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CUANDO LA LUZ SE CONVIERTE EN OSCURIDAD por LORD GRIM

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Notas del capitulo:

Bueno en vista que durante el fin de semana proximo no actualizare ninguna de mis historias, opte por subir el siguiente capitulo de esta historia. 

En una de las carpas del lugar el joven vampiro miraba ofendido a su amigo el Duque de Trelawny, quien como de costumbre escuchaba conversaciones ajenas, su enorme sonrisa de gato Cheshire ya lo estaba cansando pero ahora tenía cosas más importantes que hacer, como conversar con su padre quien por lo visto trataba de evadir el tema a toda costa.


 


-Padre, esto no está bien desde que me convertí en vampiro nunca me había pasado esto, parecía una estúpida colegiala – dijo al mismo que cubría su rostro de la vergüenza de haber tropezado tres veces, afortunadamente la corte solo había visto la primera porque en la segunda se levantó velozmente y en la tercera estaba ya dentro de su tienda.


 


-No debes preocuparte, solo cálmate – dijo el Duque muy tranquilo al mismo que bebía un poco de te traído por su mayordomo personal, pero aun así deseaba irse debido a que…


 


-Padre, por favor no evadas el tema, se a la perfección que eres una persona muy tradicionalista y que hablar de temas relacionados al sexo es un Tabú para ti, pero es importante que me digas ¿Qué demonios fue eso?- pidió el menor mientras Undertaker trataba de contener la risa


 


-Cuida tu vocabulario Edward- regaño mirando a su familiar quien se calmó-  Está bien, - suspiro finalmente el Duque dejando su taza en la pequeña mesa que tenía a su lado – Te contare todo, como vampiro posees una elegancia, gracia y sensualidad natural los cuales están ligados a tus emociones.


 


-Mis emociones – pregunto un tanto confundido el menor al mismo que escuchaba atentamente al igual que el otro Duque invitado.


 


-Hijo nunca te has preguntado El ¿Por qué de tu perfección?, bien si no es así será un buen momento – dijo con seriedad mientras cruzaba sus brazos para comenzar a hablar – Últimamente has tenido la facilidad de componer canciones no es así- pregunto recibiendo un asentimiento – Bien… eso se debe a que ahora estas más en contacto con tu interior y tus emociones.


 


-Disculpe… Duque pero… yo no soy vampiro, sería una molestia que fueran un poco más claro – pidió el Shinigami mientras bebía también una taza de té.


 


-En pocas palabras, has logrado triunfar en todo lo que has hecho hasta ahora debido a que tus emociones son más fuertes, a cada actividad que realizas le pones todo de ti… fuerza, entrega, sacrificio, pasión  por eso consigues la perfección- miro un momento a su familiar para proseguir- los emociones han hecho que las personas logren cosas increíbles por pocos instantes u ocasiones, pero nuestra especie potencia todos esos sentimientos al extremo por eso nosotros no hacemos milagros, más bien vivimos en el milagro de la perfección.


 


-Eso ya lo comprendí pero… ¿Qué tiene que ver Eiri Yuki? – pregunto el más joven sentándose un momento para acompañar al resto bebiendo de un té


 


-Edward, dime una cosa aun amas al escritor- pregunto el Duque mirando fijamente a su primogénito quien no vacilo en contestar.


 


-No, mucho menos después de la forma en que se burló de mí- dijo sin siquiera modificar la expresión en su rostro el vampiro mayor miro su interior encontrando solo con la veracidad para después suspirar.


 


-Bien, - cruzo los dedos para para así continuar - pero a pesar de ello deseas ejecutar una enorme venganza sobre este, ¿no es así? – dijo levantándose para darle la espalda a los menores quienes le siguieron con la mirada, este levanto un poco la manta de la carpa para dirigir su mirada al escritor quien aún estaba con los otros japoneses – Edward… ten cuidado con el ese sentimiento de odio que llevas dentro, puede ser un tanto peligroso.


 


-No es necesario que te preocupes… aun cuando no ejecute una cruel venganza en su contra podre darle donde más le duele… - miro a los presentes al mismo que sus ojos se mostraban serios y sin emociones- SU ORGULLO, fuera de eso tengo bien definido el camino que  quiero seguir, - sus ojos brillaron en rojo carmín dejaban ver la seguridad de su portador por lo que el Duque se tranquilizó  – y en ese trayecto eterno no está incluido Eiri Yuki.


