/ Pensamientos /
+++++++++ Separación de Escenas ++++++++++
----------- Flash Back---------
2.- AYUDA…
-¡¿Quién mete tanta bulla?! - Dijo molesto Harry y de improvisto sintió que el jovencito apuesto que había conocido esa tarde se arrojaba a sus brazos y le daba un furtivo y torpe beso en los labios, entre desesperado y acelerado, con nula experiencia.
-¡AQUÍ ESTA MI MARIDO!- Dijo Draco ante la mirada asombrada de todos a su alrededor.
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Harry estaba recostado en su cama pensando en lo que había pasado hace un rato ¿En que lio se había metido ahora? Pero no pudo negarse a seguir el juego al ver la cara de profunda desesperación del niño rubio, simplemente no pudo decir que no, además este había sido amable con él al dejarle alojarse, no tenía donde ir, por lo menos podía compensar en algo el alojamiento, ayudaría en este juego estupido, pero le tendrían que explicar bien las cosas y él también tenía que dejar TODO bien en claro en esta “supuesta” relación.
----------- Flash Back---------
Draco se había arrojado a los brazos de Harry sin pensar en nada, necesitaba tiempo para levantar la hacienda y en una medida desesperada se le ocurrió al verlo bajar por las escaleras, era el todo o nada, ojala el extraño lo ayudara y siguiera la corriente, se lo agradecería de todo corazón. No tenía en quien más acudir.
-Por favor ayúdame y sígueme el juego - Le dijo Draco tan despacito como pudo a Harry en su oído, para que nadie lo escuchara.
-¡Eso no puede ser! – Grito Voldemort furioso - Tu… ¡Yo no lo sabía!… ¡Nadie me informo! - Harry solo estaba callado observando todo en cámara lenta, viendo como el otro hombre gritaba y aleteaba alterado, también sintió el cuerpo más pequeño temblar en su brazos, rogando silenciosamente por ayuda, casi suplicando.
-¿Y por qué debería saberlo? ¡Usted no es ni mi padre, ni mi dueño para saberlo! - Le desafió Draco un vez que se soltó del abrazo, pero seguía apegado al brazo del moreno.
-¡NO! ¡TU ERES MIO! - Y trato de jalar al rubio hacia el pero una mano fuerte lo detuvo.
-Será mejor que se retire señor - Dijo Harry seriamente, saliendo de su trace - Mi “esposo” ya se lo pidió y no quiero volver a repetirlo.
Voldemort primero lo quedo mirando fijamente, con odio, como analizando al enemigo, tratando de infundirle miedo, pero no lo consiguió, el extraño era igual a el, frío como la piedra e inquebrantable al percibir emociones, dándose cuenta que esa batalla la tenía perdida salió de ahí como alma que lleva el diablo, hecho una furia ¿Cómo se le había pasado eso tan importante? ¿Cómo? Pero esto no se quedaría si, pensó decidido, había planeado esto por muchos años y Draco no se le iba a escapar. Le habían ganado una batalla, pero no la guerra. Y él era un ganador.
-¡Gracias! – Dijo sonriente Draco, dejando salir un suspiro - Yo…
-¡Será mejor que se siente y me empiece a contar de una vez todo joven! – Dijo fríamente Harry, estaba molesto - Créame que esto a mi me desagrada enormemente, sobre todo meterme en problemas que no necesito - Draco bajo la cabeza apenado, sintiéndose mal, nunca había sido su intención molestarlo – No soy ninguna especie de hermanas de la caridad ¿Le quedo claro? – Cayo al ver la mirada cabizbaja y triste del menor, vio desilusión en esos bellos ojos, guardo unos minutos de silencio y arrepintiéndose después de lo que había dicho, cambio el discurso - Lo ayudare – El moreno no supo ni porque lo había decidido tan rápidamente - ¿Está bien? Pero no espere mucho de mí, no quiero quedarme mucho tiempo aquí.
-¡Gracias! Y de verdad lo siento, pero estoy desesperado y al verlo bajando por la escalera no se me ocurrió nada mejor, si fuera por mi jamás lo hubiera metido en esto, lo siento - Y Draco le contó todo acerca de su vida y la hacienda, no le quedaba otra mas que confiar en esa persona, él era su única esperanza hasta ahora. Pero algo en su corazón le decía que podía confiar en el moreno.
-------- Fin flash back --------
Y ahí estaba empezando algo que en definitiva no tenia muchas ganas de hacer.
