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Hot & Cold – Red & Blue por byCalyxto

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Notas del fanfic:

Este es un fic que escribí en el 2006, y lo deje como estaba, ya que es un lindo recuerdo, como perdí mi otra cuenta, lo estoy volviendo a subir aquí sin ningún cambio, asíque disculpen los errores, pero si trato de arreglarlo se que terminare por cambiarlo y quiero que conserve su esencia… creo que es muy divertido, me gusta mucho esta historia… 

Notas del capitulo:

El triunfo de un partido amistoso, y el festejo del cumpleaños de Kogure, son excusas perfectas para irse de fiesta... copa va... copa viene... Rukawa mas por fastidio que por otra cosa, comienza a beber, él nunca había probado una bebida alcohólica, ni sus consecuencias, ... por lo que Hamanichi terminara encontrándose con un Zorrito de lo mas risueño, quien no vio nunca llamas azules, y acaso el frió no quema... Azul y Rojo ... Frió y Caliente... el frió apaga el fuego o lo enciende?.

Hot & Cold – Red & Blue

By Calyxto

 

 

 

Capítulo 1

 

Zorrito????.....

 

*******************

 

Había sido un día estupendo para el equipo de Shohoku, no solo habían ganado el partido de practica que Ansai organizo a ultimo momento con un equipo de otro distrito, sino que también festejaban el cumpleaños de Kogure "el cuatro ojos".

 

Como era sábado Mitsui había planeado festejar tanto el cumpleaños de su "amigo" como el resultado del partido, en un bar que pertenecía a su primo, estaban todos tan contentos que incluso pudieron persuadir a Rukawa para que vayas con ellos, lo que implico que cierto grupo de porristas se les uniera al igual que lo había hecho la gundam de Sakuragi que se habían unido al grupo sin ser invitados.

 

El bar en cuestión era un boliche al mejor estilo occidental, con música alta, reservados, y canilla libre en la barra para la alegría de dicho grupo problemático.

 

Todos la estaban pasando muy bien, a excepción de una persona que estaba sentada al final de la barra, escondida en un rincón tras una planta artificial, tratando de que no lo molestara unas chiquillas histéricas, y preguntándose como diablos se había dejado convencer para que lo llevaran a ese infierno.

 

Estaba rumiando algo entre dientes, que no eran exactamente halagos, para su equipo, y a si mismo por dejarse arrastrar hasta allí, cuando se acerco el barman por quinta vez para preguntarle si no quería probar algún trago, ya que consideraba ofensivo que ese muchacho solo pidiera agua mineral.

 

— Estoy preparando unos tragos con licuados de frutas, son delicioso, estas seguro que no quieres probarlos.

 

Ya era la quinta vez que le ofrecía lo mismo y estaba cansándose de ese tipo, pero prefería quedarse allí antes que aguantar a esas muchachas insoportables, ya había tratado de huir en varias ocasiones, pero sus compañeros de equipo estaban demasiado “alegres” y no lo dejaban irse, lo que aumentaba su mal humor.

 

— Si eso significa que dejaras de molestarme. le dijo con un tono no muy amable, pero por lo visto el muchacho de la barra se encargaba personalmente de la calidad de sus bebidas y no se percataba de la mirada asesina y los comentarios despectivos del muchacho, y le sirvió la bebida con una amplia sonrisa.

 

El trago permaneció frente a él, por un momento, tenia una sombrilla fucsia y el borde cubierto de azúcar; tomo la sombrilla con fastidio y la arrojo a un costado, le fastidiaba ese color tan chillón; con el dedo comenzó a quitar el azúcar del borde del vaso y a comérselo, no era afecto a las cosas dulces, pero no tenia otra cosa que hacer, a demás estaba hambriento, no comía desde el medio día.

 

Nunca había probado bebidas alcohólicas, ya que como buen deportista sabia que eran malas para la salud, aunque por lo que veía, al parecer era el único del equipo que opinaba eso. Mas por fastidio que por gusto probo la bebida, y para su sorpresa sabia muy bien, y cuando le tomo el gusto, su vaso ya estaba vacío, no se había dado cuenta que lo había bebido tan rápido y ahora sentía una sed terrible, por lo que pidió otro,... otro,... y otro...

 

 

Cuando termino la fiesta todos salieron riendo, y nadie se percato de una figura que se alejaba dando tumbos en una bicicleta.