 


-Como tu padre te recomiendo no hacerlo me entiendes – al ver la cara de su hijo continuo –Perfecto… ahora debes hacer algo para volver a estar en control contigo mismo, no puedes dejar que ese hombre te manipule – menciono el Duque mayor al mismo que dejaba caer la cortina no sin antes dirigirle una mirada de burla al escritor quien fue ajeno a todo. – No eduque a ningún débil, me oyes.


 


-Por supuesto padre – contesto el más joven quien parecía ya estar más calmado la plática con su progenitor lo tranquilizo, debía ser más cuidadoso y no permitir que nada que lo que hiciera Yuki Eiri lo perturbara no era un humano estúpido como para dejarse llevar por los sentimientos de forma tan descuidada.


 


-Si es el caso- ahora el peli plata hacia acto de presencia al mismo que tomaba algo de la tienda apuntando al más joven – Hanga Joven Grand Chester


 


Una enorme sonrisa se mostró en los rostros de los vampiros la idea no era tan mala además un poco de diversión no les vendría mal y de paso le darían a la corte real un espectáculo diabólico.


-Esto es tan aburrido – menciono el guitarrista bostezando llevaban ya 5 horas en aquel prado donde la mayor diversión eran los pastelillos de la mesa de comida - ¿Cuánto tiempo va durar esto?


 


-No lo sé… pero estoy a punto de comenzar a tirar al aire si quiera para tener algo de diversión- manifestó el americano quien igualmente ya estaba aburrido de todo eso.


 


-K, por favor mantén la calma solamente falta un evento y nos vamos – opino el tecladista quien también ya estaba harto de tanto esperar además sus pies le dolían de tanto estar parado.


 


-Compórtense todos no quiero darle problemas a Shuichi y una razón más al miserable de Undertaker de que no pertenecemos a este ambiente – dijo el escritor quien tan solo recordaba al nombrado le llegaba un mal sabor de boca.


 


De momento se oyó un bullicio a lo lejos con tal de quitarse un poco el aburrimiento se acercaron para ver qué pasaba, al tener un vista clara sus ojos se abrieron como platos ante ellos un par de hombres se batían en un duelo de esgrima en un nivel muy superior al de las olimpiadas.


 


Era imposible ver el rostro de los combatientes pues llevaban puesta la careta así como todo el equipo de seguridad ambos eran en extremo buenos con el manejo del florete sus estocadas rápidas y certeras pero la defensa que montaban les era casi imposible impidiendo un ataque en los puntos marcados que eran todos aquellos por encima de la cintura.


 


-Por Dios – dijo el escritor haciendo que uno de los competidores se distrajera un poco haciendo que su contrincante lograra darle un toque.


 


-Toche – menciono una voz apenas audible al mismo que la corte aplaudía por las habilidades tan magistrales de los competidores quien ahora iban empatados.


 


-Punto para el Duque de Trelawny – menciono el referí señalando al nombrado quien se quitaba la careta del rostro, dejando correr su largo cabello plateado el cual estaba atado en una trenza poniendo la punta del florete en el suelo.


 


-Tal parece que estamos empatados mi buen amigo- menciono nuevamente el peli plata notando como su oponente de igual forma se quitaba la careta para revelar su rostro, una cascada negra salió por debajo para luego dejar ver a un joven muy conocido por el grupo japonés.


 


-Shuichi- gritaron recibiendo una mirada de enojo por parte de la corte quienes los callaron pues no era propio gritar en esos eventos solo aplaudir.


 


-Así es mi estimado William – dijo el cantante el cual se acomodaba su cabello atando en una cola de caballo alta – pero… a decir verdad me está resultando demasiado aburrido, no te gustaría subir el nivel- propuso recibiendo un sonrisa de su oponente.


 


-Escucho tu propuesta Ed, Has despertado mi interés- dijo notando como el nombrado se quitaba enteramente todas las protecciones del cuerpo quedando solo con un pantalón negro y una camisa blanca de manga larga con cuello alto-


 


-Un duelo sin protección alguna usando sables – dijo al mismo que enterraba el florete en el suelo para caminar hasta un poste de utilería tomando el arma nombrada apuntando a su compañero quien lo imito la idea era interesante.


 


-Acepto el desafío Edward Grand Chester – grito mientras la corte entera los miraba asombrados al mismo que preocupado en verdad el par iba a pelear de esa forma tan peligrosa.


 


El referí intento persuadirlos, pues era bien sabido que el Duque de Trelawny eran un gran duelista con todo tipo de armas, el cual era solo igualado por el Hijo del Duque de Gran Chester, aun con todos los ruegos ambos se negaron, asumiendo las responsabilidades de lo que pudiera suceder en ese encuentro además de pedirle a los presentes que no intervinieran.


