Entré en aquel bar, del brazo de An-chan todo el que nos viera pensaría que somos la pareja ideal pero no es así. Una mirada llena de melancolía me recorría de pies a cabeza desde una mesa que se encontraba en un rincón junto a la ventana. La luz de la luna perlaba de manera impresionante y el reflejo de aquellos ojos me dejo paralizado, era como si un terrible ciclón me arrastrará en un mundo lleno de recuerdos. Esa mirada que no se cruzaba con la mía desde ya hace 2 años me hace perder el control…..Un cobarde, un completo idiota….eso es lo que soy…nunca fui capaz de poner mis sentimientos de amor en palabras o acciones…..¡Lo hice de nuevo!....Me alejé de Takano-san sin dar explicaciones. ¿Qué caso tenía seguir en esa extraña relación con él?....No puedo negar mi realidad, hay demasiadas expectativas puestas en mi y debía alejarme.
-Ricchan ¿Esta mesa te parece bien?- An-chan me pregunto y apenas pude escucharla, estaba perdido en aquellos ojos color miel que me veían a lo lejos.
-An-chan tal ves….deberíamos ir a otro lugar- No puedo ocultar mi inquietud, ella me miro algo molesta y no tuve alternativa más que permanecer en ese lugar. Deseaba voltear para ver si Takano continuaba ahí, suplicaba que así fuera pero no podía hacerlo. Sentí como el calor de mis mejillas aumentaba. Todos esos sentimientos con los que lucho día con día están ahí y nunca me dejarán tranquilo….se desbordaran tal y como lo hicieron hace doce años.
-¿Esta todo bien Ricchan-
-eee…SI….¿Porque la pregunta?- An-chan me conoce bien, debo ser tan obvio
-Es solo que desde que entramos actúas extraño, es como si algo te incomodará-
-No realmente……-
-Buenas Noches Onodera- Escuché esa voz justo detrás de mi, al mismo instante que una mano se poso sobre mi hombro “Es él…es Takano”
-Takano-san!!!!- Dije exaltado, y él se acomodo en una silla tomando un lugar en nuestra mesa sin ni siquiera ser invitado
-Usted es….era vecino de Ricchan ¿Cierto?-
-Así es….hace un tiempo que no los veía….¡Lucen bien juntos!- Hablaba tranquilo, mostrando una falsa sonrisa ante An-chan, yo lo veía de reojo se como debe sentirse….”¿Le estoy haciendo daño?”
-Takano-san….si no te importa estamos en algo importante-
-Será que ¿Podemos hablar?....¿será que puedes darle algo de tu tiempo a tu antiguo jefe?-
-Lo siento, yo en verdad….-
-Ricchan si tienen algo importante yo puedo esperar en el auto- Comenzó a tomar sus cosas y me dejó con Takano-san en aquella mesa. Mi corazón late sin control, el miedo me invade “¿Qué debo decirle?”……El silencio es incomodo, la tenue iluminación y la música de ese sitio es todo lo que nos rodea.
-¿Por qué lo hiciste?....¿Porque desapareciste de nuevo?-
-Takano-san…yo…no tenía alternativa…Ya no podía más-
-¿No pensaste en el daño que me harías?....Te lo dije…te dije que estaba asustado de morir por no ser capaz de verte nuevamente….Y no te importo- Bajo su mirada y apretó sus manos con tal fuerza que se hacía daño.
-Takano-san….Yo no quería lastimarte…nunca quise herirte-
-Pues lo hiciste….ahora debes repararlo….eres el único que puede sanar esta herida en mi corazón-
-Pero….nosotros no…..-
-Regresa junto a mi…. Yo no tengo duda de que tu y solo tu eres la persona a la que amaré durante toda mi vida….¿Tienes idea de cuántas veces repetí tu nombre en mi cabeza?...Finalmente pude decirlo de nuevo tendiéndote frente a mi….Esta vez haré todo lo que este en mis manos para evitar que desaparezcas, te quiero solo para mi….te quiero siempre a mi lado…Desde que no estas conmigo a esto me dedico todas las noches, me encierro en un bar y trato de ahogar mis penas en el alcohol…pero ¿sabes que?....No da resultado….Eres todo lo que habita mis pensamientos dese el día que desapareciste-
Takano tomo mi mano con fuerza, hace tanto que no sentía la calidez de su piel, hace que mi corazón lata más y más fuerte –Takano-san…no puede haber nada entre nosotros….ahora somos, solo un par de extraños-
-Un par de extraños que se comienzan a extrañar, un par de extraños que se han extrañado y necesitado desde la primera vez que se encontraron- “¿Cómo puede decir esas cosas en un lugar como este?”
Zafé mi mano de la suya, si las cosas continúan de esa manera todo puede convertirse en un completo desastre –Debo irme….An-chan debe estarse preguntando que es lo que pasa- me levanté de la mesa pero él me tomo con fuerza del brazo. -¿De nuevo estas con ella?- me cuestiono dejando ver la tristeza de su rostro
-Me caso en una semana- Hubiera querido no decirlo jamás, pero ya esta hecho “Lo dije”
-Mañana aquí, ven solo….necesitamos hablar…será la última vez que lo haga- me dejo ir, ni siquiera le di una respuesta y salí casi huyendo. Aquel encuentro fue todo lo que habito mis pensamientos en esa noche, quería llorar, gritar, decir cuanto lo amaba y aclarar las cosas de una maldita vez, pero no fue así.
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Aquí estoy…justo como él me lo pidió ¡Solo!....Se bien que llegue tarde, entré en ese bar y no lo encontré por ningún lado, la tristeza y el terror me invaden -“No quiero que las cosas terminen de esta manera”- Salí, subí a mi auto y fui al único lugar donde se que puedo encontrarlo.