 

Al llegar a su destino después de muchas dificultades, se dio cuenta de que esa no era su casa, así que dando un suspiro dio vuelta la bicicleta manualmente, ya que le era imposible maniobrarla, e hizo dos cuadras pero al doblar se estrello contra el cordón y cayó, el suelo se movía demasiado, y estaba tan confundido que se quedo sentado en el lugar, todo le daba vueltas y no sabia bien a donde debía dirigirse, pero eso no importaba, siempre llevaba su refugio consigo, se coloco los auriculares, y comenzó a escuchar su canción favorita, nunca había sonado tan bien ese tema, y con su corazón comenzó a seguir la letra dejándose llevar por la emoción.

 

*******************

 

Hanamichi venia riendo solo, por la calle, se había separado de la gundam en la cuadra anterior, estaba bastante ebrio, pero nada fuera de lo común, aun razonaba bastante bien.

 

Al llegar a la esquina antes de doblar para llegar a su casa, se encontró con una figura conocida sentada en el suelo, tenia la bicicleta en su regazo y la miraba con la vista perdía y desenfocada, podía escucharse la música que salía de los auriculares desde donde estaba.

 

— HEYYYY ZORROOOOO!!! . Un rostro que pensaba que ya conocía, lo sorprendió con una sonrisa, y después de varios segundos enfoco su cara, y se quito los auriculares, le sonrío amablemente otra vez y le dijo.

 

— Hola.... No recuerdo donde esta mi casa... — ^_^ y comenzó a reír — ...Oye Yo te conozco.

 

<<— **Sabia que esas cosas le hacía mal a la gente, si se escuchaba música muy fuerte, pero a este ya le había quemado el cerebro, si es que lo tenia, además ¿te conozco????? Y sonríe el idiota, que estará tramando ese Kitsune tramposo, se estará burlando del Tensai. ¬¬' ** —>>

 

— Oye zorro, que estas tramando.

 

— Siii, ya... ya sé... eres Hanamichi Sakuragi, el Tan.. tan ..ten .. Tensai, ji ji ji .

 

<<— ** ¬¬? Se habrá vuelto loco. Por si las dudas mejor me voy** —>>

 

— Oye tensai basquetbolista, espera...

 

Hanamichi se dio la vuelta de golpe para golpear a ese maldito Zorro que se atrevía a burlarse así de él pero ...

 

El Zorro trato de pararse apoyándose contra la pared, pero se le enredaron las piernas con el caño de la bicicleta y cayo de nuevo ante al atónita mirada del pelirrojo.

 

Intento pararse un par de veces mas, pero no logro ponerse de pie, así que dándose por vencido se quedo sentado en ese suelo escurridizo.

 

Unas tremendas carcajadas rompieron la tranquilidad de la noche y llamaron la atención del zorro, era Hanamichi, que se estaba desencajonado de risa, tal fue el ataque de riza que termino tendido en el suelo, abrazado a su estomago y con el rostro azulado. Mientras el otro muchacho lo miraba desorientado.

 

— Es ... ES ... Estas .. ebrio..... JA JA JA JA JA JA JA ... EL Kitsume JA JA JA JA ebrio JA JA JA JA  ni si.. ni si qui era puede pararse  ja ja hay hay hay me duele todo... me duele todo, zorr.... zorroooooo JA JA JA JA JA . Mientras se retorcía y reía en el suelo, Rukawa comenzó a reírse a carcajadas por la risa contagiosa del pelirrojo.

 

Los dos siguieron riéndose por un rato hasta que azules y agotados, trataron de recuperar la respiración. Ambos se encontraban tendidos en el piso descansando, hasta que el pelirrojo se levanto de golpe, y aun riendo un poco, quito la bicicleta que estaba enredada en las piernas del otro muchacho y tomándola del manubrio se la coloco en la espalda, con la otra mano sujeto el brazo del Zorro y lo ayudo a levantarse.

 

— Ja Ja cuanto has bebido Zorro.

 

— No lo sé, yo nunca bebo.

 

— Se nota. . . JA JA JA JA .

 

Comenzaron a caminar guiados por el pelirrojo, pero al dar solo cuatro pasos Rukawa tropezó con su propio pie y cayo, de cara al suelo, lastimándose el labio y la frente.

 

— JA JA JA JA JA Dios si que estas perdido Zorro. JA JA JA JA. Lo volvió a tomar del brazo y lo ayudo a caminar las dos cuadras que faltaban para llegar a su casa.

 

— Naaaaaaaaaaa, se que mañana me voy a arrepentir de esto, pero hoy estas tan divertido zorrito que voy a dejar que te quedes en mi casa, la verdad es que estas en un estado lamentable y hoy estoy de muy buen humor.

 

— Hanamichi, esta es tu casa.