 


-Listos – menciono el árbitro, quien se mantenía con la guarda en alto, pues conocía lo peligroso que eran ambos nobles.


 


-Listo- dijo Undertaker lanzando al aire su arma atrapándolo en un giro recibiendo los aplausos de los presentes.


 


-Dispuesto- menciono el excantante quien tenía el arma en los pies para dar un paso al frente levantándola con si pie desde atrás de sí mismo atrapándola en el aire para apuntar a su oponente.


 


-Bien, esgrimistas… salúdense – ante la orden ambos hicieron un movimiento, llevando el sable de un hombro a otro para después terminar al frente de cada uno - Comiencen – dijo el árbitro para después alejarse a todo lo que sus piernas le permitían, saliendo del área de combate.


 


Ambos hombres se lanzaron con ellos con toda su fuerza el choque de las armas era tan fuerte que de estas salían chispas, ninguno cedía un poco de espacio pues sabían que eso le permitiría a su oponente atacar sin más.


 


Ambos lanzaban sus mejores ataques, pero siempre eran evadidos o bloqueados por su adversario, la corte entera estaba sin habla jamás habían visto a tales duelistas ambos parecían no querer perder.


 


-Eres bueno – dijo el mayor al de cabello negro desviando un ataque que venía hacia su costado apenas.


 


-Tu tampoco te quedas atrás – dijo el otro retrocediendo mientras bloqueaba cada uno de los ataques de su oponente, aprovechando cualquier oportunidad para dar un estocada.


 


El peli plata comenzó a correr saliendo de la arena de duelo, haciendo que algunos de los presentes gritaran de miedo pues aquel par que se estaba batiendo era de cuidado, el más joven término por seguirlo peleando ahora fuera del terreno sin problema alguno, por lo visto a ninguno el cambio le inquietaba pues habilidades no cedían.


 


-Cuidado – dijo el mayor al mismo que derribaba un poco de nieve de un árbol cercano esperando que con eso lograse confundir a su rival pero no resulto.


 


-Buen intento… pero eso no funciona conmigo, deberás buscarte otra táctica – contesto el excantante haciendo que ambas armas chocaran una vez más en una danza asombrosa.


 


-Toche- dijo el peli plata haciendo que la espada del más joven saliera de sus manos pues aprovecho que la cambio de mano para ataca esta cayo en lo alto de una estructura de concreto las cual fue construido como puerta.


 


Todos vieron como el azabache corrían sin parar apoyándose de una soga para escalar la pared, seguido de su rival para evitar que recuperara su arma, cosa que no logro pues nuevamente era enfrentado por el más joven ahora el combate se llevaba a cabo en lo alto de la estructura, donde los movimientos era más estrechos debido a que ambos estaban parados en una tabla que no media más de 10 centímetros de ancho, todos los presentes estaba impresionado por el control que ambos ejercían, parecía que a pesar de lo difícil del escenario sus habilidades no habían mermado al contario parecían ser más precisos.


 


-Que me lleve el demonio – dijo el americano sin poder moverse mientras una gota de sudor baja por su cabeza, a sabiendas de todo lo que era capaz de hacer su protegido, quien por lo visto no necesitaba realmente de ello-


 


-Esto tiene que ser una broma – dijo el guitarrista tallándose los ojos esperando que estuviera alucinando, pero no fue así en verdad su mejor amigo de toda la vida se estaba batiendo en un duelo de armas como si fuera un especie de experto.


 


- Recuérdenme jamás hacerlo enojar – dijo el empresario quien pensó que el más joven solo sabía disparar a diestra y siniestra como su manager, pero que equivocado estaba por lo visto era capaz de pelear de muchas formas posibles, además de que estaba paralizado.


 


-Shuichi- dijo apenas el escritor quien miraba embalsamado a su pareja la cual juraba que ahora se veía mucho mejor con ese rostro serio pero a la vez divertido porque era evidente que lo estaba haciendo.


 


Por su parte ambos peleadores sonreían enormemente no había tenido un encuentro tan fascinante en sus vidas, ambos estaban acostumbrados a vivir una vida llena de riesgos pero ninguno de ellos represento un verdadero reto, ahora entendía porque se llevaban tan bien ambos eran en extremo iguales adoraban la aventura, la emoción de sentirse observados, la adrenalina de la batalla pero más que nada adoraban pelear, ambos eran tan sádicos que estaba más que visto que debían conocerse para ser compañeros, era el destino.


