Capítulo 1
- Entonces Loki Laufeyson es mi tutorado - dice un chico con lentes y despeinado. Tal chico es un genio de las matemáticas, siempre llevando buenos promedios y hasta ayudando a los maestros a dar la clase.
- Así es, Odinson- responde un hombre de edad avanzada detrás de un escritorio que indicaba que él era el director de la institución- Ese chico tiene problemas con cálculo desde hace semestres... y no habíamos encontrado a alguien que pudiera ayudarlo. El de hecho está comenzando su primer semestre en Gestión Empresarial y va a necesitar esta ayuda. Espero poder contar contigo.-
- Claro que sí señor, no dude de ello - responde el pandroso chico viendo el expediente de su nuevo alumno.
- Bueno, -el hombre busca entre uno de los cajones de su escritorio- Ten. esta es la llave, desde ahora te quedarás en su habitación, es la 79...-
- Por lo que veo es un caso difícil -frunce el ceño- suspensiones por peleas, llegar al instituto en condiciones de ebriedad y bla, bla, bla,… creo que esta vez será un reto- alza la vista el chico que detrás de esos anteojos antiestéticos ocultaba unos hermosos ojos azul índigo que demostraban su personalidad inteligente y responsable.
- Si, las matemáticas no son su único problema. Es bastante rebelde, así que ten cuidado con él, nunca puede estar mucho tiempo con su compañero de habitación, no sé qué les hace, pero después de un mes y medio, máximo dos, vienen llorando a pedir un cambio... -agrega el hombre con mirada preocupada.
- No se preocupe señor que eso no pasara - responde el chico con una media sonrisa-. Pero bueno señor, -dice mientras ve su reloj - tengo clases, así que me cambiaré de habitación en la noche. Tenga un buen día señor -termina diciendo mientras se levanta para retirarse.
- Hasta luego Thor, que tengas un buen día- se despide el hombre, que toma un expediente y empieza a revisarlo, pues como habían empezado apenas los cursos estaba hasta el cuello de trabajo.
Thor salió de la oficina con su mochila al hombro, pero mientras caminaba iba leyendo un libro de física que tenía que memorizar, no porque se lo hayan pedido, sino que a él le gustaba hacer por hobbie. Ese día vestía de forma muy natural en él, eso significaba unos pantalones deportivos anchos, una sudadera -que era el triple de él- y por debajo una camisa de manga corta que nunca se veía, ya que Thor jamás se quitaba la sudadera, y tenis blanco.
Thor usaba lentes, ya que padecía de astigmatismo y miopía. Sus padres le quisieron compran lentes de contacto, pero el chico se negó rotundamente por miedo de lastimarse los ojos o infectárselos.
El chico se dirigía a su clase de cálculo y él siempre llegaba puntual para tomar asiento hasta adelante, porque así no se distraía y escuchaba mejor al profesor, mas aparte, aunque casi no le pasaba, había compañeros que lo molestaban. Él no le tomaba importancia, ya que pensaba que gente así solo tenía dos opciones: terminar de mendigo por algún lado de la ciudad o trabajar para él.
A Thor toda materia que llevara números era su fascinación; le era un gran gusto tener que resolver problemas de física o ecuaciones en cálculo, además que le era muy fácil. Le encantaba su carrera, su meta era salir como Químico Fármaco Biólogo con honores.
Todo este estudio hacia que la vida social de Thor fuera miserable, cosa que a él no le importaba, pero se restringía mucho, como salir a fiestas de la escuela, tener más amigos de los 4 que tenía o ir a algún lugar a tomar un café o al cine. Esto a Thor le parecían cosas que quitaban el tiempo, casi siempre, si no era estar en un salón de clases o laboratorio, estaba en su cuarto metido haciendo tarea, estudiando para exámenes futuros o estudiando otras materias que no eran de su área por pura curiosidad.