 

— Si?.    — <<— **¿¿¿¿¿Hanamichi??????  ¬¬ si que esta muy ebrio, llamarme por mi nombre** —>>

 

— Pensé que era la mía.-

 

 ¡¿ … ?!  <<— ** ¬¬'   espero que no sea peligroso en este estado  ¡PUM!... Nop, no lo es, solo es idiota.** —>>

 

(Nota: el PUM fue porque Rukawa tropezó en la entrada y volvió a caer de cara al piso.)

 

Hanamichi volvió a ayudarlo a ponerse de pie, y lo llevo hasta el comedor.

 

— Siéntate, yo voy a prepárate un poco café.

 

<<— **Estará bien que haya traído a ese zorro a mi casa** —>>

 

Los pensamientos de Hanamichi fueron interrumpido por un golpe seco, que ya empezaba a hacérsele familiar, al voltearse se encontró con el Zorro sentado en el suelo a un lado de la silla, lanzándole a está una mirada asesina, como solía hacerlo cuando se enojaba con él, vio que Hanamichi lo observaba, y señalando la silla, le dijo con un tono serio, y de lo mas enojado.

 

— Se movió.

 

Eso era demasiado bueno para ser cierto, Hana volvió a tirase al piso y reír a carcajadas hasta que los vecinos amenazaron con llamar a la policía, si no dejaban de hacer ruido.

 

<<— **Definitivamente, si fue buena idea, llevarse al Zorrito a casa, no podía mas de la riza, además reía al pensar en la cara que pondría ese Kitsune apestoso, a la mañana siguiente cuando se diera cuenta de que estaba en su casa, y cuanto se reiría de él, al contarle de su nuevo amigo el “zorrito” y de las caídas y comentarios de pisos movedizos y sillas escurridizas.** —>> 

 

— Si, mejor te llevo a dormir, antes de que rompas algo, además ya no puedo respirar, y si sigues haciéndome reír así, harás que me echen del barrio.

 

— Si te echan puedes quedarte en mi casa Hana, eres muy gracioso, me haces reír.

 

— Si, tu también zorrito.- <<— ** Esto si que era divertido.** —>> 

 

Hana lo llevo al cuarto y lo sentó en la cama.

 

— No te duermas todavía zorrito, voy a curarte las heridas que te hiciste.

 

<<— **Momento, porque le voy a curar sus heridas, si es el Kitsune, aunque no parece que fuera él, además me agrada como zorrito, Naaaaaaa luego le diré que beba mas a menudo, como zorrito es muy simpático.** —>> (N.A.: El beber es malo, no beban bebidas alcohólicas, las bebidas alcohólicas no son buenas, no lo hagan chic@s, bueno no lo hagan muy seguido, y en exceso ^_~. ).-

 

Hana, volvió con un botiquín, ya tenia preparado un algodón embebido en desinfectante, se agacho frente a Rukawa, y levanto el cabello con la mano libre, para despejarle la frente y comenzó a limpiarle la herida, un raspón.

 

El contacto del antiséptico con la herida, le hizo sentir un poco de ardor y el zorro que contrajo la cara y cerro los ojos, Hana al verlo se agacho inconscientemente y comenzó a soplar la herida, para aliviar la comezón, y cuando se percato de lo que estaba haciendo, fijo la mirada en los ojos mas azules e intensos que había visto, el también estaba algo ebrio y se quedo observando que era lo que lo estaba poniendo nervioso, estaba agachado sosteniendo el cabello de Rukawa sobre su cabeza, y estaba demasiado cerca de su rostro, por lo que pudo notar la belleza de ese muchacho, que hacia tiempo que conocía pero que nunca lo había visto realmente, su piel era en extremo blanca y suave, pero ahora tenia un tinte rojo en las mejillas por la "bebida?", sus ojos eras impresionantes y lo miraba a él con una fijeza que parecía llevarlo al fondo del océano, su nariz era fina y delicada, y sus labios perfectos, bajo la mirada a su cuerpo era delgado pero bien proporcionada.

 

<<— **¡Diablos!,... es realmente atractivo, ahora se porque están todas locas por él.** —>> Una sonrisa de lo mas encantadora se curvo en los labios del chico moreno, con una voz de lo mas suave y melódica que lo hizo estremecer, lo llamo.

 

— Hana......— Estaba diciendo Rukawa, cuando el otro muchacho lo soltó rápidamente y dio un paso hacia atrás. — Estas bien, que pasa, por que me miras, así.

 

— Hemmm, ... No es nada, solo me sorprendí, no me había dado cuenta de lo atractivo que eras.