 


-Me estoy divirtiendo como nunca Ed- dijo el peli plata mientras esquivaba un combo de estocadas apenas


 


-Yo igual Will, debo agradecértelo desde que me convertí en vampiro esta es la primera vez que sonrió tanto, pero con verdadera sinceridad es emocionante batallar contigo. – dijo bloqueando los ataques del mayor mientras lanzaba unos propios.


 


-Pero esto debe terminar mi estimado amigo, hay que comprobar quien es el mejor – dijo con tristeza Undertaker quien comprendió que el espectáculo había durado demasiado y los mortales empezarían a dudar si en verdad eran personas normales.


 


-Lo sé y por eso lo lamento Will, pero debo terminarte de una vez – el más joven simplemente aprovecho un pequeño vacío en la defensa de su amigo para desarmarlo mandando a volar su arma la cual atrapo con las manos apuntándole ahora con ambas al mismo tiempo – Toche Will – ambos sables estaban en el cuello del peli plata quien simplemente sonrió.


 


-Bien hecho Grand Chester – el mayor realizo una reverencia para después aceptar su derrota argumentando que el mejor había ganado además de pedir la revancha en un futuro cosa que al otro esgrimista le encanto.


 


Ambos bajaron de lo alto una vez en suelo estrecharon sus manos para después recibir los aplausos de la corte quienes los vanagloriaban por salir ilesos sin ningún rasguño ante un combate de tan alto nivel; pronto Katherine Bennett se acercó a su prometido visiblemente preocupada por la demostración reciente.


 


-Esa… lagartona – el escritor ardía de coraje ante la escena frente de él aquello chica se le pegaba como clique a su pareja claro que este parecía no prestarle la mínima atención.


 


Pronto el heredero de los Grand Chester se disculpó ante la corte, pues debía retirarse para vestirse de manera apropiada, camino hasta su carpa donde entro de inmediato, siendo seguido por el rubio que sin ser visto por nadie logro colarse hasta la tienda.


 


-Shu- iba a llamar al más joven pero no pudo hacerlo pues una filosa hoja metálica se erguía con fuerza en su cuello al mismo que su propietario se mostraba orgulloso ante él.


 


-Sr. Uesugi, ¿A que debo esta nada grata visita de su parte? – pregunto el menor quien continuaba apuntando el arma al cuello del rubio quien intento moverse pero… - No lo haga por favor, creo que ya ha comprobado que soy un experto espadachín – Le miro con fiereza haciéndole saber que no dudaría en tomar acciones de ser necesario – Si hace un movimiento en falso… juro que lo abriré desde el estómago a la nariz – con la punta de la espada marco el camino que seguiría de ser necesario.


 


El ambiente en la tienda era muy tenso ninguno era capaz de iniciar palabra alguna el escritor por miedo a terminar desollado por el menor, mientras que el cantante hacia un gran esfuerzo por contralar su enojo hacia quien fue su más grande amor pero debía escuchar a su padre y ser más astuto.


 


-Creen que Eiri ¿Estará bien?- pregunto el empresario quien miraba la tienda del cantante a sabiendas que su excuñado se encontraba también ahí.


 


-Siendo honesto NO… - explico el manager quien en cierto modo sentía pena por el escritor, ya que había una gran probabilidad de que saliera herido de aquello, tanto física como emocionalmente pero la preocupación desaparecía comiendo pasteles de crema.


 


-Debería ir en su ayuda Seguchi- opino el guitarrista que recibió un gesto serio de su jefe algo no muy común lo que le dio a entender que su consejo no era bien recibido.


 


-Es broma Nakano… no vistes lo que Shuichi acaba de hacer, aun con todo lo que Eiri le hizo a Shuichi lo aprecio – el par lo miro bastante seriamente como dando a entender que no le creían ni una mísera palabra – Es la verdad allá ustedes si me creen o no; pero aquí el punto es que Yo no seré el idiota que este en medio de ese par. – Suspiro fuertemente a sabiendas de los sentimientos que el menor poseía por su excuñado los cuales no eran nada alentadores – En verdad llenaste su alma de odio Eiri, - fueron sus pensamientos sintiendo lastima por todo. 

Notas finales:

Bueno eso es todo por el momentos, he de avisarles que el ultimo capitulo de esta historia fue terminado desde enero de este año, sin embargo no me ha sido posible subirlo de manera constante, el motivo es que espero que este fic tenga mas audiencia, solo eso. 


Bien les envió un saludo y hasta la proxima. 


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