Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

1970 por fatfancyunhappycat

[Reviews - 8]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Los personajes no me pertenecen. Son de One Piece~ 

No fue su culpa, fue la culpa de su abuelo y su mentalidad victoriana. Salió corriendo del hotel por la entrada trasera, llevó las llaves de su cuarto y su billetera. La vista daba a un callejón en donde se llevaba a cabo una acalorada discusión. Varias mujeres dedicadas al oficio más antiguo de la historia y uno que otro hombre con los ojos enrojecidos se presentaban como expectadores.

Era un muchacho hablando en japonés con cabello extraño, verde, y un hombre que probablemente era el casero del edificio de al lado... el cual parecía matadero, opción que descartó cuando leyó las palabras "Hostal Arcoíris" en la fachada. 

Una idea surgió conforme iba escuchando la pelea.

Dio pasos veloces hacia su posible compatriota. 

Fue todo rápido, ni lo pensó bien cuando proponía aquel disparate, solo lo hizo.

—Cásate conmigo, por favor. —pronunció en su lengua natal, el japonés.

La respuesta era más que obvia.

—Espera… No te conozco, ¿acaso estás loco?

—Créeme si te digo que te convie…

Su conversación —si es que era una, para empezar— se veía interrumpida constantemente por anciano hombre que manejaba la administración del horrible y barato hostal que daba en el callejón trasero al hotel 5 estrellas en donde Luffy se hospedaba. Tenía que callarlo de alguna manera.

Decía cosas como “Págame o llamaré a la policía” o “Has permanecido más de un mes acá con la comida gratis y aún no has pagado nada” o peor aún “Voy a matarte, maldito vagabundo”, todo en un inglés tan masticado que no culpaba al peliverde por no entender nada de lo que gritaba. Era molesto en exceso.

Se dirigió al supuesto dueño del local.

—¿Me permite un momento con él? —dijo el moreno en lo que podríamos llamar un inglés con pronunciación bastante decente.

—¿Lo conoce? —respondió el lugareño.

Miró por el rabillo del ojo al extraño chico con cabello de alga (un apodo que le daría hasta saber su nombre), este solo los veía confundido a más no poder.

—Sí, es mi esposo.

—¿Tiene dinero?

—Pagaré por él, tan solo espere a que logre convencerlo… —sonrió. — Es bastante orgulloso cuando hablamos de dinero.

Hubo una pausa.

—Bien. —aceptó de mala gana el europeo.

Ahora se dirigió hacia el otro japonés, suspirando como si reprochara algo.

—¿Sabes cuánto le debes a ese pobre hombre? Son 6 meses, con comida incluida. Son 300 euros. Cásate conmigo y pagaré esa deuda. —el azabache explicó. — Y antes de que creas que lo hago porque me parezcas alguien atractivo, déjame decirte que no. Muy aparte, solo será por un corto periodo de 3 meses junto a la paga semanal más jugosa que podrás tener en toda tu vida y un techo para las noches con tres comidas al día aseguradas.

¿Eso serviría como para convencerlo? No se veía convencido. Aún.

*** 

A Zoro algo le olía mal. Oportunidades como esa no se encontraban todos los días, pese a todo, no podía confiarse: algún término en letras pequeñas debía tener.

Se vio como el pobre humano que era, sin dinero, necesitado. Normalmente, conseguía trabajos en Casinos o en apuestas.

Pero casarse era distinto y casarse con otro hombre, uh, era mil veces más complicado para él.

¿Por qué? ¿Cómo alguien estaría sumido en tal desesperación como para pedir y ofrecer eso? Lo veía en los ojos del pequeño pelinegro, una perseverancia tremenda, eso era.

—Está bien, pero primero quiero saber por qué quieres casarte con un completo desconocido. —preguntó para tener la tranquilidad de que al menos se había preocupado por otro humano en lo que llevaba de su vida.

—¿Te lo puedo contar más tarde? —pidió el chico cabello oscuro.

—No.

—Te va a parecer… estúpido.

—No pienso casarme con un extraño para hacer algo estúpido, así que dímelo para saber en qué me estoy metiendo exactamente. Estoy entre largarme del país o casarme contigo por una buena razón.

El otro lo dudó, incluso llegó a verse lleno de espeso bochorno. El pelinegro se acercó a su oído, apoyándose en su hombro, iba a susurrárselo, aunque nadie podía entenderlo de todos modos.

No quería hacer se esforzara, así que flexionó un poco las rodillas para facilitarle la situación.

Comenzó a explicarlo.

—Necesito casarme con un hombre para hacer entender a mi abuelo que soy gay, y aparte, para que deje en paz a un conocido mío. —susurró.

Era una idea descabellada, quizás infantil… no, era infantil. Se afirmaba. Los niños ricos creían que podían solucionar todo con el dinero, bueno… no estaban muy lejos de la realidad.

Era estúpido, pero Zoro era más estúpido por lo que estaba a punto de hacer: Aceptarlo.

—¿Son 4 meses, no? —preguntó.

—Son 3 meses. -lo corrigieron.

—Está bien. Ni bien se cumplan los 3 meses, no volverás a saber más de mí.

 

—Lo mismo digo.

 

 

Sellaron el trato, su futuro esposo con una sonrisa y él ansioso por llegar a dormir en una cama decente. La tarjeta de crédito del heredero de uno de los empresarios más exitosos de Japón pasando por la máquina que muchos avaros temían, cancelando una deuda de 6 meses y 21 días.

De todas las cosas malas por las que había pasado o por las que pasaría, conocer a Monkey D. Luffy se llevaría el primer puesto. 

Notas finales:

Hola. ( ´o`)

Nunca me había dedicado a dejar una nota tan larga, pero hoy vale la pena hacerlo. 

El año pasado subí esta historia bajo otro nombre de usuario, por problemas personales cambié a otra cuenta y la misma historia se repitió hasta que finalmente reaccioné. 

He vuelto con 1975, el primer fanfic yaoi que aporté al fandom de One Piece, ahora con algunos cambios porque mi memoria es pésima ( incluso he tenido que buscar ayuda para recordar varios puntos importantes xD, lo sé, soy una horrible persona). Para quienes llegaron a seguir esta obra, la historia sigue siendo la misma, para quienes no... pues que la disfruten. c: Esta vez nada desaparecerá. 

En fin, ahora no hay vuelta atrás, no tengo razón para desaparecer, tampoco por qué deprimirme con el impacto que tenga el capítulo semanal, fueron problemas de 'novata' o algo así. Antes de que me peguen(?), no, no fue necesariamente por eso que me borré del mapa por un tiempo. 

Y sí, ¡No estamos empezando con la típica escena tomando chocolate! Se siente rarísimo D: Pero ya llegará, todo gracias al bendito invierno.

Los capítulos, como siempre, son irregulares en cuanto extensión. Empezamos con algo corto, puede que llegue algo extenso y que volvamos a lo mismo y así.

Como sea, finalizo pidiendo disculpas y agradeciendo por todo esto.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).