Siente la respiración cortarse de a poco, sus parpados se mueven lenta y pausadamente, sus labios se entreabren de a poco, y siente sus latidos descendiendo en un triste y ahogado sonido, sus tibios dedos acarician con suavidad la fotografía a su izquierda, y parcialmente su mente se llena de recuerdos, recuerdos de esos días soleados en los que sonreían, recuerdos de esas enigmáticas horas en el sofá charlando por cualquier ocurrencia, recuerda esos amargos días de soledad cuando Kyuhyun estudiaba o trabajaba, y recuerda su ruptura, y lo permite, ya no lucha por detener sus recuerdos, pues es sadomasoquista, y le gusta sentirse tenuemente querido, le gusta recordar como una linda relación, no como un chiste, le gusta cómo se siente recordarle, sus iris se inundan de lágrimas, y su mano se empuña, haciendo que más sangre brotara de su muñeca, esas saladas gotas de agua, amargas y desoladas, llegan a un triste destino hacia el fino suelo de cerámica, mezclándose con el oscuro carmesí de su sangre, una larga y profunda herida recorre gran parte de su muñeca, y desmoronándose, deja que esa coraza de resignación se rompa, llora por odio, rencor, asco, pero no hacia Kyuhyun, se odia a sí mismo, se tiene rencor, le da asco su cara, su cuerpo, y por más patético que suene, llora por amor, si, por que Sungmin odia admitir que una parte de él se rompió al verlo sonreír por Seohyun, verle feliz le desagrada, Sungmin le amaba, y el solo le engaño, lo tiro cual basura, detesta admitir que cambiar tanto por alguien es un completo desperdicio, detesta verlo amarla, porque Kyuhyun le prometió amor eterno, le prometió sonrisas y felicidad, y solo recibió promesas rotas y sonrisas amargas, y aunque está débil, Sungmin ríe, ríe de lo patético que es, porque en realidad, nada es eterno ¿no es así? Ríe porque no quiere seguir llorando, ríe porque poco a poco el destrozo he hizo añicos ese puro corazón, termino de deshacer esa ingenuidad e inocencia que el desbordaba, ríe porque fue tan ingenuo, tan inocente, porque nadie quiere a alguien débil, ríe porque pensar en él es doloroso, al más fino rayo de luz, el mundo lo destruye.
¿Patético no? Realmente patético, sus labios tiemblan y deja escapar un suspiro, un suspiro prolongado y lleno de emociones, un suspiro demasiado largo para su errática respiración, porque ya nada importaba, estaba roto, confiar en alguien cada parte de tu vida, entregar tu corazón, para que rompan tus esperanzas con violencia, porque Kyuhyun termino de romperlo, Kyuhyun termino de profanarlo, es por eso que ya no le importaba, se disculpaba, por ser tan cobarde, por ser tan iluso, pero algo dentro de si se sintió en paz, por fin libre, ¿Por qué lo hacía? Porque quería dejar de sentir, quería que el dolor se esfumara, cerro sus ojos sonriendo, sus largas pestañas rosaron sus pómulos, dejó escapar la última lágrima y se dejó sumergir en la oscuridad, porque sin sentimientos, no hay dolor.