Hay una razón por la cual Draco Malfoy siempre pierde sus partidos de Quidditch contra el puto niño dorado. Y no, no es porque Potter ‘lo lleve en la sangre’. Tampoco es porque los ‘buenos’ siempre le ganan a los ‘malos’, porque todos sabemos que Draco en realidad no es malo, solo teme morir.
No, la razón es mucho mas profunda que todas esas excusas que él mismo utiliza para no permitir que nadie se entere jamás de la verdadera razón.
Esa razón que no le permite dormir bien, esa razón que siempre le distrae en los pasillos del colegio, la razón por la que Draco siempre esta detrás de Potter en la carrera para atrapar a la estúpida pelotita dorada.
La razón de que Potter dejo de llamarse ‘San Potter’, ‘El niño dorado’ o ‘Harry-Jodido-Potter’, y paso a ser llamado, mentalmente por supuesto, ‘Harry-CuloMagnifico-Potter’.
Quien podría creer que debajo –O detrás- de toda esa valentía y orgullo Gryffindor, debajo de esa horripilante ropa muggle tres tallas mayor y de las túnicas escolares, se encontraría uno de los culos mas perfectamente formados que Draco jamás haya observado, porque claro, siete años en un internado, rodeado de chicos –Si, Draco caminaba por ese lado de la acera- en las habitaciones, en las duchas y en todos lados, ¡Es imposible no observar culos!, y Draco sabia que los había de todos los tipos, formas y colores, pero esto… Esto estaba mas allá de su comprensión, ¿Cómo era posible que de solo mirar sus propios pantalones de Quidditch se imaginase el trasero de Potter en los suyos?, logrando, además, una erección monumental y una sesión de corridas interminables.
A veces, cuando todos duermen, deja correr su imaginación y se ve poseyendo ese trasero de pecado, mordiéndolo, arañándolo, penetrándolo, marcándolo, haciéndolo total y completamente suyo.
Es por esto que Draco no puede evitar quedarse atrás, las ganas de correrse esta noche pensando en Pot... cofcof... El culo de Potter, son muchos mas grandes a las de hacerse con la snitch.
*¡¡Harry Potter tiene la snitch, Gryffindor gana!!* - Se escucho fuerte y claro el grito de Thomas
-Hey Malfoy, Tengo la sensación de que te encanta morder mi polvo- una sonrisa triunfal adornaba el sudado rostro de Harry.
-Créeme Potter, que tu ‘polvo’ no es precisamente lo que quiero morder. Aunque… podríamos discutir los términos exactos de ese ‘polvo’- Contesto dando una descarada mirada al trasero de Harry. El rubor de este iba a ser una buena adquisición para esta noche y para muchas mas, se dijo Draco mientras abandonaba el campo.
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