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-¿Esta seguro joven? - Pregunto Omar preocupado al ver a Draco mirando por la ventana pensativo.
-No lo se, pero es la única solución que tengo por el momento.
-¡Pues que dios nos ayude en eso!
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Había pasado una semana y Draco se encargo de recorrer la hacienda y comprobar en el estado deplorable que estaba, difícilmente habría una solución para eso, solo un milagro lo ayudaría, pero el no se daría por vencido, el solo pensar que Voldemort lo quería para el le daba asco, su orgullo y el esfuerzo de su padre no se lo regalaría jamás.
Harry meditaba en el sillón del living, ya que estaba tomando como su casa el lugar, si lo pensaba bien, el había salido de la ciudad para olvidar todo y por lo menos aquí estaba entreteniéndose, aunque no hacia gran cosa aparte de suponer ser el esposo de el dueño del lugar, ante todos, mas que nada a la poca servidumbre que había, y a ese Marques de pacotilla que había venido antes, los únicos que sabían la verdad eran ellos tres (Omar, Harry y Draco), lo bueno es que lo atendían bien y no se podía quejar, a su supuesto esposo apenas lo veía, salía temprano y volvía tarde, solo en las noches casi, donde lo acompañaba a comer y platicaban un rato, era un chico agradable y educado, siempre trataba de atenderlo y agradecerle por lo que estaba haciendo, y el se dejaba mimar, ya había trabajado bastante para atender antes a Cris, Cris… ¡Como lo extrañaba! Sus ojos, su sonrisa, su coquetería, por mas que pasara el tiempo jamás lo olvidaría, adoraba a ese chico carismático y traicionero que lo había abandonado, si lo comparaba con Draco eran el agua y el aceite, Draco en vez de ser un chico mimado era esforzado y amable, pero ambos (Draco y Cris) compartían dos cosas, un gran carácter y una hermosura etérea, pero para él, nada ni nadie se compararía a Cris, él era su todo, su sol que alumbraba en su cielo y sin el todo estaba en oscuridad. De tanto pensar se quedó dormido, Draco llego al rato después y se acercó a él para charlar, conversaban un buen rato y de ahí cada uno se iba para su habitación.
El rubio lo encontró dormido, lo observo atento, ese hombre le atraía, y mucho, desde la primera vez que lo vio, su cuerpo se estremeció y su corazón latió violentamente, lo único bueno de todo esto, pensaba Draco, era que lo podía seguir viendo, aunque se sentía muy culpable por haberlo metido en un problema como este, tomo una manta para taparlo, se acercó lentamente, cuando se la estaba colocando lo miro directamente a la cara y luego se fijó en sus labios.
//¿Qué pasaría si los probara?//
El nunca había besado a nadie ¿Que se sentiría? ¿Y por qué quería probarlo con Harry? ¿Por qué con él? ¿Que tenía el? Aparte de ser muy atractivo y varonil. Estaba a punto de hacerlo cuando una palabra se le escapó a Harry de los labios.
-Cris…- Y toda la fuerza que tenia Draco para besarlo se fue, alejándose del durmiente, no pudo evitar sentirse triste ¡Era un estúpido! ¡Era obvio que alguien como Harry debía tener a alguien a su lado! ¡Qué Tonto! Se fue a su dormitorio, reprochándose tal atrevimiento.
Y así Draco se fue a su cuarto, sintiendo una inmensa tristeza. Pero al fin y al cabo era mejor, suficiente tenía con levantar algo que estaba prácticamente en el suelo.
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-¡Han pasado tres semanas y todavía nada! – Grito Tom furioso.
-Lo siento señor, al parecer ese hombre no es de la región - Hablo cola gusano, su fiel sirviente, tratando de encontrar una excusa para su jefe.
-¡Pues busca información afuera entonces! ¡Para eso te pago!
-Sí, partiré hoy mismo señor, ya vera que traeré algo.
-¡Mas te vale, porque será la última oportunidad! ¡Ahora FUERA! - Le serró la puerta en la cara ¡¿Como en esas malditas semanas todavía no sabia quien era ese desgraciado que se había atrevido a tocar lo que era suyo?! ¡¿Cómo?! Pero eso no se iba a quedar así, nada, ni nadie se lo arrebataría y si Draco no estaba con el ¡No estaría con nadie más! Por qué lo prefería muerto que con otro hombre.
****Continuara****