Todo luce exactamente como hace dos años, bajé de mi auto y la lluvia comenzó a ser más intensa. Miraba expectante ese edificio en el que viví justo a su lado, mi cuerpo esta completamente mojado y el viento es frío. De pronto lo vi llegar, con sus manos en los bolsillos con la mirada baja.
-Onodera- me llamo, con un brillo especial en sus ojos y me tomo del brazo con molestia, me arrastro hasta su departamento y me aprisiono contra la puerta dándome un fuerte golpe.
-Te amo….Te amo….No te dejaré ir jamás- de pronto sus labios atraparon los míos de forma demandante, me roba el aliento, invade mi boca con los movimientos de su lengua “Es desesperante”….Lo empujé justo por el pecho y lo alejé de mi, limpiando mis labios con la palma de mi mano.
-ah..ah…Esto es imposible…yo me casaré en una semana-
-Puedes largarte entonces- Nunca lo vi de esa manera “¿Entonces me odia” Palabras frías, llenas de resentimiento, de dolor, despecho…”No puedo soportarlo, me importa demasiado”
Lo abrace por la espalda, su cuerpo esta completamente mojado, al parecer camino bajo la lluvia durante mucho tiempo. –Te amo- susurré y mis ojos se llenaron de lágrimas, Takano se dio la vuelta y quedamos frente a frente.
Habíamos estado juntos tantas veces, imaginaba que tipo de ideas recorrían su mente. En estos dos años sin él, había imaginado como me tocaba, me mimaba, como me acariciaba de una manera en la que solo Takano podía hacerlo. El se había abierto completamente, me había entregado su alma una y otra vez. “Me siento indefenso”
Quede estático sumido en mis recuerdos, la boda, mis padres, el trabajo, mis sentimientos por Takano-san. Él se acercó a mi y nuestras frentes se unieron empapadas. Sus ojos eran poseedores del mundo entero, en contraste al aíre frío que se colaba por la ventana, nuestras respiraciones eran calientes y chocaban en nuestros rostros.
Dejé de poner una barrera de fuerza entre nosotros, Takano-san enredó sus dedos en mi cabello y me atrajo uniendo sus labios con los míos “no puedo más”
Rodee su cuello con mis manos y respondí a aquel beso sintiendo la suavidad de sus labios, respondí al beso con lentitud, con dulzura, mientras su lengua rozaba contra la mía.
-¿Por qué el sonrojo?- me preguntó con su sonrisa habitual “Luce feliz”
Una vez más me llevo a su habitación y me arrojó a la cama, comenzó a desnudarme entre besos y caricias, mi piel se erizaba ante el toque de sus manos, apenas era consciente del placer que me invadía, deslizaba sus labios por cada espacio de mi cuerpo y me rodeo en un abrazo dulce, hecho un largo suspiro sobre mi oreja y lo dijo –Te amo, nunca dejaré de hacerlo, así que quédate a mi lado por siempre ¿De acuerdo?-
-………..- No pude responderle, de pronto sentí su lengua activando todos los poros de mi piel, sus labios descendían por mi vientre hasta llegar a masturbarme, me lamía, intentaba provocarme, me cubría la boca debido a la vergüenza.
-Quiero escucharte- Aumento los movimientos de su boca, puedo sentir como mi erección queda atrapada en sus labios, mis manos se encajaban en las sabanas como si tratara de desgarrarlas, inesperadamente, sentí algo de presión en mi entrada, eran sus dedos….entrando y saliendo simulando envestidas
-ahhh….Takano-san….ahh…por favor….No lo hagas al mismo tiempo- suplicaba pero él no se detuvo, era un juego de seducción.
-ahhhhh……- solté un fuerte grito y me vine en su boca, sus dedos seguían ahí dentro de mi cuerpo, haciéndome temblar, me mordía los labios pero era imposible no emitir algún sonido.
-Te amo….siento haberte dejado ir- Poco a poco retiro los dedos de mi entrada y abrió mis piernas de una manera tan gentil, nos mirábamos….”El tiene razón…..Siempre nos hemos necesitado, no somos un par de extraños”
Me tomo por las caderas y las elevo un poco ejerciendo esa presión en mi cuerpo hasta que logro entrar, mis uñas se encajaban en su espalda en cada una de sus embestidas….son aceleradas, llenas de pasión, su respiración agitada me quema en la piel, el sudor de su frente cae en mi rostro, mis jadeos eran tan fuertes como vergonzosos, Takano sonreía, parecía deleitarse con ellos, mi cuerpo se tenso al sentir como Takano-san se vino dentro de mi, llenándome por completo de él, saciando mi deseo tanto como el suyo. Se dejó caer sobre mi pecho, puedo sentir el latido de su corazón junto al mío, el roce de nuestra piel me hace pensar que es un sueño….pero no lo es.
-ahhh…Tenerte siempre junto a mi es lo único que quiero ¡Te amo…te amo Onodera!- Una vez más unimos nuestros labios en un beso lleno de pasión y sentimentalismo.
Desperté en medio de la madrugada entre sus brazos….Lo vi dormir durante un largo tiempo, lo acaricie en la mejilla y me puse la ropa.
“Este es nuestro adiós”…. Salí de ahí.
Cuando Takano despertó, extendió su mano encontrando una almohada vacía, se sentó en su cama y miro todo a su alrededor, encontró una nota, justo a su lado.
*Te amo, pero lo nuestro es totalmente imposible….es solo un sueño, la realidad es más complicada de lo que parece, intenta ser feliz sin mi que yo lo intentaré sin ti. No me busques porque no me encontrarás, quédate con el recuerdo de esta noche y trata de encaminar tu vida hacia otra dirección*
FIN