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Siempre Hay Fragilidad por RozenDark

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Notas del fanfic:

Espero que les guste y que no sean tan malos porque es mi primer fic de gravitation

Notas del capitulo:

Espero que les guste jejeje
Los personajes son propiedad de su respectivo autor y sin mas que decir les invito a leer

"Siempre Hay Fragilidad"

 

~°ɞ°~ღ~°ɞ°~

 

Ya era madrugada, se supone que no debía de haber ningún tipo de ruido o sonido, debido a que todas las personas se encontraban durmiendo tranquilamente, pero en el departamento de cierto escritor era todo lo contrario. Justamente el afamado escritor de novelas románticas, Yuki Eiri y su pareja desde hacía ya tres años, el famoso vocalista de Bad Luck, Shindo Shuichi, se encontraban en la cama haciendo el amor, o al menos eso se decía el peli rosa, porque lo que parecía aquel acto, era todo menos amor.

El rubio se encontraba dentro del peli rosa, dando fuertes y dolorosas embestidas, mientras que el pobre chico se encontraba en posición de a cuatro, tratando inútilmente de resistir el terrible dolor que su amado le causaba. Después de todo, era normal sentir dolor después de tres horas haciéndolo una y otra vez, y parecía que el escritor no se cansaba, ni siquiera le daba a su pobre amante un poco de descanso y tiempo para reponerse del dolor y ni que decir de la manera tan ruda y brusca en la que lo hacía.

 

—Ahhhhh...Yu...Yuki...ya no más...por favor. —Suplicó entrecortadamente el muy cansado y adolorido peli rosa, mientras trataba de sostenerse de la base de la cama, en un inútil intento de acomodarse mejor.

—El escritor gruño con molestia y empezó a darle a su amante, más fuerte todavía. —Shuichi...no seas llorón...aguanta como hombre. —Respondió con frialdad, dando una y otra vez en aquel punto que hacía que el peli rosa delirara de placer, solo que ahora deliraba, pero de dolor.

 

~ஐ~

 

Aquel acto se repitió una y otra vez hasta las cinco de la mañana, cuando el escritor por fin se cansó. Dándole por fin un respiro al pobre y agotado muchacho, claro que debido al dolor se desmayó, desconectándose de todo a su alrededor, lo último que sus morados ojos vieron, fue al escritor ya vestido y yéndose, dejándolo a él solo en la completa oscuridad.

Durante cuatro horas, Shuichi pudo dormir a penas, debido al dolor, los rayos del sol que entraban por la ventana se encargaron de despertarlo. Lo primero que vio fue el reloj, dándose cuenta que ya eran las nueve de la mañana, por suerte para él era domingo y no tenía que ir a NG, de todos modos, aunque tuviera que trabajar no creía poder levantarse, pero con toda su voluntad se levantó con mucho trabajo y fue a bañarse, claro que cuando entro y vio su desnudo cuerpo, se deprimió al verse lleno de marcas rojas y toda clase de moretones producto del salvajismo con el que lo tomaba su amado, pero decidió que mejor se bañaba y desayunaba, ya luego hablaría seriamente con su rubia obsesión.

 

~ஐ~

 

El escritor trataba inútilmente escribir lo que sería el prólogo de su siguiente novela, el problema era que no sacaba de su mente la forma en la que trato a su baka, es decir, parecía que alguien hubiera violado al pobre peli rosa, esa no era su intención, pero desde hacía un mes había estado escuchando críticas y toda clase de chismes sobre su relación sentimental y ni que decir de la palabrería de su cuñado. Porque precisamente el presidente de NG Records, había estado insistiéndole en que deje a su bola rosa y que mejor se case con una buena mujer y forme una familia, cosa que molestaba al escritor y esa era  la verdadera razón que lo agobiaba y hacía que sin querer, se desquitara con el pobre Shindo. Dejo de pensar en todo eso, simplemente no pudo seguir con sus tormentosos pensamientos, porque escucho que alguien tocaba la puerta, ya sabía quién era, pero por alguna razón puso una mala cara y su mirada se tornó fría mientras abría la puerta con molestia y veía con enojo a su indefenso amante, el cual comenzó a temblar al verlo.