Al finalizar las clases, Thor guarda sus cosas ordenadamente y sale del salón de clases de nuevo inmerso en su lectura… hasta que siente un choque en su pecho que hace que despegue sus azules ojos del grueso libro que llevaba en mano, viendo delante de él un chico de tez pálida, cabello negro y ojos verdes que parecían cuchillos mirándolo. A lo que Thor lo observo.
- Fíjate por donde caminas -dice cortante el chico de cabellos de ébano y luego continúa murmurando, sin dejar de clavarle la mirada, como si fuera un crimen haberse tropezado contra el- estúpido nerd...-
- Disculpa -responde Thor- Es que no te vi...-
- …- El chico, muy molesto lo sigue viendo. Luego entorna los ojos y se aparta del desaliñado rubio sin hacer nada más que bufar levemente, mientras camina con prisa hacia las escaleras que llevaban al tercer piso.
Thor se encoge de brazos y prosigue su camino sin despegar la vista nuevamente de su libro. Al llegar a su habitación pone su mochila en la cama y saca una maleta que se encontraba abajo de su cama. El cuarto de Thor era amplio y lo mejor era que como es uno de los mejores estudiantes tenía el privilegio de tener una habitación para él solo, cosa que no le venía nada mal, ya que podía permanecer despierto hasta altas horas de la noche leyendo algún comic o viendo alguna serie de televisión –porque sí hacía otras cosas aparte de estudiar-. Pero ahora, dado el caso que tenía un alumno, y este era todo un personaje, se veía forzado a vivir ahora con él para hacer que el chico rencontrara su camino hacia los buenos hábitos. Así que Thor, que todo tenía perfectamente acomodado, su ropa por colores -que no era mucha-, sus zapatos, sus libros, que tenía en orden alfabético, y un sinfín de materiales que usaba a menudo, ahora tenía que llevarlo a la habitación 79.
Después de varias horas, Thor termina de empacar hasta el último lápiz que se encontraba en aquella habitación que tanto le gustaba y que tenía que renunciar por ayudar a un al chico rebelde. Thor toma sus cosas, ya que al final era como 5 mochilas que podía cargar el solo. Al ver por última vez su habitación da un suspiro de melancolía, y cierra la puerta para dirigirse a su nueva habitación.
En el lugar, un chico reposaba plácidamente recostado en su cama, extendido completamente. Estaba rebotando una pequeña pelota en la pared constantemente, mientras esperaba una respuesta a una invitación de una fiesta en su móvil.
Thor se encontraba adelante de la puerta que tenía el número 79 grabado con letras de bronce. El chico espera unos minutos fuera de la puerta. Por alguna razón, sentía un poco de miedo, ya que estar con otra persona en una habitación no le agradaba mucho la idea. Al él le gustaba su espacio. Después de meditarlo lo suficiente introduce la llave en el cerrojo, traga saliva y da un suspiro de valor, gira la llave y entra a su nueva habitación. En ella encuentra a Loki, que estaba recostado en su cama. “¿Pero cómo podía estar recostado en su cama?” pensó Thor, ya que para él dormir sólo era cuando el día terminaba, y aún eran las 8:30. A esa hora el cenaba mientras estudiaba y ese chico solo estaba tirado en su cama sin que el mundo le importara. Thor entro al cuarto y coloco sus cosas en la cama y como sus modales le indicaban dijo.
- Buenas noches-.
El chico como toda respuesta dejó de botar la pelota, se enderezó y preguntó hostilmente antes de poder ver el rostro de Thor, que estaba acomodando sus cosas.
- ¿Qué haces aquí?-
- ¿Que no te informaron que vendría? - pregunto Thor volteando a verlo.
- No... No veo por qué... -antes de que terminara la frase, descubrió la identidad de su acompañante, solo para entrecerrar los ojos y pararse automáticamente, mientras lo señalaba con uno de sus dedos finos y largos- ¡Tú!
Thor enarco una ceja en desconocimiento de la actitud de su nuevo compañero al que a primera vista parecía un gato erizado cuando ve una amenaza.
