Hace poco, me estaba perdiendo a mi mismo. Cuando mi madre murio justo frente a mi, enloqueci sin darme cuenta, lo unico que buscaba era venganza.
Creia que mi determinacion y deseos de venganza me harian un soldado fuerte, pero no fue asi, hicieron que perdiera la humanidad y la capacidad de sentir amor. Me estaba convirtiendo en un monstruo.
Hasta que te conoci a ti. Cuando me salvaste a mi y a mis amigos de ser atacados por titanes. Tu agilidad y tu fuerza eran increibles, al igual de tu voluntad.
Me golpeaste brutalmente frente a todos, y gracias a eso me salvaste de una ejucucion. Decias que te encargarias de vigilarme, y de matarme de ser necesario.
Admito que al principio me dabas miedo con tu mirada fria y actitud severa ante todo. Pero llegue a admirar tu fortaleza. Te vi como el hombre mas fuerte de la humanidad, pero incluso alguien tan fuerte y frio como tu tiene su lado amable, ya que, aunque no lo admitas, te preocupas mucho por tus compa-eros y te duele verlos caer.
Llegaste a salvarme varias veces, me dabas consejos y apoyo emocional cuando mas lo necesitaba, ayudabas a aclarar mi mente cuando tenia dudas y calmabas mis inseguridades. Eso hizo que la admiracion que te tenia se convirtiera en algo mas.
Me enamore de ti.
Olvide poco a poco mi deseo de venganza y te convertiste en mi nueva razon para pelear.
Queria demostrarte mis sentimientos protegiendote (aunque fueraz mas fuerte que yo) y volviendome tu apoyo incondicional cada vez que te sintieras debil.
Cuando te fuiste a una mision peligrosa, decidi declararte mi amor. Me rechazaste, diciendo que la diferencia de edad era mucha, me llamaste mocoso una vez mas y te fuiste sin mirar atras.
Pasaron los dias y no volvias. Tenia tanto miedo de perderte.
Pero regresaste, muy herido,tanto fisica y emocionalmente. La mision fracaso y varios reclutas perdieron la vida.
Te vi en cama, estabas llorando, jamas pense verte asi de vulnerable, debil, fragil y peque-o, incluso los mas fuertes lloran. Fui contigo y te sostuve entre mis brazos, queria brindarte proteccion. Crei que rechazarias mi abrazaso pero fue lo contrario.
Te aferraste a a mi y hundiste tu rostro en mi pecho, llorando como un ni-o. Dijiste que creias que moririas, que querias vivir.
Mi corazon salto de felicidad cuando dijiste: "Quiero seguir viviendo para estar contigo, Eren".
Me diste un corto beso en los labios, pero yo te volvi a besar, solo que fue uno mas largo y lleno de amor.
Crei que jamas seria tan feliz en mi vida, me amabas y yo a ti.
Aunque no me lo dijeras, sabia que me amabas. Nuestra relacion era la misma a ojos de los demas pero cuando estabamos solos podia demostrar todo el amor que te tenia.
Una noche, cuando todos dormian, fuiste a verme al sotano diciendome que tu habitacion era muy fria. Capte la indirecta, hice un espacio para que durmieras en mi cama conmigo. Pero lo ultima cosa que hicimos fue dormir.
Esa noche hicimos el amor.
Paso un mes, cuando te empezaste a enfermar, no me dijiste nada porque no querias preocuparme.
A la fuerza, hice que Hanji te revisara. Su diagnostico final, nos costo creerlo a los dos. Al parecer mi parte titan, te habia dejado embarazado.
Cuando procese la informacion me puse realmente feliz. Tendria un hijo de la persona que amo. Tu lo negaste al principio, pero terminaste aceptandolo y amando a ese peque-o ser que era fruto de nuestro amor.
Los demas aceptaron nuestra relacion, y tambien el hecho de que seriamos padres, aunque mi hermana Mikasa fue mas dificil de convencer.
Solo era un mocoso de dieciseis de edad, pero me esforze en madurar, para poder cuidar de ti y de nuestro bebe.
Hubo un momento de mi vida en el que estuve a punto de perderme a mi mismo y convertirme en un montruo. Solo me importaba matar titanes solo por mi egoista deseo de venganza. Pero gracias a ti, Levi, volvi a amar, a sonreir y a ser humano.
Gracias Levi, por convertirte en mi razon para pelear.
Ahora quiero hacer de este mundo un lugar mejor para nuestra hija, Rebeca y para el bebe que viene en camino.
Gracias Levi, por darme una razon para pelear.
Gracias de nuevo.
Te amo.
Atte: Tu esposo Eren Jaeger.
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Levi cerro la carta que habia encontrado en el uniforme Eren y la volvio a colocar justo en su lugar
-Mocoso cursi - dijo con molestia fingida.
Eren habia regresado de una mision, bastante cansado, pero feliz por volver donde su esposo y su hija. Estaba profundamente dormido en el lecho que compartian, junto a el, dormia Rebeca, una nena de dos a-os de cabello negro y ojos aqua como los de su padre.
El mayor, se fijo en Eren, ya no era un mocoso idiota. Ya tenia dieciocho de edad, se habia vuelto grande y fuerte, un soldado admirable y un buen padre. Aunque para Levi seguiria siendo un mocoso idiota.
Levi sintio unas cuantas patadas en el interior de su abultado vientre de seis meses. Puso su mano en el y trato de calmar a su bebe.
-Ya se, quieres ir a dormir junto a tu padre y tu hermana - dijo a su vientre.
Jamas, imagino que El, un ex ladron, soldado y el hombre mad fuerte de la humanidad que habia visto gran numero de atrocidades, se terminaria enamorando de un Mocoso semi-titan y embarazandose de el. Pero no se quejaba, gracias a eso habia sido muy feliz.
Se acosto muy cuidadosamente junto a su esposo e hija, pero antes les dio un beso en la frente a cada uno.
-Yo soy quien deberia agradecerte Eren, por haber derribado aquel muro que habia en mi corazon y ense-srme a amor - susurro, cuidando no despertar a nadie - Por haberme hecho sonreir cuando crei que ya nada lo haria, por darme una familia. - esta vez beso sus labios sutilmente - Te amo, Eren.
Se quedo dormido junto a su familia. Pero no supo que Eren no estaba tan dormido y que lo habia escuchado todo, las palabras dichas por Levi lo hicieron sonreir.
Gracias a Levi, Eren tiene aquello que creyo haber perdido, una familia.
~Fin~
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