Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

EL PRINCIPE Y EL PIRATA. por Anushiban1

[Reviews - 15]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

POR SI ES HAMBIENTADO EN OTRA EPOCA YU CON UNA HISTORIA MUY DIFERENTE A LA LINEA DE SAINT SEIYA, AUN ASI E INTENTADO MANTENER A LAS PERSONALIDADES DE LOS PROTA LO MAS POSIBLE, BESOS MARI.

Los personajes no son míos…por que si lo fueran me los patearía (robaría) y los escondería en el ropero. Gracias Kurumada,!!!!


Shun miraba triste por la ventana como tantas otras veces recordando como había sucedido todo aquello, con su hermano sentado al otro lado de la habitación revisando mapas y distintos documentos.
- deja eso ya Hyoga- suspiro el peliverde abrasando a su gran galgo, un perro negro que tenia desde niño, – si e de morir que así sea-
- no me daré por vencido- se negó el rubio y volvió a lo suyo, ese niño que estaba frente a el, aquel que se había acostumbrado a decir hermano, cuyo destino estaba trazado no merecía la suerte que le tocaba vivir.

EL PRINCIPE Y EL PIRATA.

LA ELECCION.

- BIEN- dijo el sumo sacerdote Shion envuelto en su toga blanca como la leche – hoy vamos a elegir a aquel o aquella joven que dignamente se entregara a el Kraken para salvar nuestra Isla de la cruel ira del dios Poseidón-
Shun tembló junto a su hermano Hyoga, nunca le gustaba eso, cada año se elegía a uno de sus amigos para morir, a uno de los suyos…era horrible. Se agarro del brazo de su hermano con fuerza y este le dedico una triste sonrisa.
- quiero que cada uno de ustedes se acerque a la cesta y saque las piedras, mantengan el pucho cerrado, después lo abrirán y el que posea la piedra blanca, muestra de su pureza, morirá- explico Shion, algo realmente tonto si se hace el mismo ritual anualmente. – Príncipe Hyoga por favor-
el rubio se separo de su hermano con dificultad y con paso firme se acerco a la cesta tomando su piedra, Shun no sabia a ciencia cierta el por que Kraken se llevaba a un mancebo o alguna doncella todos los años. Entendía que era una maldición, no muy vieja, tendría casi su edad; y, que se debía a que un pirata había tomado algo que no era suyo. No entendía que relación tenia esto con la isla de Andrómeda.
- Príncipe Shun-
El chiquillo obedeció por impulso, con apenas 16 años estaba acostumbrado a obedecer, no era fácil ser príncipe de su reino, con tanta ceremonia, a veces quería surcar los 7 mares y perderse en el horizonte. Se acerco a la cesta y tomo la piedra, sonrió al sacerdote y regreso a su lugar junto a Hyoga.
Así muchos jóvenes desfilaron, desde Saori, la nueva sacerdotisa, hasta Jabu su guardián, personitas muy especiales en la vida del príncipe y otras tantas que no conocía ni de vista, niños del todo el reino, niños corderitos al fin y al cabo, a punto de ser sacrificados.
- ahora abran el puño- ordeno Shion, Shun obedeció de nuevo, nunca lo escogían ni a el ni a su hermano y juraba que eso estaba arreglado, mas temía por sus amigos.
Vio su piedrita, era liza y brillante, sus ojos se abrieron como platos, jamás se lo imagino. Nadie lo hizo. La gema era de un blanco purísimo, asustado la dejo caer al piso, varios vieron el objeto estrellarse contra el suelo de arena, era una mañana soleada pero en ese momento las sombras rodearon a los presentes, su príncipe había sido electo.
Shun miro a Hyoga y luego a Shion, como podía ser? Jamás había pasado!!!
- yo tomare su lugar- se apresuro Hyoga.
- Yo lo haré- grito Saori.
Shion negó con la cabeza – los dioses han hablado, Shun será el sacrificio…en diez días el morirá-
Fue una bofetada para todos, en especial para la familia real, al final de cuentas Shun no era su hijo, no debía ser elegido ya que ni siquiera era de la isla de Andrómeda…por esa razón, y sin decirlo a nadie, Hyoga escribió una carta a la única persona que podía ayudar al joven príncipe, su verdadero hermano y un pirata conocido por su crueldad: Ikki el fénix.