 

— ¿Que rayos quieres Baka? —Preguntó el escritor con enojo.

—El peli rosa temblaba, por alguna razón sentía miedo de su amado, pero decidió ser valiente y hablar seriamente con el rubio escritor. —Yuki...no sé porque estas molesto, tampoco sé si es conmigo o por algo que hice, pero quisiera que confiaras en mí y me lo contaras, tal vez si hablamos solucionemos nuestros problemas. —Hablo suavemente el nervioso peli rosa.

—Mira Baka, primero explícate bien porque que yo recuerde no estoy molesto por nada. —Respondió secamente.

—Hablo de tu manera de ser conmigo...últimamente a la hora de hacer el amor, tú eres muy brusco y salvaje...y quisiera saber si es mi culpa o estás molesto, necesito saberlo, porque la verdad me lastimas mucho. —Explicó con detalle mientras su mirada se tornaba triste.

—El escritor sintió una inmensa culpa, en verdad quería decirle a Shuichi la razón de enojo, pero su orgullo se lo impidió por lo que encaro al menor con molestia. —Bien te lo diré...se supone que eres un hombre y como tal, debes aguantar el dolor. —Externó furioso. —No eres frágil, ni delicado para tratarte como una mujer, así que no te quejes, porque bien que te gusta y si eso era todo discúlpame, pero tengo mucho trabajo, así que ya no me molestes más. —Fríamente le escupió aquellas palabras, para después entrar a su oficina y cerrar la puerta en la cara del menor.

 

Shuichi solo suspiro con derrota, su intento de conversación no había funcionado, así que mejor fue a buscar algo para el dolor y seguir durmiendo.

 

~ஐ~

 

Ya en la noche,  paso lo mismo que en la noche anterior. Yuki llego de repente, con una mirada llena de lujuria y pasión, y como ya era costumbre desde hacía un mes, tomo a Shuichi como suyo de una manera brusca y ruda, claro que esta vez termino alrededor de las dos de la mañana, pero para el peli rosa  eso no fue un alivio, porque esta vez el escritor fue más salvaje todavía, al parecer su intento por descubrir que molestaba a su amado escritor solo lo hizo enojar aún más y ahora mismo el peli rosa estaba pagando con creces, por lo que se tomó una pastilla para el dolor y decidió dormir porque sabía que tenía que levantarse temprano para ir a trabajar y no podía faltar.

Ya en la mañana los rayos del sol fueron los encargados de despertar al peli rosa, el cual en cuanto abrió sus ojos y no pudo evitar levantarse de manera rápida e ir corriendo al baño a vomitar, cosa que preocupo al escritor que por orgullo no quería aceptar que por su culpa su Baka estuviera enfermo. En cuanto a Shuichi, el pobre termino de devolver hasta lo que no tenía, se lavó los dientes y se bañó, luego se vistió con un ajustado pescador negro, un suéter ligero de color morado y unos zapatos blancos, luego desayuno y se fue con prisa hacia NG, después de todo lo quería era que sus amigos no descubrieran lo que pasaba entre su amado y él.

Ya en el estudio de NG, donde el resto de Bad Luck practicaba, mientras que su querido manager les apuntaba con su amada magnum, llego el muy agotado Shuichi.

 

—Buenos días. —Susurró el peli rosa sin ánimo alguno.

—Hiro se preocupó por la forma de actuar que Shuichi tenía desde hacía un mes. — ¿Te sientes bien Shu-chan? —Preguntó con preocupación.

—El peli rosa sonrió levemente. —De maravilla. —Respondió en susurro.

 

~ஐ~

 

El escritor recibió la inesperada e indeseada visita de su muy "apreciado" cuñado.

 

— ¿A que debo tu visita...Tohma? —Preguntó el escritor con molestia para después darle una calada a su cigarro.