- ¿Yo… qué?-
- ¿Qué haces tú aquí? -dice continuando con su hostil actitud.
- Por lo visto no fuiste avisado. Soy tu tutor y nuevo compañero de dormitorio- respondió Thor sin más, con una mirada pacífica.
- Otra vez... –cambia su mueca de evidente molestia y ríe irónicamente. Continúa sin ninguna pena en voz alta-: No se cansan de mandarme cuanto tonto se les ocurre, para que después se los regrese suplicando misericordia… Entonces, ¿tú eres el nuevo conejillo de indias nerd que viene a "ayudarme"? -en lo último pone un descarado tono sarcástico mientras esboza una sonrisa burlona.
- Pues eso creo Loki. Yo soy tu tutor, me llamo Thor y te ayudare en tus estudios, ya que eres una desgracia para esta institución y tu familia -responde Thor viéndolo con una sonrisa apacible.
- Con que desgracia, ¿eh? -intercambia su mueca por una sonrisa divertida mientras niega con la cabeza- Así que te han hablado bien de mi... Thor-.
Thor, que parecía un débil por su apariencia, era todo lo contrario. Si alguien buscaba intimidarlo de alguna manera extrema el respondía de la misma manera. No era el típico nerd que se dejaba molestar por miedo, a él si lo molestaban de forma que lo hicieran irritar extremadamente se convertía en alguien irreconocible.
- No nadie lo ha hecho, sólo se tiene que verte para saber a qué es a lo que se enfrenta- responde el otro.
- ¡Ha! Eres gracioso para ser un ratón de biblioteca -dice con su misma mueca burlona, divertido por el comentario del rubio que acababa de conocer-. Entonces no hace falta presentarme, puesto que deben haberte dado ya un expediente mío, junto con fotos y pruebas de mis gloriosas hazañas, ¿no?-
- Si me lo dieron y debo decir que estoy impresionado que tantas grandiosas hazañas hubieran venido de un chico neófito como tú- respondió el otro con una sonrisa desdeñosa.
- ¡Gracias! -exclamó el moreno ante el insulto, fingiendo halago, y poniendo una mano sobre su pecho mientras se enderezaba- ¡Es el adjetivo más lindo y original que me han puesto en mucho tiempo!-
- No hay de que -responde dándose la vuelta el rubio para seguir desempacando sus cosas, ya que había perdido mucho tiempo hablando con Loki y tenía que hacer su tarea y estudiar química orgánica.
- Bueno... Thor -dice el nombre burlonamente y con un tono retador- Un placer enorme, pero tengo cosas más importantes que hacer, en vez de impedir a un nerd reencontrarse con sus viejos amigos libros- diciendo esto se da la media vuelta y toma su celular, que hacía unos momentos había sonado.
Thor ignora lo que había dicho y sigue con lo suyo de nuevo reacomodando sus cosas como las tenía en su otra habitación, colocando de nuevo su ropa por colores, su libros por alfabetos, su computador y demás cosas en el orden que a él le gustaba. El rubio dentro de unos momentos termina por fin de desempacar y se sienta en su cama a hacer su tarea que era de cálculo diferencial, biología y física.
Loki seguía tirado en la cama, reía de vez en cuando mientras leía las tonterías que escribían sus amigos, y que podía leer a través del glorioso aparato que sostenía entre sus manos, fruto de la bendita tecnología. Aun así, no podía evitar voltear a ver de vez en cuando a su nuevo compañero de cuarto, que le resultaba peculiar, ya que no era el típico chico ñengo, flaco, lleno de barros y con ridículos lentes unidos con un poco de cinta adhesiva por el centro. Este, aunque le doliera aceptarlo, le había intimidado un poco, parecía agresivo, y estaba gordo, o al menos eso daban a entender los enormes pliegues de la sudadera que llevaba puesta.
Thor se daba cuenta de que Loki lo observaba de vez en vez, pero no le prestaba atención, estaba bastante ocupado para perder más el tiempo con él. Para el, Loki era el típico chico problema que quiere que le pongan atención, así que sus infantiles respuestas le habían sido cosas sin chiste.