- Hola- de las lianas mas altas colgaba una joven india de las tierras de África, una chiquilla de piel bronceada y enormes ojos castaños – que haces Ikki?- el capitán no contesto, en su mano una carta era estrujada, su hermano estaba en peligro, un perfecto extraño al que adoraba desde que nació, un pequeño que por su seguridad fue regalado a los reyes de la isla de Andrómeda y cuyo pasado fue atrapado por las olas del tiempo.
- Sally cambia el rumbo a Andrómeda-
- Señor…- dudo la chica – pero íbamos..-
- No escuchaste- su mirada destilo fuego, los malditos iban a entregar a Shun a una bestia para ser devorado – vamos a la isla de Andrómeda-
- Sip!!- sonrió la chica y subió por las lianas. El barco al que llamaban Atena era el mas rápido de la época, con enormes velas que se distinguían desde varias leguas y que alguna vez perteneció a la armada imperial de la isla de Andrómeda, por eso fue tan fácil dar vuelta y dirigirse a su nuevo destino, a todos los marineros les pareció rara la actitud de su capitán pero no se atrevieron a decirle nada después de que se encerró en su camarote – y a este que le pasa?- Sally encontró la hoja de papel en la cubierta, pensó en leerla pero mejor la quemo, al final de cuentas es malo leer correspondencia ajena.
- Hermano como pudiste???- se enojo Shun que ya había aceptado su destino – es un asesino, ladrón y embustero!!- estaban en el balcón que daba al muelle, Hyoga acababa de contarle a Shun que mando a llamar al pirata del fénix.
- Es la única solución Shun-
- Pero hermano que yo muera no es tan malo, no si salvo Andrómeda- gimió el pequeño – además, si dices que tienes toda esa información por que no se la a usado antes-
- Shun esta información es un secreto de familia- Le explico enseñándole el mapa – la isla de el minotauro esta muy lejos – señalo el recorrido – es muy peligrosa y se prefirió aceptar el sacrificio-
- Un pirata robo la urna sagrada de Poseidón- repaso Shun lo que su hermano le había contado – y maldijo nuestra ciudad, la oculto en esa isla y pretendes que otro pirata venga a buscarla y nos salve?-
- Shun el vendrá, yo lo se, es mi amigo-
- Si, un amigo que se fue de aquí apenas yo nací, que yo no conozco y que por lo que se a matado a mas personas de las que yo e conocido- miro a Hyoga con tristeza – sabes lo que dirán papa y mama? No lo aceptaran-
- Por eso no se los diré- sonrió el rubio – Ikki vendrá, le pagare bien – enrollo el mapa < además nunca dejara morir a su hermano>
- No lo hará – se cruzo de brazos Shun.
- Quien no vendrá?- una voz misteriosa se escucho desde la ventana y dos lianas bajaron al interior, de ellas colgaban un chico pelilila, moreno y musculoso con una mirada llena de poder y una jovencita baja y casi semidesnuda, cubierta con un par de linos amarrados alrededor de ella y con plumas en la cabeza.
- Ikki!!- saludo Hyoga acercándose a su invitado – sabia que vendrías-
- Gracias – Ikki observo al chico que estaba con su amigo, tal vez un pequeño amante de rostro perfecto y mirada esquiba – quien es este?-
- Shun…mi hermano- dijo con recelo.
- Shun…- susurro Ikki y el joven príncipe le volteo la cara, era su hermano? Ese chico hermoso de piel de alabastro y mirada enojada pero tierna, con ese cabello desordenado y verde que caía sobre los finos hombros…nunca lo vio crecer y solo sabia de el por las cartas de Hyoga.
- Hola!!!- Sally camino por la estancia buscando algo que robar.
- Quien es ella?- pregunto Hyoga y Shun temió pensar que era tal vez una pobre esclava arrancada de los brazos de sus padres para servir a tan horrible criminal.
- Es Sally- explicó acercándose a Shun – has crecido mucho-
- Yo no le conozco- negó el chico – retírese por favor, sus servicios no serán requeridos-
- Prefieres a caso morir en las manos de Kraken niño?- pregunto Ikki.
- Si-
- Ikki el cree que tu te dedicas a matar gente por placer- nervioso Hyoga se puso a sacar unas sogas – ya sabes…rumores-