 

<<— **¡¡¡¡¡QUE!!!! QUE RAYOS ESTOY DICIENDO!, LO DIJE SIN PENSAR, AAAAAAAAAh MALDITO KITSUME, ACASO ESTAS TRATANDO DE SEDUCIRME, PERVERTIDO** —>>

 

Pero una vocecita dentro de él, le decía que era él el que lo estaba mirando así, y se callo y no insulto al muchacho que lo miraba extrañado.

 

— Tu también eres muy atractivo, no entiendo como esas niñas bobas te rechazaron.

 

— Si, tienes razón .... 

 

<<— **Momento..., que dijo: que el TENSAI ES MUY ATRACTIVO, Y QUE LAS CHICAS FUERON UNAS BOBAS, si hasta el zorro apestoso se da cuenta de ello, el tensai es irresistible JA JA JA JA.** —>>

 

— Si irresistible JA JA JA JA .-

 

Se sentó al lado de Rukawa abrazándolo por los hombros, definitivamente ese zorrito le caía muy bien, pero de pronto mientras reía, una mano tibia se poso en su mejilla, y al levantar la cabeza, unos labios lo abordaron arrojándolo sobre la cama, eran unos labios dulces, que masajeaban los suyos de una manera deliciosa, y una mano comenzó a deslizarse de su rostro a su pecho y su vientre, hasta perderse dentro de su pantalón, pero antes de llegar a su objetivo (N.A.:"je je" ^_~ ) una mano se cerro firme sobre su muñeca, y la retiro de ahí, y lo obligo a alejarse de aquellos cálidos labios.

 

— Que rayos crees que estas haciendo zorro pervertido.

 

— Te estoy besando.

 

— Tienes la menor idea de quien soy.

 

— Sip, Hanamichi Sakuragi, el Tensai, rey de los rebotes, ji ji ji.

 

<<—  **¬¬' me equivoque este ebrio es muy peligroso** —>>

 

— Por suerte fui yo, quien te encontró zorro pervertido, si hubiese sido una chica de seguro la violabas.-

 

El muchacho volvió a acercarse para besarlo, pero el pelirrojo se corrió de la cama, y el otro resbaló y cayo al suelo.

 

— Aunque en ese estado dudo que puedas violar a alguien.

 

— Apuestas, do’aho.

 

Dijo y lo abordo nuevamente besándolo, Hana también estaba algo ebrio y tardo varios minutos en reaccionar, pero lo tomo de las muñecas, y lo alejo de él.

 

— NO!! Zorro!, quieto! sentado!, será mejor que te acuestes, y duermas tranquilo o tendré que atarte a la cama.

 

Le dijo el pelirrojo serio, a lo que el muchacho contesto con una sonrisa que hasta un niño se daría cuenta de su intención.

 

— Vas a atarme.

 

— AAAAAAAAAAAAAHHHH!!!! Zorro pervertido!!!, en que esta pensando tu mente alcoholizada.-

 

— Ji ji ji ji.-

 

— Naaaaaaa, vamos mejor duérmete.

 

Dicho esto obligo al muchacho a acostarse y ni bien apoyo la cabeza en la almohada se durmió.

 

 

— No se porque me sorprendo de que se duerma tan rápido, si se queda dormido hasta en el suelo aunque estuviera lloviendo.

 

 

Pero Hana estaba completamente despabilado, así que tomo una ducha, y cuando comenzó a relajarse, pensó en lo extraño que había sido ese día, ya habían pasado seis meses desde que había conocido a Haruko, y el día anterior ella le había dicho que solo lo quería como amigo luego de que el se le declarara.

Sus ojos se estaban por nublar, hasta que un color lleno su mente, era un azul intenso cálido, pero porque sentía eso si el azul era un color frió, todo lo que era frió era representado por ese color, porque sentía esa calidez al recordar ese color, y porque recordaba ese color?, Azul... extiende la mano para cerrar la llave del agua, y ve en los mangos de las llaves de agua una en color azul, y otra en rojo, vez le dice a su mente, azul es frío y rojo caliente, pero al ver ese color, otra vez ese azul intenso, lo invade, y un calor lo llena, otra vez pensó, que es esa sensación?, sintió calor en sus labios, los sentía palpitar, llevo su mano a ellos, y al tocarlos, como si el solo tacto activara su mente, recordó aquellos labios cálidos, que lo llenaron de un calor ardiente, había abierto los ojos, y el azul lo invadió, eran sus ojos, miraba sus ojos, y en ellos había visto fuego, bajo su mano de sus labios pasándola por el pecho, y una corriente eléctrica lo atravesó, su cuerpo había reaccionado al recordar esas caricias, cuanto tiempo había estado besándolo, no lo sabía, su mano cerro el agua caliente, y abrió la fría, no sabia a donde quería llegar su mente, pero él no quiso saberlo.

 

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