—Sabes muy bien a que vine...como siempre vine a tratar de hacer que entres en razón...deja a Shindo-san, él te hace mal, es decir, tu siempre te quejas de como es y le dices muchas cosas horribles, además de que por él, siempre sufres de estrés, creo que es mejor que te busques una buena mujer y formes una familia, cosa que con Shindo-san no lograras. No creo que debas preocuparte por él, después de todo es como todos dicen, él es un hombre y como tal entenderá y sabrá salir adelante. —Hablo el mayor con una inquietante frialdad.

—Yuki se molestó más de lo que ya estaba, como odiaba que las personas se metieran en su vida y más si se trataba de su cuñado. —En primer lugar a ti que te importa mi relación con Shuichi, en segundo lugar yo lo dejare cuando se me dé la regalada gana y no cuando tú quieras y en tercero ya lárgate de aquí. —Dijo completamente enojado mientras empujaba fuera a su cuñado.

—Eiri-san piensa bien lo que te dije. —Susurró Tohma para después irse del lugar, dejando al escritor pensando en lo que le habían dicho.

 

~ஐ~

 

En NG Records todo era un lio porque cada vez que iban a comenzar con el ensayo, Shuichi iba a devolver todo lo que había comido y parecía no mejorar, razón por la cual K decidió que Shuichi mejor se retirara y se tomara el día siguiente para reponerse, cosa que el peli rosa hizo de inmediato y es por eso que ahora se encontraba frente del departamento que compartía con el escritor, pero antes de entrar se detuvo, tenía miedo de entrar, no quería que su amado lo lastime como ya se le había hecho costumbre, ni modos tenía que entrar y descansar para poder trabajar como se debe, por lo que suspiro con derrota y entro, encontrándose con Yuki esperándolo en el sillón.

 

— ¿Molestando tan temprano? —Preguntó fríamente el escritor.

—Shuichi se tensó por la manera en la que Yuki le hablo. —Lamento si te molesto tan temprano...es que en todo el día no he parado de  vomitar y sentirme mareado, así que K-san decidió darme el resto del día y mañana para que yo consulte y me reponga. —Respondió nerviosamente el peli rosa.

—Al escuchar las razones que su Baka le daba, el escritor se sintió como un bastardo porque seguramente Shuichi estaba enfermo por su culpa, pero luego recordó las palabras de Tohma y se enojó terriblemente, ocasionando que el que pague las consecuencias sea Shuichi. —La verdad no me importa lo que pase contigo, es más sabes que...como te quejas de cómo lo hacemos pues creo que es momento de que acabemos con toda esta estúpida relación y te vayas de una buena vez de mi vida. —Dijo fríamente mientras veía a Shu con desprecio.

—Shuichi abrió los ojos a mas no poder, no lo podía creer, su amado le decía que no quería nada con él, eso sí que le destrozaba el corazón, pero no lo iba a permitir, haría lo que fuera, aunque eso signifique que Yuki le haga daño, así que con decisión abrazo al rubio de manera posesiva y lo miro de manera suplicante. —Por favor...no me dejes Yuki. —Suplicó mientras de sus hermosos ojos salía un mar de lágrimas. —Te prometo que ya no me quejare...no importa cuánto me duela, con tal de estar a tu lado...yo sé que tarde o temprano tu llegaras a amarme como yo a ti y sé que cambiaras tu forma de ser conmigo, pero para eso tengo que estar a tu lado y si eso significa sentir mucho dolor yo estoy dispuesto a aceptarlo. —Se expresó con mucho dolor mientras se aferraba fuertemente a su amado.

—El escritor se sentía como un maldito bastardo, claro que él no quería separarse de su Baka, lo amaba con locura, pero eso no cambiaría el hecho de que tenía que soportar los parloteos de su cuñado, el cual no estaba de acuerdo con su relación y ni que decir de todas las críticas de las personas que no entendían su relación y juntando todo eso  con el estrés de su novela y los recientes recuerdos de su sensei, todo eso lo estaba pagando su pobre amante, el cual no tenía culpa alguna, pero como siempre su orgullo pudo más y como ya se había hecho costumbre, se desquito con el pobre Shuichi. —Si así lo quieres me parece bien pero, con una sola queja de dolor tu tendrás que irte. —Advirtió fríamente el escritor para después tomar con fuerza el brazo del peli rosa y jalarlo hacia la habitación.