- Si, los conozco – suspiro el moreno – donde esta el mapa?-
- Aquí- le extendió el papel – además de unas cuantas anotaciones que tal vez te sirvan, ya sabes, sobre uno que otro monstruo-
- Me imagino- Ikki guardo el valioso informe – Sally nos vamos-
- Si- la chica se guardo una copa de oro sin que nadie se diera cuenta.
- Ikki…otra cosa mas-
- Hyoga ya sabes el trato, te traigo la urna y me pagas, somos amigos no?-
- Si fueran amigos no le cobrarías- refuto Shun con la boquita torcida, el pirata se quiso reír.
- No es eso- enseño las cuerdas.
- Hay buenas sogas en el barco- le dijo la chica.
- No es eso tampoco…quiero que te lo lleves-
- Que?- Ikki no entendió.
- Que te lleves a Shun…temo que vengas muy tarde-
- No será que no venga- dijo ofendido el peliverde – yo jamás dejaría-
Con un gesto Hyoga le mando a callar – se que jamás lo dejarías morir, por favor…protege a mi hermano-
- Hyoga…- Shun se paralizo ante la voz de suplica de su hermano.
- Pero…-
- Si se queda morirá Ikki- acepto Hyoga – por favor- rogó.
- Entiendo- asintió el moreno y Sally rápidamente tomo las sogas.
- Pero que??- en menos de dos segundos Shun quedo envuelto en las sogas y con una tela en la boca.
- La versión oficial será que lo raptaste.
- Entiendo- rió Ikki – adiós- tomo a Shun en vilo – no te muevas mucho que puedo soltarte- alzo al chiquillo y se lanzo hacia la soga, Sally hizo lo mismo y en poco tiempo los tres ya se estaban deslizando por los aparejos de barcos para llegar al Atena. Shun se movía como un gusanito en los brazos del pirata, sin saber ni entender por que su hermano había hecho eso.
- Se que pretejerás a nuestro hermano- susurro Hyoga viendo desaparecer a los piratas con la preciada carga – GUARDIAS!!- grito y tres hombres entraron corriendo – Han raptado al príncipe Shun!! Den voz de alarma!!-
Para cuando se dio la alerta Ikki y el Atena ya estaban muy lejos, con Shun a sus pies todo atado y Sally en el timón, la tripulación estaba atónita, su capitán no era ningún secuestrador, jamás lo habían visto hacerlo en toda su vida. Pero hay estaba, con ese chiquillo a sus pies.
- desátenlo- pidió el capitán y Seiya se acerco con una daga y corto las cuerdas.
- Eres un…un…- quiso insultar Shun pero el jamás había insultado a nadie.
- Un que?- pregunto divertido Ikki.
- Un…- Shun se acerco a el y lo abofeteó – un maldito!!!-
- Que…- Ikki se acaricio el golpe – malcriado- lo tomo de la cintura y lo alzo como costal viejo.
- Bájame!!- gritaba Shun golpeando la espalda de Ikki.
- Lo que tu necesitas son unas buenas nalgadas- lo llevo hasta el interior del galeón con su tripulación atónita – te quedaras aquí- abrió una bodega – y no darás problemas que no soy niñera de nadie!!- lanzo al chico al interior – entendiste?- Shun lo miro con furia – bien- cerro la puerta y puso la traba. Luego se arrimo a la madera acariciando su mejilla, Shun tenia fuego en las venas, que mas podía tener si era su hermano? Sonrió orgulloso, seguro le daría problemas, estaba enternecido, después de una vida tenia de regreso a su pequeño Shun.
Del otro lado Shun se ponía de pie y lanzaba unas cajas hacia la puerta – regrésame a la isla!!- ordenaba – soy el príncipe Shun!!- dijo jadeante cayendo de rodillas – regrésame a mi isla- pidió – debo cumplir mi deber…- unas lagrimas corrieron por sus mejillas – no puedo dejar que todos mueran!!- sollozo – hermano por que me has hecho esto?-
A Ikki se le encogió el corazón, Shun jamás sabría que eran hermanos, por su bien y el de toda una nación. Fue a su propio camarote a matar a los demonios de su alma no sin antes advertirle a su tripulación que si alguien ponía un solo dedo en Shun estaría muerto. Shyru, Sunrey, Seiya y Mu entendieron el mensaje, Sally no…el niño estaba muy bonito y en su pueblo no desperdiciaban oportunidad…

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).