Después de un rato bastante largo, Loki entró y salió del baño ya con su ropa de noche, que eran una casaca blanca y un bóxer holgado verde, para tirarse otra vez en su cama, pero tomando esta vez entre sus manos una revista de comic que estaba reposando en su mesa de noche.
Thor ahora ya estaba leyendo de nuevo el libro de física que llevaba en las manos cuando tropezó con Loki, pero un ruido hizo que despegara la vista de su libro. Era la alarma que había puesta para dormir, ya que como a veces se desvelaba mucho una vez tuvo una descompensación, así que ahora tenía que hacerse del hábito de dormirse a una hora considerable, aunque había veces que no podía lograrlo. En esta ocasión lo hizo, ya que mudarse a otro dormitorio fue algo cansad, así que entro al baño y salió con otra sudadera y pants que usaba como si fuera pijama. Así que se fue directamente a su cama y se envolvió con las sabanas. Loki sólo se limitó a dedicarle una mirada fulminante, al verlo entrar al que de nuevo dejaría de ser “su” baño, para luego meterse a su cama y seguir leyendo su comic que tanto le entretenía. En unos minutos Thor estaba profundamente dormido ya que su día había sido pesado.
El nuevo día se alzó, con la luz del sol pegando directamente en el rostro de Loki, que dormía del lado de la ventana. Profirió un pequeño gruñido, ya que detestaba que le interrumpieran su sueño. Se endereza un poco y se talla los ojos, da un vistazo a su cuarto con sonrisa satisfecha hasta que sus ojos llegan a la otra cama. Demonios. Había olvidado completamente que ese animal se había mudado anoche con él, el mismo que se había tropezado el día anterior con él. Su sonrisa se deshizo. Aun así, Loki no puedo divisar a su nuevo compañero ya que este iba saliendo del baño secándose el cabello rubio con una toalla con unos de sus pants pero con el torso descubierto, haciendo ver su muy bien trabajado cuerpo, ya que su abdomen, espalda, pectorales y brazos así lo demostraban. El moreno se talla los ojos y se pone de pie. Pensó alucinar, pues era obvio que ese no era Thor, o al menos eso quería creer. Se limita a pensar que era producto de que aún tenía mucho sueño, pero al acercarse más y más se dio cuenta de que realmente… era él. No pudo evitar quedarse mirando el abdomen del rubio sin ninguna pena, era impresionante ver que un ratón de biblioteca tuviera tiempo de ir al gimnasio, si eso era lo que hacía Thor para tener esos abdominales tan envidiables.
El rubio se da cuenta de que Loki no le quitaba la mirada de encima, así que este se pone su camisa y sudadera.
- ¿Pasa algo? - pregunta, Thor viéndolo extrañado por la forme en que lo miraba.
-Ah, -sale de su trance- no, nada... -alza la mirada y lo mira fijamente a los ojos, recobrando la mirada burlona del día anterior- No sabía que dejaban entrar al gimnasio a los nerds...-
- Yo no voy al gimnasio - respondió Thor poniéndose sus lentes.
- Ah -exclama como toda repuesta, para agregar después- ya veo. Ya decía yo… -impulsado por la curiosidad que le carcomía, pregunta, sin olvidar molestarlo- entonces, ¿haces Pilates?-
- No, salgo todas las mañanas a correr y hacer barras. Estaba en un equipo de futbol el año pasado pero me quitaba mucho tiempo, así que salgo por mi parte a hacer ejercicio- responde el rubio sin verlo ya que guardaba sus libretas en la mochila.
- Oh ya veo... interesante... -dice Loki, lo último para sí mismo.
- Bueno, pues me voy tengo clase - dice Thor dirigiéndose a la puerta.
- Adiós, Thor... -dice mientras empieza a abrir si cajón de ropa para sacar la muda de ropa que se pondría ese día.
-Adiós Loki - responde Thor saliendo de la habitación.