 

 

~ஐ~

 

Cuando llegaron a la habitación, Yuki le quito la ropa al menos de una manera rápida y desesperada, para después quitarse la suya propia de igual manera, luego empujo a Shuichi a la cama y lo giro para que quedara boca abajo.

 

—Sabrás que en nuestro trato yo no debo ser suave, lo que significa que yo no voy a perder tiempo en prepararte. —Hablo con frialdad, una frialdad que hacía que Shuichi temblara.

—Lo sé...y yo lo acepte, así que por mi parte tú ya puedes comenzar. —Susurró con decisión.

 

El escritor no espero más y se posiciono encima del peli rosa, después tomo su miembro y lo acerco a la entrada del peli rosa, para que después entrara de una sola estocada, dañando horriblemente al pobre Shu, el cual se mordió el labio inferior para evitar gritar.

 

—Tan...estrecho como siempre. —Dijo de manera entrecortada para después comenzar a moverse de una manera rápida, ruda y salvaje.

—Ahhh...ahhh...ahh. —El peli rosa gemía sin parar, no podía evitarlo, le dolía a horrores, pero aun así se aguantaba, no solo por lo que le dijo Yuki, sino porque en verdad no quería perder a su verdadero amor. — “Aunque no lo creas Yuki...siempre hay fragilidad...seas hombre o seas mujer”. —Pensó el peli rosa con tristeza. —AHHHHHHH. —Grito de dolor el peli rosa al sentir que el rubio había tocado su punto "dulce". — “Ya...no puedo más, pero si me quejo...Yuki me va a dejar y yo no lo soportaría”. —Pensó con angustia y dolor, el cual se intensifico, pero no donde el escritor le daba, por alguna razón sintió un inmenso dolor en el estómago, era tanto el dolor que no pudo evitar hacer lo que no quería. —Para...por favor...detente Yuki...me duele...me duele mucho. —Suplicó lleno de dolor.

—Yuki se enojó, no se supone que Shu lo amaba tanto como para aguantar el dolor, entonces, ¿Por qué se quejaba y le rogaba para que parara?, eso es lo que se preguntaba el escritor y por eso en lugar de detenerse comenzó a darle más fuerte aun. —Pues lo siento, pero no me detendré. —Dijo con molestia.

—Yuki...por favor...ya no más... —Rogó completamente adolorido. —¡¡AHHHHH...DUELEEE!! —Grito desgarradoramente para después caer desmayado.

—Al escuchar el terrible grito y ver como Shuichi se desvanecía. Yuki se detuvo y salió del interior de su amante, pero al hacerlo se preocupó, ya que de la entrada del peli rosa había rastros algo alarmantes  de sangre, cosa que lo alarmo. — ¡¿Que estupidez hice?! —Preguntó con desesperación mientras se vestía para después ponerle un bóxer al inconsciente muchacho y una de sus camisas para luego tomarlo en brazos. —En verdad lo siento Shu-chan. —Susurró con arrepentimiento para después salir de su hogar hasta llegar a su auto, primero puso a Shu con mucho cuidado en el asiento trasero y luego se subió el mismo en el de conductor.

 

~ஐ~

 

El escritor manejo como loco, estaba muy preocupado, tanto que cuando paro en un semáforo no le importo pisar el acelerador cuando vio que su Baka estaba sudando mucho y su piel estaba muy pálida. Al llegar al hospital, ni se preocupó en estacionar bien su auto, salió y tomo a Shu en brazos, para que después entrar al lugar y pedir ayuda con urgencia. Un doctor y unas enfermeras que iban pasando por el lugar no dudaron ni un segundo en llevarse a Shu a urgencias, dejando a Yuki muy preocupado.

