—Te amo mi Billa, es solo que tengo miedo de perderte— me toma por la cintura y me acerca hacia él —y las palabras de Andreas me hicieron pensar, yo solo…
—Ignora al idiota de mi amigo— le replico — solo dime ¿me amas o no?.
—Te amo... eres mi vida...— responde mientras captura mis labios en un tierno beso que se fue tornando más apasionado.
Sabanas mojadas eso me puedes dar
Puedes ofrecerme el tiempo de tus madrugadas
Mi cuerpo cansar
Y que el sello de tus besos se queden marcados eso me puedes dar
En vez de oros y riquezas
Yo quiero amanecer con tu camisa puesta…
—Billa..— susurra en mi oído— que te parece si empezamos con lo ultimo que dijiste— propone mientras muerde delicadamente el lóbulo de mi oído.
Sonrió ante su propuesta y le sigo el juego —ah si y ¿cual es esa propuesta?
—Mmm veamos que te parece— recorre mi cuello con sus besos —plasmar mis labios en tu piel— su voz sonó ronca y eso me éxito.
—Me parece bien, te amo mi Tommy y mi único anhelo es amanecer con tu camisa puesta el resto de mi vida…
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