Pasaron varias horas, al escritor no le quedo de otra que avisarle a los amigos de su Baka y para su desgracia, su cuñado se enteró, así que también se encontraba en el lugar.

 

—Yo te lo dije Eiri-san, pero como siempre no quisiste escucharme. —Le dijo Tohma de manera seria.

—Yuki se acercó a Tohma e hizo algo que nadie esperaba. Golpeo fuertemente el rostro del mayor. —¡¡YA CALLATE!!—Grito con furia. —Creo que el único que me estorba y me molesta en la vida eres tú y nada más que tu Seguchi. —Rebatió con furia para después alejarse.

 

~ஐ~

 

Pasaron más horas, el escritor estaba muy preocupado, ya no le importaba mantener su orgullo, ahora lo que más le importaba era ver a su Shu sano y salvo. Iba a exigir respuestas, pero vio que el doctor que se había llevado a su Baka, así que se le acerco.

 

— ¿Cómo esta Shuichi? —Preguntó preocupado.

—Shindo-san está estable, pero quisiera hablar con usted en privado. —Dijo seriamente el doctor.

—…—Yuki asintió en silencio y siguió al doctor hacia un consultorio.

—Voy a ser directo con usted Yuki-san, usted y Shindo-san no pueden seguir con ese ritmo tan agresivo y salvaje, no solo por la salud de Shindo-san, sino por la del bebe. —Dijo con seriedad y al ver la confusión del escritor decidió seguir hablando. —Cuando dije bebé fue porque, aunque no lo crea Shindo-san está esperando un bebé, y eso es porque el joven es uno de los pocos hombres que nacen con el don de engendrar vida en su interior, a estos hombres se les denomina como donceles y Shindo-san es un doncel. —Explicó seriamente.

—El escritor se sorprendió, su Baka estaba embarazado y él lo había estado tratando horriblemente, pero al recordar lo último que le hizo se asustó. — ¿Y cómo están Shu y mi hijo? —Preguntó con preocupación, temía haber causado más daño a ambos.

—Ambos están bien, pero debido a las heridas de Shindo-san  y la cantidad de sangre que perdió, el joven tendrá que dejar de trabajar hasta que lo indique, además de comer saludable, no hacer ningún esfuerzo, ni tampoco tener disgustos, siguiendo estas indicaciones, él y su bebé estarán como nuevos, por el momento deberá quedarse aquí, pero si quiere puede pasar a verlo.

—El escritor entro y se acercó a su bola rosa, el cual estaba despierto y viéndolo con temor. —Shu...mi Shu, lamento el daño que te cause, a ti y a nuestro hijo. —Susurró con arrepentimiento mientras acariciaba el vientre de su Baka.

—Shu comenzó a llorar, en verdad que era un tonto y lo sabía muy bien, pero aun así perdonaría a su amado, después de todo al ver esa dorada mirada supo que el escritor decía la verdad. —Te perdono porque sé que estás diciendo la verdad, pero si vuelves a hacer algo como esto...yo no te perdonare y me llevare a nuestro hijo lejos de ti. —Le hizo saber  con completa decisión.

 

Yuki asintió y luego se acercó a su Baka y le dio un apasionado beso en los labios, luego le conto la razón por la que estaba molesto y como siempre su baka supo comprenderlo. Pasó un buen rato con su amante y después fue a dar las noticias a los que estaban afuera y en cuanto Tohma supo lo del embarazo decidió que mejor dejaba las cosas como estaban, sino quería ganarse el completo odio del escritor.

En cuanto al escritor, claro que no volvería a hacer  tal cosa y tampoco se dejaría llevar por las demás personas, había aprendido su lección...Siempre hay fragilidad...sea hombre o sea mujer, así que por el bien de su Baka y de su hijo decidió cambiar su forma de ser y tratar con el amor que se merecía a su muy querido Shuichi.

 

 

 

 

 

FIN ɞ°~

Notas finales:

Espero que les hay gustado y que esperen por mi proximo fic de este mismo anime jejeje
Chau chau


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